La mujer atemorizada, por ver a la muerte tan cerca, comprendía que no podría hacer nada, había gastado toda su mana, el cual había estado acumulando en todos estos años de encierro, ya que al no haber podido alimentarse adecuadamente este no había podido acumularse como debería, a pesar de sus limitaciones debía hacer algo por los dos bebes que cargaba consigo.
Con una mirada desafiante, el hombre, cual poseía una espada en su cintura y una armadura liguera echa de algún metal, se lanza hacia la indefensa mujer, desenvainando su espada rápidamente en el camino.
Esta se lanza hacia el lado contrario del ataque pudiendo esquivarlo, pero cayendo al piso poniendo su cuerpo para evitar que los bebes, cuales cargaba, sean lastimados.
El hombre se para frente a la mujer, la cual yacía en el piso, coloca su espada por encima de su cabeza con la intención de asesinarla.
"Este no puede ser el final, aun no…"
Desesperado me lo dije a mi mismo, no podía creer lo rápido que encontraría mi final, solo cerré los ojos mientras recordaba su rostro, queriendo que al menos ella sea mi último recuerdo.
De pronto siento una gota de agua en mi cabeza, era la mujer la cual sollozaba.
La mire confundido, queriendo saber que pensaba.
"Te dije que esto no sería un final rápido"
Al finalizar sus palabras, el hombre pone una espeluznante sonrisa.
La mujer cierra los ojos, por el terror que le provocaba pensar en su propia muerte, y de un sólido golpe, este le corta la pierna izquierda.
Provocando que ella comenzara a lanzar desgarradores gritos contra el cielo, parecía que sus cuerdas vocales iban a romperse; su rostro comenzó a llenarse de lágrimas, sus ojos se abrieron provocando que pareciesen salirse de sus cuencas y comienza a patalear provocando que su sangre manchara todas las paredes.
Al escuchar los ensordecedores gritos de agonía, el hombre comenzó a reírse escandalosamente, se agarra la cabeza y su sonrisa comienza a hacerse cada vez más grande mientras decía.
"¡SIIIIII, DAME MAS VAMOS, QUIERO VER MAS ESE ROSTRO TUYO, QUIERO ESCUCHAR COMO GRITAS DIOS VAMOS PORFAVOR!"
el hombre toca su miembro por encima de su pantalón.
"¡VAMOS MIRA HASTA TENGO UNA ERECCION JAJAJAJAJAJ DEMONIOS QUE EXITANTE CUANTO PLACER!"
Al ver la sangre desparramándose a su alrededor comienza a tocarse con más fuerza.
La mujer asustada y con rostro de dolor nos deja a un lado, mientras el hombre se encontraba distraído, para después acercarse hacia mí, diciéndome con un tono de voz triste.
"Cuídala por favor"
Le da un beso en la frente a su hija como si estuviera despidiéndose, no entendía que planeaba hacer.
"¡Haz lo que quieras conmigo, pero por favor déjalos a ellos!"
"¿¡AAAA!? ¿Crees que estas en posición de negociar conmigo? No me hagas reír, mejor sigue gritando como lo hacías hace un segundo"
El hombre alza su espada nuevamente.
Con las ultimas fuerzas sobre su cuerpo, la mujer se abalanza sobre el hombre usando su única pierna, sujetándolo de la cintura.
"¡¿Qué mierda hacer maldita zorra?! Si querías chupármela de nuevo me lo hubiera dicho"
Dice el hombre enojado, el cual coloca su espada con intención de incrustársela en la cabeza.
Antes que la espada atravesara su cráneo, la mujer activa uno de sus hechizos [Inmolación].
El tiempo parecía ir en cámara lenta, la mujer voltea hacia su hija y sonriendo derrama una lagrima, la cual al tocar sus mejillas se evapora, con una sonrisa en su rostro la mujer se combustiona, llevándose al hombre en su camino, el cual no tuvo ni siquiera tiempo para entender lo que pasaba, cuando su cuerpo ya se encontraba calcinado.
Me quedé estupefacto al ver su cuerpo ahora echo polvo, mis músculos se encontraban tensos, sentía un escalofrió que recorría todo mi cuerpo, el sonido no llegaba a mis odios y mi mente estaba vacía.
Fue cuando escuché el estruendo de los equipamientos del una vez hombre, cuando pude volver en mí, dándome cuenta que la bebe a mi costado se encontraba llorando y junto con eso oí el paso de otros hombres viniendo, tenía que hacer algo.
Fue cuando vi en los restos del hombre una llave, intento ir lo más rápido posible hacia la llave, pero al aun no tener la suficiente fuerza solo puedo gatear, al llegar sujeto las llaves, al tocarlas me doy cuenta que se encontraban demasiado calientes, por lo que las suelto, pero al escuchar tan cerca los pasos las sujeto, aguantando el dolor agarro las llaves y las lanzo a una de las jaulas, rezando que pueda ayudarnos.
Los hombres llegan justo después que lo lanzara.
al ver el escenario, se quedaron extrañados sin saber que había pasado, en eso su líder sale de entre los demás.
"tsk"
El hombre hace un gesto de frustración al ver que había perdido una de sus mercancías.
"llévense a los renacuajos donde una esclava que pueda lactar"
Uno de sus hombres nos carga, llevándonos hacia una jaula en la que se encontraba una esclava, esta estaba en las mismas condiciones que todos los demás.
Me mantuve inquieto todo el día pensando en lo que había pasado, esa mujer había muerto, esperaba que esa no haya sido su última vida, esperaba que en su siguiente vida lograse ser feliz de verdad.
En la noche, cuando la mayoría de hombres se encontraban dormidos, escuche el sonido de varias pisadas, de pronto se escuchó un pequeño grito.
Esperando lo peor intento despertar a la mujer, esperando que pudiera hacer algo.
A lo lejos de la jaula, vi una sombra la cual lentamente avanzaba hacia nosotros.
la mujer al verlo, retrocede rápidamente hacia la pared.
De pronto la poca luz que había logra mostrarnos de quien se trataba, era ser con figura humana el cual tenía orejas y cola de lobo, las cuales habían sido blancos pero ahora por la suciedad eran plomos, media 190 centímetros, su piel era blanca como la nieve la cual al igual que su cuerpo estaba lleno de suciedad, en su rostro se notaban los huesos de su cráneo y en una de sus manos tenía consigo una espada la cual era de alguno de los hombres que nos tenían prisioneros, al parecer este era otro esclavo el cual es un okami-mimi
Los okami-mimi son seres mitad hombres, mitad lobo, mayormente tienen rasgos humanos, existen diferentes razas parecidas, cada una con rasgos de diferentes animales, son conocidos porque tienen una magia propia la cual se baza en los animales de los cuales provienen; además de tener una fuerza, sentidos y resistencia mayor a la humana.
"Vine a sacarlos"
Nos susurro mientras aun se escuchaban otras pisadas.
Al parecer, la llave que lance había logrado comenzar una fuga entre los esclavos.
Nos abre la jaula para que pudiéramos salir.
la mujer nos carga para así escapar del lugar mientras el hombre mitad lobo nos sigue por detrás.
Un hombre sale de las sombras, delante de la mujer, este era uno de los esclavistas.
El okami-mimi se pone adelante mientras agarra la espada con sus dos manos en una posición de ataque.
"mira atrás tuyo"
Dice el esclavista mientras sonreía y con su cabeza hace una señal para que volteemos a ver.
Detrás estaba otro de ellos, el cual ya había desenvainado su espada.
Al ver esto, el okami-mimi nos hace retroceder contra una pared, para así ponerse frente a nosotros y ver hacia ambos adversarios.
De pronto quien nos protegía comienza a gritar y taparse las orejas como si un fuerte sonido lo atormentara.
La mujer y yo lo vemos con extrañeza.
"Supongo que no entienden que esta pasando, soy usuario de la magia del sonido y lo que ahora mismo su amigo escucha es equivalente al sonido de la erupción de un volcán [estruendo de enfoque]"
mientras este estaba distraído, los dos hombres aprovechan para acercarse con intención de atacarlo.
Al ver que lo iban a atacar, este sujeta la espada con su boca desde la parte del filo y se clava los dedos en las orejas quedándose sordo, esta acción deja desconcertados a los hombres y paran en medio del camino.
Agarra la espada en su boca y con una pequeña sonrisa dijo.
"Ahora si atáquenme"
"Maldita bestia"
Dijo uno de los hombres enojados el cual al terminar la frase escupe al piso.
[Frenesí del animal] El okami-mimi comenzó a desprender un gran calor de su cuerpo, su pelaje se eriza rápidamente pareciendo agujas y la fibra de sus delgados músculos se contraen.
Uno de los hombres avanza con gran velocidad, llegando tres segundos antes que su otro compañero, usa su espada intentando atacarlo desde el lado derecho para rebanarlo, pero es desviado por la espada del okami-mimi y este aprovecha la apertura que provoca el golpe de espadas para atacarlo; sin embargo, antes que esta llegara a cortar al hombre, su compañero lo intenta atacar por la espalda, provocando que se agache para esquivarlo y rápidamente se gira yendo por detrás de este para patearlo provocando que la espada del hombre atraviese a su compañero el cual intentaba recomponerse del anterior movimiento.
Aprovecha que ambos hombres se encontraban en el piso para embonarlos con su espada.
"sigamos, no podemos quedarnos aquí"
Avanzamos por los pasadizos y en las jaulas donde una vez hubo esclavos ya no había nadie.
"Estamos cerca ya"
Habríamos estado corriendo por tres minutos cuando encontramos por fin la puerta, el okami-mimi la abre, solo para ver afuera a varios de los esclavos amarrados y a otros muertos en la verde hierba mientras los demás esclavistas descansaban sentados.
El líder de los esclavistas, el cual estaba sentado en un tumulto de cuerpos, se para y mira hacia nosotros.
"Con que aún faltaban más e"
El okami-mimi asustado alza su espada colocándose en una posición defensiva y le susurra a la mujer.
"Yo los distraeré, tu corre"
El líder lo señala y hace un gesto con su mano diciendo.
"ven, dame todo lo que tienes pequeña perra"
El okami-mimi en voz baja se dijo.
"carajo, no tengo suficiente mana para usarla de nuevo, solo puedo usar esa"
[aullido de guerra] este comenzó a aullar tan fuerte que todos los presentes tuvieron que taparse los odios.
"¡Corre!"
La mujer rápidamente volteo y comenzó a correr con todas las fuerzas que poseía.
"¡Vayan tras ella!"
Ordeno el líder, haciendo que dos de sus hombres siguieran sus órdenes.
La mujer atemorizada al pensar que la están siguiendo, cierra los ojos y agacha su cabeza mientras corre, pero era muy lenta, ya que al estar tanto tiempo sin poder comer apropiadamente no tenía fuerzas.
El okami-mimi rápidamente va por ellos para intentar pararlos, pero este ya se encontraba cansado por lo cual el líder aprovecha, para alcanzarlo.
Al ver que era seguido voltea y se da cuenta que la espada del hombre se aproximaba a su cabeza, rápidamente la intercepta con la suya, pero este se encontraba muy debilitado por su anterior enfrentamiento lo que provoca que sea sometido por el hombre y termine con una pierna arrodillada
"Adiós"
Dice con un tono frio en su voz, el líder retira su espada del cruce para rápidamente de un movimiento lateral con la espada decapitarlo.
La cabeza cae al piso rodando.
El hombre con una fuerte pisada aplasta la cabeza destrozándola por completo.
la bebe comienza a llorar por el viento frio que llegaba a su piel debido a que la mujer seguía corriendo.
Llega hasta un bosque en el cual entra, los arboles eran altos y verdosos, se veía moho en las piedras, al pisar una de estas se resbala cayendo en el pasto, lo cual es aprovechado por los dos hombres que nos seguían, los cuales al encontrarnos alzan sus espadas para dar el golpe final.
La mujer nos abraza cubriéndonos con su cuerpo, siendo cortado su cuello.
Su sangre cubrió todo mi cuerpo.
Los hombres nos cargaron para llevarnos devuelta donde se encontraba el líder, nos ponen en el piso y este, el cual estaba sentado en la pila de cuerpos como si fuera un trono, habla.
"¡Todos ustedes serán castigados por lo que acaban de hacer, varios de mis hombres han muerto además que me han hecho perder mucho dinero, así que todas las mujeres aquí serán preñadas lo mas pronto posible, para que generen más esclavos; los hombres desde ahora me servirán como guardianes y tendrán que llevar puesto todos un collar de esclavista el cual me pagaran prostituyéndose con hombres en el barrio rojo, además que el alimento se les restringirá durante un tiempo indefinido!"
Todos los esclavos quedaron aterrorizados con sus palabras y se comenzaron a escuchar murmullos por el miedo al saber lo que les esperaba desde ahora.
El hombre, enojado al escuchar tantos murmullos alrededor grito.
"¡Si tienen algo que decir díganlo ahora!"
Los murmullos desaparecieron tan pronto sus palabras habían terminado.
"Así me gusta"
Se comenzó a acercar hacia mí, se puso de puntillas para verme y consecutivamente cargarme.
"Ahora tu serás mi vasallo"
Me quede confundido por lo que dijo, suponía que por las habilidades que mi madre me había dado como su hijo, seria de utilidad para él, yo volteo hacia la bebe que ahora huérfana lloraba en el piso al ser alejada de mí.
El hombre la mira y dice.
"Llévense a todos donde corresponde y a la niña a otra madre sustituta."
Tenia que buscar ahora una forma de protegerla de esos hombres, su madre me la había encargado y no podía defraudarla después de lo que hizo por mí.
Pero ahora era mas fácil, el hombre me tendría como vasallo por lo cual ahora poseí algo de libertad, aunque aun debía crecer y aprender a usar mi magia si quería protegerla.
El hombre me empezó a llevar donde su habitación, en la cual había una cama al costado de la pared, una mesa de trabajo en la cual estaban varios papeles, dos estantes; uno en los que guardaba su ropa y otro en el que había varios objetos mágicos como pociones y libros; y atrás de la mesa había una jaula donde estaban tres esclavas.
Todas con los mismos harapos, pero a diferencia de los demás estas se encontraban alimentadas, no se veían los huesos de su cráneo.
"¡Cuídenlo, será mi nuevo vasallo!"
El hombre abre la jaula dejándome en manos de una de las mujeres.