Chapter 25 - Parte 25

—Si intentas liberar feromonas o mueves un solo dedo, recibirás una descarga eléctrica que te hará agonizar.

Con la mejilla presionada sobre el suelo frío y las manos siendo atadas detrás de la espaldas, Seong Ho escuchó a Luo Bingwen. El aspecto pálido y enfermo del otro contrastó con la fuerza de su agarre y la autoridad en su voz.

Mientras estuvo en cama, había escuchado varias veces a este hombre advirtiendo a Chong Yu sobre tener especial precaución con él. Había pensado se debía a su complexión, que resultaba intimidante para algunas personas; luego incluso había concluido tenía algo que ver con la palabra "alfa".

Y al parecer había tenido razón, pero ¿qué era esto?

Ante la sorpresa, tuvo el impulso de levantarse. Sin embargo, no tuvo suficiente fuerza y fue inmovilizado. Terminó soltando un gruñido desde el interior de su garganta.

—¡Hmm!

Pese a que no quiso gruñir sino hablar, de alguna forma no pudo hablar y solo gruñó.

—¿Crees que no lo haré?

Jeon Yu vio a Luo Bingwen, que parecía querer electrocutar al alfa, y quiso intervenir. Claramente el alfa estaba tirado en el suelo en una posición vulnerable y no habían feromonas que alertaran sobre su amenaza, pero Luo Bingwen era un beta recesivo, y por ende, era incapaz de percibir feromonas. Parecía estar interpretando esto como una provocación, por lo que se veía cada vez más enojado.

—Señor Luo, él no…

Jeon Yu sintió un escalofrío y sus ojos se desviaron al sentir la mirada del alfa. El alfa había logrado dar vuelta a su rostro y ahora lo miraba. Inconscientemente dio un paso atrás y se encogió de hombros.

No fue miedo, solo… una sensación extraña.

Al notar la mirada del alfa fija sobre el omega, Luo Bingwen intuyó algo e hizo fuerza en la cabeza del alfa, obligándolo a agachar la mirada.

—No… daño.

La frase en la mente de Seong Ho fue «No les haré daño», pero con esfuerzo gesticuló dos palabras.

Aún así, estas dos palabras fueron suficientes para que Luo Bingwen reflexionara en lo que estaba haciendo.

El hecho de que se trataba de un alfa dominante lo había llevado a estar a la defensiva, haciéndole incluso olvidar que la otra persona también era un paciente despertando de un coma.  

Se alejó del alfa como si quemara y advirtió al omega.

Mientras se dirigía a la cómoda y rebuscaba entre los cajones algo, temió por las emociones que brotaban de él debido a su estrés y el cómo sentía su corazón latir acelerado en respuesta.

Debía medicarse.

Debía calmarse.

Debía evitar...

—¿Te sientes bien? —Jeon Yu vio al beta inyectándose algo y preguntó.

Diez segundos después Luo Bingwen abrió los ojos y soltó el aire retenido en sus pulmones.

—Es por mi enfermedad, no te preocupes.

Beta volvió la vista al alfa, y dejando de lado su hostilidad inicial, revisó el estado de alfa. Hizo preguntas cognitivas fáciles de responder y descubrió el alfa no fingía y parecía tener dificultad motora, al punto de presentar insensibilidad en parte de su cuerpo.

—Me llamo Luo Bingwen y él es Chong Yu. Te hemos estado cuidando desde que fuiste atacado ¿cómo te llamas?

En cuanto a las preguntas, Seong Ho pensó en manejar la situación por su cuenta, pero se detuvo justo antes de hablar. Dado estaba en el mundo de un libro con Sistema (y no en China, donde sabía cómo resolver los problemas), decidió regresar al cuarto de mando y consultar con un Sistema.

Habiendo leído tantas novelas de trasmigración sabía lo que una simple acción podría significar, un efecto mariposa que debía evitar a toda costa.

—Sistema, este es el asunto…

Y pese a parecer poco confiable, el pequeño Sistema había conseguido incrementar un punto en el S2, por lo que pensó tal vez podría ser de ayuda.

—¿Qué tú, qué? —Sistema había estado jugando videojuegos y la consola simplemente resbaló de sus manos, entonces gritó— ¡Esto es malo! ¡Muy malo! ¡Tienes que escapar! ¡Seguro van a llamar a la policía y AAAAAAHHHHHHHH!

La mente de Pequeño Sistema fue un caos ¡Tanto tiempo haciendo complicados ejercicios matemáticos para ser atrapados en este momento! ¡No! ¡No! ¡No le gustaba estudiar, pero se había esforzado tanto para nada! ¡Waaaahhh!

Los gritos hicieron que la cabeza de Seong Ho diera vuelta y se arrepintiera. Aun así, tuvo una idea y volvió a preguntar.

—Si mi identidad no es asociada a la del carne de cañón, mis acciones no afectarán al marcador del personaje ¿tengo razón?

Pequeño Sistema hizo un puchero y con lágrimas en los ojos, respondió.

—Yo qué sé, no he hecho hipótesis.

—¿No puedes hacerla?

—No quiero.

Seong Ho filtró este último comentario y después de fingir iluminación, dijo a Luo Bingwen el primer nombre que se le vino a la mente.

—Li Han.

Habló en un susurro grave, sintiendo las palabras siendo arrastradas nuevamente.

Era consciente de que este "Seong Ho" era famoso, pero precisamente a esto y a la imagen impecable que mostraba la televisión, creyó en la baja probabilidad de ser reconocido. Es decir ¿a quien se le ocurría que un tipo moribundo es en realidad un ex heredero prófugo de la justicia?

¿No sería más normal intuir que este tipo de hombre debería tener sus propios ahorros y la influencia suficiente para esconderse en algún búnker, isla o simplemente escapando fuera del país?

Era simple lógica.

—Señor Li ¿Eres extranjero? —interrogó Luo Bingwen— ¿Por qué esos hombres te atacaron? ¿Qué te pasó?

Seong Ho deliberadamente había ignorando la parte de la habitación en la que estaba Chong Yu, pero al escuchar mención del suceso, no pudo evitar mirar en esa dirección. La incomodidad en su pecho regresó.

—Frío.

—¿Qué?

Tanto Luo Bingwen como Chong Yu mostraron su confusión.

Tras unos segundos.

—Tienes frío… y fiebre —luego hizo una pausa y refiriéndose a la pregunta, dijo— No recuerdo.

No importa cómo de repente lo supo, solo lo supo.

Desde que Chong Yu había llegado, Seong Ho había sabido que estaba empapado, pero ahora también estaba allí y lo había confirmado. El clima estos días era cada vez más gélido, y debido a que había llovido, lo era aún más. Pese a la leve oscuridad, podía ver claramente cómo el chico tiritaba los dientes con una postura de brazos cruzados con la que pretendía esconder el malestar que sentía. Seong Ho lo había dejado pasar, pensando estaba exagerando. Creyó quizás estaba siendo influenciado de alguna manera por las "feromonas" del otro alfa sobre Chong Yu. O quizá era la locura del cuerpo carne de cañón.

Esto último le generó cierto conflicto.

—¿Qué no recuerdas? —preguntó Luo Bingwen.

—Nada.

—¿Nada? —Luo Bingwen arrugó las cejas, luego reajustó su expresión y continuó— ¿No recuerdas a donde fuiste luego de salir de aquí? ¿O no recuerdas ni siquiera haber estado aquí?

—Eso recuerdo —Seong Ho respondió lentamente, luego miró a Chong Yu—. Recuerdo a él.

—¿Y a donde fuiste si no tenías a donde ir? —Luo Bingwen notó la actitud silenciosa del omega y decidió re direccionar la conversación.

—Tenía hambre, caminé ciudad. Atacado allí.

Seong Ho se sintió estúpido por hablar de esta forma, pero no podía hacer nada contra esto.

Y hablado de eso, si hubiese sido otra casta, el corazón de Luo Bingwen hubiese sido blando. Sin embargo, la otra persona era un alfa dominante, cuya feromonas eran capaces de doblegar a cualquiera que no fuese otro alfa dominante, lo que convertía este recuento de palabras en un sinsentido.

—¿Entonces no sabes de dónde vienes? —Luo Bingwen sonrió cuando el omega no lo vio.

Ajeno a esto, Seong Ho siguió respondiendo.

—No sé.

—¿Y a dónde irás? —el sarcasmo de Luo Bingwen fue bien disfrazado— Llevas aquí seis días ¿Sabes que esto es una posada?

Aunque en estos momentos era un lisiado, Luo Bingwen todavía le pareció gracioso escuchar a un alfa dominante hablando sobre respetar y retribuir. Luo Bingwen tenía una buena personalidad, pero esta se ennegrecía cuando de alfas se trataba.

—No sé.

«Pobre hombre»

Por su parte, Jeon Yu limpió las lágrimas al borde de sus ojos, sintiéndose culpable e inútil. A pesar de haber sido ayudado por esta persona y de saber sobre su perdida de memoria, no hizo nada. Si hubiese sido más condescendiente y hubiese actuado, este hombre no hubiese terminado tan grave como lo hizo. Apretó los dedos en los antebrazos, sintiendo otro pesar cayendo en su corazón.

«Ni siquiera pude hacer esto bien. Que patético».

—Puedo trabajar…

Luo Bingwen escuchó las dos palabras del alfa.

—¿Trabajar? —¿Había escuchado mal?— ¿Dónde?

—Puedo… trabajar aquí.

—¿Qué? —dijeron Luo Bingwen y Chong Yu.

Pequeño Sistema no podía escuchar el exterior, pero incluso él sintió un escalofrío recorrerle la espalda.

Teniendo en cuenta que el marcador realmente no había bajado, la teoría de Seong Ho había sido correcta. Al parecer, el marcador solo bajaría si su identidad era reconocida como la de Seong Ho. Siendo así, mientras fuera discreto podría recuperarse sin preocuparse por ser atacado por el protagonista.

Rong Wei era un protagonista masculino modelo. Tenía una personalidad elegante y encantadora, bendecido con todos los artes y buenos valores.

La trama no hablaba de que fuera un vengador, sino un tipo de príncipe azul, pero ¿debía confiar?

Seong Ho no sabía lo que era ser un protagonista ni lo que era luchar por amor, pero sabía lo que era luchar.

Luchar era luchar y un hombre buscaría fuerza para encontrar justicia.

En este mundo él era un villano carne de cañón. Por supuesto, el príncipe azul buscaría derrotarlo.

Y como carne de cañón, debía planear cómo lidiar contra la trama que lo empujaba a la muerte.

Seong Ho era una persona simple, con un pensamiento simple.

«Si soy culpable, permitiré ser castigado. Si no, te castigaré».

Luo Bingwen compartió una mirada tacita con el omega. Le había prometido que cuidaría del alfa en su recuperación, siempre y cuando este lo convenciera.

—Puedes quedarte, pero no tengo dinero para pagar tu trabajo solo puedo darte comida ¿estas conforme?

El alfa asintió y cuando quiso agradecer, su estómago rugió.

Luo Bingwen dijo ir a la cocina. Omega se levantó, dedicó una reverencia al alfa y lo siguió.

—Gracias —dijo el omega, luego estornudó.

En términos de convencer, el alfa no lo convenció. Sin embargo, Luo Bingwen terminó cediendo antes sus propias razones.

—No te preocupes. Ve a tomar un baño caliente.

El amanecer entró por las ventanas, acentuando el cansancio.