Caminaron con más lentitud y Aris lo miró a los ojos esperando escuchar los "poemas" que Ethan quería decirle. Ethan se puso mas nervioso al tener toda la atención de Aris, sin saber de donde vino su valor logró decir las siguientes palabras:
—Yo...encontré esto—dijo sacando una pequeña libreta—solía escribir poemas cuando era mas joven, no sé cuales serán los que estarán escritos pero recuerdo que me gustaron mucho cuando los hice.
Aclarando su garganta abrió la libreta y leyó el primer poema en su mente ya que quería darle una pequeña leída antes de decirlo en voz alta. Pero al leerlo sus ojos se abrieron como platos, su respiración se paralizó y un leve rubor invadió sus mejillas.
Aris al ver esa reacción le dio más curiosidad saber que era lo que había en la libreta:
—¿Y bien?—preguntó ansioso.
—Creo que...no debería leerlos— respondió desesperado.
—¿Por qué no?
—No los recordaba tan...cursis.
"¿Por qué escribí esta cosa y para quién?"
—Sólo léelos de una vez, por favor, quiero escuchar—dijo frunciendo las cejas con una actitud de súplica.
Ethan no pudo evitar caer rendido ante Aris y tomando toda su vergüenza la arrojó lo mas lejos que pudo y comenzó a leer:
—V-Veo con melancolía el cielo
y exhalo un largo suspiro,
en el se expresa mi anhelo
cuando imagino....que te beso y te miro.
Dijo Ethan muy nervioso mientras era observado con mucha atención por Aris, quién al escuchar esas palabras se sintió maravillado.
—Eso se escuchó tan...es tan...—exclamó Aris sin poder encontrar palabras para describirlo. Jamás había oído algo tan agradable al oído, era como cantar pero sin hacerlo.
—¿Podrías leer más?—preguntó Aris sonriente.
"¿Le gusto?"
Pensó con duda ya que no sabía si le gustaban simplemente por que sí, o porque era él quien lo estaba diciendo. En el fondo quería creer que era por él.
—D-De acuerdo. Lo siguiente es la continuación de la estrofa anterior:
Que estés a mi lado
es lo único que necesito,
si para siempre tomas mi mano
toda la vida te estaré agradecido.
Y aunque mi corazón este llorando
y su calidez no parezca eterna
con tu amor de rosa tierna
tu me seguirás amando.
"¡Maldición! ¿En qué estaba pensando mi yo de cuando era niño?¿Por qué escribí algo tan romántico?"
—¿Tú escribiste eso?—preguntó Aris asombrado—tienes talento—dijo sonriendo. Aris no sabía nada sobre poemas pero estaba seguro de que Ethan era muy bueno en ello ya que le encantó oírlos.
—¿Tu crees?—comentó sintiéndose halagado.
—¿Hay más en ese librito?—preguntó señalándolo.
—S-Si...déjame buscar otro.
Se aclaró la garganta y comenzó a leer:
La rosa de su alma permanece bella
aunque en ella solo encuentres tristeza,
porque mantiene su sonrisa
al moverse en la agonizante brisa.
Este es algo deprimente...
Comentó Ethan.
—Quizás te sentías triste cuando lo escribiste—dijo Aris desanimado.
—Es lo más probable, habla sobre la rosa de mi alma, tal vez me refería al corazón o algo así. Veamos que sigue:
Aun así la rosa se marchita,
no puede vivir sin calidez ni amor,
y solo quiere clavarse su espina
para no sentir nunca mas el dolor.
"¿Acaso era suicida o que?"
Pensó Ethan espantado de su yo del pasado. Él no recordaba mucho de esos tiempos y mucho menos de como se sentía.
—¿A que se refiere con "clavarse su espina"?
—Creo que...—Ethan no quería decirle a Aris lo que pensaba sobre eso. Era horrible—no estoy seguro. Mejor veamos como termina, ya sólo falta una estrofa.
Ya no le importa la vida,
todo es tan pasajero y se olvida,
"pero si contigo la puedo vivir
jamás desearía poder morir"
~Pensó la rosa.
El último verso quedó flotando en el aire y ambos se quedaron en silencio.
—Vaya, algo trágico el poema—dijo Ethan riendo con nerviosismo.
—Un poco—dijo Aris con un tono apagado.
"¿Ethan deseaba morir?"
Se preguntó Aris con culpa y pesar. Conocía muy bien ese sentimiento, pero al parecer Ethan lo resistió y continuó viviendo a pesar de todo.
—Que bien que sólo es un poema. Supongo que exageraba todo cuando era mas joven—dijo sonriendo para no volver tan lúgubre el ambiente.
"Sólo es un poema..."
Se dijo a sí mismo.
—Tal vez encuentre uno mas lindo. Vemos...debajo de él escribí otro que también habla de espinas y rosas.
Sé que las rosas tiene espinas
y al tocarlas te lastimas,
pero sería una locura morir
sin haber tenido una rosa,
y prefiero con sus espinas vivir
porque sé que la rosa será amorosa.
—Vaya, este es mas bonito e interesante—exclamó Ethan, al fin había encontrado uno que era normal y que no habla de muerte ni nada de eso.
—¿Por qué?—preguntó curioso ya que ese poema no lo había entendido mucho.
—Ahh, es que este habla sobre querer a alguien y aceptar sus defectos. En la parte que dice "las rosas tienen espinas" las rosas son las personas y las espinas son sus defectos.
—Ohh—exclamó Aris y se acercó más pegándose a Ethan y dijo leyendo el poema—y el siguiente que dice "y al tocarlas te lastimas" quiere decir que ¿los defectos de las personas te lastiman?—preguntó algo confundido, no sabía que eso era posible.
—Si, nadie es perfecto y aunque no lo quieras puedes lastimar a otros—comentó un poco nervioso al sentirlo tan cerca a Aris— Y lo siguiente en donde dice "pero sería una locura morir sin haber tenido una rosa" esta muy claro ¿no crees?—dijo señalando esos versos.
—Que...estarías loco—dijo riendo—¿si murieras sin haber amado a alguien a pesar de sus defectos?
—Exacto. "Y prefiero con sus espinas vivir porque sé que la rosa será amorosa." No importa cuantas espinas tenga la rosa, eso no quita el hecho de que la puedas amar y la rosa también te amará—dijo Ethan y pensó:
"Aunque Aris parece mas un lirio"
—Amar a alguien significa también amar sus defectos. Amar a la rosa y tolerar el dolor de las espinas, pero eso no quiere decir que soportarás el maltrato de la persona sólo por amor, en este poema me refiero a defectos mas ¿normales y comunes?, entiendes a lo que me refiero.
—Eras muy imaginativo Ethan—dijo Aris mirándolo dulcemente.
—Vaya que lo era—dijo sonriendo.
Sus hoyuelos aparecieron suavemente en sus mejillas y Aris quedó aún más maravillado. Sentía como sí Ethan le estuviera diciendo esos poemas, suspiró internamente y le preguntó:
—¿Podrías enseñarme a hacer un poema?
"Me gustaría escribir uno para él"
—Por supuesto, de hecho es muy fácil, sólo tienes que formar un párrafo, conocido como estrofa hecha de oraciones que serían los versos. Las oraciones tienes que rimar unas con otras, para ser precisos las últimas palabras de cada verso.
—¿Puedo verlos?—preguntó señalando la libreta.
—Claro, puedes guiarte con los que que estén ahí—dijo entregándosela.
Ethan miró al frente y se fijó que el camino se miraba bastante despejado, siguieron y Ethan apartó unos arbustos enormes que obstruían el camino y lo que vio fue un paisaje muy extraño y exótico.
Todo estaba despejado y un lago se extendía enormemente por varios metros.
—¡Aris mira!—exclamó tocando su hombro.
—Vaya, es muy hermoso— dijo tratando de sonar sorprendido.
"Al fin llegamos, este es otro de los lugares que quería mostrarle..."
—Vamos rápido.
Dijo Ethan y tomando su mano hizo que Aris corriera a su lado hasta llegar al lago. Aris se dejó llevar felizmente por su entusiasmo y se deleitó con el tacto de su mano.
Pero al acercarse Ethan se dio cuenta que no era un lago.
—Que extraño—comentó Ethan, dejó caer todo lo que traía al suelo y se inclinó hacia la orilla—esto mas bien parece ¿un charco?
En realidad eso es lo que era, un enorme charco de agua ovalado en el que una suave y grande nube se reflejaba perfectamente sobre su lisa superficie. La vista que Ethan contemplaba frente a él no parecía real.
"¿Cómo es posible que exista algo como esto?"
Aris también se acercó y vio el reflejo de Ethan en el agua, y fue ahí cuando se le ocurrió una idea para el poema.
Ethan se agachó, se sentó sobre sus piernas y metió la mano en el agua y las ondas perturbaron su superficie, la altitud del agua era apenas de dos centímetros y debajo del agua y también en la orilla habían pequeñas piedras lisas de un color tan claro que parecían hechas de plata y el agua al ser cristalina hacía que pareciera un enorme espejo.
—Ethan—dijo Aris al verlo a través del reflejo del agua.
—¿Si?—contestó Ethan al verlo también en el agua, su imagen era tan nítida que hasta las nubes se apreciaban con claridad sobre sus cabezas.
Ethan estaba tan absorto que no se dio cuenta en el momento en que Aris se sentó a su lado y se inclinó hacia el agua.
—Estabas bastante concentrado— dijo riendo—también he escrito un poema.
—¿Tan rápido?—exclamó Ethan—tienes talento entonces—dijo sonriendo.
—Pero si aún no lo has oído— dijo un poco apenado.
—Entonces... ¿me permites escucharlo?
—Por supuesto....
Y diciendo esto miró fijamente el reflejo de Ethan y recitó:
En la quietud del agua se refleja
una nube que se mueve con la brisa
y tu radiante sonrisa
que exalta tu singular belleza,
de la que no se puede dejar de mirar,
porque alivia toda tristeza y pesar.
—¿Lo hice bien?
Preguntó un poco nervioso ya que era la primera vez que lo intentaba. Además de que lo había hecho especialmente para Ethan.
Ethan dejó de ver el reflejo de Aris y lo miró a los ojos.
—Yo...fue muy hermoso, en verdad tienes talento.
"¿Acaba de dedicarme un poema? Esto quiere decir que..."
Se preguntó desconcertado y sintió su corazón palpitar, haciendo que su sangre se calentara y su pecho se sintiera cálido.
—Me alegra que te guste—dijo girando la cabeza y viéndolo también a los ojos—Ethan...
—...Si
—¿Quieres caminar en el agua?—preguntó mirando de nuevo el "lago".
—Claro—respondió un poco ido.
Ambos se quitaron las botas, Ethan miraba a Aris sin dejar de pensar en el poema que había oído, estaba casi seguro que era una señal de que Aris también gustaba de él.
Pisaron el agua que apenas cubría la planta de sus pies. Esta imagen de Aris caminando en un lugar así le resultaba fascinante.
—Sabes...hay algo que aún no logro entender— dijo Aris viendo a Ethan.
—¿Qué cosa?
—En tu poema dijiste que todos tiene defectos pero...no sé cuales son los tuyos—dijo Aris confundido.
En el poco tiempo de haberlo conocido Aris no recordaba ninguno y trató de adivinar cuales podrían ser, pero no se le ocurrió nada.
—Oh...eso— Ethan dudó.
"Vaya, no hay nada como contarle tus defectos a la persona que te gusta"
Pensó Ethan, pero le resultaba extraño que Aris no supiera de ninguno después de haberlo conocido por algún tiempo.
—Aunque no lo parezca soy bastante tímido y reservado, distraído y demasiado perfeccionista y cuidadoso, pero a la vez holgazán y desordenado. Sólo mira mi habitación, es un desastre—dijo riendo—también otro defecto que creo tener es que no soy vengativo ni rencoroso y a veces eso hace que parezca que no me importa mi vida y que pueden hacer conmigo lo que quieran. Creo que debería ser un poco mas ¿malvado? o algo así.
Aris meditó con cuidado y luego de un rato contestó:
—Supongo que pueden considerarse defectos. Pero lo de vengativo y rencoroso no tienes porque cambiarlo—hizo una pausa y continuó—yo...no lo parezco pero creo que soy alguien malvado por así decirlo, yo si soy muy vengativo y rencoroso, cualquiera que lastime a alguien que quiera o haga algo que odie saca lo peor de mi...
Ethan se quedó un poco perplejo ante tal confesión.
"Y se mira tan calmado y amable"
—También soy alguien egoísta— dijo Aris suspirando— y cobarde.
Ethan lo miró seriamente al escuchar esto último.
—Además de que soy alguien muy frío y me enojo fácilmente— terminando de decir todo esto miró a Ethan decaído y cabizbajo.
—Aris.
Dijo suavemente y no pudo evitar abrazarlo. Una extraña angustia brotó en su corazón al verlo así, y en el fondo sintió como si una voz le dijera que lo hiciera. Que lo consolara.
Aris se quedó paralizado por el repentino abrazo, nunca esperó que Ethan lo hiciera. Nunca esperó que tomara la iniciativa.
"Al parecer se siente mal por sus...defectos. Y le importa mucho la opinión que tengo sobre él..."
Pensó Ethan.
—Pero sería una locura no conocer a la rosa tierna aunque sus espinas duelan—dijo Ethan cerca de su oído—porque sus espinas son parte de su belleza, ¿no crees?, si no tuviera espinas no fuera rosa.
—...—su corazón se sintió un poco más liviano al escuchar esas palabras. Aris nunca hubiera querido que Ethan supiera esas cosas y mucho menos quisiera que las viera, evitaría que viera lo peor de él.
—¿Mis defectos no son algo horrible?
—Claro que no— dijo con un tono relajado—es normal que los tengas, no te preocupes.
Aris levantó sus brazos y devolvió el abrazo.
—Otro defecto que se supone que tengo es que odio que las personas me toquen, no recuerdo porque pero ese sentimiento de ansiedad y asco me invade con el hecho de pensar que lo harán—exclamó Ethan con una pequeña risa— pero no me pasa eso cuando es contigo. Cuando estás con alguien que te agrada los defectos parecen no importar. No te preocupes por esas cosas.
—...Gracias.
—De nada.
Ethan lo soltó del abrazo y le sonrió dulcemente, Aris ya se sentía mas tranquilo ahora.
—Se supone que tengo que cuidar de ti, pero parece que eres tú quién lo hace—dijo con algo de culpa.
—Aunque mis recuerdos estén algo confusos estoy bien, no es nada— dijo y caminaron de nuevo sobre el agua.
Disfrutaron de la vista y de su compañía en silencio, y al cabo de un rato llegaron al centro y Ethan dijo:
—Estuve pensando en un nombre para este lugar— dijo y ambos se detuvieron.
—¿En cuál?
—Esto se ve como un espejo enorme, así que pensé en llamarlo "Espejo del cielo"
Dijo Ethan y ambos vieron hacia abajo y observaron el claro reflejo del cielo bajo sus pies.
—Es un buen nombre, eres bueno nombrando cosas—exclamó Aris al recordar que fue Ethan quién le dio su nombre.
—¿En verdad?—dijo sacando su lengua algo apenado.
Todas las cosas que decía Aris sobre él eran halagadoras y lo hacían sentir como si no tuviera defectos.
Lo hacía sentirse amado.
Y hacía que se amara a sí mismo.
Quería que Aris también se sintiera así.