**4, 3, 2, 1... ¡Tiempo completo!**
Soy la única sobreviviente, o mejor dicho, la última en pie, porque creo que el resto de personas están vivas, o eso espero. Tras ser todos encerrados en el gas del castigo, o al menos así lo llamaron la mayoría que sufría y se congelaban, aunque en sí era una batalla campal en un cuarto sin puertas abiertas de 30x30.
Creo que eran las medidas del cuarto. No se permitieron armas a menos que fueran artefactos, solo al desnudo, mano limpia o puño limpio. Se acercó a mí un hombre con un sombrero en la cabeza, una cabellera negra que se notaba a simple vista, vestido para la ocasión y un aire de estar contento con el resultado o su trabajo.
—De 100 participantes, ha sido una mujer quien ha sobrevivido esta dura prueba —dijo el hombre.
—Mira, estás agitada y muy cansada. Al parecer, el gas cristal del hielo no te hizo mucho efecto. Solo tus manos y brazos intentaron congelarse, pero tu cuerpo los rechaza. La mayoría de los participantes cayeron con solo el gas liberado, y solo liberamos un 30% del poder total de un cristal de hielo del semirreino de cristal.
—La mayor parte de los participantes simplemente caían derrotados por el gas. Esos son los más débiles; en un principio, no debieron participar. Y los que lo soportaban intentaban no quedar al otro.
—Tú, por otra parte, descubriste que no era quien ganara, sino quien aguantara más al gas. Lo entendiste todo desde un principio. Tu pelea fue, y la pelea era, quién se mantenía en pie por más tiempo.
—Y para finalizar, solo golpeaste a quien los mantenía en pie por su voluntad. Eso fue magnífico de tu parte.
—Yu Chan es mi nombre. Me presento tarde, así que discúlpeme. Es que me emocioné.
—¿Y puedo preguntar tu nombre?
La chica alza su pecho y dice:
—Titania Da Heilich.
Titania, una mujer de vestimenta mayormente azul, como en este caso, aunque en algunos eventos prefiere el morado porque combina con su cabello, el cual es morado. Su vestido azul está cubierto de perlas de color amarillo que, a nivel microscópico, no se ve la figura de las perlas, que en realidad tienen forma de cadenas. Del mismo color tiene aretes, collar e incluso una pulsera, todo de oro, incluido el rosario en su mano derecha e izquierda.
Sus ojos de córneas azules, con el iris amarillo, la hacían lucir como si entendiera todo, un ser que ya está en la cúspide de su poder, o eso hace parecer. En cuanto a su calzado, tiene sandalias de ángeles blancas, sencillas. Y en cuanto a su personalidad, es perceptiblemente inquebrantable, o allí debe de residir su orgullo.
Titania jadeó luego de decir su nombre.
Yu Chan:
—Excelente nombre. Por cierto, soy de la familia Yu del templo de cristal.
Titania:
—Los Yu son la segunda familia más leal al semirreino de cristal.
—Así es. Yo soy el joven maestro de la casa de cristal principal.
—¿Qué hace alguien como usted en una competencia de los rincones bajos? —pregunta Titania.
Yu Chan ríe de manera espléndida, y mientras disfruta la pregunta, hace un gesto con su sombrero, como si lo estuviera presumiendo o quizás tuvo la intención de enderezarlo, y dijo:
—Esto es solo una cortina. La competencia en sí misma lo es, para elegir a nuestro próximo representante del torneo de los semirreinos.
—¿El torneo de qué? —dice Titania.
—Yo he hecho esto antes. He realizado y ganado esta prueba, y nunca me habían mencionado eso, ni siquiera algo similar.
—Quizás participaste en uno que yo no te vi. Por supuesto, no todas las competencias las veo. Pero es extraño, porque al primero en estas competencias siempre los unimos a las filas de nuestro ejército, o por lo menos otros poderes lo hacen, como sectas o quizás también reinos.
—¿Qué hacían con los otros que ganaron? —pregunta Titania.
—Solo se les da dinero y nada más. Pero no te preocupes, tú has sido seleccionada para participar para la Doncella de Hierro.
—¿No era el torneo del semirreino?
—Sí, pero hay pruebas antes —dice Yu Chan.
—Solo hay un inconveniente, y es que no recuerdo haber aceptado ni torneo ni Doncella de Hierro —dice Titania con voz burlona y partiendo con la fuerza de sus brazos y manos la capa de hielo que ondeaba sobre sus manos y residuos por su brazo, como si un vidrio transparente se hubiera roto en migajas.
—¿Y por qué razón participas en esta competencia? Dinero, fama y estatus no te faltarán.
—Eso es sencillo. Porque soy una estrella amarilla. Mi clan será lo más poderoso, y yo llevo su gloria encima de mis hombros. Lo llevaré al poder absoluto, o mejor dicho, a la cima con resultados y logros. Todo lo conseguiré con el poder que alcance.
—Excelente —dice Yu Chan felizmente—. Esto es todavía más increíble. Trabajaremos juntos. Yo te haré más fuerte, y tú serás leal a mí y a mi semirreino.
—No soy subordinada de nadie. Como verás, todo mi ser y mis cadenas, aretes y joyas, más mi persona, representan a la estrella amarilla más fuerte de todas. Y apenas pueda, aplastaré a todos los otros clanes.
—Impresionante —dice Yu Chan—. Es todavía más implacable de lo que pensé. Entonces, ambos nos ayudaremos y prestaremos cosas, y ambos lograremos grandes logros, Titania Da Heilich.
Titania sonrió y dijo:
—Está bien, hagámoslo.
**Minutos más tarde**
Se encontró el hada Titania rodeada de hombres grandes y fuertes, algunos armados con armas y objetos, y otros con armas blancas. Eran 5 en total, y todos estaban en su mejor condición física. Tanto que el resultado de la batalla ya lo podían ver. Les parecía una ridiculez o una falta de respeto para muchos que los 5 se fueran contra alguien tan débil.
Hablan entre ellos:
—La chica es delgada. Es tan blanca que debe ser que acaba de salir del Polo Norte. ¿Será que es anémica? Parece cansada.
Yu Chan interrumpió el parloteo de estos aprovechadores a simple vista y dice:
—Titania, pasaste la prueba del gas de cristal del hielo, pero no conozco tus habilidades físicas o de combate. Puesto que si te sientes intimidada o quizás no es lo tuyo el combate cuerpo a cuerpo, entonces solo dilo, porque hasta que no muestres resultados, no pasarás de aquí.
Titania cierra los ojos y dice:
—¿En serio cree que estos sujetos tan aburridos y débiles harán que yo muestre mis verdaderas capacidades?
Luego abre los ojos y mueve un mechón de cabello hacia detrás de sus orejas.
—Si es así, ¡ataquen! —dice Yu Chan.
Un sujeto alto con un hacha en la mano dice:
—Yo soy Li Chan.
Titania cerró los ojos al escucharlo hablar.
Li Chan:
—¡Maldita por presumir y cerrar los ojos ante una familia superior a la tuya! (El clan rojo de los guerreros). Te partiré en dos con mi hacha, y yo me quedaré con la Doncella de Hierro.
Li Chan lanza un golpe con el hacha, y el movimiento va desde atrás de la espalda hasta el frente, yendo directo a la cabeza de Titania. Claramente tenía la intención de partir en dos a la hermosa hada de vestido azul, Titania.
Al sentir un aire, Titania abre los ojos, y las perlas de oro en su vestido azul, que eran aparentemente de adorno, fue como si cobrasen vida y sujetaron el hacha que venía a su cabeza.
Los ojos de Titania, azules con su iris amarillo, solo en estas ocasiones brillaban con mayor intensidad.
Yu Chan quedó impresionado. Se levantó de su asiento y dijo:
—¿Acaso posee sangre sagrada de artefactos?
—¿Pero qué es eso?
Yu Chan pudo observar que se transformaron, o que siempre fueron cadenas.
—¿De qué descendencia es esta chica? —era lo único en que pensaba.
Las cadenas de Titania detuvieron completamente el hacha de Li Chan, como si fuese un metal que su hacha no pudiese mover ni un milímetro, mucho menos cortar, con un golpe tan simple. Sin embargo, a la vista era ridículo, puesto que las cadenas eran delgadas y frenaban un hacha tan imponente.
Fue realmente un espectáculo visual. Las cadenas se enroscaron al hacha, y las franjas en el vestido de Titania se desenredaban como si un cono de hilo se le estuviese desenrollando de forma giratoria, siendo el cono el vestido de Titania.
Una vez enrolló bien el hacha, se la arrancó de la mano mediante las cadenas a Li Chan. Los otros hombres salieron a derrotarla o golpearla, puesto que 5 hombres no podían perder contra una simple mujer que se defiende con cadenas.
Titania balanceó el hacha en un giro, haciendo un sonido que cortaba el aire.
—¡Swoooohh!
La giró y golpeó a todos en la rueda con el mango de esta hacha, el cual no tenía filo, y luego se agachó, completando así el giro de 360 grados con el hacha.
Li Chan salió volando y cayó al piso, y los demás tomaron rutas distintas en cuanto a la caída.
Titania seguía en guardia, y el grupo de 5 estaban ya soñando que le ganaban o quizás con otra aplastante derrota.
Yu Chan:
—En verdad eres muy fuerte, Titania —dijo, y se quedó observándola por unos segundos.
Titania se quita suave y delicadamente, despacio, su pulsera de oro y la lanza en una dirección. La pulsera gira y amplía su tamaño a medida que avanza. Titania chasquea el dedo, y la parte de atrás de la pulsera se desabrocha. Ahora mismo parecía una cadena más que una pulsera.
—¡Bam!
La cadena colisionó con la pared, y luego que se disipó el humo del choque, un sujeto estaba presionando con las cadenas y tenía una ballesta al lado.
Titania cerró el puño, y esta cadena se le enrolló como una serpiente y lo elevó, haciendo que sus pies no tocasen el suelo.
Titania puso su mano en palma y dijo:
—Duendes, vengan a mí —en esa posición.
El sujeto comenzó a ir directo hacia Titania a una velocidad más que rápida.
—¡Ahhhh! ¡Suéltame!
Titania recogió las cadenas como un látigo y envió al sujeto de la ballesta a los pies de Yu Chan. Las cadenas se encogieron y volvieron a ser una simple pulsera para Titania.
—¿Es todo, no? —dice Titania.
Yu Chan:
—Quedé impresionado —se levantó nuevamente de su asiento y dijo—: ¿Acaso posees sangre sagrada de artefactos o de alguna descendencia primaria?
—¿Por qué eso es de tu interés?
Yu Chan ríe:
—¡Jajajajja!
—Bueno, antes de continuar, ese que acabas de tirar al suelo no es un enemigo, es mi guardaespaldas.
Titania:
—Lo siento (^_^)!!
—Nada de lo siento. Me golpeaste y tiraste muy fuerte —dice el sujeto.
Yu Chan:
—Jejej, bueno, retírate por ahora, chico. Ya te tendré en cuenta luego.
El chico obedece, y Titania ni lo vuelve a ver.
Yu Chan:
—¿Puedes hablarme del origen de tu poder?
—¿Las cadenas? Bueno, lo que sucede es que los duendes me regalaron un lingote de oro de la vasija sagrada, así que los artesanos de mi clan lo convirtieron en prendas para mí, trabajando muy duro, ya que el lingote no es fácil de forjar algo con él.
—Así es —dice Yu Chan—. Entonces, ¿dices que uno de los 4 duendes al mando del reino de duendes te dio uno de los 3 lingotes que se dan cada 500 años de la vasija sagrada?
Titania responde con una cara sin expresiones:
—Así es. Porque un antepasado de mi clan se ganó su favor, y este se lo regresó con algo del mismo valor a su descendencia, porque ya sabes que aún no se habían cumplido los 500 años. Y para bien o para mal, fui yo la que heredé eso. A mí se me fue entregado el lingote desde antes de nacer.
—Ah, ya recuerdo —dice Yu Chan—. Un clanista del clan Yellow Star colaboró en la batalla de los duendes contra los enanos, y los duendes salieron victoriosos, y a los enanos los avasallaron. De igual manera, debió ser un gran amigo, porque los duendes no cumplen su palabra.
Titania:
—Eso no tengo idea. Además, ya has hablado mucho. ¿Qué más tienes para mí?
—Mmm, Yu Chan, ¿recuerdas que alguien mencionó la Doncella de Hierro?
Titania:
—Sí, el sujeto del hacha y tú.
Yu Chan:
—¡Bueno!
Yu Chan sonrió débilmente, alzó su traje y acomodó su corbata.
—Aún no puedo decirte exactamente qué es. Por el momento, aún no puedes entrar. Aún queda una prueba más. Eres un gran talento, pero la última etapa está al frente de ti.
Titania:
—¿One vs one contra ti?
Yu Chan:
—Exacto. Sin embargo, descansa y tómate tu tiempo. Mañana nos enfrentaremos.
Titania:
—¿Está usted enfermo o se siente mal, señor Yu Chan? Porque yo me siento de maravillas y en plena forma.
Yu Chan:
—Espero que esa arrogancia no te cueste la Doncella de Hierro.
Yu Chan se quita el sombrero negro, y sale su cabellera negra recogida a la luz y a la vista.