Bella fue al cine con Jacob y Mike. Angela iba a ir con su nuevo novio Ben, pero se enfermó de la gripe estomacal que empezó a rondar por Forks.
Yo por mi parte estaba acostada boca abajo en mi cama con un balde en el suelo a la altura de mi cara. La puerta de mi habitación cerrada, las ventanas abiertas y dos botellas de agua en mi mesa de luz.
Había pescado la fiebre junto con Angela.
Me sentía fatal, pero como dormía la mayor parte del tiempo no lo sufrí demasiado.
No podía comer nada. Cualquier cosa que no fuera agua en pequeños sorbos tenía una corta estadía en mi estómago antes de ir a parar al balde en el suelo.
Mi único consuelo era que probablemente para mañana ya estaría en buen estado. No estaba preparada para lo que ocurrió luego.
Bella volvió enferma del cine junto con Mike, Jacob también tuvo que quedarse en casa sin ver a nadie porque se había agarrado algo en el cine.
Y la falta de comunicación con Jacob se manifestó en Bella igual que los signos de abstinencia en un drogadicto.
Los gritos por las pesadillas volvieron, las miradas vacías y los momentos en blanco. Bella volvía a casa lo más rápido que podía y se pencaba en el teléfono para escuchar de Billy o Jacob.
- Ha habido un problema con las líneas y no funcionan los teléfonos - dijo papá después de que mi hermana hubo halado con preocupación sobre Jacob. - Harry me contó que tiene una enfermedad virósica, mononucleosis o algo así. Tiene que estar aislado.
La cara de Bella fue terrible al enterarse de esa noticia. Durante una semana fue como volver de nuevo a esos meses después de que se fue Edward, solo que ahora volvía corriendo a por el teléfono.
Papá y yo nos preocupamos, papá por la recaída y yo porque me di cuenta de que mi hermana no había mejorado en lo absoluto, aún estaba sumida en la desesperación de haber terminado su relación con el vampiro.
Pero el sábado fue un día interesante.
Había hecho planes con Angela y Jane para estudiar, estábamos en nuestro último año y necesitábamos buenas notas. Había intentado invitar a Bella, pero dijo que estudiaría sola.
Cuando estaba por irme a la biblioteca vi a papá mirando a Bella con algo de pánico en su cara preocupada. Me acerqué a ver qué sucedía.
-... ¿Te vas a pescar hoy?
- Llamé a Harry porque no estaba lloviendo... - La voz de Charlie se atenuó - ¿Quieres que me quede contigo ahora que Jacob salió?
- ¿Jacob está bien? - no pude evitar preguntar.
-Ah si, recién probé y el teléfono funciona. Billy me ha dicho que era algún otro virus y no mononucleosis.
- ¡Que bueno! - respiré aliviada. Después del desahogo en la casa de Jane, me había esforzado y estudiado mis sentimientos y me di cuenta de que mi visión de Jacob había cambiado a algo más cercano, casi como un hermano.
- ¿Bella? Puedo quedarme contigo hoy...
-No hace falta que te quedes papá, la pesca es mejor en días como hoy - como si recién lo recordara mi hermana tocó el teléfono - Tal vez llame a Jessica para estudiar, su ayuda me vendría bien en Matemáticas.
-Estudiarán en alguna casa ¿verdad? No quiero que vayas al bosque, hay huellas de animales grandes cerca de los campamentos. Demasiado cerca.
Así que la preocupación de papá es porque Bella iba a estar sola en casa hoy. Miré el reloj y vi que se me hacía tarde así que me despedí.
-Me tengo que ir. Bells, si no puedes estudiar con Jessica ven a la biblioteca conmigo. Vamos a ir a comer una hamburguesa al mediodía y luego regresar a estudiar.
Saludé a ambos y salí con paso rápido. No iba a tomar la camioneta porque el día estaba hermoso y prefería caminar y hacer ejercicio en días como hoy.
Durante las largas horas estudiando ninguna de las tres hizo conversación de ningún tipo salvo de la escuela. El tiempo pasaba lento como un caracol y aún así nos sorprendimos cuando pudimos cubrir los temas que queríamos repasar más estrechamente demasiado rápido.
Cuando llegó la hora de almorzar prácticamente corrimos de la biblioteca.
- ¿Saben lo del campista que se perdió hace unos días?
Jane y yo miramos a Angela con total curiosidad.
- ¿Desapareció en el bosque o en el sitio del campamento?
-Se dice que las huellas del oso están por todo el campamento del desaparecido.
-Qué horror, debe haber alguna razón para que se hayan acercado tanto a lugares frecuentados por humanos.
Angela se acercó a nosotras y dijo en voz baja.
- Parece que es más de un oso y son enormes.
Las tres nos estremecimos. Forks estaba rodeado de bosque, si un oso llegaba hasta los lugares de campamento, podía llegar tranquilamente a las casas si estaba hambriento.
Llegué a casa exhausta mentalmente. Papá todavía no había llegado y no había rastro de la camioneta en la entrada por lo que deduje que Bella se había juntado con Jessica. Aunque no entendía la relación entre las dos, estaba bien mientras mi hermana saliera de su burbuja.
Me recosté en el sillón y prendí la tele. Estaban dando el programa ENCHANTED y yo lo dejé con todas las intenciones de ver el capítulo, pero me dormí.
Desperté con el sonido de la pueta cerrándose fuertemente.
- ¿Bella? ¿Dónde fuiste?
-De excursión.
Estaba algo atontada por la siesta que me había pegado pero las alarmas en mi cabeza sonaron fuertemente al escuchar que mi hermana había ido de excursión. Con el oso, u osos, sueltos y cerca de Forks ¿cómo se le ocurría salir sola?
-...Vi a los osos, son lobos enormes papá, y hay cinco.
-¿Los viste?
Mi voz estaba un poco ronca, pero ni Bella ni mi padre se giraron a mirarme, Bella parecía algo asustada.
-Si, los vi. Ellos simplemente pasaron de mí. Corrí hasta el auto y vine a todo lo que pude.
-Nada de excursiones Bella- dijo papá en voz profundamente cansada.
-No más.
Bella cumplió su promesa y por alguna razón se pegó a mí. No se escapó al bosque ni intentó nada extraño. Aunque su actitud llena de miedo ante cualquier ruido era algo exagerada o la de espiar a papá si se levantaba más temprano que él era muy extraña, no la aparté y me quedé con ella.
No hablamos mucho entre nosotras., pero se volvió menos forzado. Siempre pensé que, para ser hermanas mellizas no teníamos mucha interacción entre nosotras. Casi todo se basaba en vana conversación de las clases y de vez en cuando en que Jacob no había llamado desde que se mejoró.
Al principio no pesé mucho, ya que papá nos decía algunas cosas de cuando en cuando pero cuando mi hermana expuso que de llamar todas las semanas de pronto hacía casi un mes que Jacob no se había comunicado y que Billy seguía poniendo excusa para que no habláramos con el decidí ir con ella a La Push durante el fin de semana.
Me desperté tarde, los exámenes eran una pesadilla para mí. Los nervios no me dejaban dormir bien así que usaba los momentos de insomnio para releer los resúmenes que había hecho. Solo los fines de semana eran un alivio.
Cuando bajé, vi a Bella toda enfurruñada.
- ¿Qué pasa?
-Papá no me cree que hay algo mal con Sam Uley.
- ¿Y por qué debería? Sam está llevando a los traviesos por el "buen camino" - hice comillas con mis manos - No importa Sam, ¿vamos a ir?
-Vamos.
En el camino a la casa de Billy, nos encontramos con un amigo de Jacob y Bella se ofreció a llevarlo a casa. No había mucho espacio en el asiento así que después de saludarle me senté en la caja de la camioneta. Mirando el familiar paisaje. Aunque en realidad no venía mucho a la Reserva, casi todos mis viajes eran a los ríos donde papá y sus amigos pescaban.
Una vez que llevamos al joven a su casa, Bella estacionó frente a lo de Billy.
Yo me bajé de la caja y caminé hacia la puerta. Pude ver que Bella no tenía intenciones de bajar del coche, pero yo quería saludar.
Toqué la puerta solo para escuchar el sonido de una voz gruesa y gruñona.
- ¿Qué estás haciendo aquí, Bella?
La puerta de la casa se abrió y miré a Billy. Le sonreí negando con la cabeza.
-Si querías ocultar al grupo esteroides, tendrías que haberles bajado la dosis. En serio Billy.
Mi sonrisa se desvaneció al ver que la cara del hombre frente a mí permanecía seria con un toque de duda en sus ojos.
- ¿Qué están haciendo aquí Mary?
Me apoyé contra la casa mientras miraba a Jacob y Bella que estaban discutiendo, a unos metros estaba un grupo de jóvenes de cabello corto y caras furiosas. Fruncí el ceño ante la hostilidad.
-Queríamos saber qué le pasaba a Jacob. No llamó a casa en un mes. Si se peleó con mi hermana es una cosa, pero... - miré a Billy de reojo - ni siquiera me llamó para pedirme consejos amorosos o algo así.
La expresión de Billy no cambió. Suspiré y seguí viendo a mi hermana, de pronto Sam habló en un idioma desconocido y vino hacia mi dirección.
Lo observé y a los otros.
Tenían el pelo rapado, no corto. Todos eran altos y se habían puesto musculosos, como depredadores. No pude evitar silbar en mi mente y mi boca me traicionó.
-Quiero lo que sea que están comiendo.
Billy me miró raro y yo me erguí.
-Mírame, ¡apenas mido uno sesenta!
Un atisbo de sonrisa apareció en su cara. Cuando Sam estuvo lo suficientemente cerca agité la mano.
-Ey Sam.
-No las esperábamos Maribell. Ni a ti ni a tu hermana.
-Bueno, eso pasa cuando el chico que considero un primo hermano deja de llamar de golpe después de salir con mi hermana al cine. Es sospechoso. Y Bella puede ser muy obstinada.
No obtuve respuesta salvo las miradas algo hostiles de los otros tres chicos detrás de Sam.
-Vamos adentro.
Al final, entré con ellos, aunque fui muy poco sutil y me senté al lado de la ventana, corriendo la cortina para mirar. Fruncí las cejas al ver a Bella llorar. Era raro que mi hermana llorase frente a alguien más.
Discutieron, la cara de Jacob me daba mala espina, escuché a Bella hablar de Quill. Así que ese era el nombre del chico que acercamos a casa. Me relajé cuando lo vi caminar hacia la casa,
... Hasta que le dio un puñetazo a un árbol.
Me levanté bruscamente, pero antes de que lo supiera uno de los chicos estaba frente a mí. Lo miré a los ojos y rápidamente volví mi mirada hacia Bella.
-Tal vez es mejor que vuelvan a casa Marybell.
Miré a Billy y a los demás que se estaban moviendo, podía ver la preocupación el la cara del hombre y me relajé, la discusión de afuera era bastante audible para los que estaban adentro de casa y no pude evitar sentir algo de vergüenza ajena al escuchar a mi hermana admitir que Jacob era el ancla que necesitaba ahora que Edward no estaba.
-Si, tengo que llevar a Bella a casa. Ya voy a pasar por aquí - me detuve unos segundos - con papá. Extraño el pescado frito de Harry.
-Nos vemos Mary.
Ah, pensé, volvimos a los diminutivos.
Abrí la puerta y vi a Jacob con cara de desalmado frente a mí. Apenas si me registró.
-Oh, Mary, no te había visto.
Le puse la mano en el brazo y usé mi habilidad por costumbre como lo hacía con papá cada vez que se preocupaba hasta el insomnio por Bella pero retiré mi mano rápidamente para que no me descubriera.
-No te preocupes, creciste demasiado alto, ahora necesitarás lupa para encontrarme - Me giré - Nos vemos Billy, Sam, chicos.
Salí de la casa para encontrarme con lluvia. Era un aguacero y Bella estaba mojándose, mirando con esos ojos vacíos en una expresión llena de ansiedad.
Intenté convencer a Bella de que volviera al coche. Incluso la quise arrastrar, pero parecía fijada al suelo. Al último quise usar mi habilidad, pero como la otra vez, me topé con un obstáculo.
La puerta se abrió y vi que la vida volvía a la cara de mi hermana por un segundo hasta que las palabras siguientes la dejaron rota. Otra vez.
Finalmente pude llevar a Bella a casa, Papá se asustó al ver la familiar expresión en ella.
Después de que Bella se bañó, me di una ducha para evitar resfriarme. Y me encontré con papá mascullando por lo bajo en la cocina.
- ¿Que pasa?
-Hablé con Billy, se han pasado al decirle a Jacob que no se juntara con Bella solo porque su hijo tiene un enamoramiento. ¡Ella estaba mejorando!
Suspiré otra vez. Si fuera Billy también intentaría evitar que mi hijo cayera en un amor imposible, pero al mismo tiempo, al ver a mi hermana sumida en ese estado nuevamente me hizo querer ser egoísta.
A la mañana siguiente vimos a Bella correr bajo las escaleras, aún vistiéndose torpemente mientras caminaba a puerta.
-A donde vas?
-Debo ver a Jacob ahora.
-Pensé que el tema con Uley...
-No importa, tengo que verlos ahora.
-Es demasiado temprano ¿No quieres desayunar?
Bella se detuv mientras se acomodaba la ropa.
-Volveré pronto.
-No vas a parar en el camino a la casa de Jacob ¿verdad?
La voz de papá llamó la atención de Bella.
-No ¿por qué?
-Hay un testigo de los lobos, cerca del balneario junto a las fuentes termales.
- ¿Los lobos atacaron a alguien?
Bueno, esto era nuevo, ese chillido era demasiado extraño en mi hermana.
-No, solo encontraron huellas y algo de sangre, los guardas forestales patrullan armados así que no quiero que vayas cerca de esos lugares.
-¿Van a cazar a los lobos?
-Si Bella, debemos hacerlo - Papá se levantó de la mesa y se despidió de ambas, en ese momento Bella vio la pistola y las botas - ¿Vas a ir a cazar a los lobos?
-Si cariño. No te volverás una ecologista proteccionista ¿verdad Bella?, la gente está desapareciendo -dijo papá con algo de gracia antes de volverse serio - ¿Vas a salir entonces?
-Tal vez es demasiado temprano para ir a La Push.
-Bueno, me voy. Adiós chicas.