-¡Hasta ahora!
Dice Adelina en medio de aquella reunión en el amplio comedor después del evento, donde tanto las chicas que vivían en su mansión, los chicos invitados al ritual, las sirvientas, el mayordomo, la reportera.
La bibliotecaria y ella misma se habían congregado, en primera, para saber la verdadera identidad de la mulata que las había defendido de la carnicería que pretendía hacer la condesa de Malibrán con ellas ese día, porque era demasiado obvio que no se trataba tan solo de una bibliotecaria, mientras afuera la policía municipal y los marinos contenían a los reporteros, a los nativos y turistas que querían ingresar a la mansión Román.
-¡Hasta ahora que decidió mostrarse para ayudarnos a protegernos de esa bruja infernal!
Dice Leticia Correa que ya no tenía rollo en sus cámaras, pero si estaba grabando todo en una grabadora de audio con cassette, en aquella especie de entrevista en la que iba a basar su reportaje, además de que ya tenía un par de cámaras listas para filmar, solo que Adelina no aceptó que se hiciera una filmación del interior de su casa y de sus niñas.
-¡Ya había venido antes! –dice Soledad. –Pero yo no había intervenido porque los que la invocaron, consideré que eran pequeños grupos de personas que no valían la pena y que lo habían hecho tan solo por ignorancia o ambición, y que sin saberlo solitos se apuntaban en su lista negra, aunque había algunos daños colaterales, como apuestos muchachos que trasnochando buscaban únicamente a mujeres fáciles para divertirse, pues la dejaba hacer su limpieza, pero hace algunos años consideré que no era buena idea que viniera aunque fuera por pequeños grupos de pecadores y decidí erradicar su leyenda, después de todo soy una de las guardianas de la humanidad, así que comencé a buscar en las bibliotecas de todo el estado los libros de mitos y leyendas que hablaban de su maldición y del ritual para invocarla, por eso cuando ustedes fueron a mi biblioteca no encontraron lo que buscaban, porque años antes ya había visto perderse varias almas de locales y turistas que por curiosidad realizaban el ritual de invocación haciéndola aparecer, y así fue como los retiré y los quemé, por eso es que actualmente no existen muchos libros que hablen de ella y también por eso se tiene muy poca información de su vida, para evitar un evento catastrófico como el de esta época, en que aún no sé cuál es el motivo, pero ha regresado con un poder estremecedor, que si yo pude contener hoy fue porque aún era de día y no es noche de Luna llena, que es cuando ella tiene su periodo menstrual y su furia aumenta su poder mágico, haciéndola odiar a muerte a todas las mujeres que como ella estén en su periodo menstrual.
-Pues se me ocurre que la conexión es la música disco, porque cuando la invocamos por primera vez había mucha música disco, tal vez por eso su efecto llega muy lejos y se va extendiendo hasta donde la gente escucha música disco, cuya consecuencia extiende la cobertura de la maldición y por eso estén desapareciendo muchachos por todos lados. –dice Belinda Castillo, causando expectación.
-Eso puede ser cierto, así como la música disco y su grito de guerra, invocan la presencia del conde de Malibrán, también la hacen venir a ella. –dice Soledad.
-¡Pues podemos dar por hecho que ya existe un ritual para hacerla que se vaya! –dice Leticia Correa.
-Si claro, lo malo es que el mismo ritual la hace que regrese y lo que no podemos impedir es que la gente escuche esa música infernal en sus autos y en sus casas, a cualquier hora que enciendan la radio escucharás música disco en la mayoría de las estaciones y comerciales, y mucho más las rolas de Michael Jackson, que fue con la que iniciamos el ritual maldito. –dice Érika.
-Tendré que iniciar una campaña en televisión contra la música disco, advirtiéndole a la gente de la posibilidad de estar reforzando la maldición de la condesa de Malibrán, con el solo hecho de escucharla en casa o en el auto, aumentando su influencia al tocarla en una fiesta aumentando su cobertura, tal vez así pierda su fuerza y podamos hacerla que se vaya. –dice Leticia Correa.
-¡Ni se te ocurra muchacha! –interrumpe Adelina. –Si les dices eso, a la vez les estás diciendo como llamarla.
-Y mucho menos van a dejar de escucharla, entonces sí que con la terquedad que tienen los chamacos de ahora, la maldición de la Condesa se extenderá por todo el mundo, haciendo que la lista negra sea tan grande que sería como iniciar el apocalipsis.
-En eso tienes razón, Adelina. –dice la mulata. –Es mejor que no hagas tu reportaje y mucho menos que lo pases por televisión.
-Pues si no lo exhibo yo, lo pasará cualquier otro reportero de cualquier otro medio de información, pero como yo fui la primera en hablar de esto y la que estoy ahora con ustedes, entonces soy la que tiene más credibilidad, así que es mejor que me ayuden a preparar una versión oficial, a que traten de convencerme de no darla a conocer.
-Pues es un hecho que todo mundo se va a enterar de lo sucedido hoy, porque no creo que tú hayas sido la única que tomó fotos, desde tu reportaje anterior, hasta mis muchachas quisieron comprarse una cámara de fotos instantáneas y normales, porque son las únicas que funcionan cuando aparece la Condesa, y no encontraron en existencia, porque ahora todo mundo tiene o quiere un aparatejo de esos. –dice Adelina.
-¡Incluyendo las kodak disc! –interrumpe Belinda. –La mía fue la única que alcancé y además la más cara, lo malo es que hay que mandar las fotos a revelar hasta México, porque aquí en Veracruz no tienen lo necesario para revelarlas.
-La única opción buena que se me ocurre. –dice Soledad. –Es realizar el ritual de protección, que por cierto ese fue el motivo que hizo que tu carro no fallara muchacha, cuando todos los demás si durante el apagón de esta tarde, porque entre las cosas que conseguí están algunas que anulan sus efectos y podremos fabricar amuletos, así que lo que podemos hacer para que la Condesa no las pueda atacar por lo menos hasta que descubra como detenerla, es realizar el ritual esta misma noche para protegerlas a ustedes y a la mansión.
Eran las 9 de la noche, cuando por fin se abrió la puerta lateral a aquel corredizo portón de madera, ahora exhibiendo el dibujo hecho con gis y crayolas de un paisaje boscoso al cual ya le habían tomado miles de fotografías y videos, de donde un par de horas antes había saltado el conde de Malibrán.
El cerco policiaco apenas y podía contener a las miles de personas que se habían reunido en esa área del Malecón, que al ver salir a la conocida reportera guardaron un poco de compostura y silencio, mientras unos grababan en video, otros tan solo en audio y se veían miles de flashes de cámaras desechables e instantáneas.
-¡Buenas noches a todos los presentes!
Dice la reportera subida en la batea de una camioneta policiaca, que estaba estacionada al frente de la casona, mientras utilizaba el micrófono de su agencia informativa y uno de sus camarógrafos la enfocaba, junto con los de otros medios informativos.
-Mi nombre es Leticia Correa del noticiero de la XEW.
Claro que no podía dejar de hacer la presentación comercial primero, aparte de ya haber solicitado la ayuda de otro de los camarógrafos de la televisora, poniéndolo en primera fila para hacer la nota de su reportaje, que apenas estaría listo para ser televisado en el noticiero de las 22:30 horas, cuyo titular era precisamente el reportero Guillermo Ochoa, en una época en la cual todavía no eran posibles los enlaces en vivo y en directo, porque algunos países no tenían satélites de comunicaciones y trabajaban tan solo con antenas repetidoras de radio y televisión.
–Como algunos se habrán enterado de lo sucedido esta tarde, la leyenda de la condesa de Malibrán ha sido comprobada, dejando de ser uno más de los mitos urbanos tradicionales, a la cual ahora si le podemos atribuir la desaparición de los jóvenes que se han reportado durante los últimos días, pero no deben de tener miedo, como todos los presentes se dieron cuenta, la Condesa no es invencible y hay varios modos de detenerla, uno de ellos es el conde de Malibrán.
-Que al parecer es a lo único que le teme y por eso huye despavorida en cuanto lo escucha o lo ve llegar, ahora ella ya se ha ido y no sabemos cuándo volverá a aparecer, tampoco conocemos el origen de su fuerza pero si sabemos el origen de la nuestra, la unión, así como todos pudimos ahuyentarla esta tarde llamando al Conde, así es como nos podremos defender cada vez que regrese, tal vez su objetivo principal, esté en las muchachas de esta casa porque aquí se inició el primer ritual de invocación, pero eso no evita que muchachos jóvenes estén desapareciendo por todo el estado, y tal vez por los demás estados, así que lo mejor es que durante la próxima noche de Luna llena, que será en unos días, nadie debe de salir a la calle durante la noche, especialmente si son hombres jóvenes y apuestos, porque sabemos, según la leyenda que ese es el objetivo de la Condesa, aparte de las pensionadas de esta mansión que estarán muy bien protegidas por este lienzo pintado en un portón, al cual todos nosotros le dimos el poder de ser el portal por donde llegará el conde de Malibrán cada vez que lo necesiten las chicas, yo soy Leticia Correa para el noticiero de la XEW, radio y televisión, buenas noches.
La parte de la multitud dedicada a las noticias que se había acercado, ahora trataron de entretener a la chica con un millón de preguntas, pero ella logró evitarlos y regresar a la mansión donde le pidió el teléfono a Adelina para hablarle al jefe de noticieros de la televisora, el reloj marcaba apenas pasadas las 21:30 horas y el video del reportaje tendría que estar listo para el noticiero de las 22:30.
-Bien muchachas y muchachos, la versión oficial va a ser transmitida a nivel nacional y de ustedes depende que no se sepa la verdad, porque si todas esas personas que están afuera, junto con todas las que nos van a ver en televisión, la saben, van a querer un ritual de protección o un amuleto como el que ustedes van a portar, y en un par de horas la mansión estaría invadida por cientos de personas dispuestas a matar por obtener un amuleto, así que en un par de horas más haremos el ritual de protección, para que cada uno de ustedes no pueda ser secuestrado.
-O encantado por la magia de la Condesa, eso refiriéndome a los muchachos, porque a las muchachas tan solo las quiere para echárselos a los cocodrilos porque las odia, pero recuerden que es posible que algo falle y es mejor que no salgan de noche, ni mucho menos durante un par de noches antes y un par de noches después de la noche de Luna llena. –les dice la mulata.
-¡En una hora más o menos empezará el noticiero nocturno de la XEW! Y en cuanto lo vean sus padres empezarán a llamar, no olviden decirles que todo es tan solo un espectáculo de publicidad para atraer gente a la ciudad para las siguientes vacaciones de semana santa, y que todas están bien, eso si se quieren quedar protegidas dentro de la mansión, por lo menos hasta que sepamos como regresar definitivamente a la Condesa al infierno de donde la hicimos venir, ya que si alguna de ustedes se quiere ir a su casa, lo pueden hacer, pero recuerden que lejos de aquí, tal vez no sirvan los amuletos y pondrán en riesgo a su familia.
Dice Adelina, y unas cuantas horas después, al filo de la media noche, después de que las muchachas y Adelina contestaran infinidad de llamadas de los padres que ya habían visto el noticiero; Soledad ya había encendido una hoguera en lo más escondido del patio de la mansión, con madera obtenida de viejos muebles, las chicas se tomaron de la mano junto con Adelina; Leticia y los demás, formando un círculo alrededor del fuego que crepitaba de una extraña manera, haciendo que las lengüetas de fuego parecían manos surgiendo del suelo, mientras la mulata entonaba un extraño cantico que se escuchaba lúgubre pero relajante, cada uno de los que conformaban el circulo, traía un artículo personal consigo, algunos en la mano y otros en la bolsa de la camisa, que iban desde una piedra que habían encontrado en el jardín, hasta relicarios, relojes y joyas, cuando la mulata les indicó que cerraran los ojos y que nadie absolutamente los abriera, las lengüetas de fuego comenzaron a saltar sobre ellos pero sin quemarlos, actuando únicamente sobre el articulo donde lo portaran.
Claro que no faltó quien los abriera, entre ellas Érika, que gritó asustada cuando sintió y miró que las llamas la abrazaban.
-¡Recuerda que tu nombre es Érika Cienfuegos!
Le dice Adelina que era de las que estaban vigilando el desarrollo del ritual, y la chica, haciendo honor a su nombre, agarró valor y dejó de demostrar miedo, aunque estaba aterrada, las manos de fuego comenzaron a retroceder hacia su base hasta que se extinguieron.
-¡Ya pueden abrir los ojos! –les dice Soledad. –Y de ahora en adelante ese objeto que adoptaron como suyo, es tan personal que los hará invulnerables ante la Condesa, pero recuerden que es posible que no sean suficientes, así que mejor no se confíen.
Entre los asistentes estaban las madres de algunos de los muchachos y claro, algunos de los padres que habían presenciado las infernales manifestaciones de la condesa de Malibrán y agradeciéndole a la mulata, le prometieron que iban a hacer todo lo posible para proteger a las inquilinas de la mansión, organizando guardias nocturnas y todo lo que fuera necesario, cada uno portando con fe, su ahora objeto personal bendito.
El ritual terminó, las muchachas y todos los involucrados fueron a dormir un poco más tranquilos, y mucho más cuando entre todas convencieron a la mulata de Córdoba, para que se quedará a dormir en la elegante y ahora mucho más famosa, mansión Román.