Una oveja negra de un metro y medio de altura avanzaba, dejando tras de sí un rastro de relámpagos de color púrpura. Encima de la oveja negra, un hombre con cabello de color gris estaba sentado, mirando la palma de su mano, que brillaba con diferentes colores de luz. A veces su palma destellaba con luz roja, otras veces naranja, otras veces verde, y muchas más.
—Ummm... olvidé preguntar esto, pero... Me devolverás el Fuego Prismático una vez que nuestro período de acuerdo termine, ¿verdad? —El hombre de aspecto perezoso con cabello gris que montaba la oveja negra escuchó la voz de un hombre viejo.
Evan sonrió cuando escuchó la voz de Octavio, pero no dijo nada. Habían pasado unas pocas horas desde que completó el Pacto del Alma con Octavio y salió de la dimensión de la cueva.