Después de ver el cofre dorado Evan retrocedió. Antes de llevarse el cofre dorado decidió recuperar su maná. Si sin recuperar su maná intenta tomar el cofre dorado, y ese buey se despierta, no tendrá ninguna posibilidad de escapar. Sin suficiente maná, no podrá pasar a través de la barrera que cubre la cueva. Después de retroceder del área abierta, Evan se sentó y comenzó a recuperar su maná. Las personas en la habitación que estaban observando a Evan asintieron con la cabeza cuando vieron que Evan no luchó contra ese buey.
Por lo que habían visto hasta ahora, estaban seguros de que Evan no es rival para un monstruo de rango B. Si intentase luchar contra él, hay una posibilidad muy alta de que muriera.
—Es bueno que conozca sus límites y no haya actuado precipitadamente —dijo Edward mientras miraba la pantalla.
—Si hubiese decidido luchar contra ese monstruo solo, habría empezado a dudar de la inteligencia de este estudiante —Olivia también asintió con la cabeza.
