Punto de vista de Seraphina
"Espera", dije de repente cuando sentí las callosas manos de Kit arañando deliciosamente mi cintura desnuda.
Al instante, se detuvo y apartó las manos de mi piel, a pesar de las ganas que tenía de tocarme. Mis muslos se estremecieron a su alrededor, sintiendo lo fuerte que me apretaba. A través de la ropa, notaba lo excitado que estaba. El grosor de su polla se estrechaba contra mí.
La humedad se acumuló entre mis piernas y mi cuerpo se volvió sensible.
Ansioso.
Su tacto encendió un fuego bajo mi piel.
El corazón me latía con fuerza, un dolor me invadía todo el cuerpo.
Lo quería.
Lo deseaba tanto que sentía que ardía por él.
Mis manos presionaron su pecho y estaba tan duro como recordaba.
Me fijé en las cicatrices. Podía verlas por todas partes. Marcas de garras. Pinchazos de dientes. Heridas horribles grabadas en su carne. Lo único que quería era tocarlas, presionarlas con los labios y acariciarlas con las yemas de los dedos.
