- Bueno... parece que ya la encontró. - Menciona el hombre que me ha abierto la puerta y luego me habla una mujer a la cual solo le entiendo que me debo de quitar la ropa de nieve para calentarme mientras pasa la tormenta. La verdad, es que no le he puesto mucha atención y solo he escuchado bien lo que ha dicho el hombre, así que salgo de mis pensamientos y presto más atención a lo que está pasando a mi alrededor.
- Joseph, ayúdalo mientras yo voy por más té. - Dice de nuevo la mujer antes de salir de la sala, luego veo el suelo de donde me encuentro y me doy cuenta de que estoy haciendo todo un desastre a mi alrededor y de que estoy mojando a Stefania con mi ropa al mantenerla abrazada.
- Perdón... estoy mojando todo... - Digo al soltar a Stefania y luego me voy de nuevo a la entrada para quitarme y colgar ahí mi ropa para la nieve, quedándome con la ropa informal que me puse en la casa para salir a buscar a Stefania. Cuando termino de quitarme la última prenda y colgarla, la mujer se acerca a mí de nuevo cuando regresa de la cocina, lo digo por la bandeja con tazas de té que trae en las manos.
- Ten, toma para que te calientes un poco. - Me dice al ofrecerme una taza con té caliente.
- Muchas gracias. - Le digo con una sonrisa a la mujer.
- Ven, siéntate y caliéntate un poco. - Vuelve a decirme la mujer con una sonrisa.
Vuelvo a la sala en donde esta Stefania, me siento a su lado en el mismo sofá en el que ella está sentada, me giro para observarla y veo que tiene una gaza en su frente, al parecer para tapar una herida.
- Diablos!!!. - Pienso y dejo la taza de té en la mesa que está en medio de los sofás de la sala. Había estado tan emocionado de verla, que no me percaté de que esta lastimada y eso no me gusta, siento algo que no sé cómo explicar pero que me molesta, me duele y me pone como en modo protector.
- Estás herida... - Le digo mientras miro la gaza y toco un poco alrededor de la zona con la yema de los dedos, sin poder evitarlo.
- Estoy bien. - Me responde en voz baja pero no alivia mi malestar por verla lastimada.
- Yo le limpié la herida lo mejor que pude con lo que tengo aquí, pero creo que va a necesitar puntos. En cuanto se pueda, debe ir a un servicio de urgencias para cerrarla y para que no se vaya a infectar porque eso es lo que más me preocupa. - Me dice la mujer en cuanto me ve tocándole la gaza a Stefania.
Sin detenerme a pensar y como si algo se apoderara de mí, comienzo a reclamarle su mala decisión de venirse sola y dejarme plantado, ya que si no se hubiera comportado de esa manera, ella no estaría lastimada como lo está en este momento.
- Qué pasó?, porque no me esperaste como habíamos quedado para venirnos juntos?. - Le pregunto muy molesto sin poder evitar reclamarle.
- Cómo me preguntas eso y me reprochas?, si tú anoche por medio de un mensaje de texto me cancelaste. - Me responde muy enojada a la vez que noto que la mujer que nos acompañaba hasta hace un momento, se va dándonos espacio.
- Yo no te envié ningún mensaje de texto para cancelarte Stefania... - Le respondo algo confundido.
Inmediatamente Stefania empieza a decirme lo que decía el supuesto mensaje que le envié para cancelar nuestro viaje y diciéndome al final que me lo mostraría si no hubiera perdido su celular. La escucho y la observo en silencio mientras me habla muy molesta, por lo que no puedo evitar pensar en que nunca la había visto molesta o enojada realmente por algo y que se ve muy hermosa en ese estado, pero luego como si me hubieran echado un baldado de agua fría encima, me acuerdo de que anoche, había tenido mi teléfono celular desaparecido por un buen rato.
- Maldición... tuvo que ser durante el tiempo que no pude encontrar mi celular anoche después de que hablé contigo, alguien lo tuvo que haber cogido y haberte enviado el mensaje haciéndose pasar por mí, para evitar que nos viniéramos juntos como lo teníamos planeado. - Le digo al tratar de explicarle la situación, ya que sé que ella no es una persona chismosa ni mentirosa y ahora estoy completamente seguro de que alguien interfirió con nuestros planes a propósito y que mi celular no desapareció porque me hubieran querido hacer alguna broma.
- Piensas que alguien está tratando de impedir que vayamos a la construcción?. - Me pregunta sorprendida y pensativa, mientras yo la observo con mucha más tranquilidad porque por su actitud y por su pregunta, me doy cuenta de que me cree sin necesitar más explicaciones y eso me emociona y me agrada mucho, pero lo guardo para mi o por lo menos lo intento.
- Creo que se trata más de impedir que estuvieras conmigo y creo saber quién fue... - Le comento al tener prácticamente la seguridad de que fue Joey quien trató de impedir mi viaje con Stefania, de dejarme como un idiota irrespetuoso que no tiene palabra y ahora sé porque lo vi hoy en la entrada del edificio de Stefania.
El imbécil había cogido mi celular cuando entro al estudio, aprovechando que tenía los ojos cerrados y que tenía mi cabeza en otra parte. Luego le envió el mensaje a Stefania haciéndose pasar por mí, después tiro mi celular en los arbustos para hacerme perder el tiempo, pero claro que lo hizo después de eliminar todo el rastro de lo que había hecho y luego hoy en la mañana, fue al pent-house de Stefania para venirse con ella en el viaje y así quedar como todo un caballero con ella, dejándome a mi mal parado y también para poder acercarse a ella para ganar puntos, porque todo lo que ha intentado hacer en todos estos meses por acercarse a ella y conquistarla, le ha salido al revés. Pero todo lo que hizo fue en vano y volvió a fallar porque él no contó con que ella se iría sola y mucho más temprano de la hora que había acordado conmigo y cuando lo vi salir al llegar al pent-house de Stefania esta mañana, era porque sabía que ella se había ido y su plan había fallado por completo.
Como me gustaría que él viera en este momento que no pudo impedir que estuviera con ella a pesar de todo lo que hizo y como estoy disfrutando en este momento su total fracaso por apartarme de ella.
- Te pasa algo querida?. - Le pregunta la mujer a Stefania.
En cuanto escucho a la mujer, salgo de mis pensamientos y de inmediato observo a Stefania, quien intenta sonreír al tratar de minimizar su dolor, pero yo sé que no se está sintiendo nada bien, ya que no puede ocultar del todo su dolor.
- Estás bien?. - Le pregunto muy preocupado porque no me gusta verla herida y sufrir.
- Estoy bien, tranquilo. - Me responde calmada, tratando de que no me preocupe por ella.
- Cómo fue qué te lastimaste?. - No puedo evitar preguntarle, ya que quiero saber que le ha pasado.
- Me caí por un abismo, rodé algunos metros y me estrellé contra un árbol. Nada de gravedad. - Me cuenta como si fuera cualquier cosa.
- Menos mal que no fue nada de gravedad. - Le contesto con sarcasmo por tratar de minimizar lo que le pasó, ya que pudo haberse matado. Gracias a dios que prácticamente salió ilesa con semejante caída.
La mujer que se llama Renata, vuelve a la sala y le ofrece un analgésico, luego le dice algo de traer agua caliente para los hematomas que tiene en otras partes del cuerpo.
- Hematomas?. - Inmediatamente pienso sin decir nada.
- Cómo qué hematomas?, acaso tienes más heridas?. - Le pregunto cuando reacciono y muy asustado, sin poder evitar recorrer todo su cuerpo de pies a cabeza con la mirada para revisarla y para tratar de ver los hematomas que están mencionando, pero lógicamente no puedo verlos por la ropa y la manta que trae encima.
- Escúchame... estoy bien... - Me dice al poner sus manos sobre mi mano izquierda que esta puesta sobre una de mis piernas.
La miro a los ojos en silencio perdiéndome en ellos, hasta que Renata ingresa de nuevo a la sala, haciendo que Stefania se aleje un poco de mí mirando hacia ella.
Renata comienza a ayudarle a Stefania a levantar un poco su ropa en ciertas zonas y yo me quedo de una sola pieza cuando veo la magnitud de hematomas, de golpes y de rasguños que tiene en las partes del cuerpo que logro ver, no me quiero imaginar cómo tiene el resto del cuerpo que no alcanzo a observar. Definitivamente ha tenido mucha suerte de no haberse matado y yo soy un completo tonto por pensar que solo se había lastimado la cabeza.
Ha llegado la noche y la tormenta no parece calmarse, lo bueno de todo es que a pesar de la condición de Stefania de estar tan golpeada y adolorida, está viva y conmigo, tenemos donde resguardarnos de la tormenta y estamos junto a personas muy amables que nos han ayudado mucho siendo nosotros unos totales desconocidos para ellos y que sin ellos, no sé qué hubiera podido haber pasado con Stefania.
Después de un tiempo algo más tarde, me encuentro hablando con Renata y con su esposo Joseph sobre a lo que se dedican que son a los cultivos orgánicos, cuando me doy cuenta de que Stefania lleva un rato sin pronunciar alguna palabra, así que comienzo a buscarla con los ojos por el lugar y la veo que está sentada en el sofá con los ojos cerrados, me levanto de la silla del comedor para ir hacia ella.
- Stefania... - La llamo en voz baja, pero sé que está completamente desmayada en el sofá por el cansancio. La verdad es que ha sido un día bastante largo para ambos, pero con la ventaja de que yo no he salido lastimado como ella.
- Christofer, puedes llevarla a la habitación de huéspedes para que ella este más cómoda y pueda descansar. - Me dice Renata.
Me agacho un poco, acomodo con mucho cuidado a Stefania en mi regazo para no despertarla, luego sigo a Renata hasta la habitación de huéspedes muy despacio. Renata abre la puerta de la habitación para dejarme entrar.
- Estaremos en la sala con más té por si quieres. - Me dice ella antes de cerrar la puerta de la habitación para dejarnos solos.
Me acerco lentamente a la cama y luego con mucho cuidado, deposito a Stefania en la cama muy cuidadosamente, después le acomodo la almohada debajo de su cabeza lo mejor que puedo y luego le coloco encima, unas cobijas para que se mantenga caliente.
Al terminar de dejarla lo más cómoda posible, me quedo embobado viéndola dormir y como un completo idiota poseído, comienzo a acariciarle el rostro y el cabello sin poder evitar pensar que hubiera hecho si no la hubiera podido encontrar o si le hubiera pasado algo peor. Si me duele verla lastimada, no quiero imaginar cómo me puedo llegar a sentir al verla en un estado peor.
Mientras continúo acariciándole el rostro, pienso en todo lo que ha ocurrido el día de hoy, en todas mis emociones y sentimientos que he tenido en el transcurso del día y solo puedo llegar a una conclusión ahora con la cabeza mucho más fría, una verdad que ya no puedo seguir evadiendo y esa es… que Stefania Hayden me gusta como mujer, más de lo que me había llegado atraer una mujer desde hace mucho tiempo. Me refiero de una manera más personal, que no sea solo de manera física y hasta qué punto me gusta ella?, eso es algo que aún tengo que descubrir.
Mientras sigo sumido en mis pensamientos, Stefania comienza a moverse un poco y a quejarse como si estuviera teniendo una pesadilla, esta algo intranquila mientras continúa dormida, yo solo trato de calmarla como si fuera una niña pequeña hasta que deja de moverse un poco y deja de quejarse sin soltar mi mano, porque hace un movimiento antes de quedarse quieta en donde toma mi mano entre las suyas. Me quedo así por algunos minutos disfrutando de su toque, hasta que ella me suelta al moverse un poco, así que decido salir de la habitación para dejarla que descanse, ahora que está totalmente tranquila.
Salgo a la sala y tomo asiento en uno de los sofás sin dejar de ver por una de las ventanas, la tormenta que está cayendo afuera, aunque estaría mintiendo si digo que puedo ver la tormenta como tal, pero si la escucho y con ella me voy como arrullando porque empiezo a quedarme dormido y el cansancio a pasarme factura a mí también.