PARTE 1
Era una hermosa mañana, digna de admirar, el sol brillaba en todo su esplendor pero no calentaba, se sentía un ambiente agradable, ni caliente ni frio, cuando Mera sale de su casa, sabiendo que sería un día muy ocupado, mañana era navidad y debía ir a la casa de sus padres para ayudarles con las compras y en la cocina, se sentía nostálgica, tenía 5 años desde la última vez que había ido, desde aquella navidad trágica en la que había fallecido su hermana, gran dolor y vacío le había quedado que decidió centrarse en terminar su carrera y trabajar, sin tiempo de vida social ni familiar.
Se subió rápidamente al tren para dirigirse al siguiente pueblo, donde compraría unos pequeños presentes para sus padres y sus 2 hermanos menores, Alba y Teo, mientras viajaba en el tren no podía parar de admirar la belleza del paisaje, como veía pasar las montañas y arboles de hermoso follaje, el cielo azul claro y hermosas aves revoloteando sobre las copas de los árboles, se sentía sumamente inspirada, una paz que tenía tiempo de no sentir, pero a la vez le recordaba ese hueco, aquel asiento vacío en la mesa de la casa de sus padres.
Cuando finalmente llego al pueblo se detuvo en varios bazares y tiendas para comprar presentes, a Alba le llevaba un estuche de pintura, era toda una artista. Y a Teo le encontró un libro de Astronomía, el desde pequeño mostro su interés por las estrellas y tenía su propio telescopio en su habitación, a su mamá le compro un juego para la hora del té, ya que ella tenía familiares que tenían esta práctica y ella también lo hizo su costumbre, a papá quien era un gran lector le compro libros, incluido diccionarios, él era todo un sabelotodo y le gustaba leer todo tipo de libros, revistas, lo que sea.
Mera se sentía agosto con los presentes que había conseguido y se dirigía a tomar un taxi para que la llevara a la granja familiar, en el camino a la parada de taxis choco con alguien, un hombre formidable, de buen aspecto, robusto, bien vestido con traje, él se disculpó, no la había visto, ella igualmente le pidió disculpas, iba distraída viendo la hora de su reloj que ya era tarde, el desconocido le ayudo a recoger sus compras y antes que el pudiera decir algo más Mera se despidió y salió corriendo, si no se apuraba no llegaría a tiempo para acompañar a su madre a hacer las compras para la cena. El desconocido se quedó estupefacto solo viendo como aquella dama se alejaba.
Ya de camino a la granja le llamo a su madre, llegaría en 15 minutos para que la esperaran. Cuando por fin llego quiso pagar el taxi y noto que su billetera se había extraviado, la busco entre las bolsas y no la logro encontrar, su padre quien salió a recibirla fue quien pago el taxi por ella, ya adentro busco nuevamente más despacio y estaba entrando en desesperación cuando su madre le dijo.
Madre: ¿Hija, no será que la dejasteis en el último almacén donde realizaste compras?
Mera: creo es posible mamá, venía muy aprisa y es posible se me haya olvidado.
Padre: No te preocupes, podemos pasar por el pueblo buscando en el almacén antes de irnos al almacén a realizar los comprados.
Mera: Esta bien papá, vamos.
Mas tarde ese día regresando a la granja, venían con las compras mas no habían encontrado la billetera de Mera, quien estaba pegada en el teléfono tratando de bloquear las tarjetas por si alguien las había encontrado y quisiera usarlas. Ya eran las 11:00 a.m. y su madre empezaba a preparar el almuerzo mientras su padre estaba en el corral. Mera escucho un auto llegar y eran sus 2 hermanos, con gran felicidad corrieron a abrazar a Mera al verla en el pórtico de su casa.
Alba: Mera, Mera estas aquí, ¡¡¡que alegría por fin verte!!!
Teo: Por fin hermana, te has dejado ver.
Mera: Como los he extrañado par de mocosos-abrazándolos fuertemente contra su pecho-
Teo: Papá nos dijo que estabas aquí y habías perdido la billetera, ya le pedí a algunos amigos que pregunten en el pueblo por si alguien la ha encontrado.
Mera: Muchas gracias Teo, espero poder encontrarla o que alguien de buen corazón la devuelva.
Alba: Ya, pero porque no vas a ayudarle a nuestra madre, para que podamos empezar con los preparativos para la cena, esta cena será muy ESPECIAL.
Mera: ¿A qué te refieres con especial?
Alba solo soltó una risita picara y tomando a Mera de la mano la jalo hasta dentro de la casa, donde pasaron el resto de la tarde cocinando un gran banquete para la cena navideña. A las 5 de la tarde Alba le dijo a Mera que era hora que se fuera preparando para la cena.
Alba: Mera deberías ir a bañarte y prepararte para la cena, ya se acerca la hora de que vengan los invitados.
Mera: ¿Claro Alba, pero y que tanta gente han invitado que hemos cocinado como para un gran banquete y Teo con papá se la han pasado en el jardín arreglando y decorando?
Alba: Nuestros padres han tomado a bien celebrar su aniversario junto con la navidad, y tomar también un momento de silencio en memoria de nuestra hermana Nora.
Mera: Es decir, ¿que no solo es celebración de cena navideña sino también cena de aniversario de nuestros padres y recordatorio de Nora?
Alba: Así es, y siendo que este año ha sido de mucho éxito en el negocio familiar, decidieron tener una celebración más grande de lo normal por lo que han invitado a muchas personas y a aquellos que estuvieron en nuestras vidas desde pequeños.
Mera: Eso no lo sabía, creo por el distanciamiento que hemos tenido, me iré a preparar en este momento para después ver en que más les puedo ayudar.
Alba: Y algo más Mera, cuando estabas acá hiciste tanto por nosotros cuidándonos, siendo nuestra segunda mamá, que hay algo debajo de la cama, es un regalo de pre-navidad.
Y con eso y una sonrisa pícara Alba salió pronto al patio donde estaban los demás terminando los preparativos, Mera subió a su habitación para tomar una ducha y después vio debajo de la cama, había una gran caja blanca con un hermoso moño color rojo. Con un sentimiento de calidez abrió aquel regalo y dentro encontró un hermoso vestido rojo con detalles en dorado, de hombros descubiertos, tan largo que les llegaba a los tobillos, pero con una abertura a un lado hasta la altura del muslo, cuando levanto el vestido abajo noto unas hermosas sandalias doradas, un estuche con un collar dorado y pulsera a juego, junto a esto una nota que decía:
QUERIDA HERMANA, SABEMOS LO QUE HAS SUFRIDO, LA TRISTEZA QUE HAS PASADO, QUE POR TU DOLOR TE DEDICASTE TANTO AL ESTUDIO Y AL TRABAJO QUE TE HAS DESCUIDADO, EL DINERO QUE GANABAS SOLO TOMABAS LO NECESARIO Y LO DEMAS NOS LO HAS ENVIADO A NOSOTROS, PARA NUESTRA EDUCACION, POR LO QUE JUNTO CON TEO DECIDIMOS EN EL MOMENTO QUE SUPIMOS QUE VENDRIAS, TOMAMOS DIFERENTES TRABAJOS PARA PODER DEVOLVERTE ALGO, QUEREMOS QUE TE SIENTAS Y VEAS BELLA, QUE ILUMINES NUEVAMENTE LA HABITACION AL ENTRAR, TU TE LO MERECES.
CON AMOR ALBA Y TEO
Lagrimas empezaron a correr por sus mejillas, y al verse al espejo noto como esos 2 años habían hecho estragos en ella, su peinado era un moño, era más practico solo recogerlo y hacerse el moño para todo, su vestimenta eran pan y camisas holgadas, lo más práctico para moverse, tenía tiempo de no usar un vestido hermoso, menos unas sandalias de tacón, no usaba maquillajes para ahorrar ese tiempo, y en ese momento viendo su reflejo en el espejo de su antiguo cuarto y junto a él una foto suya junto a sus hermanos, noto esa gran diferencia, y se dijo para sí misma:
Mera: Si mis hermanos han realizado este esfuerzo por mí, debo hacer mi esfuerzo también en agradecimiento, por su gesto.
Y tomo un momento recordar, pero empezó a realizarse un hermoso peinado y un maquillaje profesional todo a juego con el vestido que le regalaron sus hermanos. Cuando termino se asomó por la ventana y vio que ya había varios invitados en el patio, y su familia ya andaba lista con sus trajes y recibiendo a los invitados. Mera bajo las gradas y cuando salió al patio asombro a muchos ya que estaba deslumbrante, Alba se apresuró a correr a su lado.
Alba: ¡¡¡¡Mera, que hermosa te ves!!!!
Mera: Gracias hermana, muchas gracias a ti y a Teo, y disculpen por preocuparlos tanto.
Alba: No te disculpes, sé que fueron años difíciles, pero queremos verte brillar nuevamente.
Diciendo eso tomo su mano y se adentró en la celebración, todos estaban feliz cuando vio que se acercaba a la entrada de la granja un gran auto, era tan lujoso que llamaba la atención, de él salieron más invitados, entre ellos estaba Sara, una antigua amiga de Mera, la cual en sus años de estudio era su mejor amiga hasta que Sebastián el novio de Mera, se involucró con Sara, y esta no desaprovecho para restregar en la cara a Mera que ella era mejor y por eso la habían cambiado.
Mera sintió un malestar en el estómago cuando la vio, se iba a retirar cuando detrás de Sara también salió aquel hombre con el que había chocado ese día temprano, Mera se quedó pensativa quien era, cuando reaccione, aquel caballero se acercó a Mera y le dijo:
Desconocido: ¿Hola Mera, me recuerdas?
Mera: Eeehhhh, disculpa, pero eres con el que choque en la mañana, me disculpo nuevamente....Espera, como sabes mi nombre?
Desconocido: Si soy el mismo, pero te conocía antes, solo que en la mañana no te reconocí, te veías, este, diferente, hoy ya te pareces más a la antigua Mera.
Mera: ¿Ya nos conocíamos? ¿Quién eres? Lo siento, no me acuerdo de ti.
Desconocido: Jajaja, creo te dejare con la intriga, será muy divertido.
Mera: ¿Dime quién eres?
Desconocido: Bueno solo te diré, que, por el momento, soy tu caballero de brillante armadura. --Se saca algo de su saco, era la billetera de Mera-- Creo esto es tuyo, la dueña se llama como tú, y lo encontré después de nuestro choque.
Mera: ¡¡¡¿Con que tú la tenías?!!! la estuve buscando toda la mañana.
Desconocido: ¡Bueno ya ves, he venido para rescatarte mi lady!
Mera: Muchas gracias por devolverla, pero ¿quién eres?
Desconocido: Digamos que soy un antiguo admirador tuyo, que no llegaste a conocer, pero desde lejos yo te veía a ti.
El mundo pareció detenerse ese momento, Mera no podía ubicar aquel hombre guapo en ningún recuerdo, ¿y admirador? me observaba? es algún tipo de acosador? quien era este hombre y qué relación tiene con Sara ya que venían juntos en el carro lujoso.
Desconocido: ¿Puedo ver los engranajes dando vuelta en tu cabecita, no lo pienses tanto, mejor podrías invitarme a una copa por haber encontrado tu billetera?
Mera: Ahí, esteee claro, si, aquí por favor -Saliendo del trance en el que estaba lo acompaña a la mesa para servirle una copa de vino.