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Chapter 12 - episodio 10: De vuelta a la acción.

En un pueblo tranquilo, una cabaña se erguía entre los árboles, conocida por ser el hogar de Rigor. Todos en el pueblo admiraban a este hombre, no solo por su habilidad en combate, sino también por su sabiduría y bondad.

Rigor, sentado en su cabaña, revisaba antiguos manuscritos y reflexionaba sobre los tiempos pasados. La luz del sol se filtraba a través de las ventanas, iluminando el ambiente con un brillo cálido. A pesar de los desafíos que había enfrentado, se sentía en paz, rodeado de la naturaleza que tanto apreciaba.

De repente, un suave golpe en la puerta lo interrumpió. Al abrir, encontró a Victor, quien sonrió al verlo. "Rigor, he venido a hablar contigo sobre algunos asuntos del reino," dijo Victor, sintiendo una mezcla de respeto y admiración por su amigo.

Rigor lo invitó a entrar, dispuesto a escuchar lo que tenía que compartir. La cabaña se llenó de un aire de camaradería y confianza, un lugar donde los dos podían discutir los desafíos que se avecinaban.

Victor comenzó a exponer la situación del reino, describiendo las amenazas que se cernían sobre ellos. Rigor lo escuchaba con atención, aunque no comprendía del todo la complejidad de los problemas que enfrentaban. Sin embargo, asintió con la cabeza, mostrando su apoyo y disposición para ayudar.

"Lo entiendo," dijo Rigor con voz firme, aunque en su interior sabía que la situación era más complicada de lo que parecía. "Si hay algo que pueda hacer para ayudar, cuenta conmigo."

Victor sonrió, apreciando la confianza y el ánimo de Rigor. Sabía que, aunque no comprendiera todos los detalles, su amigo siempre estaría dispuesto a luchar por el bien de todos. "Tu experiencia y liderazgo son esenciales, Rigor. Juntos, podremos enfrentar cualquier desafío."

La conversación continuó, cada uno compartiendo ideas y estrategias, fortaleciendo la alianza que había sido forjada en el fuego de las batallas pasadas.

"¿Quién eres?" preguntó Rigor, su mirada fija en Victor.

Victor se detuvo por un momento, sintiendo el peso de la pregunta. "Soy alguien que ha visto muchas cosas, Rigor. He enfrentado desafíos que muchos no podrían imaginar. Pero más importante aún, soy un amigo que busca proteger a aquellos que ama."

Rigor lo observó, sus ojos profundos mostrando curiosidad. "¿Y qué es lo que realmente deseas?"

Victor respiró hondo antes de responder. "Quiero asegurar un futuro seguro para todos, un lugar donde podamos vivir en paz y donde las sombras del pasado no nos alcancen. Pero para lograrlo, necesito tu ayuda y tu experiencia."

Rigor asintió lentamente, comprendiendo que juntos podrían formar una fuerza formidable. "Entonces, contemos nuestras historias y unamos nuestras fuerzas. Estoy contigo en esto."

Dariel siguió a Victor, sintiendo una mezcla de admiración y nerviosismo al ver a Rigor. Sus ojos se iluminaron al observarlo, dejando escapar una chispa de enamoramiento. Sin embargo, al notar que Victor se giraba hacia la ventana, rápidamente se ocultó, confundida por sus propios sentimientos.

Victor, ajeno a la presencia de Dariel, continuó conversando con Rigor. "He estado pensando en lo que podemos hacer para prepararnos. La amenaza que enfrentamos no es solo física, sino también emocional. Necesitamos unir fuerzas, cada uno aportando lo que mejor sabe hacer."

Rigor lo escuchó atentamente, sintiendo el peso de las palabras de Victor. "Es cierto, y también debemos preparar a aquellos que aún no están listos. La batalla que se avecina no será fácil."

Dariel, aún oculta, se sintió inspirada por la determinación de ambos. Sabía que, a pesar de su confusión, quería ser parte de esa lucha.

Una nave surcaba el cielo, sus motores zumbando mientras descendía. Desde el interior, una voz resonó con emoción: "Hemos encontrado de nuevo a nuestro sicario favorito." La nave atravesó la atmósfera terrestre, iluminando el paisaje nevado de las montañas rocosas con su luz brillante.

Al impactar en la ladera de una montaña, el ruido del metal resonó a través del aire helado. La puerta de la nave se abrió, y una figura encapuchada salió, envuelta en una aura de misterio. Era un experto en la oscuridad, un asesino que había dejado su marca en muchos mundos. Su mirada fría recorrió el paisaje, y una sonrisa se dibujó en su rostro al contemplar la nueva cacería que se avecinaba.

"Es hora de poner en marcha el plan," murmuró, mientras se adentraba en las profundidades de la montaña, preparado para cumplir con su misión y buscar a aquellos que se interponían en su camino.

Víctor, con rapidez, le gritó a Rigor que se levantara. Al verlo incorporarse, le dio un golpe en la nuca, dejándolo caer de nuevo al suelo. Sin perder tiempo, abrió la puerta, consciente de que Dariel estaba cerca. Sintió su poder un poco disminuido, así que se volvió hacia ella.

"Cuidado con Rigor", le advirtió. Dariel, sorprendida pero decidida, asintió y se acercó a Rigor para asegurarse de que estuviera bien. Ella sabía que la situación era grave, pero sentía la responsabilidad de protegerlo.

Mientras Víctor salía de la cabaña, el aire se tornó denso y tenso, cargado de la inminente amenaza. Sus sentidos estaban agudizados; podía sentir la energía que emanaba de la nave enemiga que se había estrellado en las montañas. La oscuridad de la noche contrastaba con el resplandor de los sistemas de navegación de la nave, que parpadeaban ominosamente.

A medida que avanzaba hacia la nave, Víctor se recordó a sí mismo la razón detrás de su lucha. No solo era por él, sino también por Rigor, Dariel y todos aquellos que no podían defenderse. El viento soplaba fuerte, llevando consigo el eco de una batalla que estaba por comenzar.

Al llegar a la nave, pudo ver las marcas de impacto en la nieve y las rocas. La puerta de la nave estaba entreabierta, revelando sombras que se movían dentro. Su corazón latía con fuerza mientras se preparaba para lo que vendría. Sabía que enfrentaría a enemigos peligrosos, pero su determinación era inquebrantable.

Con un último vistazo hacia la cabaña, donde Dariel cuidaba de Rigor, Víctor respiró hondo y se adentró en la oscuridad de la nave enemiga, listo para enfrentar cualquier cosa que le aguardara. Su poder empezaba a elevarse, dispuesto a luchar por aquellos que amaba.

Continuará...