Mientras Daiki Talloran disfrutaba de su comida en el desolado planeta K-33B, en el subconsciente de Victor, Evil Victor se regodeaba en su triunfo. En un vasto espacio negro, plagado de sombras y resonancias distorsionadas, Evil Victor se encontraba en su máxima expresión de maldad y oscuridad.
Con una risa cruel y desafiante, Evil Victor se burlaba de Victor, cuyos pensamientos aún estaban atrapados en un limbo de agonía y derrota. "¡Finalmente has pagado por tus errores!" exclamó Evil Victor, su voz llena de satisfacción y desprecio. "Pensaste que podías superarme, pero siempre he estado aquí, esperando el momento adecuado para dominarte por completo."
Evil Victor se movía con un aire de superioridad, disfrutando del tormento que su presencia causaba en el debilitado subconsciente de Victor. Cada carcajada resonaba como un eco infernal, mientras la oscuridad de su entorno se intensificaba con su triunfo.
Evil Victor, en medio de su risa siniestra, se acercó aún más a la imagen de Victor en el subconsciente, su presencia emanando una aura de malignidad palpable.
"¿Qué tan estúpido eres, Victor?" preguntó Evil Victor con un tono despectivo y burlón. "Te has dejado llevar por tus emociones, por tus esperanzas de redención. Pero al final, siempre he estado aquí, aguardando en las sombras para destruir todo lo que construiste."
Con un gesto de desprecio, Evil Victor se inclinó hacia el debilitado Victor, su voz llena de una satisfacción cruel. "Has fallado, y ahora no queda nada más que tu propia miseria para consolarte."
Victor se sumió en sus pensamientos, la desesperación palpable en cada palabra. "¿Cómo es que no funcionó la regeneración?" se preguntó en voz alta, su mente inundada de preguntas y frustraciones. "Cada corte anulaba mi capacidad de sanar. ¿Cómo diablos voy a salir de esto? Solo quedan minutos, o quizás segundos, antes de que mi cuerpo me falle y ya no pueda revivir."
Evil Victor, con una sonrisa siniestra, se acercó y dijo: "¿Qué tan estúpido eres, Victor? Pensaste que podías superarme, pero mira dónde estamos ahora. No hay salida para ti esta vez."
Victor, con los segundos contados, buscaba desesperadamente una solución, un destello de esperanza en medio de su mente fracturada. La risa cruel de Evil Victor resonaba a su alrededor, intensificando su desesperación y forzándolo a encontrar una manera de sobrevivir antes de que todo se apagara.
Victor, sintiendo el peso de la derrota, miró a Evil Victor y dijo: "Me superó, ese chico nos superó a ambos."
Evil Victor se enfureció, su rostro se torció de ira. "¡Eso es imposible! ¡Nadie puede superarme a mí!"
Victor, aún en medio de su desesperación, encontró un extraño consuelo en la frustración de su contraparte. "Sin embargo, lo hizo. Daiki nos venció, y ahora estamos al borde de la extinción."
La furia de Evil Victor era palpable, pero en ese momento de vulnerabilidad compartida, Victor vio una pequeña oportunidad. Si podían encontrar un terreno común, tal vez, solo tal vez, podrían idear un plan para sobrevivir y salir de esta situación.
Es cuando Evil Victor comento que el había hecho una regeneración mucho mejor.
Victor sintió un destello de esperanza al escuchar las palabras de Evil Victor. "¿Qué quieres decir con 'regeneración mejorada'?"
Evil Victor sonrió con malicia. "Aunque detesten admitirlo, preví situaciones como esta. Creé una capacidad de regeneración que puede activarse en circunstancias extremas, incluso cuando nuestros poderes habituales son anulados."
Victor lo miró con renovada esperanza. "Entonces, ¿podemos usarla ahora?"
"Sí," dijo Evil Victor, su tono más sombrío. "Pero no será fácil. Necesitaremos concentrar todo nuestro poder y voluntad en activar esta habilidad. No hay margen de error."
Victor asintió, su determinación renovada. "Hagámoslo. No puedo dejar que Daiki gane. No puedo dejar que todo termine así."
Daiki, se fue caminando por lo menos unos 30 metros después de todo lo sucedido, y al escuchar algo vio que Victor, ya no estaba y al voltear al otro lado noto al chico.
Daiki se dio la vuelta rápidamente, sus ojos verdes brillando con sorpresa y furia. "¿Cómo es posible?", murmuró, viendo a Victor de pie, aunque visiblemente agotado y herido.
Victor, con una mirada determinada, se plantó firme. "Subestimaste mi capacidad de supervivencia. No caeré tan fácilmente."
Daiki apretó los dientes y levantó su katana. "Entonces tendré que asegurarme de que no vuelvas a levantarte."
Victor, reuniendo todas sus fuerzas, se preparó para el próximo asalto. "Vamos a terminar esto de una vez por todas."
Continuará...