Christofer.
Son como las nueve de la noche y no sé porque me siento como intranquilo, es una sensación extraña que solo llegue a sentir el día en que Mariana murió. Siento una opresión en el pecho que se vuelve un poco desesperante y algo asfixiante mientras trato de ver algo de televisión, pero como no me puedo concentrar en lo que estoy intentando ver, empiezo a caminar de un lado para otro como inquieto, hasta que decido salir un momento a la terraza de mi habitación para que el viento me sople un poco en la cara y me ayude a despejar la mente.
Estoy sumergido en mis pensamientos cuando escucho sonar mi celular adentro de la habitación, tomo una bocana de aire y luego respiro profundamente para después ingresar de nuevo y coger el teléfono. Cuando miro quien me llama, me sorprendo enormemente.
- Hola Gwen. - Digo al contestar.
- Buenas noches Christofer, te pido una disculpa por molestarte a estas horas. - Me responde ella algo apenada.
- No te preocupes Gwen, para eso te di mi número, para que me llamaras cuando necesitaras algo o quisieras hablar conmigo.
- Ok, te llamo porque como sé que trabajas con Stefania Hayden, pensé que tal vez me podrías decir que tipo de flores le gustan a ella para llevarle mañana al hospital.
- Qué?, cómo que al hospital?... - Digo alarmado.
- Discúlpame, pensé que sabías que ella esta hospitalizada...
- Y tú cómo sabes eso?. - Le pregunto aún más preocupado.
- Bueno, lo que pasó es que me solicitaron un servicio a domicilio para el hospital y resultó que la persona que pidió el servicio era el padre de Stefania, creo que se llama Jhonatan, verdad?.
- Si, ese es su nombre.
- Bueno, pues él solicitó el servicio y ahí me enteré de que ella esta hospitalizada. - Me dice ella y yo no puedo creer lo que estoy escuchando. Ahora entiendo por qué me siento tan intranquilo.
- En qué hospital está?. - Ella me responde y yo de inmediato la interrumpo antes de que siga hablando.
- Gwen... después hablamos, tengo que colgar ahora, gracias por avisarme. - Le digo y de inmediato cuelgo.
De inmediato, me pongo un conjunto deportivo al quitarme la ropa de dormir, cojo mi celular y las llaves del auto, luego salgo como alma que lleva el diablo sin decir nada a nadie. Conduzco como un completo loco y rezo para que nadie me detenga, ya después pagaría todas las multas que fueran necesarias.
Al llegar al hospital, me apresuro a preguntar en la recepción por ella y efectivamente, Gwen no se había equivocado con la información que me dio. Stefania está internada en el hospital.
- Si señor, ella está internada pero no puede verla en este momento porque ya se acabó el tiempo para las visitas. - Me dice una enfermera en la entrada.
- Por favor, necesito ver a la paciente. - Ruego desesperado para que me dejen verla.
- Ya le dije señor que no es posible, venga mañana por favor.
- Christofer?... - Me giro en cuanto escucho mi nombre y suelto el aire por la boca que estaba reteniendo por culpa de la ansiedad cuando veo al señor Hayden.
- Señor Hayden...
- Qué haces acá?. - Me pregunta el señor Hayden muy sorprendido al verme.
- Discúlpeme por venir aquí sin decir nada, pero es que me comunicaron que Stefania está internada aquí y estoy muy preocupado.
- Si, es cierto. Tuvimos que traer a mi hija aquí porque tiene paralizado todo el cuerpo y tampoco puede hablar.
- Cómo es posible?... - Digo en voz baja muy sorprendido y mucho más preocupado que antes.
- Me acompañas a la cafetería, creo que es mejor hablar ahí. - Me dice el señor Hayden un poco más tranquilo que yo.
- Si, por supuesto...
Caminamos por un par de pasillos más en completo silencio cuando llegamos a la cafetería, pedimos un par de cafés y luego nos sentamos en una mesa algo retirada para poder hablar con algo de tranquilidad y privacidad, ya que también por la hora, el lugar está un poco vacío.
- Mi hija sufre de ataques de pánico desde hace muchos años, pero desde hace un par que no le había dado uno tan crónico como este. - Empieza a hablar el señor Hayden, rompiendo el silencio.
- mmm... puedo preguntar porque le dan estos episodios?. - Pregunto algo dubitativo.
- Antes de contestarte esa pregunta Christofer, quisiera saber por qué te interesa tanto lo que le pasa a mi hija?.
- Porque estoy completamente enamorado de ella. - Respondo de inmediato sin mostrar ningún tipo de duda por mis sentimientos.
- Me lo imaginé, por eso me atrevo a hablarte sobre lo que le ocurre a Stefania.
- Se lo agradezco señor Hayden, para mi es muy importante saber que le ocurre para poder ayudarla y apoyarla en lo que más pueda.
- Hace casi once años ya, Stefania fue secuestrada aquí en Londres como por casi tres días. En donde vivió cosas horribles de las cuales no me compete hablar, pero eso la destruyo mucho mentalmente. Además, el tercer día del secuestro mientras la transportaban no sé a dónde, ella junto con los secuestradores tuvieron un accidente en el cual perdieron el control de auto y se fueron por un abismo en el que el auto volcó varias veces y al final exploto al llegar en lo más profundo de este. Ella había logrado zafarse de las ataduras y logró salir antes de que el auto explotara, pero igual sufrió grandes lesiones.
Stefania estuvo en coma por casi tres meses, en donde tuvo grandes quemaduras, golpes, lesiones, heridas. En muchas ocasiones, estuvo a punto de morir, la verdad pensé que ella no lo iba a lograr, que no iba a poder sobrevivir. Cuando ella logró despertar al fin, pensé que todo estaría bien, pero no fue así... - Me dice como si estuviera en otro mundo y yo no puedo dejar de mirarlo por todo lo que me está contando, haciendo que un escalofrío me recorra por todo el cuerpo con cada palabra de su relato.
- Al despertar, nos dimos cuenta de que ella había perdido la memoria y que no podía mover el cuerpo de hombros hacia abajo, por lo que su recuperación fue muy larga y dolorosa. Le llevó cinco años recuperarse por completo y la verdad, es que también fue una recuperación milagrosa porque pudo recuperar la movilidad en todo el cuerpo, aunque con mucho esfuerzo.
- Por dios... - Es lo único que puedo decir porque jamás me imaginé que Stefania hubiera podido pasar por algo así.
- Estuvo sometida a muchas cirugías, a tratamientos, terapias. Fue una época muy dolorosa y traumática para ella, para todos. Pero a pesar de que ella no recordaba muchas cosas y su mente estaba algo perdida, su cuerpo no, ya que este tiene memoria propia y cuando ella se encuentra muy estresada o con miedo de algo, ahí es cuando le dan los ataques de pánico.
- Y saben que fue lo que le provoco esta vez el ataque de pánico?. - Pregunto muy interesado y preocupado.
- Max quien era el que estaba con ella, me dice que puede ser por estrés acumulado, pero la verdad, no sabemos por qué se puso así. - Me responde el señor Hayden esta vez muy preocupado.
- Bueno, pues toca esperar a que ella pueda hablar para que nos diga por que se puso así...
- Todo esto es mi culpa, jamás debí de haberla presionado para que volviera a esta ciudad. Debí haberme encargado yo de este proyecto y dejarla en Vancouver. Pensé que ella ya había superado lo que le había pasado acá, pero nunca pude haber estado más alejado de la realidad. - Comenta el señor Hayden muy afligido.
- No se culpe señor Hayden, usted no pudo haberlo sabido y en el tiempo que llevo de conocer a Stefania, sé que ella se guarda todo para no preocupar a nadie por nada y mucho menos cuando se trata de ella, así que usted no puede culparse por eso, solo queda ayudarla y apoyarla.
- Muchas gracias Christofer por tus palabras, las tendré en cuenta pero igual no me gusta ver a mi hija así.
- Y es totalmente comprensible.
- Ella lo es todo para mí. La amo con toda mi alma, es lo mejor que la vida pudo darme.
- Señor Hayden... podría verla?.
- Por supuesto, vamos.
A continuación, salimos de la cafetería y luego nos dirigimos hacia los elevadores para subir algunos pisos. Al llegar, vemos a Max afuera de la habitación.
- Christofer. - Dice Max algo sorprendido por verme.
- Max, buenas noches. - Le respondo.
- Buenas noches...
- Me encontré a Christofer abajo porque se enteró de que Stefania esta hospitalizada y vino a verla. - Dice el señor Hayden a Max.
- Y usted cómo se enteró?. - Me pregunta Max.
- Por la señorita Fix, ella me llamo y me enteré por ella.
- mmm... ya... - Comenta Max.
- Porque estás afuera y no adentro con Stefania?. - Pregunta el señor Hayden.
- Porque le están colocando unos medicamentos y la están cambiando. - Responde Max.
Después de algunos minutos, un par de enfermeras salen de la habitación.
- Ya pueden ingresar y recuerden que todos no se pueden quedar con ella. - Dice una de ellas antes de irse hacia el puesto de enfermería.
- Entra. - Me dice el señor Hayden.
- Gracias. - Respondo y sin esperar más, ingreso a su habitación.
Al entrar, puedo ver que Stefania está completamente dormida en la cama con una vía intravenosa colocada en su brazo derecho. Me acerco lentamente y en cuanto estoy al lado de la cama, no puedo evitar comenzar a acariciarle el rostro y el cabello con una de mis manos, mientras que con la otra cojo su mano derecha para empezar a formar círculos con mi dedo pulgar en su piel.
- Aquí estoy y no me pienso ir a ninguna parte y ahora con lo que sé, menos te voy a dejar sola. No solo porque estoy profundamente enamorado de ti, sino porque si antes te respetaba, ahora lo hago mucho más y te admiro completamente porque eres una completa guerrera, eres una completa heroína para mí y eso me hace amarte más y me hace querer estar más contigo. Te amo Stefania Hayden y no pienso alejarme de ti nunca...
- Y no tienes que hacerlo, puedes quedarte, Max se ha ido y podemos quedarnos los dos para hacerle compañía. - Me comenta el señor Hayden desde la entrada de la habitación. Al parecer, había estado escuchando lo que le hablaba a Stefania.
- Muchas gracias y señor Hayden, sé que no es el momento pero quisiera pedirle permiso para cortejar a Stefania. - Le hablo sin moverme del lado de Stefania.
- Sé que eres un muy buen hombre y por supuesto que tienes mi permiso para hacerlo. Además, porque sé que ella también siente cosas por ti.
Ante el comentario del señor Hayden, me quedo sorprendido, pero a la vez me hace feliz porque no estaba equivocado al pensar de esa manera y ahora que sé que yo le intereso a ella, voy hacer todo para estar con ella.