Spajit, con una destreza impresionante, entrenaba mientras se desplazaba ágilmente utilizando la cadena con dientes de su Nefesto Leviathan, balanceándose y ejecutando movimientos precisos con su espada Leviathan. Su entrenamiento era intenso, cada golpe y maniobra evidenciaban su poder y determinación, preparándose para los desafíos que estaban por venir.
Mientras Spajit continuaba su arduo entrenamiento en un paraje remoto, aislado del mundo, los ecos de su leyenda comenzaban a resonar en las calles de Chile. Aquella tierra que la vio nacer, ahora se convertía en el epicentro de rumores inquietantes. Se decía que alguien, con una apariencia y habilidades sorprendentemente parecidas a las de la temida villana, había sido vista en varias localidades. Estas habladurías corrían como el viento entre la población, alimentando el temor y la especulación sobre el surgimiento de una nueva amenaza.
La gente se susurraba historias en mercados y plazas, en reuniones familiares y en las oscuras esquinas de los bares, pintando cuadros de una figura envuelta en sombras que, al igual que Spajit, empuñaba la poderosa espada Leviathan. Algunos afirmaban haber visto el destello de su Nefesto Leviathan, la temida cadena con dientes, mientras se movía entre los árboles como un espectro, desplazándose de un lugar a otro con una agilidad casi inhumana.
No faltaban quienes aseguraban que esta nueva figura estaba buscando venganza o que Spajit, de alguna manera, había encontrado la manera de regresar para ajustar cuentas pendientes. Otros, más supersticiosos, creían que era una especie de heraldo, una advertencia de que algo terrible estaba por suceder. En cualquier caso, la sombra de la duda y el miedo se cernía sobre el país, mientras Spajit, ajena a todo, continuaba afilando sus habilidades y preparándose para un conflicto que aún no había revelado su verdadera naturaleza.
Spajit, intrigada y alerta, comenzó a prepararse a fondo. Cada pieza de su equipo fue revisada minuciosamente, su espada Leviathan afilada hasta el punto de ser letal con el más mínimo toque, y el Nefesto Leviathan, la cadena con dientes que le permitía moverse con agilidad, fue ajustado para máxima eficacia. La idea de que alguien pudiera parecerse a ella, o incluso ser una versión alternativa, encendió una chispa de curiosidad y desconfianza en su mente.
Con su entrenamiento al máximo y todos los recursos a su disposición, Spajit se embarcó hacia Chile, movida no solo por la necesidad de confirmar los rumores, sino también por el deseo de confrontar a quien o lo que fuera que pudiera amenazar su singularidad. Cada paso que daba estaba cargado de determinación, dispuesta a desentrañar el misterio y, si fuera necesario, eliminar cualquier sombra que pudiera usurpar su identidad.
Spajit llegó a Chile en un vuelo comercial, pero su presencia era cualquier cosa menos ordinaria. Con su imponente figura y aura intimidante, no pasó desapercibida para aquellos que compartían el vuelo. Mientras el avión aterrizaba, el sol empezaba a iluminar las cumbres de los Andes, dándole la bienvenida a un país lleno de misterio y posibilidades.
Bajó del avión con un propósito claro, sus ojos recorriendo el aeropuerto con frialdad calculadora. Aunque se camuflaba entre los pasajeros comunes, cada paso que daba estaba marcado por la confianza de una guerrera en busca de respuestas. Ahora, en suelo chileno, estaba más cerca de descubrir la verdad detrás de los rumores y de encontrarse con esa supuesta doble que la acechaba en las sombras.
Spajit se dirigió al lugar donde una vez había vivido con su familia, un hogar lleno de recuerdos que ahora le parecía tan distante. Mientras caminaba por las calles que conocía bien, la curiosidad y la determinación se mezclaban en su mente. A medida que avanzaba, comenzó a preguntar a las personas con las que se cruzaba sobre la chica de la que todos hablaban.
Las respuestas que obtenía eran variadas. Algunos mencionaban haber visto a una mujer con una apariencia sorprendentemente similar a la suya, mientras otros hablaban en susurros de extraños sucesos que habían ocurrido en la zona. A medida que las piezas del rompecabezas comenzaban a encajar, Spajit sintió una creciente intriga y una necesidad urgente de descubrir la verdad. Las sombras de su pasado parecían estar más cerca de lo que imaginaba, y ella estaba dispuesta a enfrentarlas, sin importar lo que encontrara al final de su búsqueda.
Spajit pasó dos horas recorriendo las calles y hablando con la gente, pero su perseverancia finalmente dio fruto. Llegó a un concurrido centro comercial, donde, entre la multitud, divisó a una chica que captó su atención de inmediato. Era como mirarse en un espejo, con solo pequeñas diferencias que hacían que sus similitudes fueran aún más inquietantes.
Spajit se acercó con determinación, sus pasos resonando en el suelo pulido del centro comercial. Sin rodeos, le preguntó a la chica: "¿Quién eres?"
La joven la miró con una mezcla de sorpresa y curiosidad. "Soy Beasty," respondió, inclinando la cabeza ligeramente mientras la examinaba. "¿Por qué te pareces tanto a mí?"
Las palabras colgaron en el aire entre ellas, cargadas de misterio y un sinfín de preguntas sin respuesta. Spajit y Beasty, dos caras de una moneda, ahora se encontraban frente a frente, y lo que seguía era un enigma que ambas estaban decididas a resolver.
Spajit y Beasty caminaron juntas en silencio, cada una sumida en sus propios pensamientos mientras recorrían las calles de la ciudad. Sus pasos las llevaron a una zona médica, donde ambas se dirigieron a un laboratorio especializado en pruebas de ADN.
Con rostros serios, se presentaron en la recepción, explicando su inusual situación. El personal, intrigado por el parecido entre las dos, accedió rápidamente a realizar la prueba.
Una vez en la sala, las muestras de ADN fueron recolectadas meticulosamente. Ambas mujeres se sentaron en silencio mientras el proceso se llevaba a cabo, la tensión en el aire palpable. Era un momento decisivo, uno que podría revelar verdades ocultas o plantear aún más preguntas.
Finalmente, las muestras fueron enviadas para su análisis. Spajit y Beasty intercambiaron miradas, sabiendo que la espera sería corta, pero crucial. Ambas comprendían que, en cuestión de minutos, podrían descubrir si su parecido era una simple coincidencia o si había algo más profundo conectándolas.
Cuando los resultados del análisis de ADN llegaron, el laboratorio confirmó lo que Spajit y Beasty ya empezaban a sospechar. El informe indicó que compartían un 99,99% de similitud en su ADN, lo que dejaba en claro que probablemente eran familiares.
Los médicos explicaron que este nivel de coincidencia era extremadamente alto y que era muy probable que fueran parientes cercanos, posiblemente hermanas. La noticia dejó a ambas mujeres en estado de shock, cada una tratando de asimilar la magnitud de lo que acababan de descubrir.
Spajit, acostumbrada a la disciplina y al combate, ahora se enfrentaba a un aspecto muy diferente de su vida. Mientras tanto, Beasty, que hasta ese momento había vivido una vida relativamente normal, se veía arrastrada a un nuevo y complejo conflicto.
Ambas se miraron, conscientes de que su encuentro había cambiado sus vidas para siempre. Spajit, con su naturaleza decidida, propuso encontrar más información sobre su conexión y cómo había llegado a ser parte de sus vidas. Beasty, aunque atónita, estaba dispuesta a explorar esta nueva revelación y a comprender el impacto que podría tener en sus destinos.
Spajit y Beasty, a pesar del impacto de la revelación, intentaron llevar la conversación de manera más tranquila y normal. En la zona médica, mientras esperaban los resultados, comenzaron a hablar sobre sus vidas y experiencias.
Spajit preguntó a Beasty sobre su vida en Chile, sus intereses, y cómo había llegado hasta allí. Beasty le contó sobre su trabajo, sus aficiones y cómo vivía una vida relativamente normal antes de que la noticia de su parecido con Spajit la sorprendiera.
Beasty, curiosa, también quiso saber más sobre Spajit. Esta le habló sobre su vida y su origen, aunque con algunas reservas debido a su naturaleza como villana y guerrera. Mencionó sus entrenamientos, su vida de combate y su búsqueda de la verdad sobre su origen.
Ambas compartieron anécdotas y detalles personales, buscando entender cómo podrían ser tan similares y qué significaba eso para ellas. La conversación, aunque al principio un poco tensa, se volvió más fluida a medida que se conocían mejor, encontrando puntos en común y compartiendo experiencias.
La charla les ayudó a calmar los nervios y a comenzar a ver esta sorprendente conexión como una oportunidad para explorar nuevas facetas de sus vidas y enfrentarse juntas a los desafíos que podrían surgir.
Spajit, al escuchar a Beasty decir que era un anti-héroe, se quedó pensativa por un momento. Su rostro mostró una mezcla de sorpresa y curiosidad.
"¿Anti-héroe?" repitió Spajit. "Eso es interesante. No es algo que se escucha mucho. ¿Cómo te describirías a ti misma en ese papel?"
Beasty, con una expresión seria, explicó: "No sigo las reglas convencionales de los héroes. A veces hago lo correcto, pero mis métodos son poco ortodoxos. Me muevo en la frontera entre el bien y el mal, dependiendo de lo que la situación requiera. Mi objetivo es proteger a los que amo, incluso si eso significa tomar decisiones difíciles o cuestionables."
Spajit asintió lentamente, reflexionando sobre sus palabras. "Eso parece ser una filosofía interesante. Yo también he tenido que tomar decisiones difíciles a lo largo de mi vida, aunque mis motivos y objetivos han sido diferentes. Quizás, en el fondo, nuestras visiones del mundo no son tan distintas."
La conversación entre las dos continuó, explorando más sobre sus filosofías y métodos. A pesar de sus diferencias, encontraron puntos en común en sus experiencias y la forma en que enfrentaban los desafíos.
Spajit y Beasty, después de conocer más sobre la vida y las motivaciones de cada una, decidieron que era el momento de continuar con sus respectivas misiones. Ambas salieron del centro médico, donde habían confirmado su conexión familiar, y se dirigieron hacia el exterior del centro comercial.
"Bueno, parece que tenemos mucho que hacer," dijo Spajit, ajustando su espada Leviathan. "Tengo asuntos pendientes y un objetivo que cumplir. ¿Y tú?"
Beasty asintió, preparándose para partir. "Sí, tengo algunas cosas que atender también. Aunque no sabemos qué nos deparará el futuro, creo que esta reunión fue interesante."
Ambas se despidieron cordialmente, cada una tomando su propio camino hacia el horizonte, listas para enfrentar lo que viniera. Spajit volvió a su entrenamiento y su búsqueda, mientras Beasty se dirigió a sus propios deberes como anti-héroe.
Después de dos semanas, Spajit y Beasty se volvieron a encontrar en un lugar acordado previamente, un parque tranquilo en el centro de Santiago. Ambas habían estado ocupadas con sus respectivos deberes: Spajit, persiguiendo su misión con renovada determinación, y Beasty, manejando sus responsabilidades como anti-héroe.
Spajit llegó al parque, notando cómo el entorno natural contrastaba con el estilo de vida intenso que había estado llevando. Mientras tanto, Beasty ya estaba allí, disfrutando de un breve descanso en un banco bajo la sombra de un gran árbol.
Spajit se acercó con una sonrisa en el rostro, visiblemente relajada tras el tiempo de trabajo arduo. "Hola, Beasty. Ha pasado un tiempo. ¿Cómo van las cosas?"
Beasty levantó la vista y le sonrió. "Hola, Spajit. Todo ha ido bien. He tenido algunos desafíos, pero nada que no pudiera manejar. ¿Y tú? ¿Cómo ha ido tu misión?"
Spajit se sentó junto a ella en el banco. "Ha sido intenso, pero estoy avanzando. Me alegra verte bien. Pensé que sería interesante ponernos al tanto y compartir nuestras experiencias."
Las dos mujeres comenzaron a conversar sobre sus recientes aventuras y descubrimientos, comparando sus enfoques y estrategias, mientras disfrutaban del tranquilo ambiente del parque.
Beasty comenzó a relatar su historia a Spajit, su hermana gemela.
"Mi vida no ha sido fácil", empezó Beasty. "Crecí en una familia que, aunque amorosa, vivió en constante lucha. Desde joven, aprendí a defenderme en un mundo que a menudo parecía hostil. Mis padres nos enseñaron a mí y a mi hermana a ser fuertes y a luchar por lo que creemos. A medida que crecíamos, nos involucramos en el mundo del crimen y la justicia, cada una a su manera."
Beasty hizo una pausa, recordando los días difíciles. "Mis habilidades se desarrollaron rápidamente. Mi padre, un conocido guerrero de la calle, me entrenó en combate y estrategia. Con el tiempo, me convertí en un anti-héroe, una figura que lucha contra la injusticia a su manera, sin ceñirme a las reglas tradicionales de los héroes."
Spajit escuchaba atentamente, notando la pasión y la tristeza en la voz de su hermana. "Hubo un tiempo en que mi hermana y yo éramos inseparables, pero nuestras diferencias de enfoque nos llevaron por caminos separados. Ella se convirtió en una vigilante más estricta, mientras yo tomé un camino más flexible, utilizando mis habilidades de manera más pragmática."
"Lo que me ha llevado a estar aquí hoy", continuó Beasty, "es la necesidad de encontrar un propósito más grande, algo que pueda unir todas las partes de mi vida. Y ahora, al descubrir que tengo una hermana gemela en otro lugar, siento que mi camino está tomando un nuevo giro."
Spajit, conmovida por la sinceridad de su hermana, asintió. "Entiendo mejor ahora por qué tienes esa determinación y fuerza. También me alegra saber más sobre ti, y me parece increíble que nuestras vidas hayan convergido de esta manera. Quizás, juntas, podamos encontrar una forma de usar nuestras habilidades para algo aún mayor."
Las dos hermanas compartieron un momento de conexión, sintiendo que, a pesar de sus diferencias y caminos separados, tenían una base común que las unía.
Beasty continuó, su voz llena de emoción y algo de tristeza. "Soy adoptada por otra familia. Nuestros padres, el tuyo y el mío, me dejaron en un lugar mientras a ti te cuidaban. Aunque no crecimos juntas, siento que de alguna manera, parte de ellos está en mí, en lo que me he convertido."
"Mis padres adoptivos me dieron amor y educación, pero siempre sentí que me faltaba algo, una conexión con mis verdaderos orígenes. La noticia de que tengo una hermana gemela me ha traído una mezcla de sentimientos, desde la sorpresa hasta la esperanza de conocer la parte de mí que había estado ausente."
Spajit escuchó con atención, asimilando lo que Beasty decía. "Eso explica mucho. Aunque no hayamos crecido juntas, es como si nuestras vidas estuvieran entrelazadas de una manera que no habíamos entendido del todo hasta ahora."
Beasty asintió. "Sí, y ahora que nos hemos encontrado, siento que hay algo más grande en juego. Quizás podemos unir nuestras fuerzas y encontrar un propósito juntos. Después de todo, la familia no siempre se define por el lugar en el que naciste, sino por las conexiones que construyes."
Spajit sonrió, sintiendo una profunda conexión con Beasty. "Estoy de acuerdo. Juntas, podemos hacer cosas increíbles. Ahora que nos conocemos, lo que construyamos a partir de aquí solo puede fortalecernos aún más."
Las dos hermanas compartieron una mirada de comprensión y determinación, sabiendo que el camino que estaban a punto de recorrer juntas sería uno lleno de desafíos, pero también de oportunidades para redescubrirse y fortalecer sus lazos.
Mientras Spajit y Beasty charlaban tranquilamente, la atmósfera en el centro comercial cambió repentinamente con la llegada de Rigor, el director de la Academia Historia. Rigor, conocido por su aguda percepción y su capacidad para detectar amenazas, se acercó atraído por la intensa energía que emanaba de Spajit.
Rigor observó a Spajit con una mezcla de curiosidad y cautela. Aunque no conocía a Spajit personalmente, la poderosa vibra que irradiaba le hizo sentir que su presencia podría ser significativa o peligrosa para el equilibrio que él buscaba mantener.
"¿Quién eres tú?" preguntó Rigor, fijando su mirada en Spajit con una expresión de evaluación fría.
Spajit, al notar la presencia de Rigor, se volvió para enfrentarlo. "Soy Spajit. ¿Y tú eres?"
Rigor, sin inmutarse, respondió con tono autoritario: "Soy Rigor, director de la Academia Historia. He notado una energía inusual emanando de ti y vine a investigar."
Beasty, al lado de Spajit, se puso a la defensiva al ver la intensidad de la situación. "No necesitamos que nos investigues. Estamos aquí para nuestra propia búsqueda."
Rigor levantó una ceja, intrigado por la defensa de Beasty pero manteniendo su enfoque en Spajit. "Mi deber es proteger la estabilidad de nuestro mundo y asegurarme de que no haya amenazas emergentes. Si tu presencia pone eso en riesgo, debo actuar."
Spajit, aunque no deseaba problemas, sintió que no podía dejar que Rigor la intimidara. "No estoy aquí para causar conflictos. Mi presencia aquí es parte de mi búsqueda personal. Si tienes dudas, puedes hacerlas, pero no permitiré que interfieras sin razón válida."
Rigor observó a Spajit por un momento más, evaluando su respuesta y la energía que desprendía. "Entiendo. Pero recuerda, la paz requiere vigilancia. Mantén tu camino claro y evita problemas innecesarios."
Con eso, Rigor se dio la vuelta y se alejó, dejando a Spajit y Beasty con la sensación de que un nuevo desafío podría estar en el horizonte. Aunque su encuentro había sido breve, la presencia de Rigor había añadido una capa de complejidad a sus planes. Spajit y Beasty se prepararon para continuar su camino, conscientes de que la vigilancia y la intervención no siempre eran previsibles, pero que debían mantenerse firmes en su misión.
Spajit y Beasty caminaban hacia la casa de Beasty mientras continuaban su conversación. A mitad de camino, Spajit, con una expresión despreocupada, soltó:
"Soy la única que piensa que ese chico llamado Rigor es atractivo."
Beasty se detuvo por un momento, su rostro se tornó en una expresión de incomodidad. No esperaba esa declaración y la sorpresa la dejó momentáneamente sin palabras. Finalmente, con un tono neutral y un poco incómodo, respondió:
"No lo había considerado..."
Spajit, sin notar el malestar de su hermana, continuó con entusiasmo:
"Es que su presencia es tan imponente. Hay algo en él que lo hace destacar. Además, siempre es interesante conocer a personas con habilidades tan poderosas."
Beasty, intentando redirigir la conversación y mantenerse en un terreno más cómodo, dijo:
"Sí, supongo que es una persona interesante. Pero, ¿por qué no dejamos eso de lado y nos enfocamos en lo que vinimos a hacer aquí? Hay cosas más importantes que discutir."
Spajit, al darse cuenta de la incomodidad de Beasty, asintió con una sonrisa, aunque aún parecía pensativa sobre el comentario de Rigor.
"Claro, lo siento. Sigamos hablando de lo que realmente importa."
Continuaron su camino hacia la casa de Beasty, donde la conversación volvió a centrarse en sus planes y el próximo paso en su búsqueda. La declaración de Spajit quedó en el aire, pero Beasty se sintió aliviada al retomar el enfoque en temas más relevantes.
A medida que Spajit y Beasty se acercaban a la casa, Spajit seguía pensando en su comentario sobre Rigor. Aunque intentaba concentrarse en la conversación con Beasty, no podía evitar reflexionar sobre su impresión de Rigor.
Para Spajit, Rigor representaba una figura intrigante. A pesar de su aparente simpleza, la presencia que emitía y su habilidad para manejar situaciones complicadas lo hacían destacar. Para ella, era un contraste atractivo frente a su propio estilo de vida más caótico y desafiado.
"Beasty," dijo Spajit, finalmente rompiendo el silencio que había seguido a la conversación anterior. "Quizás sólo estoy proyectando mi propio deseo de encontrar algo diferente. Rigor es... bueno, a su manera, atractivo. Tal vez sólo estoy buscando algo que me desafíe más allá de lo que estoy acostumbrada."
Beasty, aún un poco desconcertada por la revelación previa, asintió con comprensión. "Entiendo. Todos tenemos nuestras formas de buscar desafíos o algo que nos llame la atención. Si Rigor es lo que te atrae, eso está bien. Lo importante es que encuentres lo que realmente buscas y te sientas satisfecha con ello."
Spajit sonrió, agradecida por la comprensión de su hermana. "Sí, supongo que tienes razón. En fin, hablemos de nosotros y de lo que está por venir."
Ambas continuaron su camino, con Spajit aún con la mente algo ocupada por la figura de Rigor, pero enfocándose en el presente y en lo que tenían que hacer juntas.
Al entrar a la casa de Beasty, ambas mujeres dejaron caer la tensión del día. El ambiente era acogedor, un contraste con el bullicio del exterior. Spajit y Beasty, aunque eran nuevas en su relación como hermanas, ya comenzaban a sentirse cómodas en la compañía de la otra.
Spajit se quitó sus botas y dejó su espada Leviathan y el Nefesto Leviathan en un rincón, aliviada de poder relajarse un poco. Beasty hizo lo mismo, soltando una larga exhalación mientras se quitaba su chaqueta y se acomodaba en el sofá.
"Finalmente, un momento para nosotras," dijo Spajit, dejándose caer en una butaca, su mirada recorriendo la habitación con curiosidad. Aunque esta era la casa de Beasty, Spajit sentía una extraña sensación de familiaridad, como si de alguna manera ya hubiera estado allí antes.
Beasty asintió, sirviendo un par de bebidas y entregándole una a Spajit. "Sí, después de todo lo que ha pasado, es bueno tener un espacio para desconectar. Además, tenemos mucho que contarnos."
Las dos mujeres se acomodaron, disfrutando del silencio momentáneo. No tardaron mucho en empezar a hablar de sus vidas, experiencias y las aventuras que las habían llevado hasta ese momento. La comodidad del ambiente les permitió abrirse más, compartiendo historias que no habían contado a nadie más.
"Sabes," dijo Spajit después de un rato, "aunque hemos llevado vidas muy diferentes, siento que hay algo en ti que siempre he estado buscando. Tal vez por eso es tan fácil hablar contigo."
Beasty sonrió suavemente, sintiendo lo mismo. "Es extraño, pero es como si, a pesar de todo, hubiéramos estado conectadas de alguna manera. Y ahora que estamos juntas, es como si todo empezara a tener más sentido."
La noche se fue desvaneciendo mientras continuaban conversando, riendo y compartiendo. En ese momento, no importaba el pasado ni las preocupaciones del futuro. Solo eran dos hermanas, reconectando y encontrando consuelo en la compañía mutua.
Beasty tomó el control remoto y encendió el televisor, mientras Spajit se acomodaba aún más en la butaca. "¿Te apetece ver algo en particular?" preguntó Beasty, navegando entre los canales y servicios de streaming.
Spajit se encogió de hombros, dejando que su hermana decidiera. "Algo con acción estaría bien, pero tampoco me importa si es algo más relajado."
Beasty sonrió y siguió explorando, deteniéndose brevemente en una película de acción de alto voltaje, llena de explosiones y combates. Pero después de un momento, se decidió por algo un poco más ligero y con un toque de comedia. Encontró una película que parecía una mezcla perfecta entre acción y humor, algo que creía que ambas disfrutarían.
"¿Qué te parece esta?" preguntó, mostrando la sinopsis de una película que trataba sobre un dúo inesperado que se enfrentaba a situaciones extremas con un toque de humor.
Spajit asintió, interesada. "Parece divertida. Ponla."
Beasty seleccionó la película y se acomodó en el sofá junto a Spajit, ambas listas para relajarse y disfrutar de un rato de entretenimiento juntas. La película comenzó, llenando la habitación con luces y sonidos mientras las hermanas se sumergían en la historia, dejando por un momento a un lado sus preocupaciones y disfrutando simplemente del tiempo compartido.
Mientras las escenas de la película se desarrollaban, Spajit observaba atentamente la dinámica entre los protagonistas. La química entre ellos era palpable, con una combinación perfecta de bromas y acción coordinada.
"Me impresiona que se lleven tan bien los protagonistas," comentó Spajit, con un tono de admiración.
Beasty, que también estaba inmersa en la película, asintió ligeramente. "Sí, tienen una buena sincronización, como si supieran exactamente lo que el otro va a hacer. Es algo que no se ve todos los días."
Spajit se quedó pensativa por un momento. "Es raro encontrar una conexión así. Se nota que confían mucho el uno en el otro, incluso en las situaciones más complicadas."
Beasty sonrió. "Quizás es algo que nosotras también podamos tener. Digo, si las circunstancias lo requieren."
Spajit la miró, sorprendida por el comentario, pero luego asintió lentamente. "Sí, tal vez... con el tiempo. Es extraño, pero a pesar de todo, siento que podría confiar en ti."
Ambas se quedaron en silencio por un momento, disfrutando de la película, pero también reflexionando sobre lo que acababan de decir. La conexión entre los protagonistas en la pantalla les recordaba que, aunque eran recién reunidas, había un lazo entre ellas que podía fortalecerse con el tiempo y las experiencias compartidas.
Beasty se levantó del sofá, estirándose un poco después de estar sentada un rato. "Voy a traer algo para picar. ¿Te apetecen unos churros y una gaseosa?" preguntó, dirigiéndose a la cocina.
Spajit asintió con una sonrisa. "Claro, suena perfecto."
Mientras Beasty se dirigía a la cocina, Spajit se quedó sola en la sala, sus pensamientos divagando entre la película y las conversaciones que habían tenido ese día. La idea de tener una hermana, una conexión tan cercana y tan extraña a la vez, seguía siendo difícil de asimilar, pero también emocionante.
En la cocina, Beasty sacó una botella de gaseosa fría del refrigerador y encontró una bolsa de churros en la despensa. Mientras los ponía en un plato, no pudo evitar pensar en cómo había cambiado su vida en las últimas semanas. Tener a Spajit cerca había sido algo inesperado, pero no necesariamente malo. Era extraño, pero comenzaba a disfrutar de la presencia de su hermana.
Regresó a la sala con la gaseosa y los churros, y los colocó en la mesa frente a Spajit. "Aquí tienes. Espero que estén tan buenos como parecen," dijo con una sonrisa, mientras se sentaba nuevamente junto a su hermana.
Spajit tomó uno de los churros y lo mordió, disfrutando del sabor dulce y crujiente. "Perfecto. Gracias, Beasty."
Las dos siguieron disfrutando de la película, ahora con la adición de un buen refrigerio, compartiendo un momento tranquilo y relajado en medio de todo lo que había sucedido recientemente.
Spajit, riendo por una escena divertida de la película, se giró hacia Beasty con una sonrisa traviesa. "Hey, hermana, ¿por qué no cantas esa música? Seguro que lo harías genial."
Beasty la miró con una mezcla de sorpresa y diversión. "¿Cantar? ¡Ni de broma!" respondió, negando con la cabeza, pero no pudo evitar reírse también.
"Vamos, no seas tímida," insistió Spajit, tratando de imitar la melodía con su voz de forma exagerada para animarla.
Beasty se llevó la mano a la cara, riendo. "No puedo creer que me estés pidiendo esto," dijo, pero después de un momento de duda, comenzó a tararear la canción de la película, aunque claramente se sentía un poco avergonzada.
Spajit aplaudió animadamente, disfrutando del momento. "¡Ahí está! Sabía que podías hacerlo. ¿Ves? No estuvo tan mal," dijo, aún riendo.
Beasty se dejó caer en el sofá, riéndose también. "Solo lo hice porque eres mi hermana y no quiero que sigas insistiendo," respondió con una sonrisa, sintiéndose un poco más relajada y divertida.
Las dos siguieron riendo y disfrutando de la película, con el vínculo entre ellas fortaleciéndose poco a poco con cada pequeño momento compartido.
Después de que la película terminó y los churros junto con la gaseosa desaparecieron, Spajit y Beasty se miraron, notando lo tarde que se había hecho.
"Ya es muy tarde," comentó Beasty, estirándose en el sofá. "¿Quieres cenar un poco antes de que nos vayamos a dormir?"
Spajit asintió, sintiendo un ligero hambre después de tanto reírse y disfrutar de la película. "Sí, me vendría bien algo ligero. ¿Qué tienes en mente?"
Beasty se levantó del sofá y caminó hacia la cocina. "Estaba pensando en algo simple. Tal vez unos sándwiches o una ensalada rápida. ¿Qué te parece?"
Spajit la siguió, entrando en la cocina. "Suena perfecto. Yo puedo ayudar a preparar algo."
Las dos hermanas comenzaron a preparar una cena sencilla juntas, disfrutando del proceso y charlando sobre la película que acababan de ver, así como de otros temas. El ambiente era relajado y cómodo, reflejando lo bien que se llevaban a pesar de haber pasado tan poco tiempo juntas desde que se reencontraron.
Al final, se sentaron en la mesa con sus platos, disfrutando de una cena tranquila antes de prepararse para descansar después de un día largo y lleno de nuevas experiencias compartidas.
Después de comer, Spajit y Beasty se acomodaron nuevamente en el sofá, sintiendo la agradable pesadez que sigue a una comida reconfortante. La conversación entre ellas fluyó de manera natural mientras se recostaban, disfrutando de la calma que se había instalado en la casa.
"Es curioso cómo las cosas han cambiado tan rápido," dijo Beasty, mirando el techo, reflexionando sobre lo que había pasado desde que se encontraron. "Hace unas semanas ni siquiera sabía que tenía una hermana."
Spajit asintió, también sumida en sus pensamientos. "Lo sé. Ha sido... extraño, pero también emocionante. Es como si de repente una parte de mí que estaba incompleta ahora tuviera sentido."
Las dos se quedaron en silencio por un momento, dejando que esas palabras resonaran en la habitación. A medida que la noche avanzaba, la conversación se fue apagando poco a poco, y la somnolencia comenzó a apoderarse de ambas.
"Creo que ya es hora de ir a dormir," sugirió Beasty, notando lo tarde que se había hecho y cómo el cansancio comenzaba a pesar.
Spajit asintió con una sonrisa, sintiéndose a gusto por cómo había transcurrido el día. "Sí, será mejor que descansemos. Mañana será un nuevo día."
Se levantaron y apagaron las luces, dirigiéndose cada una a su habitación para prepararse para dormir. A pesar de lo reciente que era su relación, había una sensación de comodidad y familiaridad que las envolvía, como si siempre hubieran sido hermanas cercanas. Al meterse en la cama, ambas sabían que habían comenzado a construir algo especial, y esperaban con interés lo que el futuro les depararía juntas.
Después de un merecido descanso de ocho horas, tanto Spajit como Beasty se despertaron lentamente, sintiéndose adormitadas por el sueño profundo que habían disfrutado. La luz de la mañana comenzaba a filtrarse por las cortinas, iluminando suavemente la habitación.
Beasty fue la primera en levantarse, sentándose en la cama y estirando los brazos mientras soltaba un bostezo. Sentía el cuerpo un poco pesado, pero en general descansada. Miró a su alrededor, dándose cuenta de que el día había comenzado, aunque con un ritmo pausado, ideal para una mañana tranquila.
En la otra habitación, Spajit también comenzaba a desperezarse, estirando las piernas bajo las sábanas mientras se frotaba los ojos. El silencio de la casa era reconfortante, y por un momento, simplemente disfrutó de la calma antes de decidirse a salir de la cama.
Beasty, aún algo adormilada, salió de su habitación y se dirigió a la cocina, pensando en preparar algo para el desayuno. Al llegar, se apoyó en la encimera mientras encendía la cafetera, esperando que el aroma del café ayudara a despejar su mente.
Spajit apareció poco después, con el cabello algo despeinado y una expresión somnolienta. "Buenos días," dijo, con una voz todavía ronca por el sueño.
"Buenos días," respondió Beasty con una sonrisa, mientras servía dos tazas de café. "Dormiste bien?"
"Sí, aunque aún siento que podría dormir un par de horas más," bromeó Spajit, tomando una de las tazas y llevándola a sus labios.
Las dos se quedaron un rato en silencio, disfrutando del café mientras se acomodaban en la cocina. Era una mañana tranquila, perfecta para tomarse un tiempo antes de comenzar el día. Ambas sabían que, aunque los desafíos no tardarían en aparecer, por ahora podían disfrutar de estos pequeños momentos de paz.
Mientras disfrutaban de su café, Beasty tomó el control remoto y encendió el televisor, cambiando el canal hasta llegar a las noticias de la mañana. La pantalla mostraba imágenes en vivo de varios eventos locales e internacionales, pero un titular en particular captó la atención de ambas: "Incremento de Actividad Sobrenatural en Chile: Autoridades Desconcertadas".
El reportero, con un tono serio, explicaba que en las últimas semanas, varias ciudades de Chile habían experimentado una serie de eventos inexplicables, desde desapariciones misteriosas hasta fenómenos meteorológicos inusuales. Las autoridades estaban investigando, pero aún no tenían respuestas claras.
Beasty frunció el ceño mientras escuchaba la noticia. "Esto no parece normal," comentó, mientras miraba de reojo a Spajit, quien también observaba la pantalla con atención.
"Definitivamente no lo es," respondió Spajit, más seria de lo habitual. Aunque acababan de despertar y disfrutar de una mañana tranquila, ambas sabían que este tipo de noticias rara vez traían algo bueno. Además, la coincidencia de que esto estuviera ocurriendo en Chile, el mismo lugar donde se habían encontrado y donde vivía Beasty, no pasaba desapercibida.
El reportero continuó hablando de testigos que afirmaban haber visto figuras extrañas en las sombras, y de cómo los equipos de seguridad no habían encontrado explicación lógica para los sucesos. La cámara mostró imágenes de calles vacías, edificios dañados, y ciudadanos preocupados, aumentando la sensación de que algo estaba a punto de suceder.
Beasty apagó el televisor, dejando la habitación en un incómodo silencio. "Tal vez deberíamos investigar," sugirió, su tono lleno de determinación.
Spajit asintió. "Parece que este día será más agitado de lo que esperaba." Ambas sabían que no podían ignorar lo que estaba sucediendo, y que probablemente tendrían que enfrentarse a algo más grande y peligroso de lo que habían anticipado.
Spajit y Beasty, ahora completamente despiertas y enfocadas, se prepararon para enfrentar lo que las noticias habían reportado. Spajit agarró sus armas de confianza, la espada Leviathan y el Nefesto Leviathan, mientras que Beasty se cambió rápidamente a un atuendo más adecuado para la acción, con un abrigo oscuro que ocultaba sus movimientos.
Con determinación en sus rostros, salieron de la casa y se dirigieron al lugar donde se había reportado la actividad sobrenatural. El camino hacia el epicentro de los eventos no fue sencillo; las calles estaban desiertas, y un aire denso y pesado parecía envolver la ciudad.
Llegaron a un área que parecía haber sido un centro de actividad reciente. Los edificios estaban parcialmente destruidos, y había una sensación palpable de peligro en el aire. El lugar estaba rodeado por una niebla densa y oscura que hacía difícil ver más allá de unos pocos metros.
Beasty miró a su hermana gemela, con una expresión de alerta. "Aquí es donde lo extraño está sucediendo," dijo en voz baja, mientras ambos avanzaban con cautela.
Spajit, siempre lista para el combate, mantenía sus armas en posición, lista para cualquier cosa que pudiera salir de la niebla. "Mantente atenta," advirtió, sabiendo que lo que estaban por enfrentar no sería fácil.
Mientras avanzaban más adentro de la niebla, empezaron a notar sombras que se movían a su alrededor, pero cuando intentaban enfocarse en ellas, desaparecían en la bruma. El ambiente era opresivo, y la sensación de ser observadas era casi abrumadora.
Finalmente, llegaron a lo que parecía ser el epicentro de la actividad. El suelo estaba marcado con símbolos extraños, y en el centro, una figura encapuchada estaba de pie, rodeada por una energía oscura y pulsante. Era evidente que esta figura tenía algo que ver con los eventos inexplicables que habían estado ocurriendo.
Spajit y Beasty se detuvieron, preparándose para el enfrentamiento. Sabían que este sería un desafío, pero también sabían que juntas, tenían una mejor oportunidad de descubrir lo que estaba pasando y detenerlo.
"¿Quién eres y qué estás haciendo aquí?" Spajit demandó, su voz resonando con autoridad.
La figura levantó la cabeza, revelando unos ojos brillantes que irradiaban poder oscuro. "Finalmente han llegado," dijo con una voz profunda y resonante. "La fusión de sombras y caos. Están justo a tiempo para el comienzo del fin."
Las palabras del desconocido no dejaban lugar a dudas: Spajit y Beasty estaban a punto de enfrentarse a una amenaza que podría ser más grande de lo que habían anticipado.
La criatura, con una rapidez sorprendente, lanzó una nube de vapor denso que se expandió rápidamente, envolviendo todo el lugar en una niebla impenetrable. Spajit y Beasty, sorprendidas por el ataque, se vieron instantáneamente envueltas en una oscuridad total, sin poder ver más allá de unos centímetros frente a ellas.
El vapor era sofocante, y la visibilidad se redujo a casi nada. Ambas sabían que no podían confiar solo en sus ojos; tendrían que usar todos sus sentidos para enfrentar a esta amenaza.
Spajit, con su entrenamiento y experiencia en combate, se concentró en los sonidos a su alrededor, intentando captar cualquier movimiento que delatara la posición de la criatura. Beasty, por su parte, utilizó su aguda percepción para sentir las vibraciones en el aire y el suelo, buscando una pista de dónde podría estar su enemigo.
El ambiente estaba cargado de tensión. Cualquier movimiento en falso podría ser fatal. De repente, se escuchó un leve susurro a la derecha de Spajit, seguido de un ruido suave, como un deslizamiento. Sin perder un segundo, Spajit lanzó un corte rápido con la espada Leviathan en esa dirección, cortando a través de la niebla con precisión letal.
Al mismo tiempo, Beasty sintió una presencia detrás de ella y reaccionó instintivamente, girando sobre sí misma y lanzando una ráfaga de energía hacia la fuente de la perturbación. Sin embargo, la criatura parecía estar en todas partes y en ninguna al mismo tiempo, desvaneciéndose en la niebla antes de que sus ataques pudieran conectarse.
Era evidente que la criatura estaba jugando con ellas, aprovechando la oscuridad y el vapor para desorientarlas y atacarlas desde múltiples ángulos. Las hermanas sabían que necesitaban un plan.
"Tenemos que dispersar esta niebla," susurró Beasty, manteniendo la calma a pesar de la situación. "Si no podemos verlo, no podremos vencerlo."
La criatura, con una rapidez inesperada, lanzó un ataque en medio de la densa neblina de vapor, sin que Spajit pudiera anticipar la posición exacta del enemigo. El ataque impactó brutalmente a Beasty, atravesando su torso y dejándola al borde de la muerte.
Justo cuando parecía que Beasty caería, su poder se activó por primera vez en un momento crítico. En un instante, un "jackpot" de energía creativa surgió dentro de ella, iniciando una asombrosa regeneración. Su torso comenzó a reconstruirse, las células y tejidos se recrearon a una velocidad vertiginosa, devolviéndole la vida y la fuerza.
Aprovechando el impulso de su recuperación, Beasty reunió su energía restante y lanzó un potente ataque hacia el suelo. La explosión resultante fue tan intensa que la fuerza de la onda expansiva disipó por completo el vapor que había nublado la visión, despejando el área y revelando la posición de la criatura.
Ahora, con el enemigo visible y Beasty restaurada, ambas hermanas se preparaban para enfrentarse a la criatura con toda su fuerza.
Beasty, eufórica por su poder, gritó: "¡Suban la música, imbéciles, porque yo soy la más fuerte!" Tocó su frente con el dedo pulgar, esbozando una sonrisa psicópata, y luego agarró la espada de su hermana. Con voz firme, exclamó: "¡Corte de aguardado!"
Los cortes eran invisibles al principio, pero después de tres segundos, dejaron cicatrices gigantes en el pecho de la criatura, obligándola a retroceder. Con un movimiento rápido, Beasty saltó hacia adelante y golpeó la cabeza de la criatura con una fuerza impresionante.
La criatura tambaleó, aturdida por el ataque. Beasty, con una mirada de triunfo, se preparó para el siguiente movimiento, sabiendo que tenía la ventaja.
Beasty, con la adrenalina corriendo por sus venas y una sonrisa psicópata en su rostro, se prepara para el siguiente asalto. Su cuerpo se mueve a una velocidad increíble, casi imposible de seguir a simple vista. Sus pies apenas tocan el suelo mientras se desplaza alrededor del monstruo, midiendo la distancia y buscando el ángulo perfecto para atacar.
En un instante, Beasty salta en el aire, girando su cuerpo con una gracia letal. Con un grito de desafío, su pierna se extiende hacia el monstruo en un arco perfecto, lanzando un devastador "Majin Kick" directamente a la mejilla de la criatura. La fuerza detrás del golpe es tan poderosa que el aire alrededor de ellos parece vibrar, creando una onda de choque que se propaga por la zona.
El impacto es inmediato y brutal. La mejilla del monstruo se deforma bajo la presión del golpe, y sus ojos se abren en shock antes de que su cuerpo sea lanzado hacia atrás. Durante un breve momento, el monstruo queda atónito, incapaz de reaccionar ante la ferocidad del ataque. La criatura tambalea, tratando de recuperar el equilibrio, mientras un atisbo de miedo aparece en sus ojos.
Beasty, sin perder un segundo, aterriza con gracia y se posiciona para el próximo movimiento, su expresión aún llena de una mezcla de euforia y sadismo. Sabe que ha ganado la ventaja, y no tiene intención de dejar que el monstruo se recupere. La batalla sigue en su apogeo, y Beasty está más que lista para demostrar que, tal como dijo, es la más fuerte.
Beasty, con una velocidad sobrehumana, se lanzó hacia el monstruo. Cada movimiento era un destello de precisión y fuerza. Su espada cortaba el aire con un silbido agudo, y cada golpe atravesaba piel, carne y huesos sin esfuerzo. El monstruo, incapaz de seguir el ritmo de Beasty, se vio reducido a pedacitos en cuestión de segundos. La criatura, que antes parecía invencible, ahora yacía en el suelo, desmembrada y derrotada. Beasty, con una mirada de triunfo, se quedó de pie entre los restos, su respiración agitada pero su espíritu indomable.
Después de desmembrar al monstruo en pedacitos con su espada, Beasty se mantiene en pie en medio del campo de batalla, su respiración pesada pero controlada. La espada de su hermana, aún empapada en los restos del monstruo, descansa sobre su hombro mientras ella observa el caos que ha dejado a su alrededor.
Con una sonrisa de satisfacción, Beasty respira profundamente, saboreando la victoria y el poder que siente en su interior. Sus ojos brillan con una mezcla de orgullo y euforia, y una risa corta y triunfante escapa de sus labios. Los restos del monstruo están esparcidos por el suelo, una prueba tangible de su fuerza y habilidad.
El aire se llena de una sensación de calma después del caos, y Beasty deja escapar un suspiro, una mezcla de alivio y satisfacción. Su actitud desafiante y su sonrisa victoriosa reflejan la confianza que ha ganado al superar un desafío tan formidable.
Mientras el polvo se asienta y el silencio rodea el área, Beasty se toma un momento para disfrutar del triunfo.
Beasty, con una sonrisa de triunfo y orgullo en sus ojos, se vuelve hacia su hermana Spajit. La mirada de Beasty refleja no solo la satisfacción de la victoria, sino también una profunda conexión con Spajit. La batalla ha sido intensa, pero la presencia de su hermana a su lado hace que el triunfo sea aún más especial.
Spajit observa a Beasty con una mezcla de admiración y alivio. La fuerza y determinación de su hermana, combinadas con el esfuerzo compartido, han sido la clave para superar el desafío. La expresión de Spajit muestra que, aunque ha sido testigo del poder de Beasty, también siente una profunda gratitud y orgullo por lo que han logrado juntas.
Ambas hermanas comparten un momento de silencio cargado de significado. Las palabras no son necesarias; el entendimiento mutuo y el respeto se reflejan en sus miradas. La batalla ha sido dura, pero el lazo entre ellas ha salido fortalecido. Mientras el sol comienza a asomarse en el horizonte, iluminando el campo de batalla con un resplandor dorado, Beasty y Spajit saben que han superado una prueba importante y que su vínculo es más fuerte que nunca.
Desde el cielo, Rigor observa la escena con una sonrisa enigmática. Su mirada fría y calculadora refleja una mezcla de interés y satisfacción mientras examina a las hermanas. La batalla y el dominio de Beasty sobre la criatura parecen haber captado su atención de una manera especial.
Rigor, desde su posición elevada, no sólo observa los eventos sino que también analiza el potencial y las habilidades de Beasty y Spajit. La manera en que Beasty ha manejado la situación demuestra una fuerza y un carácter que no pasan desapercibidos para él. Rigor considera la posibilidad de que las hermanas podrían ser piezas clave en sus planes futuros, y su sonrisa refleja un conocimiento oculto de los eventos que están por venir.
Mientras las hermanas celebran su victoria y se reencuentran, Rigor permanece en las sombras, esperando el momento oportuno para hacer su movida. La escena que observa no es sólo una muestra de la habilidad y la fortaleza de Beasty, sino también una oportunidad para él de evaluar y planificar su próximo paso en el complejo juego en el que están involucrados.
Beasty y Spajit, satisfechas con la victoria, se dirigen a un restaurante cercano para disfrutar de una comida. Beasty, aún eufórica por su demostración de fuerza, no puede dejar de sonreír mientras comparte su entusiasmo con Spajit. Spajit, aunque más reservada, está igualmente contenta por haber superado el desafío y por haber visto a su hermana en acción.
Rigor, mientras tanto, sigue observando desde las alturas, con una expresión que mezcla resignación y curiosidad. Su suspiro refleja la complejidad de su situación y los pensamientos que pasan por su mente mientras contempla la escena. Aunque no está directamente involucrado en la celebración, su presencia en el escenario añade una capa de intriga a los acontecimientos que se desarrollan.
La comida para las hermanas es una oportunidad para relajarse y disfrutar del tiempo juntas después de la intensa batalla. La camaradería entre Beasty y Spajit se fortalece con cada bocado, y el momento de tranquilidad les permite reflexionar sobre lo ocurrido y prepararse para los desafíos que aún podrían venir. Mientras tanto, Rigor sigue planeando sus próximos movimientos, consciente de que las acciones de hoy podrían tener repercusiones en el futuro.
Rigor, con una sonrisa enigmática, decide bajar al suelo para experimentar algo diferente. Saltando de edificio en edificio, disfruta de la sensación de realizar parkour, un recordatorio de cómo sería la vida sin poderes. Cada salto, cada movimiento ágil le permite apreciar el arte del parkour y la libertad que conlleva, algo que encuentra refrescante y liberador.
Mientras se desplaza por los tejados, Rigor contempla la ciudad desde una perspectiva única, recordando que, a pesar de su gran poder, aún hay placeres simples que puede disfrutar. Esta experiencia momentánea le brinda una nueva perspectiva sobre sus habilidades y su lugar en el mundo, antes de que retome sus planes y objetivos con renovada determinación.
Rigor, con la capucha ondeando al viento mientras realiza parkour, se desplaza con agilidad entre los edificios. La tela de su capucha se mueve con cada salto y giro, añadiendo un toque dramático a sus movimientos fluidos. La combinación de la capucha que se agita y su destreza en el parkour crea una imagen visual impresionante, una mezcla de estilo y habilidad.
A medida que Rigor salta de un edificio a otro, la capucha parece tener vida propia, complementando sus movimientos con una elegancia casi artística. Este sencillo placer, alejado de sus responsabilidades y poderes, le proporciona una sensación de libertad y disfrute que contrasta con la complejidad de su vida habitual.
Spajit, al notar a Rigor realizando parkour con una destreza impresionante, decide seguirlo, intrigada por su habilidad y el enigma que representa. Mientras Rigor se mueve ágilmente entre los edificios, Spajit se aproxima con cautela, manteniendo una distancia segura para no ser detectada.
A medida que Rigor realiza sus saltos y acrobacias, Spajit evalúa su técnica y su objetivo. Sabe que al involucrarse podría alterar los planes de Rigor, que hasta ahora parecen estar orientados a disfrutar del parkour y del momento. Sin embargo, Spajit no puede ignorar la posibilidad de que haya algo más detrás de sus movimientos.
Mientras sigue a Rigor, Spajit se mantiene atenta a cualquier indicio de sus verdaderas intenciones y se prepara para actuar según lo que descubra. Su objetivo es determinar si este desconocido representa una amenaza o si simplemente está en busca de su propio tipo de satisfacción y desafío.
Spajit observa desde una distancia prudente mientras Rigor se quita la capucha, revelando su rostro. La capucha, al caer, causa un impacto notable, creando un cráter en el suelo que destaca su peso y posible importancia. Esta acción inesperada despierta la curiosidad de Spajit aún más.
Rigor, ahora sin la capucha, continúa con una habilidad impresionante, utilizando un poste y un barandal para ascender rápidamente hasta el techo del edificio. Su agilidad y destreza son evidentes mientras se mueve con fluidez y confianza. La eliminación de la capucha parece haber mejorado su movilidad, permitiéndole ejecutar maniobras más complejas con facilidad.
Spajit se pregunta si este cambio en el equipo de Rigor es un indicio de su verdadera identidad o simplemente una forma de mejorar su rendimiento durante el parkour. La técnica y precisión que demuestra en sus movimientos indican que tiene una gran experiencia y habilidad en este campo.
Decidiendo no perderle de vista, Spajit se desplaza con cuidado, manteniendo una distancia segura. Está decidida a descubrir más sobre Rigor y entender mejor sus intenciones, sin revelar su propia presencia.
Spajit, al notar que Rigor ha detectado su presencia, se prepara para la maniobra que está a punto de ejecutar. Cuando Rigor lanza los dos ataques hacia el cielo, su objetivo es crear distracción y confusión. La explosión resultante ilumina el área con una intensidad cegadora, dificultando la visión.
La explosión crea una serie de destellos y ondas expansivas que oscurecen brevemente el entorno. Spajit, cegada momentáneamente por el resplandor, tiene que refugiarse detrás de una pared para protegerse del impacto y ajustar su visión. A través de la luz deslumbrante, observa cómo Rigor se lanza desde el edificio.
El movimiento rápido de Rigor es audaz, y la explosión hace que Spajit pierda temporalmente su orientación. Sin embargo, su entrenamiento y experiencia le permiten recuperarse rápidamente. Consciente de que Rigor está intentando escapar, Spajit reevalúa su estrategia.
Mientras Rigor desciende con habilidad, Spajit utiliza su agilidad para buscar una ruta alternativa que le permita seguir al objetivo sin ser detectada. Con precisión y rapidez, decide saltar de un edificio a otro, utilizando las sombras y las estructuras para minimizar su visibilidad y evitar ser afectada por la distracción creada por Rigor.
Spajit, utilizando los Nefestos de Leviathan, empieza a moverse ágilmente entre los edificios. La cadena con dientes le permite maniobrar de forma impresionante, balanceándose de un edificio a otro con precisión y rapidez. La cadena se enrolla alrededor de los postes y barandales, y Spajit la utiliza para catapultarse hacia adelante, evitando el suelo y los obstáculos que podrían ralentizarla.
Mientras Rigor sigue descendiendo y realizando parkour por los tejados, Spajit se aproxima cada vez más. Ella controla la cadena con gran destreza, permitiéndole cambiar de dirección instantáneamente y adaptarse a los movimientos de Rigor. La velocidad y la habilidad de Spajit con los Nefestos la hacen una perseguidora formidable.
A medida que Spajit se acerca, su objetivo es interceptar a Rigor antes de que tenga la oportunidad de escapar completamente. Utiliza las cadenas para elevarse por encima de él, preparándose para un posible enfrentamiento en el aire o en el próximo edificio donde Rigor decida aterrizar.
Rigor, sintiendo la creciente proximidad de Spajit, aumenta su velocidad con entusiasmo. A pesar de que tiene la capacidad de volar, decide mantenerse en el suelo para disfrutar del desafío que representa este intenso juego de persecución.
Al llegar a una zona de edificios en ruinas, Rigor se desliza ágilmente a través de una ventana rota y entra al edificio abandonado. La estructura deteriorada ofrece un terreno desafiante, pero Rigor está familiarizado con este tipo de entorno y se mueve con habilidad entre los escombros y pasillos en ruinas. Corre por las escaleras, aprovechando cada rincón y cada sombra para mantenerse un paso adelante.
Spajit, al llegar al edificio en ruinas, se enfrenta a un entorno complicado. Sin embargo, su habilidad con los Nefestos de Leviathan le permite navegar por los escombros con destreza. Utiliza la cadena para balancearse entre las paredes y las vigas expuestas, sorteando obstáculos mientras se dirige hacia las escaleras.
El eco de los pasos de Rigor resuena a través del edificio mientras él sube las escaleras rápidamente. A medida que Spajit se acerca, el edificio se convierte en un laberinto de escombros y pasillos oscuros, donde cada segundo cuenta para mantener la ventaja en esta emocionante persecución.
Rigor, en su prisa por evitar a Spajit, se desliza rápidamente por un agujero en el suelo del edificio. Este agujero lo lleva a un pasadizo subterráneo oscuro y angosto, donde el eco de sus pasos resuena en las paredes de concreto.
El pasadizo es estrecho y lleno de polvo, con apenas suficiente espacio para moverse cómodamente. Rigor avanza con rapidez, confiado en que el entorno subterráneo lo protegerá de la vista de su perseguidora. Sabe que Spajit tendrá dificultades para seguirlo a través de estos túneles angostos, y utiliza su conocimiento del edificio para elegir el camino más rápido.
Mientras tanto, Spajit, al llegar al agujero, se detiene momentáneamente para evaluar la situación. Sin dudarlo, utiliza los Nefestos de Leviathan para descender con cautela por el agujero, preparándose para continuar la persecución en el pasadizo subterráneo. Su habilidad le permite adaptarse rápidamente a nuevas situaciones, y está decidida a no perder la pista de Rigor.
Rigor, con rapidez, concentra energía en sus manos y lanza un ataque explosivo hacia el techo del pasadizo. La explosión hace que parte del techo colapse, creando escombros que caen mientras él aprovecha el caos para saltar hacia arriba.
Con habilidad, se impulsa a través de los escombros y sale del pasadizo subterráneo, emergiendo en un nuevo edificio en ruinas. A pesar del riesgo y el polvo que lo rodea, se mantiene en movimiento, buscando una nueva ruta de escape mientras el polvo se asienta a su alrededor.
Spajit, descendiendo con los Nefestos de Leviathan, sigue el rastro de Rigor, utilizando su habilidad para adaptarse a los cambios y maniobrar con rapidez a través de los obstáculos. Aunque el rastro de Rigor se hace más difícil de seguir, su determinación la mantiene enfocada en su objetivo.
Spajit, utilizando la energía de los Nefestos de Leviathan, abre un agujero en el techo y sube rápidamente hacia él. Al salir, ve a Rigor corriendo hacia la salida del edificio en ruinas.
Con determinación, Spajit se mueve con agilidad, utilizando los Nefestos para impulsarse rápidamente entre los escombros y las estructuras colapsadas. Mientras sigue a Rigor, usa su velocidad para cerrar la distancia entre ellos, preparándose para un posible enfrentamiento o para interceptarlo antes de que pueda escapar.
El sonido de los pasos de Rigor se mezcla con el eco de la destrucción que lo rodea, creando una atmósfera cargada de tensión. Spajit se acerca cada vez más, lista para actuar en cuanto tenga la oportunidad.
Rigor, al notar que Spajit está muy cerca, lanza un ataque de energía que lo impulsa hacia atrás. El ataque destruye parte de la pared, creando un pasaje por el que Rigor sale disparado hacia una ventana, atravesándola con velocidad.
Una vez en la calle principal, se reincorpora rápidamente y comienza a correr de nuevo, esquivando los escombros y los vehículos estacionados. Sus movimientos son ágiles y calculados, buscando escapar de su perseguidora y mantenerse un paso adelante mientras se dirige hacia un destino desconocido.
Spajit, tras atravesar la ventana, también se encuentra en la calle principal y continúa persiguiéndolo con determinación, decidida a no perderlo de vista. La persecución se intensifica a medida que ambos se mueven entre los edificios y las calles, con Rigor tratando de mantenerse fuera de alcance mientras Spajit lo sigue de cerca.
Spajit utiliza los Nefestos Leviathan para lanzar los dientes encadenados directamente hacia la pierna de Rigor. Los dientes se clavan en su pierna, causando un dolor intenso. Rigor intenta moverse con rapidez a pesar del dolor, pero Spajit tira con fuerza de la cadena, arrastrándolo hacia ella.
La fuerza es tal que Rigor es lanzado contra un edificio cercano. El impacto lo deja aturdido, y se derrumba en el suelo frente al edificio. Spajit se acerca con cautela, lista para enfrentarse a él y poner fin a la persecución. Rigor, aún recuperándose del golpe, se prepara para la siguiente fase del enfrentamiento.
Rigor se levanta con enojo, adoptando una postura de Krav Maga, y comienza a moverse con determinación. Spajit, que no tiene la espada Leviathan a mano, se enfrenta a él con la habilidad y agilidad que ha desarrollado en su entrenamiento.
Ella utiliza los Nefestos Leviathan para bloquear y desviar los ataques de Rigor mientras busca una oportunidad para contraatacar. Sus movimientos son rápidos y calculados, empleando su agilidad y su habilidad para manipular las cadenas con dientes para mantener a Rigor a raya.
La batalla entre ambos se intensifica en las calles desoladas, con cada uno buscando superar al otro en habilidad y estrategia.
Rigor, aprovechando su habilidad de salto en el tiempo, congela el entorno por un instante. En ese breve lapso, se mueve con una velocidad casi imperceptible, golpeando a Spajit con precisión en los puntos clave de su cuerpo usando Krav Maga. Cada golpe es calculado, dirigido a puntos de presión específicos que la dejan vulnerable.
Cuando Rigor desactiva su habilidad, el tiempo vuelve a fluir normalmente. Spajit, que apenas pudo percibir lo que ocurrió, siente su cuerpo temblar de manera incontrolable, como si estuviera al borde del desmayo. La intensidad y precisión de los golpes la han dejado aturdida, obligándola a luchar por mantenerse de pie y recuperar el control de sus sentidos.
Rigor observa cómo del cuerpo de Spajit emanan varios brillos intensos desde los puntos donde la golpeó. Con una mezcla de sorpresa y curiosidad, baja la guardia y deja de utilizar su postura de Krav Maga. Las luces se intensifican rápidamente, llenando el área con una explosión cegadora que envuelve a Spajit. La energía liberada es tan potente que ilumina toda la calle, obligando a Rigor a retroceder unos pasos para protegerse del destello.
Cuando la luz comienza a desvanecerse, Rigor se queda expectante, intentando discernir qué efecto tendrá esta explosión de energía en Spajit y si ella sigue siendo una amenaza o si algo nuevo ha despertado en su interior.
A pesar del ataque devastador de Rigor, Spajit logra mantenerse consciente, resistiendo el dolor que recorre su cuerpo. Sin perder tiempo, utiliza los dientes encadenados de los Nefestos de Leviathan para agarrar la otra pierna de Rigor. Con una fuerza impresionante, los dientes muerden profundamente, haciendo que Rigor sienta un dolor agudo y paralizante en su pierna.
Antes de que pueda reaccionar, Spajit lo jala con toda su fuerza y lo lanza violentamente hacia otro edificio cercano. El impacto es brutal; Rigor atraviesa la pared y el sonido de su cuerpo estrellándose contra la estructura resuena en toda la zona. Mientras los escombros caen alrededor de él, Rigor queda temporalmente inmovilizado, intentando recuperar el control de la situación. Spajit se prepara para lo que venga a continuación.
Rigor, a pesar del dolor que recorre su cuerpo, se pone de pie con dificultad. Polvo y sangre manchan su ropa mientras evalúa sus heridas rápidamente. Al levantar la mirada, ve a Spajit, quien también está visiblemente lesionada, pero aún de pie, con una expresión de determinación en su rostro.
Ambos están al borde de sus fuerzas, pero ni uno ni otro está dispuesto a ceder. Rigor toma una respiración profunda, sintiendo cada uno de los dolores que recorren su cuerpo, y se prepara mentalmente para el próximo enfrentamiento. Sabe que está herido, pero también sabe que la batalla aún no ha terminado. Sus ojos se entrecierran mientras estudia a Spajit, buscando cualquier signo de debilidad o apertura en su postura.
El silencio entre ellos es tenso, roto solo por el sonido de sus respiraciones y el viento que arrastra el polvo del combate. Rigor sabe que este enfrentamiento es crítico, y aunque está dañado, su espíritu combativo no ha sido quebrado.
Spajit, con una mirada de determinación, fijó sus ojos en Rigor. Utilizando los nefestos de Leviathan, aquellos dientes puntiagudos, agarró firmemente el brazo de Rigor. Con un giro poderoso, Spajit lo lanzó con una fuerza descomunal. Rigor voló a través de varios edificios, cada impacto resonando como un trueno, hasta que finalmente se estrelló contra un vehículo en un estacionamiento. El sonido del metal retorciéndose y el vidrio rompiéndose llenó el aire, marcando el fin de un enfrentamiento épico.
Spajit, con una mirada decidida, coloca los nefestos de Leviathan en una posición estratégica, utilizándolos como una resortera. La cadena con dientes se tensa mientras ella se prepara para lanzarse hacia Rigor, que lucha por mantenerse consciente en medio de los escombros.
Con un movimiento rápido, Spajit libera la tensión y se impulsa a una velocidad vertiginosa. Atravesando los agujeros en los edificios que Rigor había creado al ser lanzado, ella se mueve como un proyectil humano, su objetivo claro en su mente. En cuestión de segundos, llega al estacionamiento donde Rigor está intentando levantarse.
Sin darle tiempo para reaccionar, Spajit le da un golpe directo en el estómago, canalizando toda su fuerza en el impacto. Rigor es lanzado hacia abajo, atravesando el suelo del estacionamiento y cayendo varios metros hasta un nivel inferior, creando un cráter con su caída.
Mientras tanto, en otro lugar, Beasty observa todo el combate en las noticias desde el comedor. Sin mostrar mucha preocupación, simplemente sigue viendo los eventos como si fuera una pelea cualquiera, confiada en las habilidades de su hermana para manejar la situación. Después de todo, era su hermana, y sabía que Spajit siempre encontraba la manera de salir victoriosa.
Rigor se sacudió el polvo y los escombros de su ropa mientras se levantaba del cráter que Spajit había creado al impactarlo contra el suelo. Cojeando ligeramente, caminó hacia la calle, notando cómo la pelea había dejado un rastro de destrucción a su alrededor. A su lado, Spajit, con su habitual sonrisa burlona, lo siguió, claramente satisfecha con el caos que habían generado.
"Mira lo que causaste," dijo Spajit, con una mueca de diversión en su rostro mientras observaba los edificios dañados, los autos volcados y el caos general que reinaba en la calle.
Rigor, todavía recuperándose de la batalla, dejó escapar una sonrisa, a pesar del dolor que sentía. "Lo dice quien me persiguió por toda la ciudad, peleando como si no hubiera mañana," respondió, su tono mezcla de seriedad y humor.
Spajit miró a su alrededor, tomando en cuenta el caos que habían desatado juntos. Aunque ambos eran poderosos, la magnitud de la destrucción era innegable. Era casi cómico cómo una simple persecución se había convertido en una batalla tan intensa, pero para ellos, era simplemente otro día en sus vidas llenas de acción y conflicto.
"Parece que el problema fue de los dos," añadió Spajit, con una sonrisa irónica mientras los dos se quedaban un momento en silencio, observando el paisaje urbano que habían transformado en un campo de batalla.
El sonido distante de sirenas empezó a acercarse, pero ninguno de los dos parecía preocupado. Ambos sabían que su enfrentamiento había dejado una huella, pero también sabían que su camino estaba lejos de terminar.
Rigor, con una sonrisa maliciosa, lanzó un golpe abrumador contra Spajit. El impacto fue tan poderoso que creó un cráter en la calle, enviando a Spajit volando hacia abajo. Spajit se estrelló contra el suelo, rompiendo el pavimento y cayendo en las aguas negras de las alcantarillas. El sonido del agua sucia salpicando y el eco del golpe resonaron en la oscuridad, marcando el brutal desenlace del ataque de Rigor.
Spajit, con su cuerpo empapado en las aguas negras y el barro que impregnaba las alcantarillas, no permitió que la situación la venciera. Con una mirada decidida, activó el nefesto de Leviathan. Las cadenas con dientes se desplegaron con velocidad, clavándose en las paredes del agujero que había dejado su caída.
Con un movimiento ágil y poderoso, Spajit utilizó las cadenas como apoyo para impulsarse hacia arriba. Su cuerpo se elevó rápidamente, emergiendo del cráter con una fuerza impresionante. Mientras ascendía, el agua sucia goteaba de su ropa, pero su determinación no se había desvanecido en lo más mínimo.
Finalmente, aterrizó en la superficie, justo en frente de Rigor. Los ojos de Spajit ardían con una intensidad renovada, y su sonrisa burlona no había desaparecido. Estaba lista para continuar la batalla, sin importar las circunstancias.
Rigor, con una sonrisa burlona, comentó: "Hueles mal."
Spajit, claramente molesta, replicó: "¿Cómo no voy a oler mal si tú me golpeaste hasta caer en las aguas negras?"
Rigor se encogió de hombros, con una expresión de falsa inocencia. "Bueno, podría ser peor. Al menos ahora tienes una excusa para darte un buen baño."
Spajit apretó los puños, su enojo aumentando. "¿Sabes qué, Rigor? Tal vez cuando termine contigo, tú también termines oliendo a algo peor que agua sucia."
Rigor soltó una risa suave. "Buena suerte con eso. Pero si te hace sentir mejor, te daré un momento para que te pongas presentable antes de seguir."
Spajit, sin decir más, decidió tomar la sugerencia con ironía. Utilizó sus habilidades para impulsarse hacia un edificio cercano, donde localizó una fuente de agua limpia. Con rapidez y determinación, se limpió lo mejor que pudo, sabiendo que la pelea no había terminado, pero al menos no iba a dejar que Rigor tuviera la satisfacción de burlarse de ella por mucho más tiempo.
Cuando terminó, volvió a lanzarse al combate, renovada y lista para continuar la batalla con más fuerza que antes.
Rigor, aún sonriendo, comentó con un tono burlón: "Al fin hueles bien, señorita."
Spajit esbozó una sonrisa calculada y, sin previo aviso, lanzó un poderoso golpe directo al pecho de Rigor. El impacto lo mandó volando hacia un gran recipiente de agua cercano. El sonido del golpe fue seguido por el estruendo del metal y el agua salpicando por todas partes cuando Rigor se estrelló contra el recipiente, quedando completamente empapado.
Rigor, ahora mojado de pies a cabeza, se levantó lentamente del agua, sacudiendo su cabello empapado. Con una expresión de sorpresa y humor mezclada en su rostro, miró a Spajit, quien lo observaba con una sonrisa triunfante.
"Supongo que ahora los dos estamos a mano," dijo Rigor, intentando contener una carcajada, mientras el agua goteaba de su ropa.
Rigor, al caer junto a Spajit, no perdió el tiempo y en un movimiento ágil envolvió su cintura con sus piernas, acercándola hacia él. Con una sonrisa pícara y divertida, comentó: "Vaya situación empalagosa."
Mientras se reía suavemente, levantó una mano y apuntó con su dedo índice hacia Spajit. Una pequeña bola de energía de color verde comenzó a formarse en la punta de su dedo, brillando intensamente, mientras él mantenía su mirada fija en ella, esperando su reacción.
Spajit le devolvió la sonrisa, dejando ver su confianza y astucia. "¿A poco sí?" respondió con un tono desafiante. "Ya estás muy grande para que te cargue."
Con un movimiento suave pero seguro, levantó su dedo y lo apuntó directamente hacia el rostro de Rigor, replicando su gesto. La chispa en sus ojos mostraba que no estaba dispuesta a ceder ni un centímetro en este enfrentamiento, mientras ambos mantenían la tensión, sus sonrisas llenas de desafío y adrenalina.
Rigor, con una sonrisa que no alcanzaba a ocultar el brillo en sus ojos, murmuró con voz calmada, casi como si estuviera disfrutando del momento: "Bang."
Spajit, imitando su tono pero con un toque de burla en sus labios, replicó: "Bang."
En un instante, el aire se cargó de tensión y poder. Dos esferas de energía, una verde y otra de un tono distinto, emergieron de sus dedos apuntando directamente al rostro del otro. La colisión fue inmediata, brutal, una explosión de energía tan intensa que el suelo tembló bajo sus pies.
El impacto los lanzó a ambos en direcciones opuestas, como si fueran meros muñecos de trapo atrapados en un vendaval. Rigor fue arrojado hacia un edificio, chocando contra la estructura ya deteriorada, que crujió y se desplomó parcialmente a su alrededor. Mientras tanto, Spajit voló hacia el lado contrario, estrellándose contra otro edificio, cuyas paredes cedieron ante la fuerza de la embestida.
El polvo y los escombros se levantaron en una nube alrededor de ellos, ocultándolos momentáneamente de la vista. Los edificios, ahora aún más dañados, se tambaleaban peligrosamente, como si el mero hecho de soportar los cuerpos de estos dos guerreros hubiera sido la gota que derramó el vaso. Pero incluso en medio del caos, las sonrisas de ambos no desaparecieron; eran rivales disfrutando del desafío, disfrutando de la batalla, sin importar cuán destructiva fuera.
Spajit y Rigor se lanzaron al combate con una velocidad y precisión impresionantes. Los golpes y movimientos eran rápidos, casi imperceptibles para cualquier observador no entrenado. Rigor, con una sonrisa de satisfacción en el rostro, parecía disfrutar cada segundo de la batalla, esquivando y contraatacando con un estilo juguetón y provocador.
Con solo los Nefestos de Leviathan en sus manos, Spajit ajustó su estilo de combate para compensar la ausencia de su espada Leviathan. La cadena con dientes del Nefesto se convirtió en una extensión de su cuerpo, moviéndose con una precisión letal para bloquear y desviar los ataques de Rigor.
Rigor, consciente de que Spajit había perdido una de sus armas principales, intensificó su ataque, buscando aprovechar la ventaja. Sin embargo, Spajit demostró una habilidad excepcional para usar los Nefestos de Leviathan con gran eficacia. La cadena se movía como una serpiente, golpeando y enredando los ataques de Rigor mientras ella se mantenía ágil y evasiva.
El combate se volvió aún más dinámico y caótico, con Rigor lanzando golpes rápidos y Spajit respondiendo con movimientos fluidos y estratégicos, utilizando los Nefestos para protegerse y contraatacar. La tensión entre ellos seguía siendo palpable, y la batalla, a pesar de la pérdida de una de las armas de Spajit, se mantenía igual de intensa y emocionante.
Rigor, con una precisión letal y una habilidad refinada en el boxeo, lanza un hook derecho hacia las costillas de Spajit. La velocidad y fuerza del golpe son notables, y su puño izquierdo se mueve para conectar con la parte vulnerable del torso de Spajit.
A pesar de su agilidad y destreza, Spajit no puede evitar completamente el impacto. El hook derecho de Rigor se encuentra con las costillas de Spajit con un golpe seco y potente, que la hace tambalear. Sin embargo, su habilidad para usar los Nefestos de Leviathan le permite reaccionar rápidamente.
Utilizando la cadena del Nefesto, Spajit bloquea parcialmente el impacto y contrarresta con un rápido movimiento de su cuerpo para evitar el golpe definitivo. La fuerza del ataque la deja respirando con dificultad, pero su actitud desafiante no se desvanece. Con una sonrisa torcida, se prepara para reanudar el combate, dispuesta a aprovechar cualquier oportunidad para devolver el golpe a Rigor.
Spajit, con una fuerza descomunal, lanzó un golpe directo al estómago de Rigor, impactando con una fuerza de 999 kgs. Rigor, sintiendo el dolor, escupió un poco de sangre que lanzó al ojo de Spajit, cegándola momentáneamente. Aprovechando la distracción, Rigor levantó su pierna y golpeó con fuerza la pierna de Spajit, desestabilizándola y haciéndola tambalear.
Rigor, sintiendo una mezcla de satisfacción y agotamiento, lanza un golpe directo al rostro de Spajit con toda su fuerza restante. El impacto es brutal, y Spajit es enviada al suelo con un estruendoso golpe. La fuerza del golpe la deja aturdida y con dificultad para levantarse.
Rigor, por su parte, siente el peso de la batalla sobre él. La intensidad del combate y el desgaste físico lo han dejado exhausto. Se deja caer al suelo, respirando con dificultad y tratando de recuperar el aliento. La victoria no está asegurada, y la lucha ha dejado su huella en ambos combatientes.
Ambos luchadores, ahora en el suelo y agotados, están en un momento crítico de la batalla. El resultado del enfrentamiento pende en la balanza, y la determinación de ambos para seguir adelante será la clave para decidir quién se alzará victorioso en este duelo.
Spajit, aún en el suelo y con una expresión de enojo, se soba la mejilla afectada por el golpe. Con un tono molesto, dice:
"Era necesario el último golpe."
A pesar de su frustración, su mirada sigue siendo desafiante. La batalla ha sido dura y ambos combatientes están claramente agotados, pero Spajit mantiene su actitud de desafío. Su orgullo y determinación están a flor de piel, lo que sugiere que no se rendirá fácilmente, a pesar de la dura prueba que ha enfrentado.
Rigor se pone de pie lentamente, aún respirando con dificultad, pero su sonrisa permanece en su rostro. Responde con una afirmación sencilla.
"Sí."
Spajit, frotándose la mejilla con una mueca de dolor, añade con una mezcla de frustración y resignación.
"Esto dolerá un buen rato."
Ambos combatientes se miran, conscientes de la magnitud de su enfrentamiento. Aunque están exhaustos y adoloridos, el respeto mutuo y la intensidad de la batalla se reflejan en sus expresiones. La lucha puede haber sido feroz, pero la determinación de ambos sigue intacta.
Rigor, aún sonriendo a pesar del cansancio, se inclina y ayuda a Spajit a levantarse. Mientras lo hace, le dice en tono juguetón:
"Eres muy chiquita, mínimo mides 1.59, ¿no?"
El comentario provoca la molestia de Spajit. En un arranque de enojo, aprovecha el momento para golpear a Rigor en los genitales.
Rigor, sorprendido y visiblemente adolorido por el golpe, se dobla por el dolor y se aparta de Spajit. La situación cambia de inmediato, con el rostro de Rigor reflejando un dolor intenso mientras Spajit se recupera, aún molesta por el comentario.
El golpe de Spajit, sumado a la pérdida de sangre y al agotamiento extremo acumulado durante la batalla, lleva a Rigor al límite. La intensidad del dolor y el estrés físico son demasiado para él. Con un último suspiro, su cuerpo cede, y se desmaya, cayendo al suelo con un estruendoso golpe.
Spajit, viendo a Rigor inconsciente, respira profundamente para calmarse y tratar de recuperar su propio equilibrio. Aunque aún molesta, la realidad del combate y su desenlace la confronta. Con la batalla decidida, la tensión entre los dos combatientes se disipa, dejando a Spajit en el campo de batalla, ahora dominado por un silencio pesado.
Spajit, con esfuerzo, levanta a Rigor y comienza a trasladarlo con cuidado. A pesar de su cansancio y las heridas, su determinación la impulsa a asegurar que Rigor reciba ayuda. Se dirige hacia la casa de su hermana Beasty, donde planea llevar a Rigor para que pueda ser atendido.
Beasty, habiendo terminado de hacer unas compras y de comer, regresa a casa, aún despreocupada y enérgica. Al entrar, se encuentra con la escena inusual: Spajit cargando a un Rigor inconsciente. La expresión de Beasty cambia rápidamente de sorpresa a preocupación, y se apresura a ayudar a Spajit a llevar a Rigor dentro de la casa.
Una vez en el interior, Beasty, con su instinto de cuidadora y habilidades, se prepara para atender las heridas de Rigor y asegurarse de que reciba el tratamiento necesario para recuperarse.
Spajit, aún con la adrenalina y el orgullo de la batalla, comenta con un tono de respeto:
"Ese tipo dio un buen combate."
Beasty, mientras examina a Rigor y se concentra en curarlo, echa un vistazo a su hermana. Aunque su expresión refleja un poco de despreocupación, su foco está claramente en atender a Rigor. Utiliza su conocimiento y habilidades para tratar las heridas de Rigor, aplicando primeros auxilios y asegurándose de que esté estabilizado.
La atmósfera en la casa cambia, con Spajit observando desde un rincón mientras Beasty trabaja con rapidez y precisión. La preocupación por el estado de Rigor es evidente, y Beasty se encarga de brindarle el cuidado necesario para que pueda recuperarse.
Después de unas horas, Rigor comienza a despertar, sintiendo el dolor residual y la fatiga del combate. Al abrir los ojos, se da cuenta de que está en una casa desconocida, y una ola de preocupación lo invade al recordar la batalla y su estado.
Con esfuerzo y mucha dificultad, Rigor se levanta de la cama o lugar donde fue colocado. Su cuerpo aún está debilitado, pero su determinación lo impulsa a moverse. A medida que se pone de pie, su visión se ajusta a la habitación, y ve a Beasty y Spajit cerca, la primera enfocada en asegurarse de que Rigor esté bien.
Beasty, al notar que Rigor se ha despertado y está intentando levantarse, se acerca rápidamente para ayudarlo. Su expresión es seria, pero también hay una chispa de alivio al ver que Rigor está consciente.
"Tranquilo." Le dice Beasty. "No te esfuerces demasiado. Necesitas descansar."
Rigor, con una determinación palpable, comienza a caminar con dificultad, buscando su camisa. A pesar de sus esfuerzos, el dolor y el agotamiento se hacen evidentes en cada paso que da.
Beasty, viendo que Rigor está decidido a levantarse y buscar su ropa, se acerca para ofrecerle apoyo. Con una mezcla de preocupación y exasperación, le dice:
"Déjame ayudarte. No deberías moverte demasiado todavía."
Con la ayuda de Beasty, Rigor encuentra su camisa. Aunque está claro que todavía necesita recuperarse, su actitud resiliente y su deseo de recuperarse rápidamente reflejan su carácter. Beasty y Spajit lo observan con una mezcla de respeto y preocupación, listas para intervenir si es necesario.
Rigor, con la camisa ya puesta y una sonrisa de satisfacción en su rostro, concentra su energía para crear un portal. Tras abrirlo justo en la cama donde estaba descansando, se lanza a través del portal, buscando escapar y regresar a un lugar familiar.
El portal lo lleva rápidamente a la Academia Historia. Rigor cae en una silla negra, justo al lado de su escritorio, con un suave golpe. Se acomoda en la silla, visiblemente agotado pero aliviado de estar en un entorno conocido y seguro.
A su alrededor, la academia sigue su curso normal, con estudiantes y personal moviéndose por los pasillos. Rigor se toma un momento para respirar profundamente, intentando recuperarse del esfuerzo y del dolor mientras se relaja en su asiento.
Beasty y Spajit, decididas a seguir a Rigor, atraviesan el portal justo antes de que se cierre. Ambas caen a través de él y llegan a la Academia Historia casi al mismo tiempo que Rigor. La caída provoca que se estrellen contra él, arrojándose sobre su espalda y su silla con un fuerte golpe.
El impacto sorprende a Rigor, que estaba intentando acomodarse en la silla. Ahora, bajo el peso de Beasty y Spajit, la situación se vuelve un tanto caótica. Beasty, con su habitual pragmatismo, se aparta rápidamente y se asegura de no causar más daño, mientras que Spajit, aún algo molesta pero también aliviada por la familiaridad del entorno, se levanta con una expresión mezcla de fastidio y alivio.
"¡Esto no es lo que esperaba!" exclama Spajit, tratando de recuperar el equilibrio mientras se aparta.
Beasty, con una mirada de preocupación, se asegura de que Rigor esté bien mientras intenta levantar a Spajit y a ella misma de encima de él. El ambiente de la academia sigue siendo un contraste palpable con el tumulto de la batalla anterior.
Rigor, visiblemente molesto por la situación, empuja a Beasty y Spajit con determinación para liberarse de debajo de ellas. Luego, se pone de pie con esfuerzo y comienza a buscar frenéticamente en su escritorio o en las cercanías, en busca de una pastilla verde que tiene para curarse.
Con la pastilla finalmente en la mano, la examina para asegurarse de que es la correcta. La coloca en su boca y la traga, esperando que sus propiedades curativas alivien su dolor y ayuden a su recuperación. Mientras tanto, Beasty y Spajit lo observan, conscientes de que Rigor necesita su espacio y se preparan para ayudarlo si es necesario, aunque Spajit parece tener una expresión de curiosidad y un toque de preocupación por la eficacia de la pastilla.
La pastilla verde que Rigor toma comienza a hacer efecto de inmediato. Sus heridas se curan notablemente rápido, con la mayoría de los cortes y moretones desvaneciéndose. Sin embargo, las cicatrices de la batalla permanecen, recordando el esfuerzo y el dolor que sufrió.
Rigor observa las cicatrices con una mezcla de alivio y resignación. Aunque el alivio del dolor es significativo, las marcas en su piel son un recordatorio tangible de la intensidad del combate. Beasty y Spajit, al ver la recuperación de Rigor, se acercan con miradas de comprensión.
Beasty comenta:
"Las cicatrices pueden ser una señal de que te has recuperado, pero también de que no debes esforzarte tanto."
Spajit, con un tono más relajado pero aún desafiante, agrega:
"No te preocupes, al menos estás entero. Aunque las cicatrices te harán ver más interesante."
Ambas, reconociendo el estado mejorado de Rigor, están dispuestas a ofrecerle apoyo mientras él se adapta a su recuperación y a las marcas de su reciente batalla.
Rigor, aún algo molesto y con una expresión seria, se levanta y se dirige hacia la puerta con pasos firmes. El alivio de haber curado sus heridas es evidente, pero las cicatrices y el agotamiento emocional de la batalla lo han dejado con una necesidad urgente de serenidad.
Beasty y Spajit lo observan en silencio mientras se va, comprendiendo que Rigor necesita tiempo para procesar lo que ha sucedido y recuperar su equilibrio emocional. Sin decir nada, Rigor sale de la habitación, buscando un lugar tranquilo donde pueda encontrar un poco de paz y serenidad después del caos y la intensidad del combate.
El silencio que sigue es palpable, y Beasty y Spajit intercambian una mirada de comprensión antes de permitir que Rigor tenga su espacio para reflexionar y recuperarse a su manera.
Rigor, caminando por los pasillos de la Academia Historia, siente el peso de todo lo que ha ocurrido recientemente. El estrés comienza a apoderarse de él, y la búsqueda de un momento de serenidad lo lleva a fijarse en una clase que se está llevando a cabo. Observa a Tino, uno de los profesores, dando su lección a los estudiantes.
El deseo de hablar con alguien en quien confía lo impulsa a acercarse. Con una expresión seria y una ligera tensión en su andar, Rigor se detiene frente a la puerta y la toca con firmeza. Tino, al escuchar los golpes, interrumpe su clase y se dirige a la puerta.
Al abrirla y ver a Rigor, Tino percibe de inmediato que algo no está bien. Rigor, claramente abrumado, toma un momento antes de hablar.
—Sí... suceden cosas —menciona Rigor con un tono cargado de estrés, reflejando el peso de las circunstancias recientes.
Tino, comprendiendo la seriedad de la situación, lo invita a entrar o a caminar con él, mostrándole que está dispuesto a ofrecerle el apoyo que necesite en ese momento.
Mientras Rigor busca un momento de tranquilidad, Spajit y Beasty, sin el mismo sentido de contención, caminan por la Academia Historia. Ambas, con su personalidad vibrante y energía inagotable, no pueden evitar causar un poco de desorden a su paso.
Spajit, aún con la adrenalina del combate, empieza a jugar con sus Nefestos de Leviathan, lanzándolos hacia las paredes y usándolos para impulsarse por los pasillos, lo que causa pequeños daños a su alrededor. Los estudiantes que pasan cerca miran con sorpresa y un poco de preocupación, tratando de evitar el caos que Spajit está provocando.
Beasty, por su parte, también se deja llevar por el ambiente y empieza a hacer travesuras. Mueve cosas de lugar, juega con la decoración, y su risa contagiosa resuena en los pasillos. La combinación de sus actos convierte los pasillos de la academia en un escenario de desorden divertido, aunque un poco caótico.
Los estudiantes y el personal, acostumbrados a cierto nivel de orden, se sienten desconcertados por la repentina explosión de energía que Spajit y Beasty han traído consigo. Mientras tanto, las dos hermanas disfrutan de la pequeña anarquía que han creado, sin preocuparse demasiado por las consecuencias.
Mientras Victor está en medio de su clase, el sonido del alboroto en los pasillos lo interrumpe. La confusión de sus estudiantes y el creciente ruido lo llevan a salir del aula para investigar lo que está ocurriendo.
Al asomarse al pasillo, Victor observa el caos que Spajit y Beasty han desatado. Aunque reconoce vagamente a Spajit, no la recuerda completamente, y Beasty le es totalmente desconocida. Sin embargo, su comportamiento disruptivo no pasa desapercibido, y Victor, como un profesor responsable, decide intervenir.
Con una voz firme y autoritaria, les llama la atención:
—¡Ustedes dos, basta ya! Esto es una academia, no un parque de diversiones. ¡Comportarse de manera adecuada o tendrán que enfrentarse a las consecuencias!
Su tono es severo, reflejando su desaprobación por el desorden que están causando. Spajit y Beasty, al escucharlo, se detienen por un momento, sorprendidas por el regaño. Aunque su diversión se ve interrumpida, es evidente que Victor no está dispuesto a tolerar más comportamientos así.
Victor, decidido a tomar control de la situación, mira a Spajit y Beasty con seriedad antes de hablar:
—Les enseñaré a controlar sus poderes... pero solo por 30 segundos.
Antes de que puedan reaccionar, Victor realiza un movimiento ágil y saca un dispositivo que, al activarse, despliega una habitación temporal de entrenamiento en medio del pasillo. Aunque en apariencia es un simple armario, su interior es mucho más grande y está diseñado específicamente para entrenar y controlar habilidades especiales.
—Pero antes de que empecemos, quiero que entren aquí —dice, señalando el armario que ha pasado a ser una habitación de entrenamiento camuflada. A pesar de su tamaño reducido por fuera, el espacio dentro del armario es amplio y seguro, ideal para un breve pero intenso entrenamiento.
Victor, con su experiencia como instructor, se asegura de que el lugar pase desapercibido para los demás estudiantes y personal, concentrando el caos en un espacio controlado. Spajit y Beasty, aunque sorprendidas por la eficiencia de Victor, se preparan para lo que será una lección rápida pero importante sobre el control de sus habilidades.
Dentro del espacio de entrenamiento oculto, Victor se mantiene firme, observando a Spajit y Beasty con una expresión seria. A pesar de la limitación de tiempo, está decidido a medir sus habilidades y ayudarlas a controlar sus poderes.
—Quiero ver de lo que son capaces —dice Victor, cruzando los brazos mientras se prepara para evaluar—. Ataquen con todo lo que tengan.
Su instrucción es clara y directa. Spajit, con su naturaleza impetuosa, inmediatamente se prepara para lanzar un ataque con los Nefestos de Leviathan, canalizando su energía mientras se concentra en el objetivo que Victor les ha indicado. Las cadenas de energía oscura que se extienden desde su brazo zumban con poder, listas para ser desatadas.
Beasty, con su confianza desbordante, decide probar una de sus habilidades de creación. Activa su "jackpot" interno, listo para regenerar cualquier daño mientras canaliza un ataque destructivo que combina fuerza bruta y energía, apuntando hacia el mismo blanco que Spajit.
Ambas chicas, ahora enfocadas, lanzan sus ataques simultáneamente. El entrenamiento ha comenzado, y Victor observa atentamente cada movimiento, midiendo su precisión, control y poder.
Victor, con una sonrisa que refleja su experiencia y poder, activa su técnica "ira dansandankai". Un fuego morado envuelve su cuerpo, intensificando la tensión en sus músculos mientras la energía se acumula a su alrededor. Su voz resuena con autoridad:
—¡Ira dansandankai two!
La habitación temporal responde a la activación de su poder, y una explosión de energía llena el espacio. Sus músculos se preparan para el combate, y el aire se carga con una sensación de intensidad pura.
Dentro de este espacio, el tiempo se distorsiona. Aunque afuera solo pasarán 30 segundos, dentro de la habitación, Victor, Spajit, y Beasty tienen 30 minutos para medir fuerzas y habilidades. Victor se coloca en posición de combate, listo para enfrentar los ataques de Spajit y Beasty, y al mismo tiempo, poner a prueba su propio poder contra el de las dos chicas.