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Chapter 8 - Roca de la Guerra Sangrienta

El camino de regreso a la Aldea de las Nubes Tormentosas se encontraba cubierto de Bestias Mortales como pasaba normalmente y el clima se encontraba lluvioso. Mientras el joven Baltazar avanzaba de camino hacia la aldea fue cazando fue cazando toda clase de bestial y recolectando los recursos que ellas dejaba, el contabilizaba los recursos con los que contaba.

Tenía grandes cantidades de Polvo de Hueso de Hierro, Polvo de Hueso Rojo Llameante, Polvo de Colmillos de Plata y de Polvo de Hierro Relámpago. Aunque estos eran recursos de bajo grado, eran muy útiles a la hora de cultivar. Y tenía unas considerables cantidades de Polvo de Hierro Negro de Relámpagos y de Polvo de Hierro puro que eran recursos de grado medio.

A la vez tomo las algas que había recogido en el lago y decido plantarlos en el nuevo lago donde se encontraba la Extraña Perla de Agua Pura.

Cuando ya se encontraba a media distancia de camino hacia su hogar, se cruzó con un grupo de carroñeros que avanzaron hacia él para amenazarlos.

- Oye chico entrega todo lo que lleves encima y no te haremos mucho daño.

Uno de ellos dijo esas palabras mientras que los que lo rodeaban comenzaron a reír maliciosamente mientras se relamía los labios cuando sacaban sus dagas para amenazar al joven Baltazar. Pero el comenzó a sonreír y alzó su palma mientras desprendía una densa energía corporal, y se abalanzó mientras gritaba.

-    Serán útiles para estirar mis músculos.

Esas palabras causaron que los carroñeros fruncieron el ceño molestos ya que su plan real era el de amenazar a este joven, no el de ser amenazado. Y en ese instante comenzaron a desprender una densa aura del Segundo Nivel de Alma de Energía. Pero frente a esa presión el joven Baltazar sonrió burlonamente y explotó el primer Pétalo de Hierro totalmente formado.

- Palma de Hierro - Primer Movimiento: Golpe Feroz.

Y se abalanzó hacia los carroñeros a quienes cada golpe logró destruir completamente sus defensas, pero en el momento que se estaba por retirar descubrió que en las manos de uno de ellos se encontraban restos de cabellos de mujer y en otros algunos arañazos de mujeres también. Esto causó que la mente de Baltazar se reaccionara rápidamente ya que los carroñeros frente a él no eran simples y también se dedicaban a abusar de las mujeres que se encontraban indefensas y eso causo que la mirada del joven Baltazar se volviera completamente sombría mientras levantaba su mano y decía lentamente.

- Palma de Hierro - Segundo Movimiento: Perforación Siniestra.

Y en ese mismo instante una energía densa comenzó a desprenderse de esa mano y con ella atravesó al medio el cuerpo de los carroñeros destrozándose completamente. Y tras comenzar a calmar sus emociones recogió las pertenencias de los mismos guardandolas en el saco de su cintura ya que se dio cuenta que no eran muy valiosas.

Pero antes de comenzar a retirarse observó una escena muy extraña, la sangre de los carroñeros comenzó a dirigirse a la Roca de la Guerra Sangrienta que llevaba en su cuellos al igual que la de las Bestias Mortales cercanas y la misma comenzó a concentrarse en un solo punto de la roca formando una clase de lunar rojo oscuro brillante en ese lugar.

Y entonces el joven Baltazar noto como la cantidad de energía de la roca había aumentado bastante y con una extraña expresión le pregunto a la misma.

-    Puedes absorber la sangre de los cuerpos muertos que nos rodean.

Y la voz femenina resonó en la mente del joven Baltazar con un tono un poco molesto.

-    Es real que no sabes nada sobre mi, ni sobre el Arte de la Guerra. Cómo es que has obtenido algo tan valioso.

Esas palabras indirectas causaron que el joven Baltazar comprendiera que una de las funciones de la Roca de la Guerra Sangrienta es la capacidad de absorber la sangre de los muertos y refinarla en Energía Sangrienta y eso lo conmocionó ya que así sería mucho más fácil cultivar su Camino Mortal y no le consumiría tanto esfuerzo. Secretamente comenzó a agradecer al hombre de sus sueños mientras volvía a escuchar un poco más la voz de la roca.

-     Pero debes de saber que no es tan simple, solo puedo absorber la energía de los muertos que hayas derrotado con tus propias manos. Asi que tendras que salir de cacería más a menudo para recolectar recursos y sangre a diario.

Entonces el joven Baltazar se dio cuenta que no sería tan fácil cultivar y también dedujo que mientras más poderosa sea la sangre que absorba será debido a que es mayor la cantidad de Energía Mortal contenida en ella.

El continuo su camino hacía la aldea mientras discutía con la voz de la roca que no quería darle ninguna clase de detalles personales sobre ella, le decía que él no era digno.

Unas horas después el joven Baltazar podía ver su casa desde la distancia, lo cual lo hizo sentir en un estado de armonía. Y tras ingresar en ella se conmovió al ver a su hija Illya que cultivaba diligentemente bajo los rayos del sol que ingresaban por una ventana e irradiaba una densa energía mortal. Aunque no estuviera en la Formación del Alma,lo que significaba quizá estaba en el comienzo de su camino de cultivación. Esto significaba que cuando logrará ingresar en el Primer Alma de Energía su nivel será bastante mayor a eso.

Gracias joven Baltazar la observaba cultivar durante varias horas ella no había sentido su presencia y se había mantenido en la misma posición hasta que en un momento comenzaron a bajar los rayos del sol y en ese momento ella suspiró mientras se quejaba todavía con los ojos cerrados.

- Para Illya es muy solitario encontrarse sola tantas horas, espero que papá vuelva pronto y así le mostraré mi progreso para que pueda irse tranquilo a la academia. Illya no es débil.

Pero en el momento que abrió lentamente los ojos y se dio cuenta que su padre estaba sentado frente a ella la expresión de su rostro cambia totalmente y se ruborizó ya que él le sonreía demostrándole que había escuchado todo lo que ella había dicho. Pero en ese mismo instante Ella hizo un puchero con los labios y se quejó.

- Ya que después de tantos días lo mínimo que podrías hacer en vez de dejarme cultivar es pasar el tiempo conmigo...

Frente a ese reproche el sonrío internamente cuando fue a responderle las siguientes palabras lo dejaron helado.

-. … Ya que sólo quedan tres días para que partas a la academia con el Abuelo de las Nubes.

Esa última frase cayó como un balde de agua helada sobre el lomo de joven Baltasar,nunca se hubiera imaginado que ya había pasado exactamente un mes fuera de la aldea cultivando.

Y de repente resonó en su mente la voz dulce de la Roca de la Guerra Sangrienta.

- Por supuesto que al ser un novato es totalmente ignorante sobre los tiempos que lleva cultivar. Un mes no debería sorprenderme ya que cuando vayan progresando puede llegar a pasar meses o inclusive años sin salir de un cultivo aislado. Además esta hermosa guerrera le gustaría saber si realmente esa niñas hija suya, ya que es demasiado hermosa para haber sido procreada por un orangután.

Aunque se sintió molesto por ese comentario me ignora totalmente y abrazó delicadamente a su hija, quién intentaba no lagrimear. y dedicaron al resto del día a charlar mientras él le regalaba recursos de cultivo y ella se encontraba totalmente feliz de darse cuenta de que varios de ellos eran valiosos.

Fueron pasando las horas del día y en un momento la pequeña Illya se encontraba molesta ya que comenzó a observar el torso del cuerpo de su padre estaba repleto de heridas, y con unos ungüentos que ella preparaba de hierbas comienzo a curar las heridas.

Tass terminar de curar las heridas de su padre ella preparó una agradable comida para que pudieran disfrutar tranquilamente y a la vez no le entregó trescientas piezas de bronce que le había cambiado por muchos recursos valiosos al Anciano Avaricioso de la Orfebrería. Al tener tanta cantidad de piezas de bronce en las manos la pequeña Illya se sentía extremadamente nerviosa, ya qué el promedio de piezas de bronce que se utilizaban para sobrevivir durante varios meses no supera las cincuenta piezas de bronce. sólo podía imaginar en su mente el esfuerzo sobrehumano que había realizado su padre en el último mes para recolectar tanta riqueza.

Unas pocas horas después la pequeña niña ya se encontraba dormida y el joven Baltazar se encontraba en la habitación donde él se dedicaba a cultivar, en sus piernas se encontraba un saco de Polvo de Hierro Puro y el mantenía su conciencia separada en tres partes.

Una continuaba cultivando el Arte de la Guerra, otra la se encontraba enfocado en comprender los primeros pasos para cultivar una habilidad que había encontrado en los diagramas de la cueva y la última de sus conciencias se enfocan refinar los recursos para el Cultivo Corporal. 

A medida que fue avanzando la noche el único progreso que consiguió en su arte de cultivo no podía ser considerado mucho y en esa habilidad de los diagramas lo único interesante era que había logrado comprender los pasos iniciales de la misma.

Y casi a mediados de la noche cuando ya nadie en el pueblo se encontraba despierto el cuerpo de este joven comenzó a desprender un brillo metálico y nuevamente sintió un progreso tanto en su piel como en sus músculos, había logrado ingresar definitivamente en la Etapa Inicial del Segundo Pétalo de Hierro. Y esto significaba que su cuerpo pasaba a ser un 10% tan duro como el hierro.

El joven Baltazar no podía evitar alzar una sonrisa en su rostro mientras consolidaba el cultivo de su cuerpo,quién se encontraba más sorprendida era la extraña conciencia de la roca de la guerra sangrienta quien con su dulce y aguda voz que sonaba como un pensamiento decía.

Este joven es muy extraño, tiene la capacidad de progresar varias veces más rápido en su cultivo corporal que en su cultivo mortal. No es algo que la lógica simple pueda explicar, pero qué más da nada que tenga que ver con el dios de la guerra puede ser normal.