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Chapter 2 - Capítulo 2 Voces en la Oscuridad

Capitulo 2

Con el grupo decidido a actuar, se reúnen en un viejo almacén para discutir su plan de acción. La energía en el aire es palpable; todos saben que ha llegado el momento de dar un paso adelante. Leo, entusiasmado, comparte su visión sobre cómo pueden movilizar a más personas y crear conciencia sobre las injusticias que están sufriendo.

Los Chichos, siempre inquietos pero leales, aportan ideas para hacer que su mensaje llegue a la mayor cantidad de personas posible. Proponen realizar una serie de volantes y graffitis en lugares estratégicos, asegurándose de que la voz del pueblo se escuche. La emoción crece cuando todos coinciden en que deben actuar con valentía y determinación.

Durante la reunión, Clara, una mujer carismática que ha estado observando al grupo desde lejos, se une a ellos. Ella trae consigo información valiosa sobre las tácticas del gobierno y propone un plan audaz: organizar una manifestación pacífica para atraer la atención de los medios y del público. La idea entusiasma a todos, pero también genera un debate sobre los riesgos involucrados.

Leo se siente inspirado por la pasión del grupo y decide tomar la iniciativa. Juntos, comienzan a diseñar pancartas y elaborar discursos que resalten las injusticias que han sufrido. La camaradería entre ellos crece mientras trabajan codo a codo, compartiendo risas y anécdotas que fortalecen su vínculo.

A medida que se acerca el día de la manifestación, la ansiedad también aumenta. Sin embargo, Leo se siente más decidido que nunca; sabe que están luchando por algo más grande que ellos mismos. La noche anterior al evento, se sientan alrededor de una fogata, compartiendo sus esperanzas y sueños para un futuro mejor.

La manifestación comienza con un ambiente de esperanza y unidad. Leo y los Chichos, junto a Clara y el resto del grupo, se sienten optimistas mientras marchan por las calles, levantando pancartas que exigen justicia y un cambio. Sin embargo, la respuesta del gobierno no es la que esperaban.

A medida que la multitud crece, los militares, en lugar de escuchar sus demandas, envían unidades antidisturbios para sofocar la protesta. Sin previo aviso, los cañones de agua comienzan a arrojar chorros de agua a presión sobre la multitud, dispersando a las personas que intentan mantenerse firmes. El sonido ensordecedor de las sirenas se mezcla con gritos de desespero cuando los gases lacrimógenos empiezan a llenar el aire.

Leo, aturdido por la repentina violencia, observa cómo algunos de sus amigos caen al suelo, luchando por respirar. La escena se convierte en un caos total; la esperanza que había sentido momentos antes se transforma en rabia. En medio de la confusión, se da cuenta de que las palabras pacíficas no son suficientes para enfrentar esta opresión.

Cuando logran reagruparse en una calle cercana, el grupo discute lo ocurrido. La furia colectiva crece y Clara sugiere que ya no pueden seguir siendo pasivos. "Si no nos escuchan con pancartas, tal vez tengan que escucharnos con acciones más contundentes", dice con determinación. Los Chichos asienten; están listos para ir más allá de lo que habían planeado.

Leo siente cómo el peso de la decisión recae sobre sus hombros. Sabe que cruzar esa línea significará dejar atrás cualquier esperanza de una lucha pacífica. Sin embargo, también entiende que la única forma de luchar contra la corrupción de los jefes militares es desmantelar su poder desde dentro.

Después de una intensa discusión, deciden que deben atacar los centros de poder militar para debilitar el régimen. Se organizan en pequeños grupos para llevar a cabo actos estratégicos: sabotear instalaciones clave y desmantelar operaciones ilegales. La idea es clara: si van a luchar, lo harán con todas sus fuerzas y sin miedo.

El capítulo culmina con Leo mirando a sus amigos; siente una mezcla de temor y determinación. Saben que han tomado un camino peligroso, pero es un camino necesario para recuperar su libertad y justicia. Con un grito unánime de "¡Por la libertad!", comienzan a trazar su nuevo plan.