*Arealla*
"Ahora mismo está estresado. Seguro que sabe lo que quieres decir. Voy a hablar con él", me dijo Liana, mientras seguía a su hermano a la puerta.
Cerró la puerta tras de sí y la oí pronunciar el nombre de su hermano.
Y entonces, sin más, me quedé solo en todo este lío.
No estaba tan segura de que Marcus entendiera mis palabras como Liana. Y sabía que aquí había un gran problema que había que solucionar.
Y sólo había una manera de resolver toda esta situación.
Tenía que hablar con Jason.
Él era quien lideraba la insurgencia. Los lobos se reunieron a su alrededor y se basaron en su conocimiento de mí, y en el hecho de que él me había traído a la manada, para fundamentar su afirmación de que no se debía confiar en mí.
Si lograban convencer al resto de la manada de lo que ellos pensaban, que yo era el culpable o el causante de todo el caos y el desorden en la manada, entonces ponían a Marcus en una situación muy difícil.