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Chapter 25 - Capítulo 25

Elizabeth reacciona de inmediato y antes de que el monstruo que me atacó esté demasiado alto, se teletransporta justo encima de él y lo atraviesa justo por en medio de la espalda, provocando que este caiga al suelo y mientras éste desciende ella le continúa apuñalando para que una vez ya este abajo encontrarse muerto.

Me pongo de pie con la ayuda de mi compañero y le comento muy agradecido por salvarme. —Muchas gracias amigo. Me libraste de una buena.

Responde orgulloso con su desempeño heróico. —No fue nada, solamente me di cuenta que venía a por tí y evité que te hiciera daño.

Me torno curioso y le pregunto. —¿Y más o menos no me puedes decir cómo fue que te diste cuenta?

Piensa un segundo y responde. —No fue que lo ví, sino que sentí la intención asesina hacia tí acompañada de la sensación de peligro más fuerte de lo normal. Es como que de tu cuerpo salieron ondas que me decían 'estoy a punto de morir' que me dan un terrible escalofrío.

—Pero una pregunta, aquí todos estamos en peligro, ¿cómo notaste la diferencia?

—Es cierto, la sensación de posible muerte me viene de todos, pero cuando es una muerte casi segura como la mía hace poco y después la tuya, es tan fuerte que hasta se me entumen los dientes.

—En verdad que tu habilidad es increíble, no solo te advierte del peligro hacia tí sino también de los que te rodean. Así que es muy poco probable que algún enemigo te tome por sorpresa.

—Solo espero nunca verme en la situación que no haya forma de evitarlo, como que me ataquen varios a la vez y cosas así porque no soy rápido como tú Irán, como para escaparme de inmediato.

—De algo si estoy seguro, y es de que si nos mantenemos como vamos hasta ahora por lo menos en esta prueba no va a suceder. Por cierto, ¿cómo te llamas? Es que no quiero estarte llamando anti peligro o cualquier apodo relacionado a tu poder.

Ríe al estar de acuerdo conmigo y se presenta. —Soy Gabat mucho gusto en conocerte Irán.

—El gusto es mío Gabat. Entonces completemos esta maldita prueba— Me expreso algo ansioso.

Volvemos al combate y a pesar de que en el anterior portón perdimos a nueve, sumándose que ya hay mayor número de enemigos no nos sentimos acorralados porque contamos con los dos que liberaron su poder.

Lo que resulta algo perturbador es como los monstruos le hacen grandes heridas a la chica de cabello rojizo y ella simplemente aún dejando salir sangre a montones continúa peleando hasta acabar con el que tenga en frente.

Yo viéndola igual de impactado que antes le digo a Alfred que lo tengo cerca. —Ella dice que como quiera las heridas duelen, pero yo no noto que le afecten mucho.

Mi amigo me contesta igual de perplejo que yo. —Pues parece que se adaptó muy fácil a su habilidad, igual o más rápido que todos. Yo diría que cada uno tenía su afinidad con cada poder antes de conseguirlo.

—Y estoy seguro que el caso contrario son de los que mueren sin haberlo descubierto— Le sumo con franqueza.

Nos mantenemos sin ceder ni un centímetro a la enorme cantidad de monstruos que vienen a por nosotros hasta que dejan de llegar y ya casi el puente está lo suficientemente bajo como para cruzar de un salto.

Entonces Alfred exclama con aires de victoria tras haber matado a la última salamandra. —¡¿Esos eran todos?! Jajajaja... Ya no hay quien nos detenga chicos. Esta prueba ya la tenemos en el bolsillo.

Steven le habla precavido como siempre. —Yo creo que todavía es muy pronto para cantar victoria, vikingo— Concluye señalando al aire frío que se arremolina frente a nosotros, dando lugar a la llegada de lo que a nuestro entender es un espectro con un cuerpo casi traslúcido que emite un brillo azulado de apariencia esquelética con una armadura muy trabajada en cuanto a ornamentos de tallados de runas antiguas y figuras de rostros de personas sufriendo, además de una espada larga como el tamaño de su cuerpo y delgada como la hoja de un puñal. El cual emite imponente aura de poder oscuro que hace que todos nos sintamos temerosos de él.

El espectro se mantiene observándonos por un segundo creando una atmósfera de tensión que hace que nos quedemos paralizados a la espera de lo que haga.

El nuevo enemigo tras ver un poco nuestros rostros desafiantes decide avanzar del mismo modo en que Elizabeth emplea su habilidad y se teletransporta justo detrás de nosotros cortándole los brazos y masacrando a los que mueven una de las poleas para después ir a por los arqueros que Elizabeth se lo impide cruzándose en medio y bloqueando su ataque, pero antes de que ella pueda hacerle algo éste desaparece de nuevo y surge justo detrás de ella listo para apuñalarla, pero yo sé lo impido desviando su ataque con uno mío desde abajo para después en movimiento circular ir a por sus piernas sin conseguirlo, porque se vuelve a mover hacia mi amiga que le repite el mismo juego que él desapareciendo antes de que su ataque llegue para después surgir justo a su lado pretendiendo cortarle la cabeza en vano porque éste se escapa de nuevo, donde yo nada más verlo le ataco otra vez en vano porque él se transporta hasta Alfred, el cual dificultosamente bloquea ese ataque que se le dirige al centro de la cabeza por un lado.

La rutina se sigue repitiendo hasta que ataca a la chica de cabello rojizo que le atraviesa el abdomen y está haciendo que la espada atraviese su cuerpo se le acerca lo suficientemente como para cortarle los brazos y aprovechando la ocasión, Elizabeth le clava su lanza en la cabeza del problemático enemigo, el que se desvanece después de iluminarse completamente y estallar.

Alfred se dirige a la rueda y por medio de la colosal fuerza que su hacha le concede, logra terminar de bajar el puente.

Nos dirigimos al último puente y allí nos encontramos con que surgen de la misma forma que el anterior lo que más llamativa por el número, tres espectros, uno con espada y escudo, otro con una lanza con punta en ambos extremos y el último con una espada larga igual que el que acabamos de derrotar.