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Chapter 16 - Sanado por una Belleza

En la sala donde se encontraban los mayores se podía sentir una densa tensión y la Anciana de las Túnicas Verdes sudaba fríamente al darse cuenta que su discípula primero había causado que ese joven quedará herido por entrometerse en los asuntos de los demás y después de no controlar sus emociones impulsivas y lo atacó furtivamente reabriendo grandes heridas que él tenía a medio curar.

Cuando todos los presentes se dieron cuenta el Anciano de las Nubes comenzó a emitir una presión asesina y los observó a todos los demás con una mirada que lo que causó que se ahogarán y casi perdieran el conocimiento, sin decir una sola palabra un vapor comenzó a rodear su cuerpo y una leve y casi transparente nube apareció a sus pies mientras una velocidad que casi no podía ser vista por los ojos comenzaba avanzar hacia donde los jóvenes se encontraban reunidos.

Los seis mayores restantes que eran los representantes de las aldeas y uno que era uno de los grandes ancianos de la Academia de las Escamas Blancas suspiraron aliviados cuando se dieron cuenta que estuvieron a punto de perder la vida en ese instante a manos del anciano que todos conocían y es muy peligroso de tratar. Y el Hombre de la Caravana de Calavera y qué era el representante de la Aldea del Caracol Cyan dijo para cortar el silencio.

- Ese joven inclusive gravemente herido logró retener la energía de los extraños relámpago que desprendió su compañero.

Y una mujer que apenas había interactuado que llevaba ropas oscuras y ojos saltones que era la representante de la Aldea de las Rocas Tenebrosas dijo totalmente incrédula.

- Además de eso no se dieron cuenta que el joven de cabellos electrificados desprende naturalmente esos relámpagos del cuerpo sin utilizar ninguna habilidad. Es claramente un verdadero Cuerpo Elemental de Relámpagos.

Al escuchar esas palabras los otros presentes comenzaron a razonar esas palabras eran reales y un hombre que su rostro se encontraba con bastante cicatrices hablo seriamente.

- Con razón por más de que se encuentra en el Primer Nivel del Alma de Energía puede intercambiar sus golpes con la princesa Sofía de la Aldea de las Espadas de Luz y además de todo eso lo que más me extraña es que sus relámpagos son bastante más poderosos de lo que debería, eso significa que el Anciano de las Nubes ha hecho un gran trabajo en entrenarlos a lo largo de los años.

Ese hombre de rostro de cicatrices era el representante del Pabellon de los Relampagos dentro de la academia y hablaba por su amplio conocimiento sobre el tema.

- Ese joven llamado Baltazar es muy conocido en la aldea por ser un desvergonzado y mujeriego inclusive siempre corrió el comentario de que nunca fue posible para el cultivar, pero la gran herida en su pecho fue causada por qué se interpuso frente a la habilidad de el joven Rafael de mi aldea, recomendaría que no lo subestimen ya que claramente no es simple para nada.

Todos se sorprendieron de las palabras del Hombre de los Ojos Siniestros de la Aldea Flor de Agua ya que era quien claramente tenía mejor información sobre los habitantes de la Aldea de las Nubes Tormentosasy en ese momento estaba explicando de dónde había surgido la primera herida del joven harapiento. Un anciano de cabellos blancos y roca ropas blancas que era el representante de la academia la reunión de mayores la dirección en la que se había marchado el anciano de las nubes mientras decía.

- Claramente el joven harapiento no es nada normal ya que para soportar una habilidad de frente del Genio Raphael que aunque no sea uno de los diez mejores de la academia su nivel de habilidad es bastante alto como para que alguien pudiera enfrentar su golpe de frente y está claro que él no es nada débil ya que el joven del Cuerpo Elemental de Relámpagos obedece todas y cada una de sus órdenes.

Cuando escucharon esas palabras se dieron cuenta que era real eso dicho por el anciano de la academia de las escamas blancas ya que el joven Frederick parecía seguir todas y cada una de las órdenes de joven harapientos y ahí todos ellos se pusieron extremadamente cauteloso.

- Sólo espero que el Anciano de las Nubes calme su ira sino no habrá quién que pueda salvar esta academia.

Y en ese momento tanto a la Anciana de las Túnicas Verdes como el Hombre de la Espada Dorada cruzaron sus miradas ellos no habían dicho ni una sola palabra, pero se dieron cuenta que habían ofendido alguien que podía hacerles frente a sus genio y aunque no sabían si realmente pudiera enfrentar en una batalla real a sus genios no era tan simple como parecía ya que despertaba extrañas emociones en el Anciano de las Nubes, emociones que ni siquiera la familia de sangre de ese anciano lograba mover.

Mientras esos mayores observaban la dirección en la que se había ido el Anciano de las Nubes, permanecían nerviosos por lo que acontecerá a continuación y cerca de donde se estaba realizando la reunión el anciano de las nubes se dio cuenta que no podía ingresar a través de la barrera que había sido levantada en esa zona con la función de que ningún vez mayores interviniera,sabía que podía destruirla pero no quería causar un desastre en plena prueba por lo que comenzó a calmar sus emociones y con un grito que resonó en el aire lanzó un pequeño paquete que la había entregado a la pequeña Illya.

- Frederick!.

En ese momento todos los presentes alzaron su mirada cuando observaron al anciano frente a ellos y comenzaron a sentir un miedo enorme pero recordaron la barrera lo que los hizo sentir aliviados,pero cerraron como un pequeño paquete volaba rápidamente en dirección hacia dónde se encontraba el joven Baltazar.

El joven Frederick recordó que ese paquete le fue entregado a su maestro por la hija de su hermano Baltazar y cuando fuerza su mano para tomarlo se sorprende al darse cuenta que una sombra ya la había tomado en el aire y se abalanzaba Baltasar.

Era la joven de la Aldea de los Árboles Santos, la tímida Livia que rápidamente tras tomar el paquete se sorprendió al darse cuenta que dentro de él se encontraba un pergamino que tenía escrito un extraño diagrama un pequeño frasco con un líquido viscoso verde. El joven Baltazar todavía medio consciente se sorprendió de la gran agilidad de esa torpe joven y con su voz temblorosa dijo.

- Coloca el pergamino en mi pecho y las heridas se detendrán, luego me encargaré de aplicar el ungüento en las heridas. 

No podía sentir ninguna clase de emociones en el tono de voz de este joven lo cual la asustó a ella y todos los presentes. Pero sin tardar medio tropezando se cayó arriba del cuerpo del joven Baltazar pero en ese momento no se preocupó por eso sino de aplicar el pergamino lo cual instantáneamente comenzó a hacer que se detuviera el sangrado de las heridas.

Los mayores que se encontraban observando todo desde la sala de la reunión se sorprendieron al darse cuenta que ese pergamino era tan efectivo y querían saber de dónde había salido, pero lo sorprendió más aún cuando comenzaron a ver cómo él se pasaba el ungüento en las heridas y la redacción de las mismas eran varias veces más potente qué el pergamino.

La anciana de las Túnicas Verdes comenzó a respirar tranquilamente ya que la acción de su discípula significaba una clase de redención contra la herida que le había causado al joven de los cabellos blancos y se sintió mucho tranquilidad, aunque la sorprendió darse cuenta de cómo su discípula torpe se había desenvuelto en esa situación.

En ese momento el Anciano de las Nubes comenzó a volver a la sala de la reunión ya tranquilo al darse cuenta que el joven Baltazar había salido del peligro, pero le preocupaba el pensar de que ya no podría continuar con las pruebas del examen debido a la gravedad de sus heridas.

El joven Frederick se ofreció a pasar el ungüento en las heridas de su hermano pero él mismo se negó ya que le dijo que no era necesario y que lo primordial era que consolidar su cuerpo para prevenir que volvieran a desprenderse los rayos instintivamente. 

Y este joven comenzó a centrarse en su cultivación para reprimir los relámpagos, aunque nadie se daba cuenta que la princesa Sophía lo observaba atentamente ya que se había dado cuenta que aunque ese joven era tan fuerte como ella tenía un alto potencial y habilidades muy extrañas que todo parecía haber sido entregado por el joven harapiento que estaba frente a ellos.

Y joven Baltazar sonreír amargamente en su corazón ya que había sido herido con una muy grande gravedad y para continuar con las pruebas sabía que no sería tan fácil, pero estaba más enojado con los jóvenes imprudentes de la Aldea de la Espada de Luz que con la joven de la aldea de los Arboles Santos ya que ella no lo había hecho intencionalmente fue un reflejo por los pervertido que era el, pero tampoco se arrepentía de esa acción porque la había disfrutado hasta mucho en su imaginacion.

Para su sorpresa la joven Livia tomó de sus manos el ungüento sin pedirle permiso y con su rostro todo rojo comenzó a pasarlo a sus heridas, todos los compañeros de su aldea así como uno de los discípulos a cargo las pruebas que se origina de la misma avanzaron instintivamente con miedo que este joven la pudiera dañar en venganza pero se dieron cuenta que el muy descarado no hizo eso, causó que de una manera muy casual la joven Livia tropezara sobre el cuerpo de y sus pechos le rozara el brazo sano.

Ella pareció no darse cuenta de ese tema, pero de todas maneras si lo hiciera lo ignoró ya que estaba concentrado en pasar ese extraño unguento medicinal por todas las heridas y tras terminar con el pecho y comenzar con el brazo izquierdo se sorprendió de lo rápido que el mismo actuaba, y de repente tomó desde un pequeño bolso que tenía su cintura unas vendas con el que comenzó a reforzar en las heridas de este joven.

Una voz resonó en la sala y era la de uno de los discípulos que decía.

- Por más que se puede ver este extraño incidente es momento de continuar con las pruebas ya que como pueden observar esta anocheciendo.

Sólo en ese momento se dieron cuenta de que había pasado casi todo el día y casi todos emocional mientras avanzaba hacia la puerta de la prueba.