Mientras Mist había asestado un golpe limpio al monstruo renegado que se había dirigido a la sección este, un hombre de la sección central observó la escena desde lejos, quedando boquiabierto al no haber visto nunca a una persona del pueblo decapitar tan fácil y limpiamente la cabeza de un monstruo con un solo movimiento ágil.
—¿¡Pero quién diablos hizo eso!? —Tristán no pudo evitar exclamar, su expresión era de asombro mientras miraba al hombre armado a su lado. Dándole un codazo, preguntó:
— ¿Esa persona es nueva en el pueblo?
—¿Un recién llegado? Para nada. —En respuesta a la pregunta, Damián negó con la cabeza—. Luego, con una leve sonrisa burlona, le dijo a Tristán:
— De hecho, ya conoces muy bien a esa persona.
—¡Vamos! ¡Dilo ya! ¡No me dejes en suspenso! —Tristán frunció el ceño poco después, al darse cuenta de que Damián deliberadamente no mencionaba el nombre de la persona que había realizado la proeza que acababa de ver. Girando la cabeza hacia lo que tenían delante, repitió:
— ¡Vamos, Damián! ¡Dímelo ya! ¡La segunda ola viene en camino!
—Está bien, está bien, está bien. —Al escuchar cuánto quería Tristán saber quién era, Damián no pudo evitar reír por un momento. Finalmente, después de tomar algunas respiraciones profundas, le dijo:
— Es Mist, Tristán. Mist hizo eso.
—¿Mist? —Tristán inclinó la cabeza, tratando de remover en su memoria ya que el nombre le sonaba familiar. Después de un tiempo, sus ojos se abrieron de sorpresa—. Espera... ¿me estás diciendo que esa pequeña niña de hace unos años realmente hizo lo que prometió?
Al decir esto, Tristán no pudo evitar recordar la primera vez que había conocido a la niña. Fue en un día fatídico cuando dos personas habían llegado a la herrería, Damián, quien acababa de convertirse en el líder de los guardias del pueblo en ese tiempo, y la niña que eventualmente conoció como Mist.
Según lo que recordaba, Damián le preguntó si podía forjar un arma específica para Mist, una hoja delgada y aerodinámica que se parecía más a una espada que a un florete. En respuesta a eso, Tristán no pudo evitar preguntar por qué, diciéndoles que cualquier espada estaría bien.
Sorprendentemente, la que respondió esa pregunta fue la joven Mist, quien lo miró con ojos llenos de determinación antes de abrir la boca, diciendo palabras que se habían quedado en su memoria desde entonces.
—Eso es porque... ¡quiero convertirme en la usuaria de espada más rápida que exista! —afirmó ella.
—Definitivamente es la usuaria de espada más rápida que conozco. —Tristán se rió al recordar, una pizca de orgullo en su rostro, sintiendo que había tenido un impacto en cómo Mist había crecido en lo que era hoy en día. Después de soltar un ligero suspiro poco después, miró a Damián antes de asentir levemente—. ¿Te importa si le forjo una espada una vez que esta marea de monstruos haya terminado?
—Adelante. —Damián encogió sus hombros ligeramente—. Estoy seguro de que Mist estaría encantada de recibir una nueva espada de tu parte.
Recibiendo una sonrisa de respuesta por parte de Tristán, Damián luego enfocó su atención en lo que tenían delante. Entrecerrando un poco los ojos mientras aparecía una leve mueca de preocupación en su rostro, ordenó a un par de personas que se acercaran a él:
— Digan a la sección oeste y este que se acerquen un poco a la sección central.
—Es casi la hora de que la segunda ola llegue.
…
Para cuando Mist había regresado a la sección este, casi todos allí la aclamaban, con algunos de ellos hablando de lo fácil que mató al monstruo que se había vuelto renegado. En respuesta a esas palabras, Mist sonrió levemente y asintió con la cabeza, agradeciéndoles antes de volver a su posición original.
—Parece que algo te preocupa —Valyr no pudo evitar decirle a Mist una vez que había regresado, lo que hizo que esta última lo mirara con una ceja levantada. Al ver que había captado su atención, se rascó las mejillas y continuó:
— A juzgar por tu expresión, parece que estás insatisfecha.
—Supongo que sí —Mist encogió sus hombros en respuesta, recibiendo un mensaje de la sección central para que la sección este se moviera más cerca un tiempo después. Mientras ordenaba a todos que se movieran un poco más cerca de la sección central, continuó hablando con Valyr—. Digamos que no siento que me esté moviendo lo suficientemente rápido.
—Para mí ya te mueves bastante rápido —le dijo Valyr—. De hecho, de todos en la sección este, creo que fui el único que pudo ver hacia dónde te dirigías, aunque estoy bastante seguro de que te perdí de vista a veces.
—Eso es lo que me molesta —respondió Mist, suspirando ligeramente—. Quiero moverme tan rápido que nadie pueda seguirme.
—Bueno, definitivamente es una meta ambiciosa —no pudo evitar decir Valyr—. ¿Has conseguido habilidades que aumenten tu AGI?
—Más o menos, supongo —dijo Mist en respuesta antes de echar un vistazo rápido al campo de batalla frente a ellos. Calculando que solo faltaban unos minutos para la llegada de la segunda ola, ordenó a todos que apuraran el paso—. Compré todas las habilidades pasivas en la tienda de puntos de contribución que aumentan mi AGI. También compré todas las habilidades activas que hacen lo mismo, pero solo puedo activar un cierto número de ellas hasta que mi maná se acabe.
—Hmm... —Después de pensarlo por un momento, Valyr decidió usar [Análisis] en el equipo que llevaba puesto Mist. Para cuando la sección este había terminado su reubicación para estar más cerca de la sección central, Valyr finalmente notó la parte que ella no había estado utilizando a su máxima ventaja—. 'Su equipo no aumenta sus estadísticas en absoluto.'
Aunque raras en las primeras etapas del juego, el equipo que aumentaba las estadísticas se hacía cada vez más común una vez que uno avanzaba a través de los distintos rangos de clase. De hecho, se podría decir que una gran parte de la razón por la que los jugadores de alto nivel lograban estadísticas increíblemente altas era principalmente debido al equipo que usaban, aumentando todas sus estadísticas a grados insanos.
'Lo único que tiene que aumenta su AGI es la espada alrededor de su cintura', pensó Valyr. 'Además, el aumento de ella no es el máximo que se podría obtener de un arma hecha para un Poseedor de Clase Rango 1.'
—¿Cuándo fue la última vez que cambiaste tu equipo? —Valyr preguntó mientras Mist estaba en medio de elegir a las personas para luchar en la primera línea.
—Hace un par de días. ¿Por qué lo preguntas? —dijo Mist en respuesta, preguntándole a Valyr si podía ayudar en la organización del personal para enfrentar la segunda ola.
—Bueno, creo que tengo una idea de cómo podrías dar un paso más hacia el logro de tu meta —dijo Valyr en respuesta, lo que despertó instantáneamente el interés de Mist. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de preguntar cómo…
Rumble…
Un estruendo mucho más fuerte que el de la primera ola se sintió a lo largo de toda la línea defensiva, haciendo que un par de personas en la primera línea tropezaran y cayeran por la pura intensidad del estruendo. Desafortunadamente para Mist, al ver que la segunda ola de monstruos ya estaba frente a ellos, no pudo evitar suspirar internamente, dejando el asunto en el fondo de su mente para más tarde mientras reenfocaba su atención hacia el campo de batalla.
—¡Adelante! —gritó.