No esperaba esta situación.
-Hah… Hah…
-¿Qué ocurre?
…Esta sería la primera vez…
-¿Ya te rindes?
-¡Hah…! ¡Agh! Yo…
-No llevamos ni 4 Km… ¿Ya tiras la toalla?
Que me sentía tan enfermo.
Después de que mi abuelo y yo empezamos a correr por el vecindario.
Pude darme cuenta de la terrible condición física que tenía.
No llevamos ni 10 minutos que partimos de nuestra casa. Y yo ya no podía recuperar el aliento.
Al ver a mi abuelo con una expresión serena viéndome sin siquiera sudar una gota de sudor.
Comienza a darme ánimos para rendirme.
¿Esta no es la parte en donde tienes que apoyar a tu nieto? ¿Talvez…?
No estoy seguro de que está pasando por su mente ahora, pero volteo su mirada hacia mí y me dijo.
-Creo haberte dicho que si veía que te rendirías o pensabas en eso, nos detendríamos, Lo prometiste. ¿Es difícil?, Lo es, ¿Estás cansado?, Por supuesto. Pero adivina. El mundo al que quieres entrar no le importara en lo más mínimo esas cosas, toda la frustración que sientes debes soportarla hasta superarlas. Y si no puedes sobrepasar esa valla que está frente a ti, si esperas alientos de mi parte te decepcionarás. Solo lograrás que te maten sin poder hacer nada.
…¿Entonces es así?
Sus palabras eran severas.
Si considerara que esto sería fácil, entonces está equivocado.
Solamente tengo que superar esto. Lo acepto.
Me di cuenta de que me estoy apoyando de una pared para no caer.
El sudor no dejaba de caer. Mi respiración era pesada. Pero hice lo posible para mantenerme de pie.
-…
No quería desperdiciar el poco aliento que me quedaba, así que solo le lance una mirada a mi abuelo. Y trasmitirle que aún puedo seguir.
Él parecía no estar muy convencido. Pero creo que entendió lo que quería demostrar.
Nada más me dio la espalda.
-Bueno, entonces. Solo quedan como 6 km, desde ahora no me voy a detener. Ya conoces el recorrido, no llegues tarde.
-¡¿…?!
Mi abuelo solamente dijo eso. Y después comenzó a correr de nuevo, pocos segundos después ya no había rastro de él.
Estaba solo.
…Vamos.
Tome de nuevo el camino y comencé a correr de nuevo, o trotar más específicamente.
Un paso a la vez. Era lo que me decía a mí mismo para no caer.
Estaba por llegar a las zonas públicas y no paso mucho para atraer la atención de las personas que transitaban.
Sería una molestia si llego a colapsar del cansancio. Y le daría más razones a mi abuelo para detener el entrenamiento, así que me aleje de ellos y los ignore.
Mientras más apresuraba mis pasos. Mi fatiga no dejaba de aumentar.
Estaba llegando a la mitad, el puente que pasamos antes estaba delante de mí, pero…
… ¡Oh no…!
Mi visión comenzaba a nublarse y comencé a sudar frío. Sentía que el calor de mi cuerpo me abandonaba y mis pasos se hacían erráticos.
Siento que…
Algo comenzó a subir por mi garganta, de inmediato caí en el suelo y no pude dejar de sentirme enfermo y temblar, de pronto…
-¡Buagh…! ¡Agh!
En ese camino donde se podía ver un río y pasto a su alrededor. Expulse todo lo que había en mi estómago.
Los restos de fluido y comida fueron esparcidos en la hierba. Dejándome un sabor agrio en la boca.
-¡Puk! Mierda…
Escupí para deshacerme lo que aún quedaba de ese sabor. Y maldije mi patética situación.
…Desagradable.
Estaba molesto conmigo mismo, me di cuenta de lo ingenuo que era.
¿Cómo iba a hacer un Ripper, si ni siquiera puedo hacer esto?
…mientras me encontraba tirado en este sitio. De esta manera tan miserable, no tuve de otra que ponerme de pie y seguir de nuevo. No podía quedarme aquí.
Tengo que superar esta situación y continuar.
Ordenándole a mi cansado cuerpo que corriera otra vez, junto con el sonido de mis pasos desequilibrados y mi respiración agitada.
<- - - - - - - - - ->
No sé cuántas veces me he tropezado o casi llegar a colapsar. Pero pude finalizar el recorrido.
Mi casa se encontraba a unos pasos enfrente de mí y parado frente a ella, estaba mi abuelo parado viendo en mi dirección.
Sin querer mi cuerpo, al saber que ya estaba por terminar, comenzó a relajarse haciendo que a pocos metros de llegar, hicieron que tropezara y cayera frente a él.
-¡Huuff….! ¡Haaff!
Tratando de llenar de aire mis pulmones que habían llegado a su límite hace kilómetros atrás.
No podía hacer nada más que mirar hacia al suelo intentando no desmayarme del cansancio.
-Llegas tarde, por un momento llegue a pensar que te habías desmayado por ahí. Estaba a punto de irte a buscar.
Mi abuelo comenzó a decir unas cosas, estoy muy cansado ahora, así que no pude entender mucho lo que dijo. Pero estoy seguro de que está diciendo algo sarcástico ahora.
Después de unos momentos pude recobrar un poco el sentido y el aliento.
-Entonces…
Mi abuelo me hablo.
-¿Te das por vencido?
… ¿En serio?
Quería decirles muchas cosas ahora. Pero no era el momento.
Solo pude intentar ponerme de rodillas y mirarlo a los ojos y decirle lo que en verdad pensaba a este señor.
-… Pronto…
-¿…? ¿Qué dices?
Mis respiraciones entrecortadas me molestaban, pero se lo tenía que decir.
-Es el primer día… Es muy pronto para rendirse… ¿Verdad?
-… Ya veo.
Él nada más dijo eso sin ninguna expresión en su rostro y se dio la vuelta.
-Mañana harás lo mismo. Lo harás solo desde ahora.
Luego entro a la casa y me dejo otra vez tirado en la calle. Se está siendo costumbre hoy en día.
Bueno, siendo sincero, esta es la segunda vez que me esfuerzo a más no poder. Pero esta vez era por razones diferentes. Desde ahora supongo que esto será mi día a día. Si puedo hacer esto más rápido y sin caer, entonces podre decir que estoy mejorando. Aunque sea un poco.
Cuando estaba a punto de irme a dar una ducha, alguien se acercaba.
-¿…? ¿Ryuji, Porque estás tirado hay en el suelo?
-¿…? Ah.
Al levantar la mirada vi que era Risa, que al parecer estaba llegando de la escuela.
Tenía una cara que parecía estar preocupada. Y no la culpo, si encontrara a alguien que conociera en el estado en el que estoy también tendría mis preguntas.
Últimamente, ella siempre me encuentra de esta forma.
-¿Qué hiciste…? Te ves muy mal.
Acercándose más a mí, no deja de darme preguntas.
… En serio.
No pude evitar reírme por alguna razón. Y solo pude darle la mejor sonrisa que tengo.
-Solo fui a correr un poco.
<- - - - - - - - - ->
Al día siguiente de esa caminata eterna…
Me encontraba corriendo de nuevo los 10 km que hice ayer. Aún tenía dificultades para mantener la constancia en mis pasos, mi respiración seguía siendo pesada al igual que mi cuerpo. Pero aun así podía hacerlo esta vez sin colapsar.
Mi abuelo dijo que tenía algo importante que tenía que decirme. Así que debería de apresurarme.
Minutos después, estaba llegando a la casa cansado y como siempre mi abuelo estaba esperándome en la entrada.
-Veo que poco a poco te estás acostumbrando.
-Sí, tengo problemas para controlar mi aliento y la cabeza no me deja de doler. Pero fuera de eso, estoy bien.
Mi abuelo me arrojo una botella con agua y de inmediato comencé a tomar. Sentía que la vida volvió a mi cuerpo.
-¿Es todo por hoy?
-No exactamente, Ry, desde ahora harás este recorrido todos los días. Mientras más vayas acostumbrándote, aumentaremos la rutina.
¿Correr todos los días?, Algo no está bien…
-¿Eso es todo lo que haré? ¿Solo correr?
Le formulo esas preguntas a mi abuelo por la simple razón de la simpleza de esto. Entiendo que por ahora correr se me dificulta, pero más o menos estoy mejorando. No es del todo fácil, pero tampoco es difícil.
Cuando estaba un poco dudoso de todo esto, el únicamente saco un pedazo de papel de su bolsillo junto con una sonrisa siniestra.
-Por supuesto que no solo vas a correr, solo te decía que correr sería lo estándar de tu entrenamiento. También lo alternarás con esto.
Con la misma sonrisa y aire siniestro me paso el papel arrugado que tenía.
Al borde de la hoja tenía escrito "Si no puedo hacer esto, mejor me rindo".
…Ignorare eso por ahora. Mientras que la abría para ver su contenido, pues…
Solo digamos que la sangre se drenó de mi cara.
-¿Q-Que es esto? ¡¿En serio?!
Era una lista completa que llenaba toda la hoja de papel.
Repleta de ejercicios básicos que conozco por libros y clases de educación física. Pero la cantidad de repeticiones no eran para reírse. Además de que había algunos que no conocía.
¿Tengo que hacer todo esto?
-Escucha, los ejercicios están determinados para que tu cuerpo se desarrolle y se adapte a cualquier situación, y por supuesto, van a ir aumentando con el tiempo. Además de que harás ejercicios diferentes todos los días para variar.
…Entonces, no solo tengo variedad para entrenar. Si no que a la vez aumentaran al mismo tiempo de mi crecimiento. Al menos eso entendí.
Pero tengo una duda, y una muy importante.
-¿Tendré días de descanso?
-Claro. Fines de semana, cumpleaños, días festivos. Solo correrás el doble de lo que haces comúnmente esos días, y no harás más nada. ¿Entendiste?
-Sí, entendí que no tengo días de descanso.
Me encontraba absorto por la situación y lo que venía a continuación.
Pero, por alguna razón, no pude evitar reírme de la emoción. Y de lo agradecido de saber que estoy siendo tomado en serio.
-Entonces, otra vez. ¿Te vas a rendir?
… ¿Seguirá con eso?, Muy bien.
-¡Ah, Claro que no lo haré! ¡Deja decir eso, ¿No te cansas?!
Las cosas se pusieron algo animadas con mis escándalos.
Después de todo, si no puedo reírme de todo esto.
¿Cómo podría llegar a lograrlo?