Capítulo 5 parte 3
La primera en llegar es Miru-chan, ella se ha encargado de limpiar la mesa en donde nos sentaremos, Seji-sensei se encarga de atender a los pocos clientes que quedan mientas que Kibo, Chie y yo revisábamos la presentación.
— Oigan, ¿alguno de ustedes dos recuerda cómo citar lo que dijo una persona en la bibliografía?
Kibo pone una cara irónica.
— Qué, ¿quieres citarte a ti mismo?
— ¿A quién más citaría? Sabes que hay nula información sobre los diamantes en internet.
Chie también pone su cara irónica.
— Mejor no pongas referencias.
Muy molesto volteo a ver a Chie.
— ¡Eso es una falta de respeto! ¡¿cómo mis lectores van a saber de dónde saqué la información?!
Kibo se exalta.
— ¡Cállate y solo pon "gracias" al final!
Mientras nosotros discutimos sobre las referencias bibliográficas, entra Nekoyashiki-chan tan ruidosa como siempre, viene acompañada de Chisato-chan, tan callada como siempre supongo…
— ¡Senpai!
— Con permiso…
Me levanto para recibirlas y darles la bienvenida.
— Bienvenida, Neko-chan, ¿eh? ¿invitaste a Chisato-chan?
— ¡Sí! Miru-senpai me dijo que probara las pupusas que aquí se preparan y aprovechando que venía a la reunión le dije a Chisato que venga conmigo para probarlas juntas.
…
¿Qué sentido tiene eso?
Además, ¿tan bien se llevan Neko-chan y Miru-chan como para hablar de esa clase de cosas?
— Oye, mejor hubiéramos pedido a domicilio. — le dice Chisato-chan a Neko-chan.
— Verás, aquí en la pupusería no tenemos servicio a domicilio, así que…
En eso Seji-sensei se me acerca por detrás, me pone una gorra y una mochila de repartidor y me dice:
— ¿En serio? ¿entonces por qué te vistes así si no irás a repartir?
— ¡Oiga! ¡Seji-sensei!
Todos empiezan a reírse mientras yo estoy enfurecido.
En eso, Miru-chan llega a recibirlas.
— ¡Bienvenidas, pasen adelante por favor!
Neko-chan y Chisato-chan siguen a Miru-chan hasta la mesa.
Tanto "chan" que estoy diciendo hace que se me traben las palabras…
— ¿Puedo traerles algo? Tenemos chocolate, agua, soda, café, horchata…
— ¿Qué es horchata? — dice Chisato-chan muy confundida.
Seji-sensei voltea a verme y me dice:
— Ella es muy trabajadora y eso que realmente no trabaja aquí, a ver cuándo aprendes.
Antes de que le dijera nada a Seji-sensei, entra Hiroki.
— H-hola.
En eso llega Miru-chan, lo toma del brazo y se lo lleva a la mesa.
— ¡Bienvenido, aquí estaremos todos!
Se nota que Hiroki se ha sonrojado un poco, es algo extraño viniendo eso de él…
Pasado todo eso me dirijo a mi lugar mientras los espíritus de nuestros diamantes preparan las diapositivas y Seji-sensei sigue preparando las pupusas para los clientes y para nosotros.
Todos parecen bastante tímidos, Neko-chan y Chisato-chan esperan en silencio la comida, Miru-chan esperaba a Seji-sensei en silencio mientras que Hiroki con cara de confusión se me queda viendo.
Es un momento realmente incomodo…
Siento como su mirada me penetra…
De repente, Hiroki suelta un golpe en la mesa y se pone de pie bastante molesto y confundido.
— ¡¿Qué hacen aquí estos dos idiotas?!
Mi rostro dibuja una expresión de ironía y le respondo:
— Si con "dos idiotas" te refieres a mí y a ti no podría estar más de acuerdo con lo segundo…
Hiroki muy molesto me voltea a ver y señala a Neko-chan.
— ¡Obviamente me refiero a ti y a la niña loca que destruyó medio instituto!
Neko-chan furiosa también se levanta para regresarle el insulto…
— ¡¿A quién llamas idiota, idiota?! Además, ¡¿Quién diablos eres tú?! ¡ni siquiera te conozco y me faltas el respeto, idiota!
Esta niña ha dicho la palabra "idiota" tantas veces que me hace dudar, su lenguaje no es de alguien de su edad, es el de algún viejo molesto…
Mientras ella gritaba se le hace un corte en el rostro y comienza a sangrar de este.
Miru-chan se muestra preocupada por Neko-chan, pero a pesar de eso ellos dos siguen gritándose.
— ¡Pues si no sabes quién soy déjame decirte que soy Hiroki!
— ¡Yo soy Sumire, mucho gusto!
Ambos hacen un puchero y regresan a sus asientos aun molestos y el corte del rostro de Neko-chan sana.
Para intentar calmar un poco la situación Miru-chan decide intervenir con unas palabras.
— ¡Bien, al parecer comenzamos a llevarnos bien jajaja…!
…
Chisato-chan y yo estábamos con un rostro serio y despreocupado a pesar de la situación, supongo que se debe a la incomodidad que ambos sentíamos…
Pasa un minuto de silencio incomodo nuevamente, pero finalmente los espíritus de nuestros diamantes acaban, los últimos clientes del lugar se marchan, Seji-sensei cierra la pupusería y finalmente toma asiento.
Ai apaga las luces del lugar quedando este muy oscuro, Chie se acerca muy emocionado para empezar.
— ¡Bien! Ya es momento de hablar de todo lo que sabemos hasta el momento.
Se muestra la primera diapositiva con el logotipo del instituto Adachi, el nombre del tema y los nombres de los autores de las diapositivas.
Todos se me quedan viendo raro…
— Ya dejen de verme así… es por si piden trabajo de esto en el instituto…
Yasuragi pasa a la siguiente diapositiva con una foto de todas las marcas de los diamantes que poseen y mi diamante salido.
— Como ya sabrán, ustedes son los portadores de un diamante…
Neko-chan interrumpe para hacer una pregunta.
— Tengo una pregunta, ¿de dónde sacaron las fotos de las marcas de nuestros diamantes? Que yo sepa no hay información sobre eso en internet y mi diamante está casi en mi espalda y no recuerdo haberlo fotografiado…
Antes de que continue decido interrumpirla.
— Eso es lo de menos, Neko-chan, mejor volvamos a la presentación…
Al parecer todos se me quedan viendo con cara de incomodidad…
Realmente no es nada malo, ¡es obvio que son ilustraciones! ¡solo un enfermo mental se metería a sus casas en secreto a fotografiar esas marcas!
Obviamente no hice eso…
Chie continúa con el tema.
— Ujum, como les decía, el diamante del amor que lo poseen Miru y Ai, el de la fuerza que lo poseen Hiroki y Chikara, la paz de Sumire y Yasuragi, la inteligencia de Seji y de mí, y, por último, la esperanza; de Rasec y Kibo… una vez ya sepamos todo eso de nosotros pasemos a recapitular todos los datos que sabemos hasta ahora.
¿Por qué nos mencionó de último y con tanto suspenso? Creo que le doy demasiada importancia a cosas tan pequeñas.
Yasuragi pasa a la siguiente diapositiva.
Puedo notar el excelente equilibrio entre texto e imágenes, realmente estoy orgulloso de mi presentación…
Seji-sensei comienza a dar el siguiente punto.
— Existen dos tipos de espíritus de los diamantes, los normales que son ustedes y los invertidos, sabemos que los normales habitan en los diamantes cuyo propósito de uso sea noble y puro mientras que los invertidos por lógica y por lo sucedido en el instituto suponemos que habitan en los diamantes cuyo propósito del portador sea corrupto e impuro.
Después de su explicación me pongo de pie para hablar al respecto.
— En mi batalla con Neko-chan me percaté que el poder y la velocidad del portador de un diamante invertido aumenta con la fuerza de la lluvia, noté eso al ver lo inestable que se volvió de repente cuando comenzó a llover fuerte porque en la montaña se notaba el ambiente denso, pero no denotaba un peligro mortal. Estamos a punto de entrar en invierno así que debemos ser precavidos ya que algún portador de un diamante invertido podría aparecer y meternos en serios problemas.
Seji-sensei y yo volvemos a nuestro asiento y me pongo a pensar en alguna posible idea para afrontar el invierno, al parecer todos comienzan a pensar a excepción de Chisato quien voltea su cabeza para vernos a cada uno de nosotros.
Muy confundida nos dice:
— Pensé que veníamos a comer pupusas…
Seji-sensei muy confundido voltea a verla.
— Es verdad, no me di cuenta de que había alguien más aquí, ¿y tú quién eres?
— Soy Fujisaki Chisato, mucho gusto…
Neko se rasca levemente la cabeza y con cara alegre le responde por qué está ahí:
— ¡Jajaja! Es que la traje para que venga a probar las pupusas.
Hiroki muy confundido voltea a ver a Chisato, se queda un momento en silencio y se cuestiona algo.
— ¿Por qué hablamos de esto frente a ella?
Miru-chan alegremente le responde:
— ¡Quizás ya es parte de nuestro equipo!
— Me niego… — respondió Chisato-chan muy fría y seriamente.
En eso, Yasuragi cambia de diapositiva y Kibo va al frente para hablarnos del siguiente tema.
— Ujum, me temo que si te puede interesar esto. — responde Kibo dirigiéndose a Chisato-chan.
Dirigiéndose nuevamente a todos continúa con el tema.
— Por ahora solo sabemos que Miru y Sumire son las únicas que han podido crear un arma, el de Miru es un arco y el de Sumire es un báculo, los ataques de Miru son a distancia, por ende, no puede luchar cuerpo a cuerpo porque tendría una gran desventaja.
Yasuragi se acerca a nosotros para continuar con el arma de Neko-chan.
— En el caso de ti, Neko-chan, solo puedes elevar, agregar y fortalecer atributos como la velocidad, la fuerza o cosas relacionadas, posees el diamante de la paz y por eso no puedes luchar porque de hacerlo harías que el diamante te rechace aun cuando tus sentimientos o acciones sean nobles.
Luego de lo dicho por Yasuragi me dirijo hacia Neko-chan y a Chisato-chan.
— Por ese motivo necesitamos a alguien que pelee por ella ya que su poder no puede ser dado al portador de otro diamante según nos cuenta Yasuragi, creo que tu serías perfecta para esto.
— No estoy interesada…
…
Se me hace imposible intentar convencerla… pero al parecer Neko-chan sabe cómo.
— Tú practicas magia oscura, ¿verdad?
— Sí, pero nunca funciona…
… ¿Habré oído bien? ¿Neko-chan le preguntó si practica magia oscura y esta le responde que sí?
Mientras todos nos quedamos estupefactos Kibo con toda confianza se les acerca para hablar con ellas y dar un dato interesante.
— Con el poder que te brinde Sumire te aseguro que todos esos hechizos funcionarán, y mejor de lo que te podrías imaginar.
— ¿Eh?
Luego de eso, Chisato se pone roja como un tomate, al ser ella algo pálida se le nota a simple vista, al parecer se sintió un poco "emocionada" porque podrá hacer magia negra…
— B-bien, estoy dentro…
Respondió con una voz temblorosa y aun sonrojada…
Muy preocupado decido darle un importante aviso.
— No le cuentes nada de esto a tu hermano o de seguro me mata.
— Entendido…
Volteo a ver a Hiroki, se notaba un poco confundido con todo lo que está pasando, incluso ha estado un poco callado durante toda la presentación.
— ¿Sucede algo?
— ¿Eh? Que te importa, tú a lo tuyo.
Eso me pasa por preocuparme por los demás…
Yasuragi pasa a la siguiente diapositiva mientras que Chikara y Chie pasan al frente para exponer el punto siguiente.
— Bien, una vez aclarado eso debemos tener en cuenta que el enemigo podría aparecer en cualquier momento durante el invierno.
— Por eso tenemos que crear actividades y planes de entrenamiento para cada uno de ustedes en el caso de que tengamos que defendernos. Miru debería ir al club de arquería de la ciudad.
Mientras explicaba, Chie saca un mapa de la ciudad con el club de arquería señalado en este.
Kibo se acerca para exponer el punto siguiente con respecto a los entrenamientos.
— Sumire puede crear un arma, pero no puede pelear; aun así, necesita aprender a defenderse por si el enemigo ataca, no podemos arriesgarnos a perder a alguien del equipo así que te sugiero que tomes clases de gimnasia, puede ir con Chisato si quieres.
Sumire y Chisato asienten con la cabeza afirmando que entendieron lo que tenían que hacer ahora.
Yasuragi pasa a la siguiente diapositiva, Seji-sensei y Kibo pasan a exponer con respecto a mi entrenamiento y al de Hiroki.
— Por lógica deduzco que el arma de Hiroki debe ser cuerpo a cuerpo, creo que la mayoría no saben, pero soy maestro de artes marciales así que yo te entrenaré aquí.
Hiroki le dice que lo ha entendido, pero a la vez parecía no agradarle la idea subir tantas escaleras y pasar tiempo conmigo.
— Kibo, continua con lo otro.
— Bien, ya que no sabemos nada del arma de Rasec, ni yo… supongo que tendrá que entrenar aquí con Seji y Hiroki.
— ¡¿QUÉ?!
¡¿Tendré que entrenar junto con el?!
Me dirijo desesperadamente a Seji-sensei.
— ¡Seji-sensei! ¿podría no entrenar?
Hiroki con cara de orgullo voltea a verme.
— Je, así que me tienes miedo…
Seji-sensei interviene poniéndose entre medio de los dos para poner orden.
— Discutan eso mañana en el entrenamiento.
Hiroki y yo muy incomodos volteamos a ver al lado contrario de cada uno.
Otro silencio incomodo se apodera del lugar…
Habría sido mejor si nunca hubiera tocado este diamante…
Capítulo 5 parte 4
Mientras el silencio incomodo se apodera del lugar, no habían terminado de presentar las diapositivas con las referencias bibliográficas cuando ya estaban guardando todo.
En eso, Chie enciende la luz, se acerca al reproductor de música ambiental y lo enciende.
Me sorprendo al escuchar que lo que está sonando son cumbias, pero rápidamente me tranquilizo porque es lo que pone normalmente Seji-sensei aquí.
Se escucha el rugir de todos nuestros estómagos, incluso el de los espíritus de los diamantes.
— ¿Podemos comer ya…? — pregunta Chisato-chan muy seriamente.
Seji-sensei se dirige al mostrador y comienza a ponernos platos con pupusas sobre la mesa.
— He preparado unas pupusas para todos, apliqué la técnica de Reina-dono-sensei para hacerlas, procuren disfrutarlas.
Desde kilómetros se podía notar la emoción de Hiroki, por eso Miru-chan le pregunta:
— ¿Entonces si te gustan las pupusas? Creí que no te gustaban.
Chikara se mete en la conversación con rostro serio.
— Su mamá le dice que tiene que comer para ser más grande y fuerte.
— ¡Oye, cállate!
No fue difícil que todos escuchemos eso, Neko-chan no aguanta la risa por lo que dijo Chikara.
— ¡Ajajajaja! ¡grande y fuerte!
El ambiente de la nada se torna alegre y deja de ser incomodo.
Seji-sensei nos sirve a todos chocolate mientras hablamos de cosas realmente irrelevantes.
Entre todo esto, por algún motivo empiezo a sentirme raro.
Me empiezo a sentir mareado, casi como si estuviera dejándome llevar por el ambiente…
Parece que todos estamos en ese mismo estado mismo estado.
Las pupusas que ha preparado Seji-sensei saben tan bien como siempre.
Miru-chan alegremente nos propone algo y Neko-chan parece confundida.
— ¡Sigamos hablando sobre nosotros mientras jugamos un juego!
— ¿Un juego?
Rápidamente recuerdo que tengo un juego de mesa por aquí.
— Saben, creo que por aquí hay un juego de mesa que conseguí de mi país natal.
Me dirijo al almacén de la pupusería y saco el juego de mesa que tenía ahí guardado.
Seji-sensei se levanta de su asiento y nos dice:
— Mejor reabriré la pupusería, si quieren jugar háganlo ustedes.
Hiroki también se aleja un poco de nosotros con una cara algo roja por algún motivo.
— Paso, mejor haré otra cosa.
Al parecer, jugaré contra las chicas…
Ellas y yo comenzamos a jugar este juego de mesa.
Se escuchan risas e historias graciosas mientras tomamos jugo.
Me empiezo a sentir mucho más mareado, parecía que me estaba embriagando poco a poco al igual que las chicas y Hiroki.
No sé qué tendrá este jugo que no puedo dejar de tomarlo…
Chisato-chan cae en una casilla para tomar una carta, incluso ella parece estar un poco sonrojada.
Toma una carta y con su dulce voz lee lo que en ella está escrito.
— "La Tuty se quedó sin comida, desembólsate 100 colones…"
Esa carta me hizo recordar algo muy triste.
— ¡Jaja! Qué recuerdos de la Tuty…era mi perrita, pero murió…
Comienzo a llorar, ya no pienso claramente, ¿este jugo tendrá algo?
¡Este Chie! ¡No debimos dejarlo a cargo de las bebidas!
Todos se me quedan viendo raro, las cumbias salvadoreñas no paran de sonar.
— Bien, mi turno.
Tomo los dados y los arrojo.
— uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis… parece que tengo que sacar una carta.
Al tomar la carta leo lo que en ella está escrito.
— ¿Qué te salió, senpai?
— "Salga gratis de la cárcel"
Luego de leer la carta volteo a ver de reojo a las chicas, ¿eran tan bonitas cuando llegaron?
Incluso Neko-chan y Chisato-chan se me hacen bastante atractivas a pesar de ser cinco años menores que yo…
— ¡Supongo que esto me será muy útil! *hip*.
¿Realmente me estoy embriagando? Espero que no sea el caso porque si no esto sería conllevaría a un verdadero problema.
Neko-chan toma los dados muy alegremente.
— ¡Mi *hip* turno! Uno, dos, tres, cuatro… compañía de luz, ¡La compro *hip*!
Ya no pienso claramente, y al parecer las chicas tampoco…
¡Es momento de dejarme llevar por el ambiente! ¡maldita sea! ¡ya no hay marcha atrás!
Los espíritus de nuestros diamantes están realmente borrachos, ellos si bebieron realmente alcohol, aunque a este punto no sé si nosotros también.
Chie se le acerca a Hiroki bastante confiadamente, Hiroki se encuentra bastante adormitado hasta el punto en el que parece estar muy tranquilo.
— ¡Hi *hip* roki, mi hermano! ¡hay que poner una empresa de ascensores para subir montañas!
Muy confiadamente me meto en su conversación.
— ¡Sho también estoy dentro!
— Calla, serías nuestro único cliente.
Mientras hablábamos de eso empieza a sonar una de mis canciones favoritas.
¡"Yo te necesito" de Los Bukis! ¡de las mejores canciones!
— ¡Wuuuu! ¡Chie, trae otra ronda de ese jugo de naranja!
— ¡Marshandooo! Je, si claro… jugo de naranja, ¡jajaja!
Seji-sensei se muestra algo incomodo y furioso.
— ¡Niños cálmense, eso no tiene alcohol, después van a hablar mal de mí!
Es su culpa por dejar ese tipo de música puesta.
Mientras sigo bebiendo de ese extraño jugo de naranja observo que Kibo está hablando con un trapo, otra vez…
— Eresh la única que puede hacer que olvide a la chica de color rojo…
Él se ha quedado hablando con el trapo, los demás teru teru bozu se encuentran alegres bailando.
Pocos lo saben, pero Seji-sensei también vende el alcohol que prepara, por eso y gracias al ambiente entraron algunas personas para beber.
Parece que no les importa que haya niños que actúan como si estuvieran borrachos.
Neko-chan estaba abrazando a Chisato-chan, sus rostros están realmente apretados entre sí, Neko-chan alegremente cierra sus ojos.
— ¡Chisatooo! Yo te quiero un… *hip* musho… eres mi mejor amigaaa.
— Oh… yo también te quiero, Neko-chan…
Chisato-chan cierra lentamente sus ojos mientras Neko-chan la abraza.
— ¡También quiero musho a Uraseku-kun! — dice gritando.
— Sí, sí, sho también…— le respondo sin saber de qué hablan.
Neko-chan se sonrojo y abraza con más fuerza a Chisato-chan.
— ¡Yo los quiero a todos! — grita alegremente Miru-chan.
— ¡Ah!
Neko-chan se exalta.
— ¡Hubieran visto al hermano de *hip* Chisato ayer! Se estaba besando con cuatro mujeres en el bar, ¡dos por cada lado! ¿verdad, Chisato?
— Seh…
Ya están empezando a decir mentiras…
No es algo que realmente me importe, pero de igual forma me gustaría ver a donde llega todo esto.
Hiroki se exalta debido a que Makoto es también el líder del club de atletismo.
— ¡¿Quéééééééé?! ¡y lo creíamos todo correcto e inocente!
— ¡¿Verdad?! Incluso les pidió su teléfono a todas, ¡y Uraseku aceptó casarse conmigo! ¿verdad, Uraseku?
Empieza a sonar la canción "Recuerdos" del grupo algodón, un grupo de música salvadoreña como ya es costumbre.
Eso me trae algunos recuerdos…
— ¡Esa canción… es la mejor!
Nuevamente empiezo a llorar…
— Oye, respóndeme…— dijo Neko-chan con su cara seria.
Empiezo a sentir mucho sueño…
Hiroki a punto de dormirse se da una cachetada para reaccionar, todos volteamos a verlo y golpea la mesa y se pone de pie.
— ¿Y si mejor hacemos otra cosa?
Neko-chan se pone de pie y alegremente alza la mano.
— ¡Hay que *hip* jugar al rey!
— ¿Qué es eso?
Neko-chan saca de algún lado unos palillos de madera, unos más pequeños que otros y con números escritos en ellos.
— Tenemos unos palillos, el que saque el más pequeño será el rey y este dirá un número, le pedirá lo que quiera al que tenga el número que mencionó el rey.
¿Por qué tendrá guardadas esas cosas…?
Miru-chan medio adormitada responde alegremente:
— ¡Suena divertido!
Hiroki que estaba de pie se sienta tranquilamente.
— Bien, le entro.
Justo antes de empezar comienza a sonar "Ven porque te necesito" de un grupo musical llamado "Los temerarios".
Este tipo de música solo hace que me sienta más borracho a pesar de no haber bebido nada.
Todos toman un palillo, me sale el número dos, el palillo es largo; por ende, supongo que no soy el rey…
— ¡Yo soy el rey!
Neko-chan se pone de pie alegremente.
— A ver… quiero que me cargue en sus brazos el número… ¡tres!
Hiroki molestamente se pone de pie.
— ¡¿Eh?! ¡yo no te quiero cargar!
— ¡¿Eh?! ¡¿tú eres el número tres?! ¡yo no quiero que me cargues!
Chisato con una cara sonrojada y picarona le responde:
— Son las reglas…
— ¡Sí, cárgala! — responde Miru-chan.
— Hazlo, Neko-chan. — le digo para que se tranquilice.
— S-solo porque Miru-chan lo dice…
— S-solo porque Uraseku lo dice…
Neko-chan se deja cargar por Hiroki, ambos están sonrojados.
Justo cuando sus miradas se cruzan, Neko-chan se pone más nerviosa.
— ¡Suficiente!
— ¡Ah!
Neko-chan se suelta y empuja a Hiroki haciendo que ambos caigan al suelo, el gato que siempre lleva Neko-chan le gruñe a Hiroki y lo rasguña.
Otra vez todos sacamos un palillo y nuevamente, no soy el rey…
— Ahora soy el rey.
Exclamó Chisato con extrema confianza y seriedad a pesar de estar sonrojada por estar medio embriagada por el ambiente.
— Según las reglas tengo que pedir algo más extremo, a ver… quiero un beso en mi mejilla del número… uno.
— ¿Eh? Ah, soy el uno…
Respondo medio adormitado.
— Ahora cumple.
— Ya que…
Me acerco a Chisato-chan, aparto el cabello de su rostro y beso su mejilla.
— Oh…
Ella se sonroja más de lo que ya estaba.
— ¡Grrr! ¡No se puede *hip* confiar ni en mis amigas!
Neko-chan y su gato Nyakoshi comienzan a gruñir al mismo tiempo.
En este momento estoy agradecido de tener la carta para salir gratis de la cárcel… pero mejor la guardaré hasta que realmente la llegue a necesitar…
Solo espero que en un juicio real me la acepten…
— Aww, ¡sigamos jugando! — exclamó Miru-chan alegremente.
Me dispongo a querer ser el rey para poder hacer algo con Miru-chan.
Como ya es costumbre, no me ha tocado ser el rey…
— Ahora yo soy el rey *hip*. — exclamó Hiroki.
— Y no sé… quizá podría darme un apretón de manos o…
Miru-chan lo interrumpe.
— ¡No! Tiene que ser algo más extremo que lo anterior… ¡Ya sé! ¿y si se toman de las manos, se miran a los ojos y se dicen "te quiero"? ¡Jajajaja!
— ¡Pues eso será!
¡Maldición, no debo permitir que Hiroki elija a Miru-chan! Pero ¡¿cómo haré eso?!
Aunque realmente me siento con mucho sueño como para hacer algo, ya que… el juego trata de esto después de todo.
— Quiero hacer eso con el número… ¡cuatro!
Espera… ¡¿Qué?!
Me pongo de pie bastante estupefacto.
— ¡Y-yo soy el número cuatro!
— ¡Maldita sea!
Miru-chan me empuja hacia Hiroki.
— ¡Vamos, Uraseku-senpai, que no te de pena!
Kibo se me acerca para vernos y me dice:
— Es cierto Rasec, que no te de pena… *hip*
Tch, si me metí en este juego tendré que hacerlo.
Miro la cara de furia de Hiroki, pero el igual sabía que teníamos que hacerlo…
Ambos nos tomamos de las manos y como decía el reto, nos miramos directamente a los ojos.
Por algún motivo él se sonroja más de lo que ya estaba…
¿Tendrá algo que ocultar? Para mí no es algo por lo cual deba sonrojarme…
— T-te quiero…— decimos ambos al mismo tiempo.
Se mira el flash de una cámara, no le tomé mucha importancia en ese momento.
Todos comienzan a reírse en el local y Hiroki me suelta y me golpea dejándome tirado en el piso.
El tiempo pasa relativamente rápido, Miru-chan pone en una de las mesas una caja blanca mientras que los espíritus de nuestros diamantes están tirados en el piso todos borrachos.
Todo mientras suena de fondo un mix de Los Temerarios, un grupo musical bastante bueno para esta ocasión…
De la nada comienza a llover y eso solo hace más depresivo el ambiente.
Todos estamos bastante agotados.
Yo realmente ya no puedo más…
Miru-chan aun alegre pero algo decaída abre lo que hay dentro de la caja.
— Realmente no se hacer pasteles, ¡pero este lo hice con mucho amor!
Neko-chan se despierta abruptamente y por algún motivo muy alegre.
— ¡Bien!
Chisato-chan, Hiroki y yo estamos bastante cansados y deprimidos casi dormidos en una de las mesas.
Seji-sensei termina de guardar las cosas y se dirige hacia nosotros.
— Acabo de cerrar, ya es muy tarde y deberían irse a casa.
— ¡Solo compartiremos este pastel!
— Bueno, ya que, entonces supongo que los acompañaré.
Seji-sensei se sirve un trozo de pastel y saca un tenedor de su bolsillo que por algún motivo tenía ahí.
— Buen provecho.
Seji-sensei es el primero en darle un bocado, luego de eso escupe el trozo que comió, pone una cara extraña y finalmente cae al piso.
Hiroki intrigado pregunta:
— ¿Le habrá dado un paro cardiaco?
Dentro de mi tengo un mal presentimiento, pero realmente no me importa.
— No lo sé, voy a probarlo. — respondo ignorando lo que pasó.
Lo probamos todos y uno a uno fuimos escupiendo lo que comimos y caemos al piso.
La lluvia se intensifica mientras que todos quedamos inconscientes tirados en el piso del restaurante.
Realmente siento que esto fue una clase de limpieza cerebral, definitivamente no recordaré nada de esto mañana…
Capítulo 5 parte final
Durante la fuerte tormenta de la madrugada suceden muchas cosas.
Al otro lado de la montaña un hombre es perseguido por otro que parece ser joven.
— ¡Por favor, tenga piedad!
El hombre huía aterrado hasta que finalmente tropieza y cae a la grama del piso.
Se acerca alguien con cabello rojo intenso y en su brazo se muestra un diamante color negro con brillo rojo.
Sale lo que parece ser un teru teru bozu invertido, de color negro y con voz de ultratumba.
— Acabalo… Kira…
La persona de cabello rojo saca un arma de fuego y si pensarlo tira del gatillo.
— ¡Ghagh!
Ese disparo acaba con la vida de la otra persona dejando una mancha de sangre en la fría grama de las faldas de las montañas.
Se le ve un ojo de color rojo con una herida con forma de cruz.
Luego de cometer su acto este sonríe cruelmente.