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Despertar De La Revolución

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Synopsis
Un grupo de valientes ciudadanos se une para desafiar y derrocar a un gobierno militar opresor que atenta contra la vida de los inocentes.
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Chapter 1 - Capítulo 1 La Chispa de la Inconformidad

Capítulo 1

Leo es un joven de 17 años que vive en un país en guerra. Un día, los militares llegan a su casa y lo reclutan a la fuerza, obligándolo a servir a su patria. Sus padres se oponen y tratan de protegerlo, pero los militares los llevan junto a Leo y los asesinan frente a él. Leo queda traumatizado y lleno de odio; en su mente jura vengarse de lo que el gobierno le hizo a sus padres.

Leo es llevado a una base militar, donde lo someten a un experimento con radiación. El objetivo es crear soldados superpoderosos que puedan ganar la guerra. Sin embargo, el experimento sale mal y ocurre una explosión. Leo es expuesto a una gran cantidad de radiación, y los militares lo reportan como muerto. Pero Leo no muere; en cambio, obtiene la habilidad de crear cualquier cosa que pueda imaginar. Al darse cuenta de esto, sabe que podrá cumplir su venganza.

Decide alejarse lo más posible de la capital para no ser reconocido y se instala en un pequeño pueblo llamado Maxia. Una vez que tiene un apartamento y lo básico para sobrevivir, decide ir al médico para ver si tiene secuelas por la radiación.

Entra al hospital y pide una cita médica. Debe esperar a que lo llamen; tras unos minutos, lo llaman al consultorio del doctor. El médico lo revisa y le comenta que está en muy buenas condiciones, incluso mejor que muchos jóvenes promedio. Con la tranquilidad de saber que está bien de salud, decide ir a un restaurante para celebrar el hecho de seguir vivo y tener una habilidad con la cual vengarse.

En ese restaurante, conoce a una chica llamada Luna. Al ver a Leo solo, ella se sienta en su mesa y comienza a hablarle.

+LUNA: Hola, ¿cómo estás?

-LEO: Hola, bien. Disculpa, ¿te puedes retirar de mi mesa?

+LUNA: Oh, disculpa por no pedir permiso para sentarme contigo, pero es que me llamaste la atención desde que te vi y no pude evitar dirigirte la palabra.

-LEO: Bueno, ya que estás aquí, dime tu nombre.

+LUNA: Claro, mi nombre es Luna. ¿Y el tuyo?

-LEO: El mío es Leo. ¿Cuántos años tienes?

+LUNA: Tengo 16 años, pero en un par de meses cumplo 17 años.

-LEO: Bueno, ¿vives aquí o estás de viaje?

+LUNA: Soy de la capital pero ando de viaje. ¿Y tú?

-LEO: Estoy viviendo aquí en Maxia.

+LUNA: ¡Qué bien! Bueno, me tengo que ir.

-LEO: Está bien, adiós.

-LEO: Qué chica tan rara; es muy extrovertida, pero me agrada.

Al terminar de comer, se dirige a su apartamento para descansar después del largo día que tuvo.

### Capítulo 2: Nuevas Alianzas

Leo se despertó al día siguiente con la mente llena de pensamientos sobre su encuentro con Luna. Era raro para él abrirse a alguien, pero había algo en su forma de ser que le resultaba intrigante. Sin perder más tiempo, se levantó y decidió que era hora de comenzar a planear su venganza.

Mientras tomaba su desayuno, recordó la explosión en la base militar y cómo había sobrevivido. La idea de usar su nuevo poder para crear aliados lo emocionaba, pero también lo llenaba de incertidumbre. Necesitaba personas en las que pudiera confiar, personas que compartieran su deseo de hacer justicia.

Después de meditar un rato, Leo salió a explorar el pueblo. Mientras caminaba por las calles tranquilas de MAXIA, notó un pequeño café donde un grupo de jóvenes se reunía. Se acercó y escuchó fragmentos de sus conversaciones: hablaban sobre el gobierno, la guerra y sus familias. Leo sintió que podría encontrar allí a algunos posibles aliados.

Se armó de valor y se acercó a la mesa.

+LEO: Hola, ¿puedo unirme a ustedes?

Los jóvenes lo miraron con curiosidad.

-JOVEN 1: Claro, siéntate. ¿Cómo te llamas?

+LEO: Soy Leo. Estoy viviendo aquí desde hace poco.

_JOVEN 2: ¿De dónde eres?

+LEO: De la capital... pero no quiero hablar mucho sobre eso.

Los jóvenes intercambiaron miradas comprensivas. Leo sintió que había hecho bien al hablarles; notó que compartían una frustración similar hacia el gobierno militar.

+LEO: He estado pensando... ¿qué harían si pudieran cambiar las cosas?

La conversación se encendió rápidamente. Uno de los chicos, llamado Marco, comenzó a hablar con pasión.

-MARCO: ¡Yo haría lo que sea necesario! ¡Estamos cansados de vivir con miedo!

_JOVEN 3: Pero no podemos hacerlo solos. Necesitamos un plan.

Leo sonrió al escuchar esto; finalmente parecía estar acercándose a lo que quería.

+LEO: Yo tengo una idea... ¿y si formamos una organización? Algo que nos permita unir fuerzas y luchar contra el gobierno.

Los jóvenes se miraron entre sí, sorprendidos pero intrigados.

-JOVEN 2: ¿Organización? Eso suena arriesgado... pero emocionante.

+LEO: Sí, podemos empezar por reunir información y construir una red de apoyo en otros pueblos.

Así fue como Leo empezó a reclutar a sus primeros compañeros: Marco, un chico valiente con habilidades para la estrategia; Sara, una joven hacker con talento para infiltrarse en sistemas; y Tomás, un ex soldado desilusionado que conocía los secretos del ejército.

Con el grupo formado, comenzaron a reunirse cada semana en el café para discutir sus planes. Leo utilizó su habilidad para crear objetos útiles: mapas detallados del área y herramientas para comunicarse sin ser detectados.

Un día, mientras estaban en una reunión, Luna apareció en el café nuevamente y se acercó a la mesa.

-LUNA: Hola, Leo. Me alegra verte otra vez. Pareces muy ocupado...

Leo sintió un extraño impulso de compartir su misión con ella.

+LEO: En realidad estamos hablando sobre... cómo luchar contra el gobierno militar.

Luna frunció el ceño, sorprendida pero interesada.

-LUNA: Eso suena peligroso... ¿estás seguro de lo que haces?

Leo asintió con firmeza.

+LEO: Sí, he perdido mucho por culpa de ellos. No puedo quedarme sin hacer nada.

Luna miró a los otros jóvenes y vio la determinación en sus rostros. Después de un momento de reflexión, sonrió y dijo:

-LUNA: Si me dejáis ayudar, yo quiero estar en esto también. Tengo contactos en la capital que pueden ser útiles.

Leo no podía creerlo; una nueva aliada podría ser justo lo que necesitaban.

+LEO: Claro, bienvenida al grupo, Luna.

A medida que los días pasaban y su organización crecía, Leo se sentía más fuerte y decidido que nunca. Cada vez estaba más cerca de cumplir su venganza y darles a sus padres la justicia que merecían. Pero también sabía que el camino sería peligroso; debían estar preparados para cualquier cosa.

Mientras tanto, en la distancia, sombras del pasado comenzaban a moverse… El gobierno no iba a permitir que un grupo así surgiera sin luchar. Leo tenía mucho trabajo por delante; cada decisión contaba y cada aliado era crucial en esta batalla por la libertad y la venganza.