—¡Rápido, cierra la puerta! ¡No mires más! —El rostro de Hannah se volvió cenizo. Ella no podía entender dónde habían salido mal las cosas; ¡Lily debió haber bebido el jugo de Ella!
Pero el grito de Ella ya había atraído a una multitud de compañeros de clase, que se acercaron preguntando:
—¿Qué pasó?
—Sí, Ella, ¿qué está pasando? —Brandon, Charles y Chloe también se acercaron, con preocupación marcada en sus rostros.
Ella, pálida como un fantasma, señaló hacia la habitación, tartamudeando:
—Lily... Lily, ella...
Al ver la expresión de Ella, varias chicas que eran cercanas a Lily se lanzaron hacia adelante.
—¡Lily está descansando! ¡No la molestes! —Hannah gritó fuerte, tratando de evitar que vieran la horrible escena en el interior, sabiendo que si sus compañeros la presenciaban...
Pero una de las chicas fue repentinamente empujada fuertemente por alguien, causando que se estrellara contra la puerta.