Cuando Terry vio el estado de Jack, no pudo evitar pensar en cómo se comportó frente a Evan cuando fue a secuestrarlo.
«Tuve suerte de que me dejara ir en ese momento», pensó Terry mientras tragaba saliva.
—¿Por qué sigues sentado ahí? —Terry salió de sus pensamientos cuando vio a Evan de pie frente a él—. ¿Estás pensando en quedarte aquí toda la noche?
—Um... mis piernas —dijo Terry mientras miraba sus piernas.
Cuando Evan se concentró en las piernas de Terry, vio que ambas estaban rotas y aunque ya había bebido una poción curativa, todavía tomaría bastante tiempo antes de que volvieran a la normalidad.
Al ver sus piernas rotas, Evan no dijo nada. Una luz verde parpadeó en sus ojos mientras activaba su habilidad de manipulación del viento.
De repente, el cuerpo de Terry empezó a levitar en el aire.
—Qué diab... —Terry se sobresaltó cuando de repente comenzó a levitar y trató de retroceder de allí.
—No te resistas —Terry escuchó la voz de Evan y lo vio alejarse de allí.