Viento… Calma… Una brisa pasajera ondulaba mis ropas y mi bufanda en el aire, con un gran color verde brillante y luz de sol que me hace derramar pequeñas gotas de sudor por mi frente, en medio de una pradera inmensa mientras me acercaba a cordilleras en la distancia
Que hay de nuevo, soy Archer, y por ahora me encuentro en medio de las pedreras norte de Libria, una zona pacifica en donde mayormente te encontraras con slimes comunes y corrientes, acompañados de ratas gigantes y otros monstruos como serpientes de escama rocosa. El verde se extiende hasta donde la vista no alcanza, hasta que se topa con varias cordilleras que bloquean el horizonte, según el mapa, el pueblo al que me dirijo esta después de todas esas montañas, no hay mucha civilización en este zona ya que debido a la proximidad del bosque de Kalisios y la nula cantidad de cosas por recolectar lo hace un lugar muy poco atractivo para hacer un pueblo…
El camino que transito parece infinito, ha pasado un día desde que estoy fuera de aquel bosque brumoso y aun la memoria de mi despedida de esos amigos que hice ahí vive en mi memoria vívidamente, sin embargo, tengo muchas cosas que contarte aunque no haya pasado bastante tiempo…
Primero que nada, he estudiado el libro a fondo la noche anterior…
Aún hay cosas que descifrar debido a que hay varias hojas con notas que poseen un idioma que desconozco… Aunque lo que sí he descifrado son varios hechizos que trae, aunque para esto tengo que decirles algo de teoría…
La magia de Laurum se divide en clases, y cada una son de una magnitud diferente a la anterior, en total hay cinco clases, por lo que hay varios hechizos con diferentes intensidades, claramente esto hace que proporcional al rango consumas maná en mayor cantidad
Piro, Pira, Pirapa, Piraka y Piraza. Este es un ejemplo de escala en rango, se pueden diferenciar debido al enunciado en el final, cada rango tiene sus propios recitales y propios hechizos, para ser un mago tienes que ser versátil a la hora de aprender estos tipos de cosas para tener un repertorio grande…
El libro contenía varios elementos básicos, pero también venía con hechizos muy poderosos de cada rango, incluyendo la clase Piro, aunque esto sean buenas noticias, definitivamente no es algo que sea del todo útil… Por lo que pasare al siguiente punto
La espada…
La noche anterior monté un campamento cerca del rio que pasaba por la pradera, la luna y las estrellas, acompañado de la luz de la fogata, iluminaban la oscuridad de la noche, la calma que se sentía era perfecta para poder intentar probar un poco su poder
Anteriormente esta espada herrumbrosa demostró ser más que eso, aún hay mucho misterio detrás de ella y su habilidad de "Evolución"… Probé el usarla otra vez y definitivamente lo logre…
Posé mi espada en mi hombro derecho, con la cintura ligeramente baja, al hacer aquel gesto sentía como el mana y un brillo tenue de color rojo se generaba, y el detonante para que no se active de manera accidental son aquellas palabras
—Canalización: Fuego— La espada inmediatamente se envolvió en flamas, y en tan solo momentos su forma cambió a la de aquella vez, su filo era impecable con un largo considerable, y totalmente manejable con una sola mano… Sentía como el maná de aquella espada se distribuía por mi cuerpo, como si un calor se impregnara dentro de mis entrañas…
Habian varias cosas que quería intentar, el poder que tenía en mis manos escapaba mi comprensión, ¿cuál era el límite para estas llamas?
Sentí algo curioso al usarla… Nunca en mi vida había usado un arma como esta… Sin embargo… Sabía como usarla… Muy tontamente… Pero había algo en mi mente que me decía que esa era la forma… Como si conocimientos ajenos a mi fluyeran por mi cabeza… ¿O tal vez aquel bailecito que hice con aquel caballero en llamas sirvió de algo? Lo único que podía reconocer es que es un misterio para mí…
La espada funcionaba de manera sencilla, es como si ella respondiera a lo que mi alma quiere, puedo lanzar tajos normalmente, y si así lo deseo, puedo agregar llamas a los ataques...
—Oh dioses dragón, quemen lo que hay enfrente con su aliento, Piro— Después de recitar esas palabras, una bola de fuego del tamaño de una pelota fue lanzada hacia el cielo estrellado.
Puedo usar hechizos al usar esta arma, pero aun cuando yo lo intentase varias veces, no podía usar magia de otros tipos más que del tipo Piro…
Intenté hacer ese truco que hacía con mis pies en el combate contra el Treant, canalicé maná en mis pies ¡Y para mi gran…! Infortunio… Si… Funciono… Aunque no considerare como funcionar cuando terminé estrellándome contra el rio… Y quede empapado por completo…
Otro punto a agregar es que no puedo desactivar a voluntad la espada… Necesito aprender a hacerlo debido a lo siguiente…
Después de un rato, la espada volvió a la normalidad, sin embargo un cansancio inimaginable quedó en mi cuerpo, caí al suelo, apenas sosteniéndome con mis cuatro extremidades, hasta la menor de las acciones requería una cantidad titánica de esfuerzo…
Un minuto
Eso es todo lo que dura aquel poder… Y no es como que lo pueda repetir, tal vez solo lo pueda usar una vez al día… Por lo tanto, he creado la primera regla para usar su poder
Solo activarla cuando la situación sea absolutamente critica
Ahora mi espada no es completamente inútil cuando no está transformada, había filo… Muy poco si soy sincero… Sin embargo esto puede ayudar bastante, al menos podre cortar cosas aunque requieran mucho esfuerzo…
El sol estaba en su punto más alto, movia rápidamente con mi mano derecha mi bufanda, tratando de generar aire para quitar este calor insoportable, el calor de las llamas era peor pero esto es más como una prueba para mi mente… Para mi suerte, había un árbol de manzanas cerca del camino, una sonrisa se dibujó inmediatamente en mi rostro, aceleré el paso hasta llegar a aquella fresca sombra
—Fiu… No estoy acostumbrado a esto…— Me desplomé una vez llegando a la sombra, desde que despierto hasta que me duermo camino y camino, atravesando cerros y altiplanos, mis pies parecen que quieren explotar, sin embargo después de este descanso, tengo que seguir mi camino…
—Vamos a ver… Debería estar por…— Mientras me aconchaba en el tronco del árbol, saqué de mi bolsa el mapa de Libria, ya he caminado demasiado a través de la pradera y las cordilleras se ven cada vez más cerca, la demografía era muy poco descriptiva… O tal vez soy malo interpretando mapas, según esto, el camino que recorro se extiende hasta las cuevas de aquella cordillera, luego de eso sigue un bosquecillo y a decenas de "drakes" debería de encontrarse esta ciudad llamada CalmWind…
Una ciudad eh… Sé que mi pueblo a pesar de lo animado que era, Drakenshiel fue solo un cacho de tierra entre lo gigantesco que es Libria, me pregunto cómo será el bullicio de un lugar tan grande…
Bostecé ligeramente, la brisa pasaba por el lugar, dando un sentimiento fresco que me resguardaba del calor, mientras que el sonido del pasto y las hojas del árbol resonaban suavemente…
𝘏𝘦 𝘥𝘦 𝘥𝘦𝘤𝘪𝘳 𝘲𝘶𝘦 𝘤𝘢𝘪́ 𝘥𝘰𝘳𝘮𝘪𝘥𝘰 𝘢𝘭 𝘪𝘯𝘴𝘵𝘢𝘯𝘵𝘦…
Medio día… Han pasado dos días desde que dejé Kalisios atrás, y ahora me encuentro este punto crítico en mi viaje… Aquellas lejanas cordilleras ahora estaban enfrente de mí, con un intrínseco sistema de acantilados por el cual el camino pasaba, al caminar se podían escuchar el sonido de las rocas y tierra moverse al pisarlas, podía escuchar como el canto de un ave hacía eco a través del lugar, a pesar de lo desolado que se veía, tal parece ser que no estoy solo al pasar por estos lugares…
A partir de aquí, no hay nada que conozca, me zambullí en lo más profundo de lo desconocido, aferrándome fuertemente al mango de mi espada
—Ok… Me debes de estar jodiendo…— Dije casi como un suspiro, poniendo mi mano en mi frente, el camino se separaba en dos… No importa como lo viera, ambos eran idénticos, pero esto solo significa un cincuenta por ciento de probabilidad de que una sea la correcta y la otra sea una muerte segura…
—De escama a escama… Elige al azar, díganme dragones cual mi destino será— mi dedo apuntaba al son de la canción hacia cada uno de los lados, hasta que se detuvo con esa última palabra, haciéndome elegir en el camino izquierdo, el silencio inundaba el lugar mientras observaba con detenimiento aquel corredor sin fin, tragué mi saliva fuertemente y desenfunde mi espada, sosteniéndola firmemente con mi mano derecha
—Bueno… Solo se vive una vez, ¿no?— Mientras una gota de sudor frío recorría mi rostro, me dispuse a caminar por aquel sendero… Mientras mis pasos generaban un eco a través del lugar…
El tiempo parecía infinito, el sol no cedía, tal vez es el aburrimiento y el calor que me están jugando una broma…
La roca de los riscos empezaba a tonarse de un color marrón a un color rojizo… Dudo mucho que sea un color natural… Ya que un olor raro se sentía por el lugar… Tal vez debería dar media vuelta, pero el sol ya estaba empezando a esconderse… Las paredes empezaron a reducirse y el camino desemboco en un claro en medio de tantos pasillos de piedra, en el que había un manantial en medio del todo, y un par de árboles en los alrededores
—Este lugar ciertamente es bonito…— Una brisa tranquila inundaba el lugar, y el sonido del agua del manantial hacia que quisiera caer dormido, inmediatamente esos pensamientos pasaron por mi mente, me golpee mis dos mejillas con las palmas de mis manos con una gran fuerza
—¡NO! Si me terminaran comiendo en mi primer viaje sería muy vergonzoso— Después de aquellas palabras me adentré en el lugar, saque de mi bolsa mi cantimplora, quitándole el corcho y empezando a llenarla con el agua del manantial, el olor que venía de ella era muy refrescante…
Después de un rato decidí revisar el lugar, no había señales de animales o cosas parecidas, ¿tal vez no llegaban aquí? O es que de plano no hay ningún monstruo en estos riscos… Empecé a recoger ramas y varias piedras que estaban desperdigadas por el lugar, y las empecé a colocar alrededor del lugar, terminando cerca de uno de los arboles al fondo del sitio
—Si algo trata de acercarse, no la tendrá muy fácil para no hacer ruido— Me limpie el sudor de mi frente con mi brazo e inmediatamente después solté un suspiro…
El silencio inundaba el lugar, la noche era fría y desolada, me hace preguntarme el cómo estarán esos slimes, sin embargo mi imaginación corría salvajemente al pensar de nuevo que en unos días llegare a CalmWind… ¿Cómo será? ¿Cuánta gente habrá? Tengo un mundo aun por recorrer si quiero encontrar a mis padres… O a Raciel… O tal vez a todos los demás que escaparon en aquella puerta extraña…
Saque de mi bolso aquel libro, siempre que lo leo, encuentro algo nuevo… Sin embargo este hechizo me inquieta… El ritual de corrupción…
¿Que buscan esos tipos? Volviendo un ser así en un monstruo… ¿Tal vez se referían a esto cuando aquel hombre dijo "premios gordos"…?
Cerré de un instante el grimorio, dejándolo de lado… No… No debo de pensar en ello… Ellos deben de estar bien… ¿No…? Jusean… Raciel… No quiero que la próxima vez que los vea sea de… Esa… Forma…
Y así mientras la luna iluminaba mi noche… Mis ojos cedieron al cansancio…