PARTE VI
Ese día en la tarde había quedado con Jack en una salida, se verían en el lugar donde habían chocado el primer día. Algo cómico pensó. Eran cerca de las 4:00 p.m. cuando iba llegando al lugar, vio a Jack esperándola, apoyado sobre un auto negro, cuando se acercó le saludo.
Mera: Hola, buenas tardes.
Jack: Hola My Lady, ¿cómo te ha ido en tu día?
Mera: Estupendo, pero ¿podrías dejar de llamarme My Lady? Se siente muy meloso.
Jack: Claro, ¿cómo deseas te llame?
Mera: Mera me parece.
Jack: ¿Así nada más? Me gusta tener un cierto detalle de cariño.
Mera: uhhhh por el momento Mera, después depende si vas superando las pruebas -soltando una risita- podre permitirte me llames de otras formas más cariñosas.
Jack: Entonces lo tomaré como si a medida me voy ganando tu corazón podre llamarte de formas más cariñosas.
Mera: Exacto.
Jack: Me gusta la idea, porque significa que ya estás aceptando que si llegará a pasar.
Mera: -sorprendida- esteee, bueno, dejemos que el tiempo lo decida.
Jack: -soltando una carcajada- Jajaja, de acuerdo Mera, ¿porque no subes al auto?, hay un lugar al que me gustaría llevarte.
Mera: De acuerdo, vamos.
Se suben al auto, y a medida va conduciendo Jack, Mera ve que salen de la ciudad a la carretera, ambos conversando de su vida.
Jack: Dime Mera, ¿qué has hecho después de irte de aquí hace años?
Mera: Bueno, después de irme tuve que enfocarme en mi carrera, logré convertirme en arquitecta, también estuve asistiendo a terapías por mis problemas emocionales, para superar la pérdida y aceptar mi nueva vida. A los meses de haberme graduado empecé a trabajar de asistente en una firma, a la vez realizaba mis propios planos, ideas, bocetos y se los enseñaba a mi superior en tiempos libres para que me brindará su opinión, quien me ayudo bastante, fue mi jefe quien vio un potencial me decía siempre, me permitió ir ascendiendo hasta llegar a ser parte de un equipo de arquitectos para diseños que realizábamos para trabajos de la ciudad. Luego empecé a tomar trabajos independientes, y al final me era mas remunerables los trabajos independientes que realizaba que estar trabajando para otros, así que presente mi renuncia, siempre me han dicho que cuando quiera regresar sería bienvenida, pero el trabajo independiente me permite tener mi propio tiempo, tengo mis hobbies, he hecho varios viajes, el año pasado fui a un tour por España, creo ya no me veo estando atada a un trabajo fijo con un horario que cumplir.
Jack: Cielos, si que te has dado una buena vida, te veo mas relajada hoy. Aunque el primer día te veía un poco cansada, desaliñada.
Mera: Puedo estar mas relajada con mi trabajo, pero creo en lo personal me he descuidado, no me animaba a maquillarme ni lucir perfecta.
Jack: No es necesario mucho trabajo, siendo honesto siempre has sido bella, con o sin maquillaje.
Mera: ¿Coqueteando?
Jack: Es un cumplido.
Mera: ¿Me puedes hablar de ti?
Jack: Bueno que te puedo decir, culmine mi carrera, ahora soy doctor pediátrico, me encanta poder cuidar y ayudar a los niños, tengo mi propia clínica, ahorita la tengo cerrada por vacaciones. También soy co-propietario de la empresa de insumos médicos con mis hermanos, me gusta venís los fines de semana de visita donde mis abuelos.
Mera: ¿En la granja de los Matthews?
Jack: Si, a pesar que mis padres fallecieron estando todos nosotros jóvenes, fueron mis abuelos los que nos criaron, y nos ayudaron para que pudiéramos sacar nuestros estudios y empezar nuestra empresa, es por eso que estamos tan agradecidos con ellos. Y los fines de semana los vengo a visitar y a ayudarles en lo que pueda en su granja, son personas ya mayores y aunque tengan personal que les asisten, pero no es como tener a tu propia familia.
Mera escuchando con mucha atención a Jack no se había dado cuenta de hacía donde iban, cuando vino a reaccionar notó como ya no estaban en la carretera, ahora iban por un camino empedrado y solitario.
Mera: Jack, ¿hacia dónde vamos?
Jack: Es una sorpresa. De hecho, ya estamos llegando, justo detrás de esa colina.
Mera observando, ve como iban rodeando la colina, a medida que esta desaparecía empezó a deslumbra un hermoso lago, junto a el lago se encontraba una gran cabaña, con su terraza, parqueo, e incluso tenía un tipo punto de atraque, donde podían subirse a pequeñas canoas y lanchas para navegar por el lago. En la cabaña había una terraza, con varias mesas dispersas.
Mera: ¿Qué lugar es este Jack?
Jack: Es un hospedaje, también funciona como restaurante, es un lugar donde mis abuelos me sabían traer de pequeño, una de las cosas mas llamativas del lugar es la privacidad que ofrece, aparte de las actividades que pueden disfrutar.
Mientras Jack mencionaba eso, iba observando que detrás de la cabaña había canchas para practicar deportes, establo para cabalgatas. En el parqueo había varios vehículos de huéspedes que se estaban quedando en aquel lugar.
Mera: Jack, este lugar parece ser de lujo.
Jack: Creo que se puede considerar así, puedes venir a quedarte un par de días o simplemente venir a un almuerzo o cena.
Mera: Cenaremos acá, ¿Cierto?
Jack: Así es, te llevare a cenar. -Dijo mientras iban entrando al estacionamiento-
Bajándose del vehículo, Jack tomó de la mano a Mera para dirigirla adentro de aquella cabaña.
Recepcionista: Buenas tardes, Señor Jack, bienvenido nuevamente a nuestro hotel, ¿se quedará con nosotros?
Jack: Buenas tardes, me gustaría, pero hoy solo cenaremos aquí.
Recepcionista: Es una lástima, siempre es tan bienvenido a quedarse en nuestras acogedoras habitaciones. ¿Sería mesa para dos?
Jack: Si, por el momento.
Mera: Parece que sabes venir bastante a este lugar.
Jack: Te dije me encanta, y mis abuelos me sabían traer de pequeño, ahora soy yo quien los sabe traer a ellos.
Mera con un sentimiento de ternura al ver como este gran hombre, a pesar de su carrera y posición económica siempre ha estado pendiente de aquellos que le cuidaron de pequeño. Cuando llegaron a su mesa en la terraza, tenia una hermosa vista del lago, el cual a medida el sol se ocultaba detrás de las montañas se veía la luna asomarse y su resplandor poco a poco embellecía la superficie de aquel lago, parecía un camino blanco sobre un suelo oscuro brilloso, a medida iban sirviendo los distintos platillos de la cena, la conversación se ponía bastante amena, entre recuerdos de la infancia, travesuras como expectativas a un futuro. Cuando terminaron de cenar y la mesera se acercaba con el postre, a través de la puerta salió una pareja, que Mera nunca se hubiese esperado ver en su primera cita con Jack.
Sara: Vaya, vaya, primito, que compañía la que te has conseguido.
Jack: ¡Sara! No esperaba verte aquí.
Sara: ¿Sorprendido? Resulta que es nuestra escapada como pareja, ya sabes que la vida de los ricos es bastante agotante entre los paparazis.
Jack: coff, coff, sí, claro, coff -le contesto Jack entre una tos fingida y con sarcasmo.
Sebastián: Veo que no pierdes el tiempo, hace poco se reencontraron y ya están cenando juntos, sí que eres rápida Mera.
Mera: Pues no lo suficiente, ya que otros antes de salir de una ya están con otra. Además, no es algo que debería de importarte ya.
Sara: ¡Claro que no le importas! Me tiene a mi por esposa. – le replicó molesta. -
Sebastián: Vamos, mejor pidamos nuestra mesa.
Jack: Si por favor, ya que hemos tenido una linda velada y no quisiéramos arruinarla.
Ante este comentario Sebastián le dio una mirada fulminante a Jack mientras se alejaba con Sara.
Sebastián: ¿Desde cuándo tu primo está saliendo con Mera?
Sara: Yo que sé, hasta donde sabía no se habían visto hace mucho tiempo.
Sebastián: Para ser que tienen tiempo sin verse están muy cariñosos esos dos.
Empuñando la mano con fuerza tratando de controlar su enojo por ver a Mera con Jack procurando no ser tan evidente, pero Sara que tenia tiempo con el y le conocía se dio cuenta. Su esposo estaba celoso que su ex novia estuviera en una cita.
Sara pensando "no puedo permitir que la aparición de Mera arruine mi matrimonio, más de lo que ya está, se que Sebastián ha tenido sus aventuras, pero con mujeres que no valían nada para él, pero Mera es diferente, debo alejarla de nuestras vidas nuevamente".
Terminando la velada Mera se disculpó con Jack para ir al tocador, mientras el esperaba la cuenta, cuando ella se levanto Sebastián la observaba cuidadosamente para ver adonde se dirigía, le dijo a Sara que esperara allí, mientras el se levanto sigilosamente para alcanzar a Mera sin ser visto por Jack, la espero en un pasillo por donde debía pasar al regresar a su mesa. Al pasar ella, Sebastián la tomo del brazo y la jalo a un rincón, poniéndola contra la pared.
Sebastián: ¿Qué crees que estás haciendo?
Mera: Eso debería de preguntarte yo a ti.
Sebastián: Desapareciste hace cinco años, y de repente te vuelves a aparecer y sales en citas con ese tipo ¿así de la nada? ¿Qué es lo que quieres que sienta?
Mera: Creería que no debes de sentir nada, fuiste tú quien me engañó hace cinco años, y ahora estas casado con Sara, no entiendo, ¿porque sigues teniendo problemas conmigo?
Sebastián: Porque yo no te deje de amar Mera, por eso tengo problemas con esto.
Mera: -completamente en shock- ¿Amar? ¿Tú me amas? Jajajaja, Sebastián si de verdad me hubieses amado nunca me hubieses engañado.
Sebastián: Tu no entiendes, yo te puedo amar y estar con otras mujeres, ¿Por qué no eres como Sara? Ella si lo entiende.
Mera: ¿Sara lo entiende? Es decir, ¿que tú le engañas y ella esta de acuerdo con eso?
Sebastián: Si, ella por conveniencia lo sé, por mi dinero, y yo la mantengo por no pasar alguna noche solo, y el estado CASADO abre puertas.
Mera: Están enfermos los dos. – Trata de alejar a Sebastián a empujones para poder salir de ese lugar, pero Sebastián forcejea-
Sebastián: No creas te libraras de mí, todos estos años me he hecho de un nombre, una reputación, mujer que quiero, mujer que obtengo, y tu amor siempre serás mía, así que olvídate de Jack, ya que no permitiré que seas de alguien más.
Mera al escuchar eso se sintió amenazada, le dio una patada en la entrepierna y huyo, dejando a un Sebastián adolorido tirado en el pasillo, con un dolor que no podía ni exclamar palabra alguna.
Cuando llego a la mesa nuevamente, Jack la notó agitada y preocupada.
Jack: Mera, ¿Qué ha pasado? ¿Por qué estas así, esta todo bien?
Mera: Sssii, ¿ya pagaste la cuenta?
Jack: Si, ya está pagada, pero ¿qué te ocurrió?
Mera abrió la boca para contarle, pero vaciló un momento, la esposa de Sebastián es la prima de Jack, no quería llegar a causar conflicto entre los primos.
Mera: Nada, ¿Podríamos irnos ya?
Jack: Claro, quería llevarte a una caminata alrededor del lago.
Mera: Es muy lindo, pero creo me ha pegado bastante fuerte el vino, ¿lo dejamos para otro día?
Jack: Esta bien, ¿pero me lo prometes?
Mera: Si te lo prometo.
Mientras se levantaban para dirigirse a la salida, se cruzaron aun Sebastián echando humo, que venía cojeando desde adentro de las cabañas, y sentía como su mirada de furia no se les quitaba de encima.
En el camino, a pesar que Jack trató de averiguar que había ocurrido, Mera no le dijo nada, siempre le cambiaba el tema, así que no le insistió más. De esta forma la fue a dejar a la casa, y a pesar de los inconvenientes, sentía que la había pasado bien con la compañía de Jack, pero no podía quitar de su mente las palabras de Sebastián, ¿será que está planeando algo con ella o contra Jack?
Y de esta forma terminó su primera cita, si así fue la primera, ¿qué más podría esperar Mera? Tenia 3 semanas antes de volver a la ciudad, ¿podría llegar a sentir algo realmente por Jack, así como él lo hace por ella?