—Nuestra tarea principal es atrapar al invocador. Tan pronto como atrapemos al invocador, la victoria será nuestra. Así que una vez que la lucha comience, concéntrate en defenderte en lugar de atacar —dijo Ron, mirando a los cazadores que aún estaban nerviosos después de lo sucedido hace unos minutos.
Todos los cazadores asintieron con la cabeza al unísono al escuchar a Ron, pero su confianza aún era baja.
—Maldita sea, esto va a ser mucho más difícil de lo que pensábamos inicialmente —murmuró Ron con un tono de frustración al ver las caras nerviosas de los cazadores.
—Todo es culpa de cierto hombre que no pudo mantener su boca cerrada y casi muere —dijo Margaret con una mueca en su rostro y miró a Ronan de reojo.
Ronan apretó los puños con fuerza al escuchar las palabras de Margaret, pero decidió mantener su boca cerrada.