ALEX
Desde hace un más era el hombre más feliz del mundo y todo porque Gabriela aceptó ser mi novia, fue algo mejor que en mis sueños, más que nada porque no era verdad, pero ahora sí que lo era, ¡¡¡ESTABA SALIENDO CON GABRIELA!!!
La cuestión es que también recuperé a Marcos y Carlota, porque a pesar de que nunca se lo dije antes de que pasara lo que pasó, eran mis amigos, y de los buenos. Confiaba en ellos tanto como lo hago ahora. Carlota había dejado de lado sus intenciones de matarme y podíamos hablar, eso no quería decir que confiara en mí del todo aún, pero algo era algo.
Sara ya era otra historia. Ahora si me hablaba, pero solo lo justo y necesario. Gabriela siempre le decía que no le haría nada, cosa de que estaba seguro de que conseguiría, pero ella seguía sin creérselo del todo.
Por fin me tocaba la clase que adoraba, pero no porque me gustase, sino que allí estaría la persona más bella y que más amaba en este mundo. Estaba caminando hacia la clase que tenía ella ahora y como la puerta aún no se había abierto me quedé esperándola fuera.
No tardo mucho tiempo en salir y parece que iba tan metida en sus pensamientos o medio dormida que no me ve. Otra posibilidad es que esté enfadada por algo que le hiciese, pero no tengo ni idea la verdad, por lo que me acerco a ella para descubrir qué era lo que le pasaba.
"Hermosa, ¿seguro que estás bien?" pregunté por segunda vez en el día "¿Dónde estabas?" preguntó con el ceño fruncido "Junto a tu clase, pero ¿me vas a decir que es lo que te pasa?" pregunté, intentando descubrir que es lo que la estaba molestando, porque algo me decía que algo la estaba molestando "Tengo sueño, te lo dije."
"Pero hay algo más, lo sé. Cuéntame anda." insistí "No es nada, de verdad, me molesta la cabeza y la vista." respondió finalmente "Si quieres no vamos a clase." le aseguré, porque lo último que necesitaba, era que ese estúpido del profesor la molestase "Si que vamos a ir, se me pasará dentro de un rato no te preocupes."
"Por ti me preocuparé siempre." aseguré, porque era cierto "Así de exagerado saliste." respondió, riéndose. No tardamos nada en llegar a la clase y nos fuimos al sitio de siempre, porque si, ahora nos sentábamos juntos, lo que al principio hizo que todo el mundo nos mirara raro y Gabriela se sintiese incómoda y ahora que caigo podía ser por eso ahora también porque ella tenía algo que hacía que notase todo antes que el resto, igual porque no quería ser el centro de atención, pero en verdad no tengo ni idea de lo que le pueda pasar.
La clase pasó rápidamente, no sin que el profesor le llamase la atención a Gabriela que últimamente lo hacía mucho a pesar de que Gabriela empezaba a hacer más caso que de lo que le hacía de costumbre.
Estábamos saliendo de clase y Marcos no tarda nada en llegar a junto a nosotros. Verlos juntos hacía que sintiese cierta envidia por la relación que mantenían. Era una relación que no se ve en cualquier lado la verdad, él estaba ahí para ella, da igual la hora que siempre contestaría y ella lo mismo por él. Se apoyaban mutuamente. Como ellos mismos decían parecían hermanos y no me coge en la cabeza como no lo vi en su momento. De haberme fijado seguro que no nos hubiésemos separado nunca, de eso estoy seguro. Además, que me sentía en deuda con Marcos y Carlota por estar con Gabriela cuando yo no lo hice, creo que es algo que los unió más
"¿Qué tal os fue la clase de dibujo técnico?" preguntó Marcos a los dos, pero centrando su mirada en Gabriela "Una mierda, por una vez que estaba medio atendiendo y va el tío y me hecha la bronca." protestó "Igual es porque estabas medio atendiendo."
"Pero le atendía algo Marcos, sabes que yo a ese hombre no le entiendo nada de lo que explica. Prefiero preparármelo por mi cuenta y ya está." respondió molesta "Pues haz lo que mejor creas que es para ti, si no lo entiendes y sacas mejores notas estudiando por tu cuenta pues hazlo y déjalo a él en paz."
"Marcos tiene razón hermosa, si no lo entiendes y prefieres estudiar por tu cuenta pues hazlo." apoyé, porque lo cierto es que era de las mejores notas en clase "Claro que lo haré, estoy hasta las narices de que me venga a joder." Llegamos abajo e íbamos a empezar a andar hacia el lugar donde siempre se ponían, más que nada porque allí hacía sol y a Gabriela le encantaba, esta se para y se queda mirando para mí.
"¿Qué pasa mi reina? ¿Por qué te paras?" pregunté, frunciendo el ceño "Porque hoy vas a ir con tus otros amigos." dijo, y podía ver que estaba hablando en serio "¿Por qué? Si yo quiero estar contigo." aseguré "Lo sé, y créeme que yo también quiero, pero no por estar conmigo vas a dejar de lado a tus otros amigos."
"Pero Gabriela..." empecé, pero no tarda nada en detenerme "Nada Alex, no hay pero que valga, hoy vas a pasar tiempo con tus amigos, si quieres salimos hoy a la tarde a dar una vuelta, pero ahora vas a ir con tus amigos."
Para mi mala suerte sé que cuando Gabriela decía las cosas así, no habría nadie en este universo que le fuese a cambiar de idea, era más terca que yo incluso, por lo que iba a aceptar, pero eso no implica que fuese a quedar convencido del todo. Sé que no estaría sola, pero me gustaba pasar tiempo con ella.
"Vale, tu ganas, pero solo por esta vez. Para la próxima no lo haré, y puedes tener por seguro que si quieres, esta tarde saldremos a dar una vuelta." respondí y una gran sonrisa aparece en su rostro "Para la próxima ganaré yo también y claro que me apetece salir a dar una vuelta."
"Entonces salimos a la tarde, pero ya veremos si ganas o no." aseguró con una sonrisa plantada en su rostro "Alex, siento decirte que, si te va a ganar ella, siempre haces lo que quiere y si ella quiere eso, pues lo harás sin dudar un segundo." dijo Marcos "Gracias Marcos por tu apoyo, de verdad."
"Sabes que es verdad, no te piques ahora." Eso era verdad, no le negaba nada a Gabriela a no ser que le pasase algo, pero como ese no era el caso, pues ganaba ella, simple y sencillo. Si Gabriela quisiese podía hacer conmigo lo que quisiera que no me negaría a nada.
"Bueno, entonces me voy a buscarlos." dije "Vale, pero nada de meterse en líos ni problemas." pidió y asentí "No lo haré preciosa." Nos dimos un beso y me fui, no sin antes echarle un vistazo para asegurarme de que estaba bien, que así era.