—No te preocupes por tu pecho, ya crecerá, y come pan eso ayuda o eh escuchado. Como sea continuemos, las residencias es en si un espacio mental propio cual se manifiesta totalmente en un gran área, permitiendo que ningún golpe del propietario fallé... ninguno fallará —Su voz seria al hablar sobre las residencias, siendo un tipo de técnica especial cual trae lo mental a lo real. Con los brazos cruzados mientras inhala y exhala antes de continuar, viendo como los ojos de la muchacha brillan de curiosidad —Es decir, podrías golpear, cortar, o lanzar un ataque cual podría fallar pero el daño será percibido por el cuerpo de tu enemigo en menor medida.
—¿Cuánto es una menor medida?, y ¿Cómo se consigue crear uno?, ¿Qué pasa si dos chocan?, y... —Los labios de la mocosa sellados por el dedo índice de su maestra, quien suspira profundamente. Su tono algo cansado a la hora de hablar —No preguntes demasiado, y sobre tus respuestas...
—Como ejemplo de menor media, si te cortas con un cuchillo sin pensarlo podrías sangrar, y si lo haces suavemente solo quedará una línea roja. Ahora, sobre crear uno, necesitas experiencia en combate y encontrarte en momentos extremos que te fuercen a darlo todo, acerca de un choque... solo quien demuestre más pureza en su control de residencia ganará, hay diversas formas, como dar tu sangre, no es mucha pero al finalizar sentirás una gran dolencia, un precio por ganar —Agarraría un Kunai cual sacaría de una bolsa café de cuero, que esta trajo en su llegada al campo de entrenamiento donde se encuentra con Kanya, rápidamente corta su brazo de forma que sangra. Unas cuantas gotas de sangre caen al césped visto por ambas —Solo debes hacer eso, si crees poder continuar con el dolor, sino solo puedes usar barreras para evitar el impacto invisible o de contraataque, te enseñaré algunas mañana. Hay dos tipos de residencias, las mortales, y...
—Divinas, ¿verdad?, creo la arconte electro Raiden Ei usa este tipo, ¿no? —La demonio mira con intriga a su sensei, en espera de una respuesta. Ve como se levanta y se acerca, cerrando los ojos con fuerza como cubriéndose la cabeza con las manos presa del miedo. En su lugar, solo siente como sus manos son quitadas por las fuertes y algo ásperas de la mayor, cual revuelve su cabello suavemente —Eres muy lista, quizás te juzgue mal. Y si, ella puede usar ese tipo de residencia, este tipo se caracteriza por predominar sobre un choque con un mortal, como sus golpes asegurados son más fuertes. Una vez estuve en una, fue una experiencia interesante como dolorosa.
—Pero estas aquí, ¿eso significa qué... ganaste? Digo, los dioses suelen ser mostrados como seres de gran poder, y si tu estas aquí... ¿Cómo de fuerte eres sensei? —La peli roja frunce el ceño, a pesar de su ojo derecho ser el único descubierto, se puede sentir la curiosidad como la seriedad en sus palabras. Una ráfaga de viento aparece entre ambas, en eso una sonrisa aparece en los labios de la belleza hilichurl —Hmph, preguntas mucho hoy, eh, la primera es obviamente mi victoria, y la segunda... mejor te enseño mi residencia.
Juntando las manos rápidamente, con su mano derecha agarrándose a su muñeca izquierda, con el codo levantado y recto en ese momento exacto, mientras la extremidad libre tiene los índice como corazón cruzados, y con el pulgar tocando el anular al estar retraído, igual que el meñique tocan la palma.
—¡Residencia mortal: Mar abisal! —Una cúpula se expandió alrededor del bosque, encerrando a las dos en aquel cuerpo de agua sobre el cual se encuentran de pie. El cielo solo un reflejo de este, la joven mira el piso e intenta tocarlo notando como se ondas de agua redondas se forman por su toque, tras agacharse y se pone de pie nuevamente para encarar a su maestra —Tu residencia es agua, por tanto, serán clones corpóreos de agua, ¿verdad?
—Más que eso, cada uno de ellos son manifestados por tus recuerdos, la manera de como soy consciente de los recuerdos de mis oponentes no te la diré, mi residencia principalmente obtiene las memorias y según las emociones que estas presentan su fuerza aumenta. No esta limitado solo a recuerdos, yo también puedo manifestar los míos, por tanto además del golpe certero, te enfrentarás a oponentes del pasado, y otros trucos más —La mujer se encoge de hombros, con un clon de Kanya emergiendo del agua. Esta copia de ella, luce idéntica al punto de solo ser distinguida por las gotas de agua, como apariencia azulada y celeste. Dando un paso atrás algo aterrada por verse así misma como ver a esta clon suya abalanzándose en dirección a ella, y a punto de asestar un derechazo a sus mejillas.
Sostiene el puño con la palma de su mano izquierda, pero a pesar de ello retrocede, más se mantiene firme, y levanta su rodilla para esta chocar con la de su copia quien intento asestar un rodillazo al estomago, ambas dejan escapar un gruñido leve antes de tomar distancia la una de la otra.
—Sensei, es suficiente, no deseo golpearme la cara a mi misma. Y si es una prueba para que discierna su forma para obtener los recuerdos, ¡no podré hacerlo si estoy en un combate! —Sus gritos hacen eco en la residencia, más no recibe una replica de su maestra. Solo puede escuchar una risa, cual proviene de su copia hecha de agua que levanta su antebrazo y aprieta su puño derecho —Oh, la niña tiene miedo, tu sensei no esta para auxiliarte. Solo será un uno contra uno, puedes negarte a pelear pero, ¿es eso la actitud de una ganadora?
—Tsk, como quieras, me importa una mierda como es que puedes hablarme, solo prepárate para besar el suelo, digo agua —Rápidamente el clon emerge delante suyo con un gancho a la barbilla, cual solo avanza a bloquear con sus antebrazos cruzados. Impulsada hacia al aire protegiéndose el abdomen antes de recibir una patada descendente de su copia, el agua dándole la bienvenida mientras trata de ir a la superficie.
Al dar un vistazo al frente ve como su rival lanza puñetazos cuales se tornan en dragones del mismo líquido que embisten hacia ella ferozmente, limitada y sin opciones nada desesperada hacia la superficie. Con el corazón latiendo a mil por segundo, al sentirse totalmente desesperada por salvarse.
—"Vamos, vamos, vamos, si no soy más rápida que ellos... ¡Nada, hija de puta!" —Con una motivación por sobrevivir renovada, esta consigue llegar a la superficie. Rápida se pone de pie, y comienza a correr hacia atrás perseguida de esas bestias cuales se fusionaron en medio de su vuelo, haciéndose más grande e imponente. Tragando saliva, ella se da la vuelta para ver de frente a la bestia voladora —Todo, lo que necesito, es... ¡Un salto de fe!
Antes de ser atrapada en las fauces del dragón de agua, esta salta alto para aterrizar sobre la cabeza de la bestia como corre hacia su espalda, con un último salto al llegar casi a la cola. El dragón vuela alto como desciende y asciende en busca de golpearla de lleno, desprotegida y sin nadie a su lado esta cierra los ojos.
Percibe como cada gota de agua en su cuerpo se desliza de este hacia el mar azulado bajo suyo, sus sentimientos y emociones como recuerdos se tornaron en nada solo reemplazados por el silencio, hasta que una gota de agua toco la superficie marina. Ese sonido tan relajante como vivo, le hace volver a ver.
Estirando su brazo ya retraído hacia atrás al punto de ser capaz de sentir un leve dolor, esta en vez de gruñir como antes solo mantiene sus ojos bien abiertos recordando un momento en concreto. Tomando un poco de aire, y exhalando mientras la bestia se alza para devorarla.
—¡Ocaso elemental! —Extiende en un rápido instante, su puño con una fuerza bestial como envuelto en rayos azulados y destellos blancos, que enviaría una onda de viento potente que dispersa al dragón en simple agua. Cayendo esta mira hacia el cielo, cual es bello al ser un mero reflejo del mar, una pequeña sonrisa en la cara de la chica de cabellos carmesí quien golpea la superficie acuática, y permanece allí flotando —"Lo hice, realice un ocaso elemental, ¿Cómo se sentirá mi maestra? Si quiera, me vio."
—Lo hiciste increíble, ahora levanta. Solo te deje con tu copia para ver tus limites, y si te superaste, lograr un ocaso elemental minutos después de solo verlo, wow, eres una prodigio —Levantándola de un tirón de mano, Kanya se pone de pie gracias a Mei, que le sonríe alegre como orgullosa. La residencia se desvanece y vuelven a estar en medio del bosque, al lado del lago.
—En fin, trata de recordar ese sentimiento, quizás te sirva para lograr el ocaso si es que vuelves a tener suerte. La lección termino, y recuerda comer bien y entrenar sola, eso ayuda —La hilichurl le levanta el pulgar en signo de aprobación, como orgullo antes de volver a sentarse sobre la roca de ayer. Su alumna solo asiente mientras mira su mano derecha, como si todavía percibe esa fuerza descomunal —Ah, si claro, adiós Mei-sensei, nos vemos mañana.
—"Esa mocosa, tiene un gran futuro. Solo será una lastima si se pierde en el otro camino, de cualquier forma esto es un avance grande, debería exponerla más al peligro a ver que sucede, jeje."