Verla como una niña termino por causarle muchas heridas, el Cazador no volvería a cometer el mismo error. Sus ojos están fijos en los movimientos de su rival, quien había congelado la parte superior de sus extremidades y con una sonrisa tan burlona como la de un gato se abalanzó, su velocidad era increíble, en unos instantes logro alcanzar al Cazador, está a duras penas logro esquivar el golpe que se dirigía a su mandíbula. El cazador intento poner algo de distancia entre ellos, pero sin darse cuenta, la joven ya había logrado conectar una patada directo a su diafragma. Lo primero que sintió fue el hielo, luego sintió el dolor, el Cazador descendió sobre su rodilla izquierda mientras sus brazos se amarraban instintivamente a su estómago, la muchacha sin perder tiempo, disparo uno de sus pies, apuntando a la sien del Cazador.
El Cazador, al sentirse de nuevo acorralado, sintió como la vergüenza, atravesaba sus pensamientos con un rayo, mientras la pierna de la joven se precipitada sobre él, sus manos que acariciaban su estómago, dibujaron en el aire, un símbolo, su cuerpo irradio una pequeña luz, antes de que el golpe conectará, logro atraparlo con una de sus manos, a tan solo centímetros de su cabeza.
- Oh - Exclamó Dear con una sonrisa juguetona - Así que te haz encantado - El Cazador, empujó la pierna de la joven y se incorporó.
- Discúlpame por subestimarte - Respondió con seriedad - Voy a tomarme esto enserio.
- No puedo estar más contenta - Replicó la joven, mientras una capa de hielo azul oscuro, más resistente que el normal, empezaba a formarse alrededor de su pecho como si fuera una armadura. El Cazador susurro la palabra "Potenciar", su cuerpo volvió a emitir un ligero brillo, solo que ahora más intenso y en un parpadeo, el Cazador se encontraba a centímetros de la joven, quien a duras penas pudo observar su movimiento, pero no sé movió, el impacto fue directo, el puño potenciado del cazador logro levantar un poco a la joven del suelo, pero no logro causar ningún efecto en su armadura de hielo, ella de inmediato respondió lanzando su puño, pero el cazador logro esquivarlo sin muchas dificultades; Dear ni siquiera le dio oportunidad para contraatacar, empezó realizar una lluvia de golpes, pero los reflejos del Cazador se habían potenciado, y gracias a eso pudo notar algo extraño en la expresión de la joven, su rostro se encontraba sonrojado, aunque por el brillo en sus ojos, el Cazador dudaba mucho de que fuera por el enojo o el frío del hielo que la recubría.
La joven, bajo la guardia durante unos momentos, en medio de su desenfrenado ataque, oportunidad que el Cazador tomó para asestar un fuerte golpe en la boca de su estómago, logrando agrietar un poco su armadura, pero al instante que intento alejarse se dio cuenta, que su una fina capaz de hielo se había formado sobre su puño, manteniéndolo pegado al cuerpo de la chica, desde esa posición tan desfavorable, no tardó en recibir una contundente patada en las costillas, incluso pensó que si no hubiera reforzado su cuerpo, ese ataque pudo haberle partido algunas. Dear, con los ojos encendidos, se preparaba para lanzar de nuevo una serie de golpes, el Cazador logro anticipar sus intenciones y escapo de aquel extraño agarre tan solo pateando rápidamente su torso. Dear emitió un sonido de disgusto al ver como se escapaba, entonces se puso de rodillas y posicionó sus manos sobre la tierra. El Cazador, al ver una apertura tan extraña pensó que debía lanzarse a atacarla, mientras tomaba impulso, la joven grito con todas sus fuerzas - ¡Congelar! - Toda la tierra a su alrededor se convirtió de un segundo a otro en una pista de patinaje, el Cazador intento detenerse pero ya era muy tarde, el hielo recién formado termino por hacerlo resbalar y cayo de espaldas con fuerzas, a penas tuvo tiempo de rodar para esquivar la patada de la joven, que agrietó el hielo que acaba de formar.
Dear, esbozo una sonrisa de oreja a oreja, cuando se lanzó para atacarlo de nuevo, el Cazador podía ver sus movimientos, pero está vez no logro esquivarlo, el daño que hacía sus golpes habían disminuido, pero su atención no se encontraba en la herida, sino en el hecho de que pudo verla pero no esquivarla. La joven volvió a arremeter contra el Cazador, está vez, una ligera risa se escapó de la comisura de sus labios, mientras sus ojos se volvían cada vez más vivos. "No puede ser por el hielo" pensó el Cazador, sus reflejos y su cuerpo potenciado, hacían que moverse en el hielo no sea una dificultad; su velocidad no había aumentado, el aún podía verla sin dificultad, pero aún no podía darle ni un golpe, no esquivar los suyos.
Desde el árbol, cercano en que hace poco se había posicionado; Álvarez al verlos pelear, no sentía más que una mezcla de tristeza y envidia, a diferencia de la joven, sus ojos se habían apagado por completo, a medida que la pelea continuaba, solo se sentía más y más pequeño. Su mirada, que al inicio se encontraba fija en ambos combatientes, ahora solo se enfocaba en el hielo dónde intercambiaban tantos golpes. Y entonces se dio cuenta de algo, por un pequeño instante, logro descubrir como la joven aumentaba de pronto su velocidad. Entonces se sintió un extraño impulso de ayudar a alguien, que detestaba hace tan solo unos minutos, tan solo porque le había mostrado algo de amabilidad. "Soy demasiado patético" pensó, mientras reunía en su interior la fuerza para gritar.
- ¡Se está deslizando! - Escucharon de pronto, ambos combatientes giraron al unisono, para darse cuenta de la presencia de Álvarez, apoyado en el árbol - ¡Se impulsa de un segundo a otro para deslizarse, así aumenta su velocidad de manera sorpresiva! - Termino por informar, la cara de Dear mostraba un desagrado completo por lo que acaba de pasar, mientras que la vergüenza volvió a inundar los pensamientos del Cazador al no poder darse cuenta de algo tan simple.
- ¡No se supone que lo agrediste! - Respondió con rabia la joven - ¡¿Por qué demonios lo estás ayudando ?!
- E-El me ayudó a mi... A pesar de lo que hice - Respondió con timidez - A-Así… ¡Así que lo mejor que puede hacer un caballero es devolver el favor! - Termino por responder con un cierto aire de realización, como quien logra llegar a una respuesta que ha estado buscando por años.
- ¡Acaso no tienes orgullo como guerrero! - Replicó con brusquedad la joven - ¡Lo único que quieres es sentirte menos impotente al no poder hacer nada, verdad! - La joven, notablemente disgustada empezó a acatar verbalmente a Álvarez, quien no sabía en qué roca esconderse - Ni siquiera conoces a este tipo, y te dejas llevar por un simple gesto de amabilidad, que es lo mínimo que tiene que dar el vencedor de un combate; ni siquiera sabes si el de verdad te quería ayudar, capaz solo no quería sentirse mal, después de haberte roto los huesos con los que manejas la espada, no solo no tienes orgullo como guerrero interfiriendo en un duelo, sino que eres demasiado ingenuo - Álvarez, se por completo derrotado ante las palabras de la joven y calló de rodillas al suelo, incluso podría verse que unas gotas de lágrimas brotaban silenciosamente. El Cazador, que contemplaba estupefacto la escena, no dudo en aprovecharse, apunto hacia el hielo con su mano y de un segundo a otro grito - ¡Reacción! - La maga solo logro voltear para ver los rayos salir disparados de la mano del Cazador y penetrar el suelo.
El hielo alrededor empezó a evaporarse y en cuestión de segundos desapareció, sin dejar ningún rastro de humedad en el ambiente, lo cual dejó un impacto muy fuerte en la maga, quien agachó para tocar el suelo y sentir como hasta el frío había desaparecido, aún así siguió su mano de manera desesperada por el caliente suelo y entre sollozos, apunto a la cabeza del Cazador para exigir una respuesta
- ¡T-Tu bastardo!, ¿Qué le has hecho a mi hielo? - Esgrimió con un profundo disgusto marcado en los ojos
- Lo evapore - Respondió el Cazador sin muchos problemas.
- P-Pensé que tu magia solo hacia explotar cosas - Interrumpió Álvarez, quien estaba atónito al ver la nube en que se había convertido el hielo de Dear.
- Mas o menos - Respondió el Cazador - La magia de reacción, produce de manera artificial cualquiera reacción química o física sobre un cuerpo, siempre y cuando sepa cómo se produce, es muy útil, aunque es un gasto de mana considerable - Cuando termino su explicación, la joven se encontraba aún en el suelo, susurrando algo en voz baja, entonces salto enérgicamente y señaló de nuevo, con sus dedos índice al Cazador.
- Así que me has mostrado una de tus cartas de triunfo, eh - Dear se mostraba se muy buen humor ante la explicación del Cazador, aunque esté pensó en explicarle que no era para tanto, la joven ni siquiera le dejo articular palabra alguna - Pues ahora podrás admirar una de mis cartas de triunfo - Antes de que alguno de los presentes pudiera decir algo, la mujer realizó un chasquido con sus dedos y varios bloques de hielo, se desprendieron de aquel muro y volaron, golpeando con fuerza el lugar en donde Dear se encontraba, tanto el Cazador como Álvarez, se quedaron estupefactos ante lo sucedido.