Tomé las llaves del auto y llamé a los chicos y a Harold, abrí el maletero y saqué algunas armas hechas del mismo material de los androides, hechas con partes de ellos, ya que eran las únicas que podrían dañar a estas criaturas, un par de espadas, un rifle y un hacha, les dí las espadas al chico mayor y el rifle a Harold, mientras guardaba el hacha en mi espalda, entonces uno de los chicos me refutó "¿Que hay de nosotros, acaso no iremos a la batalla?" Y seguido el más pequeño nos gritó "¡Yo quiero pelear también!" Yo tan sólo solté la risa, entonces el mayor nos dijo "Ellos no pueden venir, porque así se lo prometí a mamá, prometí que los cuidaría y no los alejaría de mi lado a no ser que fuese una situación peligrosa, y definitivamente esta lo es" entonces el adoptado empezó a gritar y a enojarse, pero intenté que pudiera entrar en razón diciéndole que esto sería muy peligroso para niños como ellos, sin embargo no dejaba de insistir, hasta que su hermano mayor le dió un golpe en su cabeza, no con mucha fuerza, sólo la necesaria para que entrara en razón, aunque lo que provocó fue solamente que se enojara más y Jamie llegó a mientras por dentro pensaba "Definitivamente alguno de nosotros va a morir" pero traté de ocultar ese pensar ante los niños, entonces Mark, bueno, creo que ese era su nombre, el del chico mayor me dijo "Sí, el señor Mason tiene razón, debemos de pensar con la cabeza fría, porque creo que realmente me está afectando mi miedo, ya que mi mamá... Ella ya no está... Creo que realmente la necesito" Mientras veía como las lágrimas salían de sus ojos, pero no las lágrimas de niño llorón, no, eran lágrimas de hombre, y ví a Harold llorando, pero esas lágrimas eran de señora viendo el final de una telenovela, más enfermizas que las de un niño llorón, entonces sólo volví a la casa antes de que cometiera una estupidez.
Estaba con el teléfono en la mano, las palabras de ese chico me conmovieron, llamé a mi madre, ya que no hablaba con ella desde hace ya un buen tiempo, pero en ese momento llegó uno de los chicos, el más pequeño, me dijo "Señor Mason, ¿Con quien estás hablando?" Normalmente le daría un golpe y le diría que no fuese tan metiche, pero ese niño no tenía ni siquiera 5 años y esa era una pregunta inocente de un niño que no comprendía la situación por la cual pasaba, entonces le respondí con otra pregunta "¿Cuantos años tienes?" Y el me dijo "tengo 3" pero con su mano me indicó tener 4 y me dió un poco de risa, entonces me despedí de mi madre y le dije al niño "¿Como te llamas pequeñin?" Y el me dijo "Lenny" y está vez le pregunté "¿Sabes lo que pasó con tu madre?" Y el soltó el llanto y me dijo "Mamá... Mamá se fue... Y ya no volverá, nunca más..." Mientras lloraba, entonces Jamie llegó y me regaño por preguntarle eso al niño.
Después de comer, les explicaba como podríamos acabar con los androides a Harold y Mark, entonces Harold me interrumpió diciendo "Hace varios años registramos un ataque de tres androides, pero esto es algo sin precedentes, tantos androides juntos, realmente es temible, y no podemos esperar que llegue la ayuda de la O.R.A porque en cuanto lleguen, ya habrán conquistado media ciudad, debemos actuar nosotros, y ya" y el chico añadió "Creo que debemos de ir ahora mismo, si esperamos, las consecuencias pueden ser más devastadoras, además de que Tom y Lenny no me dejaran irme, ellos vendrán de una u otra forma, debemos actuar rápido antes de que lo sepan" y les dije "Desconozco si los seres estos descansarán en algún momento, pero si no lo hacen, deben estar destruyendo todo en estos momentos, pero nuestras heridas no están del todo sanas" pero Harold añadió "Si perdemos tiempo, cientos de personas podrían pagar las consecuencias, entonces le dije al chico que le diera una espada a Harold y le pasara el rifle, así todos podrían matar a los androides internamente, usando sus debilidades de fábrica ya que las posibilidades de que mueran de un balazo serían menores entonces entré a la casa y le dí un beso a Jamie, diciéndole "Sabes lo mucho que te amo cierto, eres la mayor bendición que pude recibir, y si algún día me pasa algo, no llores sólo busca a mi madre y dile que me perdone por ser tan estúpido, y para tí no tendré nada, ya que lo único que te doy es mi amor de la manera más sincera que puedo hacerlo" la besé, entonces busqué a Mark y estaba con los chicos, y Harold nos esperaba afuera hablando por teléfono, de seguro también estaba despidiéndose de su familia, no lo sé.
Mientras caminábamos, le pregunté al joven "Niño ¿En el pueblo no habían ocurrido acontecimientos extraños que pudiesen dar sospechas de los androides?" Y el me respondió "De hecho sí, hace ya bastante tiempo, empezaron a llegar muchas familias, este era un poblado pequeño, pero desde hace un tiempo, las personas que habitaban aquí empezaron a aumentar extrañamente... Recuerdo decir a mis amigos sobre conspiraciones o cosas por el estilo, pero todo eso sonaba demasiado infantil, todo eso lo dejé de lado sin más, no creí que podría ser cierto, aunque hoy veo que lo que creí infantil o muy estúpido en su momento pasó a ser una pesadilla que habitará en mí, por siempre" sonaba muy dolido, con sed de venganza, lo cual lo hacía excelente opción para acompañarnos.
En ese momento llegamos a visualizar el poblado, pero este se veía como un infierno, las llamas se levantaban a varios metros de altura, sobre las edificaciones y casas, posiblemente levantando las cenizas de muchas personas, bueno, las que quedaban de carne y hueso.
Decidimos correr hacia allá, parecía una pesadilla que a cualquier persona dejaría en shock, las llamas, combinadas con la sangre derramada en el suelo, e incluso partes humanas con moscas y demás insectos dentro.
Mark apreciaba la matanza, mientras yo podía ver la impotencia le invadía por dentro, las lágrimas bajaban por su cara y en sus ojos era evidente esa sed de sangre, la cual pude sentir en mí muchas veces, tan sólo quería acabar con todo lo que había frente a mí, una sensación casi diabólica, pero decidí interceder en él "Tranquilo amigo, juntos acabaremos con esto..." Pero el me interrumpió diciendo "¿Crees que alguno de nosotros vaya a morir?" Fue en ese momento que pude ver que dentro de esa sed de sangre, había un fuerte miedo a la muerte, y no es para menos si vió a su madre fallecer horas antes, por lo que le respondí con la mayor sinceridad que podía "Cualquiera de nosotros tenemos muchas posibilidades de caer acá, pero lo más importante de todo es que si llegase a pasar, que caigamos dignamente; si morimos, no lo haremos en vano, porque hasta nuestro último aliento lo utilizaremos en tratar de salvar este lugar pues este pueblo está completamente hecho añicos, pero podemos hacer algo por los de alrededor, si morimos, lo haremos como héroes ¿Entiendes?" Y me dijo "Creo que tú también jugaste muchos videojuegos y viste muchas películas de acción en tu infancia ¿Cierto?" Y sólo le contesté "Talvez" y dí un paso al frente, tan sólo quería acabar con esas despreciables bestias metálicas, pero ví que el chico corrió frente a mí y se abalanzó sobre los androides, con un coraje y una temible sed de venganza en sus ojos, entonces corrí a ayudarle, ya que atacar así era casi un suicidio y si no le socorría podríamos terminar muy mal.
Me sorprendió bastante que el chico utilizaba muy bien la espada, de una manera casi instintiva, pero solamente eso, no lo haría capaz de salvarse, entonces me acerqué y ataqué a un par de androides que le estaban sobrando al chico, entonces decidí preguntarle "Oye chico ¿Donde aprendiste a usar tan bien la espada?" Y él me dijo "No lo sé, creo que viendo Highlander, junto al instinto de supervivencia, aunque talvez aprendí algo viendo animes de acción también" sólo me reí, después contesté "Eso temía escuchar" y seguimos matando a esos malditos con relativa facilidad, ya que eran bastante menos ágiles que los que poseen algún rasgo característico, un arma o alguna habilidad, estos tenían apariencia completamente humana y su estructura era más débil que la de los anteriores, pero aún así lograban resistir con relativa facilidad el calor; las llamas se seguían levantando y el infierno se seguía desatando, Harold se defendía con grandes dificultades, entonces corrimos donde él y le ayudamos, talvez no fue la mejor estrategia, el reunirnos con tantos y tanto espacio que debíamos limpiar, pero esa era una de las pocas esperanzas de poder salir vivos de allí, mientras la calor aumentaba sin límite, seguimos defendiendo al rostizado lugar que fue un pueblo en algún momento, entonces fue ahí cuando encontramos al androide original, al que creo que era el líder del batallón que quería ya había insinerado el pueblo y posiblemente estaban apunto de acabar con otros más, en ese momento el chico dijo "Maldita sea, un nivel 2" y creo que ese fue el mejor nombre que pudo encontrar en medio de la batalla a pesar de ser la clase de androide con los que he acabado todo este tiempo atrás, aunque presentía que el nombre debió de lo sacó de algún videojuego, pero eso no me importa, si es un maldito friki el chico ese o no, no es de mi interés la verdad.
Pero lo que sí sabía es que teníamos un gran problema en frente, más que el androide, ya que su habilidad era escupir fuego, el gran problema eran los demás cientos de androides, entonces decidí decirle al chico que se encargara del androide nivel 2 y yo me encargaría de los demás, él dió un paso al frente y me dijo "Más te vale que me cuides la espalda" y le respondí "Probablemente después de cada ataque con fuego, tenga que esperar unos segundos para cargar de nuevo, utiliza esos segundos para atacar, y tranquilo, si alguien te ataca por la espalda, no será un androide" mientras reía, obviamente no tenía intención de atacar al joven, pero siempre es divertido provocar inseguridad en las personas. Y hablando de inseguridad, en ese momento perdimos de vista a Harold.
El chico corrió con su espada en la mano y se trató de acercar, pero el androide le lanzó una llamarada, me pregunto si su creador no le equipo un extinguidor en algún lado, por si trataba de incendiar a alguien, entonces le pregunté al chico lo había podido evadir, más que nada para saber si aún estaba vivo, pero al parecer logró evadir las llamas y me dijo "Por muy poco" y realmente dudo que logre vencerlo sin mi ayuda, después de todo soy el más experimentado en este ámbito de matar a robot asesinos, entonces oí al chico gritar "Oye Mason ¿No tienes un escudo de este mismo material en el maletero de tu auto?" Entonces le contesté "Tengo un plato de este material, era exelente para cocinar y comer mi almuerzo caliente ¿Te sirve?" Pero no sé si me respondió, en ese momento tuve más dificultades de las habituales con los androides, esos malditos seguían apareciendo en incontables cantidades, creo que una gran cantidad de la población regional que eran androides en realidad, estaban en una reunión en el pueblo, entre mi hacha y mis pies, lograba apenas quitarlos de encima, en un momento, uno trató de escapar y atacar al chico a mis espaldas, me lancé a atacarlo y que no pudiese tocar al chico, pero apenas lo logré, terminando en el suelo y siendo casi cubierto con humanos metálicos con sobre peso sobre mí, veía al chico muy cansado y débil, todo se veía muy mal, todo, pero en ese momento escuché un disparo y ví que el robot con que batallaba el chico tuvo una pequeña explosión en su boca, por donde expulsaba las llamas, entonces perdió su habilidad, el chico lo partió por su cabeza y Harold llegó atrás de mí y mató a varios de los androides que tenía encima, yo acabé con el resto y le pregunté "¿Que fue eso?" A lo que me respondió "Una muestra de puntería nada más" entonces corrimos junto al chico a un lugar seguro, necesitábamos reponer energías.
Harold abrió su mochila y esta estaba llena de comida, entonces recargamos rápidamente las energías y él nos dijo "Tranquilos, aún faltan sorpresas" y nos cubrió para poder comer, al terminar nos dijo "Saben, aún tenemos una posibilidad, aunque será muy arriesgado, es probable que acabemos con toda la vida de la ciudad, cualquier planta o animal morirá, hasta persona si aún queda, sólo debemos de recolectar las 3 esferas electromagnéticas que aún están entre la ciudad, en el centro de ella, donde tratamos de acabar con el androide en primera instancia, las demás las recolecté antes de salvar a estos chicos" entonces les contesté "Ustedes encargarsen de cubrirme y yo lo haré, las traeré" y así lo acordamos, dejamos las 5 que ya tenían en un lugar seguro y fuimos a tratar de salir vivo una vez más.
En el proceso matamos a varios androides, pero tratamos de no llamar su atención, lo cual no estuvimos ni cerca de conseguir, llegamos a visualizar el lugar, sólo hacía falta llegar allí, les grité "Voy a correr, Mark, ven conmigo, quédate atrás de mi y Harold, acércate a mí lentamente, acabando con los androides con las balas que nos quedan, en cuanto se acaben, te acercas a Mark y se acomodan para poder cubrir todo el espacio posible" y Mark añadió "Tranquilo Terminator, ganaremos todo el tiempo que podamos" y corrí a toda velocidad, la cual no llegó a ser mucha por mi actual condición; logré ubicar el centro, entonces busqué los puntos posibles donde podrían estar, pero lo desagradable eran que estaban bajo los cadáveres putrefactos de los compañeros de Harold, escarbé entre intestinos, riñones, hígados, incluso dos cerebros, y tuve el corazón de alguien en mi mano, lo cual no se sintió tan mal, después de todo en mi momento, era una de mis maneras preferidas de acabar con las personas a las cuales asesinanaba, logré encontrar una nada más, quedaban tres cadáveres.
Fue entonces cuando ví a Harold correr hacia mí, las balas duraron menos de un par de minutos, talvez fueron diez o veinte, no lo sé, no tenía reloj, bueno, si hubiese tenido, estaría lleno de sangre de distintas clases, entonces la hora no creo que se vería muy bien, este le dió su espada a Mark y él se encargó de protegernos, Harold me dijo "Sin la pistola, seré un estorbo nada más, déjame buscar las esferas electromagnéticas a mí, tu cubre mi espalda con el hacha y yo hago el resto" le traté de ofrecer el hacha pero él insistió, que el físicamente era menos que una escoria, que su único fuerte era la puntería, entonces decidí acceder, ya que él no lo haría, además de que en el fondo sabía que ese gordo no podría matar a un par de androides con mi hacha, entonces fuí e hice un festín de aceite junto con el chico, Harold logró encontrar una más y la lanzó hacia mí, mientras nuestro cansancio seguía aumentando, la velocidad de Harold era cada vez menor, pero al menos olvidó que lo que estaba quitando de encima eran los órganos de sus amigos, después de vomitar unas siete veces, eso fue un avance.
El chico cayó herido al suelo y me encargué de todos yo, pero eran muchos aún, eran como un ejercicio de zombies de película, entonces el gordo nos gritó "¡La tengo! ¡Tómala y corran! Yo de todos modos debí de morir desde un principio junto a mis compañeros" le dije que no lo haría, aunque sabía que él diría que lo hiciéramos y lo terminariamos haciendo, si por mi fuera le hubiese dicho que sí desde un principio, pero así le daría más dramatismo, era como cumplir un sueño al chico, entonces decidí tomarlo y correr, dejé una katana con él y me monté al joven en mis hombros, entonces corrí aún más rápido, o eso creí, de hecho creo que duré más del doble de tiempo, pero ese no es el punto, al llegar, dejé al chico en el suelo y me senté, entonces él me preguntó muy enojado "¿!Qué hiciste!?" Y acto seguido, me envió un puñetazo con las fuerzas que le quedaban en mi mejilla; no hizo falta siquiera preguntar a qué se refería, era sobre lo de Harold claramente, entonces le contesté "Creí que lo entendías niño, pero veo que no; esto es la guerra, los sacrificios con casi inevitables, él sabía que debía de quedar atrás, porque así nosotros podremos acabar con nuestro objetivo, ya tenemos las esferas, ahora debemos de acabar con esto en su nombre" Y el joven soltó una lágrima mientras veía hacía el pueblo arder.