>>> Por la mañana <<<
Me desperté con los primeros rayos del sol filtrándose por la ventana. Parpadeé y miré la hora en el reloj.—Ya es de mañana...
—murmuré, aún adormilado. Solté un bostezo y me estiré antes de levantarme lentamente—. Bien, vamos a clases. —Suspiré—. Aunque, honestamente, no tengo mucha emoción por empezar —comenté para mí mismo, sacudiendo la pereza mientras me dirigía al baño.
Con cada paso, notaba cómo mi percepción estaba mucho más afinada. En estos dos días de entrenamiento en el bosque, había practicado.....especialmente el control de mis sentidos, y la diferencia era notoria. Ya no sentía los ruidos como ataques a mis oídos.
—Al menos ahora puedo tolerar los ruidos... —susurré, entrando en la ducha mientras me sumergía en el agua tibia.
Reflexioné sobre el hecho de que mis sentidos se habían amplificado de forma extrema, en especial el oído. Era como si cada sonido estuviera amplificado varias veces, lo cual había sido un verdadero desafío en la ciudad. Pero, después de entrenar, al menos la sobrecarga ya no era tan abrumadora.
>>> Un rato después <<<
Terminé de arreglarme y volví a mi habitación, mirando las opciones de ropa que había comprado durante los últimos días para el colegio. También me había encargado de ordenar el departamento y hacerlo al menos un poco acogedor.
—A ver... tengo que ir con algo casual, algo que no llame demasiado la atención —murmuré, examinando la ropa.
Me decidí por un conjunto sencillo que además me ayudaría a pasar desapercibido. Aunque mi aspecto físico siempre tendía a atraer miradas, especialmente mis ojos, este atuendo y unas gafas que había comprado deberían bastar para disimular.
—Perfecto. —Me miré al espejo y solté una pequeña risa—. Bueno, parezco un nerd, pero así está perfecto.
Tomé mi mochila y, con todo listo, salí del departamento.
>>> En el callejón cerca de la escuela <<<
Aparecí en un callejón cercano al colegio, el mismo que había usado para teletransportarme en mis prácticas. Era perfecto; siempre estaba vacío, y además me dejaba a solo unas cuadras del colegio.
—Creo que este callejón se va a convertir en mi punto de teletransporte oficial —dije, riéndome mientras salía hacia la acera y empezaba a caminar hacia la entrada de la escuela.
>>> En frente del colegio <<<
El edificio era aún más imponente de cerca. Respiré hondo y me ajusté la mochila, intentando calmar los nervios.
"Bien, llegó el momento", pensé. Avancé hacia la entrada y noté que el colegio estaba aún bastante tranquilo. Quizás había llegado un poco más temprano de lo necesario. Perfecto, así podría encontrar a la consejera antes de que comenzara el bullicio.
El interior estaba ya más animado; algunos estudiantes comenzaban a llenar el lugar con sus voces y conversaciones. A pesar de la intensidad de los sonidos, ya no me sentía tan afectado como antes. Toda esa práctica en el bosque había valido la pena.
—Menos mal que pasé la mayor parte del tiempo entrenando... esto no me aturde tanto como antes —susurré, en un intento de motivarme mientras caminaba entre la gente.
Noté que algunos estudiantes me observaban, susurrando entre ellos. Bajé la mirada y puse una expresión relajada, tratando de ignorar la incomodidad.
"Sí, sí, ya sé que parezco un ñoño", pensé, conteniendo una sonrisa irónica. "Solo dos años, solo dos. Eso es todo lo que necesito soportar".
Finalmente, llegué a la oficina de la consejera académica. Toqué suavemente y entré.
—Ah, Thiago, justo a tiempo —dijo la consejera al verme, levantando la mirada de unos papeles en su escritorio. Me sonrió de forma amable—. Aquí tienes tu horario de clases y un mapa de la escuela para que no te pierdas.
—Gracias —respondí, esforzándome por que mi inglés sonara natural. Intentaba sonar confiado, pero aún se notaba un poco torpe.
"En serio, necesito mejorar en inglés", pensé. "No puedo seguir hablando tan mal".
La consejera me dedicó una última sonrisa y me entregó los papeles. Asentí en señal de gratitud y, con el horario y el mapa en la mano, salí en busca de mi primera clase.
Salí de la oficina de la consejera y, con el mapa en la mano, empecé a caminar por los pasillos del colegio. Aunque había pasado solo unos minutos desde que llegué, la escuela ya empezaba a llenarse de estudiantes. Los pasillos resonaban con conversaciones, risas y pasos apurados, creando una cacofonía constante habría sido insoportable dos días.
"Todo este entrenamiento realmente funcionó", pensé mientras me deslizaba entre los estudiantes, sorprendido de que el ruido apenas me afectara.
Seguí el mapa hasta encontrar la puerta de mi primera clase. Al abrir la puerta, un grupo de estudiantes ya estaba acomodándose en sus asientos, y algunas miradas se posaron en mí al entrar. Bajé la cabeza, intentando no llamar mucho la atención, y busqué un asiento cerca de la ventana...calma..calma
Mientras esperaba a que llegara el profesor, observé el aula con detenimiento. Los detalles de cada cosa resaltaban de una manera casi abrumadora
---bien...el sonido ya no es un problem ni tanpoco la vison ya no me sinto abrumado por las detalles que llega a mi cabeza ..pero no signicfica que no sea molesto
el roce de una hoja de papel, el crujido de las mochilas al colocarse en el suelo y hasta el sonido del bolígrafo de una chica que escribía rápidamente al otro lado del salón. Aunque no eran ruidos molestos, me recordaban que, incluso con todo mi entrenamiento, mi sentido del oído seguía siendo agudo.
---bien...el sonido ya no es un problem ni tanpoco la vison ya no me sinto abrumado por las detalles que llega a mi cabeza ..pero no signicfica que no sea molesto
--- (pensando) "Tal vez debería seguir practicando para bloquear mejor los sonidos que no necesito escuchar", me dije, haciendo una nota mental mientras sacaba mis útiles.
>>> Un rato después <<<
El profesor entró y el murmullo del aula se apagó casi de inmediato. Comenzó a dar la bienvenida al grupo y a explicar los temas que cubriríamos en el curso, pero yo noté cómo algunas miradas todavía se dirigían hacia mí. Era como si, a pesar de mis esfuerzos por pasar desapercibido, hubiera algo en mí que no lograba ocultar del todo. Me ajusté las gafas y miré hacia la ventana, tratando de relajarme y concentrarme en la clase.
---(pensar)...son mis ojos..no...bien tendre buscar una gafas con vidrios modificados....(suspiro)
Pasaron las primeras horas de la mañana y, a medida que avanzaba el día, me acostumbré un poco más al ambiente. Había logrado mantenerme en un bajo perfil, hablando poco y solo cuando era necesario. Sin embargo, durante el recreo, me di cuenta de que mantenerme completamente al margen no sería tan fácil como había pensado.
>>> Hora del recreo <<<
Al sonar el timbre, los estudiantes comenzaron a salir al patio en grupos, algunos riendo y otros hablando sobre sus planes para el fin de semana. Me quedé en el aula por unos minutos, esperando a que el lugar se vaciara un poco antes de aventurarme en los pasillos.
"Sería bueno explorar un poco", pensé. Tomé mis cosas y salí, encontrando una esquina tranquila en el patio donde pude observar sin llamar demasiado la atención.
Fue entonces cuando me topé con algo ... Cerca de una de las paredes del colegio, un grupo de estudiantes se había reunido en círculo... Al acercarme un poco más, pude ver que uno de ellos parecía estar en el centro de la atención, hablando en voz alta y gesticulando de forma exagerada. Los otros reían y aplaudían sus bromas.
--- (pensando) "Seguro que es el típico chico popular", deduje, mientras observaba la escena desde una distancia prudente.
Justo cuando estaba a punto de darme la vuelta para evitar cualquier interacción, el chico en el centro me vio y me lanzó una mirada curiosa. Para mi sorpresa, se acercó a mí con una sonrisa y me tendió la mano.
—¡Hey, tú eres el nuevo, ¿no? —dijo en inglés, con un tono amigable—. Soy Ethan, bienvenido a la jungla.
"Genial, lo que menos queria hoy era que el chico popular me hablara", pensé mientras aceptaba su saludo, tratando de no parecer incómodo.
—Gracias... soy Thiago —respondí, esforzándome en pronunciar con claridad.
Ethan sonrió y dio un paso atrás, evaluándome como si intentara averiguar algo. Noté a algunos de sus amigos observándonos, y la incomodidad comenzó a crecer.
—Eres... e nuevo, Thiago —comentó, aún sonriendo—.teves divertido.... Bueno, espero que sobrevivas a esta jungla.
Se despidió con un gesto de la mano y regresó con sus amigos, dejándome solo en medio del patio.
"Genial, ¿qué quiso decir con 'divertido'?"veras...ya se por donde ban los tiros, pensé, sintiendo una mezcla de incomodidad y cansancio. . De cualquier forma, sabía que debía ser aún más cuidadoso para no levantar sospechas...y no llamar la atencion...
>>> Fin de la jornada escolar <<<
Las clases finalmente terminaron, y mientras recogía mis cosas, sentí una sensación de alivio al saber que había superado el primer día sin demasiados problemas. Al salir del aula y dirigirme hacia la salida, no pude evitar pensar en lo complicado que sería mantener mis habilidades en secreto.
"Será un reto mantener esta vida en equilibrio... Solo son dos años", me recordé, tomando un último respiro antes de teletransportarme de regreso a mi departamento.
>>> Un poco después de llegar a casa <<<
Al teletransportarme a mi departamento, dejé la mochila en el suelo y me estiré, sintiendo una mezcla de cansancio y satisfacción. El primer día de clases había sido menos complicado de lo que imaginaba, pero aun así, la presión de mantener en secreto mis habilidades y aparentar ser un estudiante "normal" era más agotadora de lo que pensaba.
Después de una breve pausa, me acerqué a la ventana y observé el atardecer sobre la ciudad. Las luces comenzaban a encenderse en los edificios cercanos, mientras el tráfico crecía abajo, una corriente interminable de autos y personas en movimiento. Me sentía un poco más cómodo, menos perturbado por el caos de Nueva York, y sabía que tenía que agradecerle a los días de entrenamiento en el bosque .
"Bien, primer día superado", pensé. Ahora solo faltaba adaptarme a esta rutina y seguir practicando
--- (pensando) "Todavía es temprano... Podría darme un respiro o aprovechar el resto de la tarde para seguir practicando.
"Decidí que lo mejor sería hacer ambas cosas. Me cambié la ropa escolar por algo más cómodo y coloqué unos auriculares en mis oídos para ayudar a bloquear el ruido exterior, aunque sabía que no podía ignorarlo completamente.
>>> Una hora después <<<
Me encontraba en un parque no muy lejos de mi departamento, una zona relativamente tranquila donde la gente no prestaba mucha atención a los demás. Ahí podía experimentar un poco más con mis habilidades sin llamar la atención, sobre todo ahora que sentía un mayor control sobre ellas.
--- (pensando) "A ver... La teletransportación ya no representa tanto problema. Es rápida y puedo hacerlo casi al instante, pero aún tengo que ser cuidadoso con la intangibilidad.
"Miré hacia un árbol cercano, pensando en cómo quería perfeccionar esa habilidad en particular. La intangibilidad tenía un límite de tiempo de tres minutos antes de que se desactivara automáticamente. Lo ideal sería poder prolongarla un poco más o al menos activarla y desactivarla a voluntad sin mucho esfuerzo.
Me acerqué al árbol, respiré profundamente y concentré toda mi atención en el punto donde mi mano tocaba la corteza. Con cuidado, activé la intangibilidad, sintiendo el cosquilleo que recorría mi brazo mientras la materia de mi mano comenzaba a atravesar el árbol.
--- "Bien... Al menos ya puedo mantenerlo estable por más tiempo sin perder el control", me dije en voz baja mientras sacaba la mano del árbol y la volvía a materializar por completo.
Experimenté un rato más, practicando el paso de mis extremidades a través de diferentes objetos: una banca, el tronco de un árbol, e incluso el suelo, que se volvía casi como agua cuando activaba la habilidad.
>>> Al rato <<<
El sol ya se había ocultado, y las luces del parque comenzaban a encenderse, creando una atmósfera relajante. Sentí una satisfacción tranquila al ver mis avances y decidí que era momento de regresar. Había logrado mejorar bastante en el uso de mis habilidades y controlar mis sentidos, y eso me llenaba de una extraña calma, como si, de alguna manera, estuviera encontrando mi propio equilibrio entre el caos y la quietud.
Me dirigí de vuelta a mi departamento, caminando entre las luces de la ciudad que ya parecía cambiar de ritmo al acercarse la noche.
>>> Al día siguiente, de camino al colegio <<<
Decidí teletransportarme nuevamente al callejón cerca de la escuela para evitar la muchedumbre de la entrada. Ya comenzaba a gustarme esa estrategia. Salí del callejón y comencé a caminar hacia la entrada principal cuando alguien me llamó por detrás.
—¡Hey, Thiago! —Era Ethan, el chico popular que me había saludado el día anterior—. Parece que madrugaste de nuevo. ¿Listo para otro día de supervivencia?
Lo miré, algo sorprendido de que recordara , y le respondí con una sonrisa forzada.
—Sí, eso parece. Supongo que así es la vida en la jungla, ¿no?
Ethan soltó una carcajada y asintió mientras se unía a mi paso.
—Exactamente, pero te acostumbrarás. Oye, si necesitas ayuda con algo, no dudes en decírmelo. Es raro ver a alguien nuevo por aquí, sobre todo alguien como tú.
—¿Alguien como yo? —pregunté, frunciendo el ceño con curiosidad....se burla
—Sí, ya sabes... —dijo con una sonrisa misteriosa—, alguien... dievertido
.Ethan pareció pensarlo un segundo antes de cambiar de tema rápidamente, y eso me dejó pensativo. ¿que le pasa a este tipo? Lo observé de reojo mientras continuábamos caminando. Parecía amigable, pero no pude evitar la sensación que finjia . Guardé ese pensamiento para mí, decidiendo que no valía la pena obsesionarme con eso de momento...
---este sera un dia largo(suspiro)
>>continuara<<