Todos los presentes no pronunciaban ni siquiera una sola palabra sobre lo sucedido mientras observaban a los jóvenes arrogantes de la Aldea Flor de Agua retirarse cubiertos de heridas y el jefe de la aldea sonreía extremadamente feliz de darse cuenta de gran progreso del joven Baltazar.
En la periferia de la aldea dentro de su casa se encontraba el joven Baltazar junto a su hija Illya dentro de la casa mientras él la guiaba sobre la cultivación y le explicaba cómo progresar en la Etapa Inicial del Nacimiento del Campo de Cultivo, mientras comían tranquilamente en la mesa la pequeña Illya le preguntó.
- No entiendo cuál es la razón por la que rechazar la propuesta del Abuelo de las Nubes, esa sería una gran oportunidad de que puedas dedicarte solamente a cultivar y puedas ingresar en el Camino del Cultivo Mortal. Además, Illya puede quedarse a vivir con el Abuelo de las Nubes y cuando ingrese en el Primer Nivel del Alma de Energía poder ir directamente a la academia para acompañarlo padre.
Esas palabras causaron que el joven Baltazar sintiera en su corazón una emoción descontrolada al saber que su hija lo quería apoyar para que el progresara en su cultivación. Tras terminar de comer el ingreso en una de las habitaciones de la casa a la cual la pequeña Illya tenía prohibida la entrada. Dentro de la misma solamente se encontraban tres pequeños libros sobre una biblioteca y un arete de oído de color oscuro sobre los libros. Se acercó muy despacio hacia los libros y tomo el que estaba en la cima y comenzó a soplar el polvo de la carátula para revelar el nombre del mismo que se llamaba 'El Arte de la Guerra' y tras pensarlo determinadamente decidió sentarse cruzando los pies y comenzó a leer detenidamente el contenido del libro. En ese instante su conciencia ingreso en un espacio aislado donde solamente se encontraba dentro de su cuerpo quiero un pequeño campo con una cabaña de madera en la que dentro solamente se encontraban unas pequeñas bolsas sobre el suelo además de un pequeño almohadón en el cual se sentó y comenzó a cultivar mientras repetía lentamente las palabras del primer capítulo del Arte de Cultivo Marcial.
- 'La guerra es la muerte, la sangre y la desesperación… pero tras la guerra viene la paz, el amor y la esperanza, sin guerra no hay paz y sin paz no hay guerra… la sangre es el arma de la guerra y las armas del guerrero son la sangre que corre por sus venas…'
Mientras recitaba los párrafos del Arte de la Guerra dentro de su cuerpo sucedía un extraño cambio, el Campo de Cultivo recién formado era transparente con un simple contorno circular que era un humo que circulaba lentamente. Pero mientras su conciencia se perdía aún más profundo en el cultivo del Arte de la Guerra de su cuerpo comenzaba a surgir una potente energía rojiza que desprendía olor a sangre. Y dentro de su Campo de Cultivo una pequeña alma roja con forma esférica comenzó a surgir y a circular como si se encuentra emocionada de haber surgido en el Campo de Cultivo de este joven y en ese momento una voz dulce sonó en el oído del joven Baltazar mientras él seguía sumergido dentro del cultivo.
- Nacido para la guerra será y recompensado con la suerte divina serás. De la guerra surge la batalla y de la batalla la sangre, la energía de la sangre será tu camino y convertirás en polvo toda obstrucción en tu camino. De la sangre al polvo y del polvo a la sangre.
Mientras esa voz dulce se desvanecía de los oídos del joven Baltazar él se encontraba en un gran estado de paz y comenzó a regresar de su estado de cultivo. Abrió los ojos y observo la pequeña área espacial en la que se encontraba.
- Mi zona espacial ya puedo darle un nuevo uso y ese será para cultiva, además dentro de ella puedo mantener seguro el libro del Arte de la Guerra además de los recursos de cultivo.
Tras decir eso comenzó a inspeccionar los pequeños sacos que se encontraban en ese lugar, en uno había un extraño polvo que brillaba como la Plata.
- Me queda bastante Polvo de Colmillos de Plata, que sirve para el cultivo del Cuerpo de Agua de Plata. Aunque no me especializo en él, pienso que en algún momento puede servir ya que es extremadamente difícil conseguir este polvo de cultivo.
Otro de los sacos contenían un polvo rojizo más arenoso y el último contenía un polvo metálico, aunque era del que menos cantidad quedaba.
- El saco Polvo de Hueso Rojo Llameante está bastante lleno, aunque también es inútil para mi cultivo quizás en la Academia Escama Blanca pueda intercambiarla por algunos recursos para el cultivo corporal. Mientras que el Polvo de Hueso de Hierro que utilizo para mi cultivo es bastante puro, pero no me queda mucha cantidad solamente para masomenos un mes.
Debido a que el joven Baltazar nunca presentó ningún talento para el cultivo mortal nunca pudo desarrollar ninguna afinidad hacia los elementos y de esa manera este joven comenzó a cultivar su cuerpo usando recursos de energía neutral. Pero ese tema siempre le ha causado una gran cantidad de problemas debido a que la especies siempre se han cruzado entre ellas causando que la mezcla de especies no deje casi especies de elemento neutro.
- Tendré que salir de cacería durante algunos días ya que si no me equivoco el próximo ingreso a la Academia Escama Blanca es en tres meses.
Tras salir de su Zona Espacial recogió otro de los libros de la habitación titulado 'La Intención de las Armas' y lo guardó también dentro de su Zona Espacial, pero sin ingresar en ella. Y tomó un pequeño collar de la pequeña mesa junto con el tercer libro, salió de la habitación y tras entregarle esos dos objetos a Illya e informarle que iba a estar unos días fuera de la casa para salir de cacería.
Unas horas más tarde en el páramo donde el joven Baltazar acostumbraba a cazar comenzó a absorber la energía que lo rodeaba pero se dio cuenta que ni siquiera con ella podría progresar en su camino mortal, lo cual lo extraño demasiado pero sin poder hacer nada observo como esa pequeña alma que se encontraba dentro de su cuerpo se había quedado totalmente quieta y se dio cuenta que se encontraba en el Tercer Nivel de Nacimiento del Alma en ese momento y solo estaba a medio paso de Ingresar al Primer Nivel del Alma de Energía.
El joven Baltazar comenzó a avanzar más profundo en el páramo hasta llegar a una zona un poco más profunda donde avistó unos Orangutanes Llameantes y sin darles tiempo a reaccionar se abalanzó sobre ellos mientras en el dorso de su mano comenzó a resplandecer el casi formado Pétalo de Hierro y con cada golpe que él daba casi logra matar por completo a un Orangután a la vez y para realmente deshacerse de ellos no precisaría más de dos o tres golpes cada vez.
Tras terminar de eliminar a estos Orangutanes de las Llamas comenzó a abrir sus cuerpos retirando de ellos un hueso de los brazos el cual no media más de veinte centímetros, pero lo que sí desprendía esos huesos era una energía muy potente de llamas y con los mismo se puede refinar el Polvo de Hueso Rojo Llameante que almacenaba en su Zona Espacial.
Estos Orangutanes Llameantes no eran muy poderosos ya que solo eran Bestias Mortales de Primer Grado por lo que no causarían muchos problemas mayores al joven Baltazar a la hora de salir a cazarlos. Las Bestias Mortales se dividían en Nueve Grados de Poder claramente diferenciados y poder derrotar a estas Bestias que solo se encontraban en el Primer Grado ya no causaba tantos problemas para el joven Baltazar debido que esto era algo que él hacía a diario al igual que la cacería de Lobos Colmillos de Plata los cuales también eran Bestias Mortales de Primer Grado.
Tras terminar de quitar los recursos de los cuerpos de estas Bestias Mortales se encontraba bastante conforme ya que en al menos tres de ellos logró sacar unos pequeños huesos que desprendían una Energía de Hierro Pura y podían ser refinados en Polvo de Hueso de Hierro. En ese momento decido tomar un descanso tras algunas horas de cacería y comenzó a refinar dentro de su Zona Espacial el Polvo de Hueso de Hierro para avanzar la Cultivación Corporal de su cuerpo. Tras media noche de cultivo el Pétalo de Hierro del dorso de la mano del joven Baltazar se encontraba en la cima del Nivel Intermedio y de esa manera sabía que con su cuerpo podía enfrenta a cualquiera que se encontrara en el Segundo Nivel del Alma de Energía.
Justo cuando estaba a punto de comenzar a avanzar más profundo en el páramo se dio cuenta que el alma dentro de su Campo de Cultivo comenzó a agitarse y la Energía de la Sangre de los Orangutanes Llameantes comenzaba a ingresar muy lentamente hacia su cuerpo. En ese momento se le dio la idea de comenzar a tratar a cultivar su Arte de la Guerra, dándose cuenta de esa manera que mientras refinar la Energía de Sangrienta logró comenzar a progresar en su Cultivo Mortal y se dio cuenta que la manera de avanzar en su cultivo era con la sangre de las Bestias Mortales que se dedicaba a cazar. Este hecho lo sorprendió mucho pero también se encontraba sereno ya que sabía que el Arte de la Guerra no era simple y no le sorprendería ninguna anormalidad que él apareciera a su Cultivo Mortal.