- Si me disculpan, mi nombre es Nathaniel, vengo a tratar de ayudar a su padre -
En cuanto hablé ambos hermanos se giraron hacia mí, tratando de examinarme de pies a cabeza, su mirada también pasó por Nephy.
- Con todo respeto, Nathaniel, no creo que puedas ser de ayuda aquí -
El primero en hablar fué Joseph.
- No es bueno juzgar a alguien con una sola mirada, heredero del Duque -
Si vas a ser un político, debes pulir tu habilidad para evaluar a la gente.
- Mi esposo está aquí a petición de su hermana, no creo que sea correcto despedirlo sin más -
Nephy habló algo irritada por las palabras de Joseph.
- Escuchen, en este momento esta casa no es apta para recibir invitados -
Mirabelle habló después de su hermano tratando de mediar entre nosotros.
- Escuchen hermanos, esta persona es especial, estoy segura de que podrá hacer algo por nuestro padre, después de todo es un viajero -
Ambos hermanos reaccionaron instantáneamente a la palabra viajero.
- Escucha Tara, se que tratas de ayudar pero las posibilidades de que esta persona sea realmente uno son muy bajas -
- Concuerdo con nuestro hermano, no puedes confiar tan fácilmente en otros -
Detrás de mí Nephy parecía estar muy enojada.
- Entonces solo debo demostrar que realmente soy uno ¿No? -
Si quiero mi recompensa debo convencer primero a los hermanos de Tara para que me permitan examinar a su padre.
Ambos me miraron con sospecha pero finalmente parecieron pensar en algo.
- Bien, si realmente eres un viajero demuéstralo enfrentándote a mí -
- ¿Eso es todo? ¿Esa es una forma poco fiable de demostrarlo no creen? -
Estaba preparado para mostrarles algo de mi conocimiento para probar mi origen pero parece que no será necesario.
- Mi hermanita ve algo en tí con esos ojos especiales que tiene y la mejor forma de saber el carácter de alguien es chocando espadas, si me convences creeremos en tí independientemente de tus orígenes, eso es todo -
Parece que la hermana es una cabeza de músculo.
- Acepto el duelo señorita -
- No me llames así, mi nombre es Elizabeth -
Caminamos un poco hasta estar sobre el pasto e inmediatamente ella se puso en guardia desenvainando su espada.
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Nombre: Elizabeth Von Blackwood (Humano)
Atributos:
Físico: A
Maná: A+
Consciencia: E+
Habilidades:
Danza de luz de luna (A)
Filo del alba (B)
Fuerza de gigante (A+)
Sobre marcha (A)
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Solo viendo sus estadísticas puedo decir que es la humana más fuerte que he encontrado en éste mundo.
Su postura es impecable, no hay huecos en sus defensas. Yo mismo alisté mi postura con mi espada en lo alto.
- Tu puedes ganar!!! -
Con Nephy animando aumento el maná que circula por mi cuerpo y me disparo hacia mi oponente cerrando la distancia en un momento.
Ella no dudó en bloquear mi ataque con su espada redireccionando mi corte hacia el piso, aunque su fuerza es muy menor a la mía su técnica es lo suficientemente buena como para cubrir la brecha.
Tras bloquear mi golpe ella libera una andanada de ataques feroces en dirección a mis puntos débiles, en un instante tuve que repeler más de 10 ataques.
Sus habilidades están muy por encima de las mías en este momento, si no quiero perder debo buscar la forma de ponerme al día con ella.
Sin darme tiempo de respirar su avalancha de golpes no se detienen, barras laterales y oblicuas, estocadas provenientes de distintos ángulos seguidos de innumerables cortes. Con sus pies moviéndose libremente como una danza es difícil preveer desde dónde llegará el siguiente ataque.
Utilizo mis habilidades a toda potencia pero la cantidad de información que entra en mi cerebro es enorme por lo que analizarla de golpe es imposible sin embargo si no fuera por esos esfuerzos ya habría sido abrumado.
La expresión en el rostro de Elizabeth es muy seria, parece muy concentrada.
Estoy dando todo de mí para defenderme utilizando incluso el pomo de la espada para repeler algunos golpes pero no he podido encontrar una apertura para lanzar algún contraataque.
Me esfuerzo por sentir el maná dentro de su cuerpo e intentar ver hacía dónde se mueve en un intento de anticipar sus golpes.
Conforme pasan los minutos ella desacelera un poco, evidentemente cansada, lo único bueno de tener mejores estadísticas es que no me canso tan fácilmente.
Finalmente una oportunidad de contraataque aparece y lanzo una fuerte patada hacia su abdomen en un intento de hacerla perder el balance, gracias a mi velocidad la patada conecta.
Mirabelle es enviada hacia atrás con una gran cantidad de fuerza desafortunadamente debido a su armadura no causé mucho daño pero logré romper su guardia por lo que es hora de dar la vuelta.
Imitando su juego de pies comienzo a moverme ágilmente a su alrededor descargando una gran cantidad de cortes sobre ella, con mis estadísticas superiores cada golpe tiene la fuerza de un cañón detrás.
Ella tiene problemas para desviarlos ya que recibir de frente mi espada es peligroso, si no tiene cuidado la fuerza puede provocarle daño interno.
Hábilmente logró hacer distancia entre nosotros y puedo sentir que una gran cantidad de maná se reúne dentro de su cuerpo explotando y al instante ella ya estaba frente a mi.
Su espada descendió rápidamente, sin apenas tiempo logro detenerla pero la fuerza del impacto logra hundir el suelo bajo mis pies e incluso mis brazos se entumecieron ligeramente.
Sin otra opción tuve que concetrar mi fuerza en las piernas y saltar hacia atras en un intento desesperado de abrir distancia entre ambos, ella rápidamente me siguió por lo que en cuanto tuve los pies de nuevo en la tierra me agaché y rodé hacia el frente escapando de la hoja de su espada por los pelos.
Nuevamente entramos en un punto muerto sin que nadie pueda dar un golpe decisivo, cada momento el impacto de nuestras espadas liberan chispas por la fuerza y agrieta el suelo a nuestro alrededor.
Su estado actual parece ser producto de una sobre estimulación de su núcleo de maná, obtiene mucho poder pero la carga sobre su cuerpo debe ser enorme, si esto se alarga ella puede correr algún riesgo.
Tras un último choque logro empujarla unos cuántos metros con mi espada, comienzo a reunir una gran cantidad de maná en la hoja planeando un último gran choque.
Elizabeth parece entender mis intenciones y comienza a llenar su propia arma con una gran cantidad de energía, después de unos instantes de preparación, ambos nos miramos fijamente y nos lanzamos el uno contra el otro dispuestos a terminar esto de una vez.
El instante en que nuestras armas chocan parece extenderse bastante, una luz brillante nos ciega a todos mientras que las vibraciones resultantes del choque de las dos masas de energía amenazan con arrancarnos las armas de las manos a ambos.
Para finalizar el choque entre ambos un fuerte estruendo seguido de una pequeña explosión nos envía a los dos a volar por varios metros.
Cuando golpee el suelo todo se volvió negro de repente y así sin más me desmayé.