Varios minutos pasan hasta que el reloj de la enfermería marca que son las 8:30 Am. Ethan se ha recuperado completamente y ha dejado de sentir nauseas. Él se levanta de la cama con la única intención de volver a la sala de reuniones, y se dirige hacia la puerta para salir. Al estar en los desolados pasillos empieza a caminar hasta que observa a esta chica parada al frente de las ventanas.
— ¡¿Por qué siento que todo esto es aún más complicado?! Además, no debería haber hablado de mis problemas con ese chico—susurra para sí misma.
Esta chica cubre su rostro con sus manos, a la vez que intenta controlar su ansiedad mientras él se acerca en silencio. Ella empieza a temblar levemente debido a que es la primera vez que libera un poco de sus reprimidas emociones. La sensación que invade todo su cuerpo es incomoda, pero a la vez tranquilizadora. Y cuando esta por marcharse acaba chocando con Ethan, ninguno de los dos acaba cayendo al piso. Ella mira que él está aquí, esto hace que sus ojos se abran.
— ¿Qué haces aquí? —pronuncia ella torpemente mientras luce sorprendida.
Ethan frunce su ceño al escuchar esta pregunta, al notar que está cerca de ella se aleja. Y empieza a hablar de manera intranquila como si le faltara el aire mientras ella sostiene en su mirada algo de sospecha.
—Nada. Solo quiero volver a la sala de reuniones para saber a qué salón de clase me designaron—responde duras penas.
Al terminar de hablar el empieza a vomitar todo su desayuno en el piso. Ahora se siente extraño, antes se sentía bien. Cuando esta frente de ella siente tantas nauseas, al recordar lo que sucedió en la sala de reuniones.
Ethan hace este sonido mientras se inclina hacia el piso. Esta chica coloca su mano en su hombro, pero él no deja de jadear y de sentir tantas ganas de vomitar.
— ¡No deberías salir de la enfermería si te sientes mal! —recrimina esta chica mientras luce furiosa.
Empieza a llevarlo a la enfermería nuevamente. Y lo recuesta en una de las camas y se dirige al casillero que está cerca de la puerta, que contiene los implementos de limpieza. Ella toma el vacío cubo junto al trapeador. Poco después sale de la enfermería en dirección a los sanitarios femeninos para llenar el cubo de agua, y va directamente a donde Ethan acabo vomitando. El olor del vomito es desagradable y le genera ganas de vomitar. Al terminar de limpiar, tira el contenido del cubo y lava el trapeador.
Al abrir la puerta de la enfermería con su mano libre. Observa que Ethan luce una expresión llena de confusión, es como si intentara entender algo. Ella ignora esto por el momento y se dirige a guardar el trapeador y el cubo en el casillero. Cuando ella se está acercando a hacia Ethan, de pronto el mueve su mano para que ella se detenga dónde está. Esto hace que se sienta confundida a la vez que levanta su entrecejo.
—Parece que los desagradables murmullos que escuche en la sala de reuniones hacen que quiera vomitar cada vez que estoy cerca de ti. Por favor, puedes darme un poco de tiempo para asimilar todo esto.
Cuando escucha esto, ella hace una expresión llena de desagrado.
— ¡Tú también sientes asco hacia mí! —dice mientras su respiración es agitada— ¡¿Por qué sientes asco hacia mí?! ¡Acaso te hice algo!
De pronto la voz de esta chica suena rota. Ethan mira en dirección donde se encuentra ella, y observa que ella está llorando al no soportar esas insensibles palabras. Las lágrimas inundan los ojos carmesís de esta chica mientras recorren sus mejillas hasta finalmente caer al piso. Ahora ella luce muy frágil y vulnerable es como si fuera una niña perdida que llora de frustración al no ser capaz de pedir ayuda.
Repasa lo que dijo y entiende lo que ha transmitido y dado a entender a esta chica de manera involuntaria: "Cada vez que estoy cerca de ti siento ganas de vomitar", que es lo mismo que decirle "¡Me das asco, no te acerques a mí!". Esto hizo que el cansado y frágil corazón de ella se desmoronara.
—Lo lamento, no quería decir eso—dice rápidamente.
Incluso después de disculparse. Ella no deja de llorar mientras lo miro con odio, a la vez que se siente incómodo de escuchar el llanto de esta chica. Poco después ella empieza a hablar.
— ¡¿Por qué te disculpas?! ¡Después de decir que te doy asco! —dice hostilmente—, ¡Acaso te retractas! Al darte cuenta de que perderías la gran oportunidad de acostarte con la puta de la preparatoria Maxis.
—No quise decir eso—menciona, pero cuando está a punto de decir algo más es interrumpido por ella.
— ¡Entonces que querías decir! —grita.
Ethan se queda callado mientras agacha su cabeza y se limita nuevamente a escuchar el llanto de esta chica.
— ¿Por qué todos son tan idiotas al creer en esos murmullos y rumores? —susurra esta chica.
El escucha esto, pero si dice algo más empeorara las cosas en este tenso ambiente que provoco al expresarse mal. Después de varios minutos el "Tick" del reloj digital aparece. Los ojos carmesís de esta chica se encuentran hinchados y cansados después de llorar. Ethan intenta hablar con ella al verla tranquila, además de parecer un buen momento para aclarar el malentendido.
Ethan hace este sonido.
Así llamando la atención de esta chica que mira el piso. Ella quiere irse, ya que no quiere estar en el mismo lugar que Ethan. Él sabe perfectamente lo que ha hecho, pero está dudando de lo que va hacer mientras fija su mirada a las sabanas de la cama. Y toma un poco de aire y se mueve torpemente al intentar levantarse de la cama, así cayendo al piso de lado. Esta chica mira de reojo atrás, donde se encuentra el para poco después centrar su mirada a la puerta de la enfermería.
— ¡Espera! —pronuncia mientras se levanta del piso—No quise decir eso. Es solo que los murmullos de la sala de reuniones me resultaron desagradables, además no tengo nada contra ti. No te conozco y no sé qué tipo de persona eres.
Ella baja su cabeza al escuchar esas palabras y se da media vuelta mientras lo mira con más odio, además de acercarse para empezar a hablar.
— ¡Vuélvelo a repetir cerca de mi si eres capaz! —replica esta chica.
El intenta repetir sus palabras una y otra vez, pero es incapaz de hacerlo sin cubrir su boca con sus manos. Ella que él no es capaz de hacer esto se llena más de ira.
— ¡Si ni siquiera eres capaz de repetirlo! ¡No te hagas el comprensivo ahora! ¡Mejor cállate! ¡Y deja de pronunciar palabras que eres incapaz de volver a repetir!
Ethan luce desconcertado, tal vez él no es tan diferente de los demás. Incluso si intenta negarlo con sus fuerzas, no deja de sentir esa nauseabunda sensación que genera que quiera vomitar. Ella tiene su mirada fija en él, pero él es incapaz de devolverle la mirada. Y un centenar de pensamientos aparecen en su cabeza mientras intenta buscar una explicación, pero resulta que no hay ninguna que fuera valido o que valiera la pena mencionar.
« ¡No es así! ¡No puedo hacer eso! ¡No siento asco hacia ella, sino por los murmullos! ¡¿Por qué siento que la estoy juzgando?! ¡No puedo hacer eso!»
Incluso en sus complicados pensamientos no puede evitar que sus ganas de vomitar se hicieran presentes, pero tiene aceptarlo. Él no es capaz de lidiar con esto. Una parte de él sabe que no es capaz de asimilarlo, pero otra parte suya intenta negarlo rotundamente. Esta chica mira como Ethan se encuentra abrumado mientras intenta salir de su lucha interna. Ella se da media vuelta para marcharse, pero el sujeta su brazo para detenerla.
—Tal vez…Tal vez sea igual a los demás—dice cubriendo su boca con su mano—, pero como quieres que sepa asimilar algo como esto tan rápidamente. Después de escuchar esos desagradables murmullos.
— ¡Eso me parece un pobre intento de excusa! —menciona hirientemente.
«Aunque parezca un pobre intento de excusa, al menos me niego hacer lo mismo que los demás. Aunque esto suene hipócrita y superficial.»
Piensa a la vez que la sensación de nauseas va despareciendo al momento que ordena sus pensamiento. Y quita sus manos de su boca mientras luce muy pálido, y empieza a hablar con una expresión decaída y llena de agotamiento.
—Puede que tal vez sea un pobre intento de excusa para ti…pero… para cualquier que hubiera escuchado esos murmullos hubiera actuado de distinta manera. Así que no sé qué debería decir o hacer. Incluso cuando me preguntaste ¿Qué pasaría si alguien arruinara mi vida? No entendía a qué te referías. Y cuando me contaste sobre todo eso, tampoco sabía que palabras debería colocar en mi boca. Supongo que no quieres escuchar palabras de lastima.
— ¡Y tú qué sabes de mí! —pronuncia furiosa al ver la actitud que él toma, es como si realmente comprendiera la situación.
— ¡El punto es que yo no sé nada de ti! ¡Ni tampoco sé cómo actuar o que decir! ¡Dime que debo hacer! ¡Si lo sabes dímelo! ¡¿Porque yo no lo sé?!—replica frustrado y toma por sorpresa a esta chica.
— ¡Hasta un idiota lo sabe! ¡No deberías reconfortarme en vez de juzgarme en silencio! ¡Imbécil!
— ¡Dije que eso no es lo que quería decir! ¿¡Por qué te empeñas en hacerme parecer como el malo!?—recrimina al escuchar las palabras de esta chica.
— ¿¡Por qué eres un imbécil!? ¡Acaso no lo sabes!
— ¡Al menos no estoy siendo una estúpida que anda sacando conclusiones precipitadas, y que no quiere escuchar!
Cuando termina de decir esto, ella le da una cachetada que lo toma por sorpresa. La expresión de esta chica es invadida completamente por la ira que siente mientras sus labios dejan entrever un poco del como aprieta sus dientes, además de escucharse el sonido de "Chick".
— ¡Eres un imbécil! —grita nuevamente mientras intenta darle otra cachetada, pero el sostiene su brazo.
Al quedar incapacitada empieza a llorar nuevamente. Ethan frunce su ceño al ver esto mientras se siente molesto, poco después suelta el brazo de esta chica. Y se aleja de ella a la vez que deja escapar un suspiro e intenta disipar su enojo, además de sentarse en la cama y fijar su mirada en el techo de la enfermería.
« ¿Qué demonios le sucede?»
Piensa mientras cierra sus ojos por algunos segundos, a la vez que se va tranquilizando poco a poco. Al estar totalmente tranquilo llega a una conclusión que desea haber tomado hace unos minutos atrás, pero ya es demasiado tarde para esto. Además de sentir su adolorida mejilla.
«Era mejor esperar a que ella se hubiera tranquilizado completamente para aclarar el malentendido. Antes de haberla retenido y provocado esta discusión.»
Coloca en sus pensamientos, y decidió que ya no vale la pena pensar en eso. Ethan abre sus ojos y mira al reloj digital que está en la pared, el cual marca que son las 9:15 Am. Esta chica se encuentra reflexionando en silencio, pero cuando sus miradas se encuentran. Ella simplemente desvía su mirada de el con una expresión de disgusto de manera infantil, y decide ignorar esto para no comenzar otra discusión. Él se levanta de la cama para salir de la enfermería, pero es detenido por ella. La cual luce una expresión frívola.
—Te voy a llevar a la sala de reuniones—pronuncia mientras se ve un poco incomoda.
—No gracias.
— ¿A caso sabes dónde queda la sala de reuniones? —pregunta mientras luce seria.
Ethan no sabe dónde queda la sala de reuniones, pero todavía recuerda todo el recorrido que hizo ella para traerlo a la enfermería.
—Se cómo llegar. No necesito tu ayuda.
Ella se queda en silencio mientras Ethan pasa a su lado. El abre la puerta de la enfermería y sale a los pasillos, así recorriendo todo el camino hasta estar frente de la entrada de la sala de reuniones. Mueve su mano hacia la perilla de la puerta, pero la chica que se encontraba caminando en la entrada principal termina abriéndola. Ethan tiene su mano en el aire, y esta chica luce una expresión totalmente indiferente.
—Puedes por favor dejarme pasar—pronuncia con una tonalidad de voz monótona.
Ethan se hace a un lado y mira dentro de la sala de reuniones para descubrir que la ceremonia de apertura a finalizados. Los estudiantes empieza a salir y el frunce su ceño, a la vez que luce una expresión conflictiva en su rostro. Ahora él no sabe a qué salón de clase fue designado, al poco tiempo aparece los pasos de alguien corriendo en los pasillos junto a la voz de cierta chica.
—Por fin te alcanzo—dice jadeando y toma un poco de aire antes de seguir—, puedes saber a qué salón de clase te designaron. Si vas a la cartelera que está en la entrada principal.
Al escuchar esto, Ethan intenta recordar si en la entrada principal hay otra cartelera a parte del mapa de la preparatoria Maxis. No logra tener certeza de esto debido a que no miro a detalle toda entrada principal, ya que estaba tan desesperado por llegar a tiempo a la ceremonia de apertura. Ella mira como el intenta recordar, después de no lograrlo fija su mirada en ella y habla.
—Gracias.
Empieza a caminar en dirección a la entrada principal, pero los pasillos están repletos de estudiantes. Es como estar dentro de una lata de sardinas, nadie puede hacer un mínimo movimiento. Él está en medio de dos chicos que pertenecen a cursos superiores, delante de él se encuentra una chica y tiene otra en su espalda. Es imposible moverse, ya que un solo movimiento desencadenaría en una discusión. Sin mención que esto triplicaría sus problemas.
— ¡¿Espera?! Esas dos chicas de allí no están en el top 10 del ranking de las más populares, y hermosas de toda la preparatoria.
—Sí, ellas pertenecen a ese ranking, pero no lo digas en voz alta ¡Idiota! —susurra un chico.
Como nadie puede moverse. Esos dos chicos no tienen certeza de lo que dicen y simplemente se limitan a mirar.
—La que esta adelante es Rose—responde la dudosa voz de un chico.
—Entonces la chica que está detrás de ese chico de allí, puede ser Alejandra—menciona un chico mientras fija su mirada en donde está el.
«Estoy en medio de dos chicas, que pertenecen al top 10 del ranking de los chicos.»
Piensa mientras mira a la chica que esta frente de él, ella tiene el cabello rubio y puede oler su perfume perfectamente. Ya que ella apoya su espalda en pecho, y su altura oscila entre 1.45 a 1.55 Cm. Ethan no puede saber esto con certeza, además no puede ver el rostro de esta chica debido a que la multitud de estudiantes hace imposible moverse.
Pasaron varios minutos hasta que la multitud de estudiantes empezara a avanzar, y poco a poco los congestionados pasillos se van vaciando. Al estar fuera del auditorio, Ethan respira aliviado y siente sus brazos adormecidos después de no moverlos por un largo periodo de tiempo. El fija su mirada donde se encuentra esa chica de cabello rubio, sus ojos son de color verde esmeralda y su rostro emite dulzura e inocencia. Además de dar la sensación de que es alguien muy indefensa y adorable.
La otra chica es pelirroja, su mirada es feroz y combinan bien con sus de color naranja, esto le da cierto toque sexy, además de emitir madurez. Ella es de tercer año de preparatoria. Cualquiera que mire a estas dos hermosas chicas fuera de la preparatoria Maxis, seguramente se les quedaría mirando debido a que son muy atractivas. Rose luce una amable sonrisa y la madura, pero sexy Alejandra son el foco de atención de las miradas curiosas de los estudiantes.
— ¡¿Oye?! Julieta está aquí.
Aparece la voz de una chica, que llama la atención de todos los estudiantes.
—Sí, ella es la que ocupa el primer lugar en belleza y en todo lo demás.
Muchas chicas fruncen sus ceños con disgusto y celos al ver a Julieta, quien está hablando con una chica de manera relajada. La presencia de Rose y Alejandra es eclipsada por la presencia de Julieta. Todos los chicos se encuentran emocionados, a la vez que algunas chicas se hunden en la melancolía e intentan no compararse. El exterior del auditorio se vuelve ruidoso, así generando un ruido similar a la fastidiosa estática de un televisor que no sintoniza.
Toda esa cantidad de ruido hace que Ethan sienta dolor de cabeza y camina en dirección al sendero de piedra. Estando en el sendero de piedra puede escuchar el cantar de los pájaros y poco a poco su dolor de cabeza va cesando, además de escuchar sus pensamientos mientras mira a los alrededores. Y observa a la chica que lo guio hacia el auditorio sentada debajo de la sombra de un árbol, ella está leyendo un libro completamente concentrada.
« ¿Debería hablar con ella? No, mejor me voy no quiero interrumpir su lectura.»
Ella baja el libro de color verde oscuro que lee, y fija su mirada seria en el para poco después suavizar la expresión que tiene en su rostro. Él se encuentra desconcertado mientras ella se levanta del césped, y camina en su dirección. Ahora ellos dos están uno al frente del otro, y un silencio prolongado deja escuchar como los pájaros cantan. Ethan intenta hablar, pero sus labios se mueven torpemente.
—Hmm… ¿Ah?... ¿Estas ocupada? —pronuncia mientras su mala elección de palabras deja ver su interés en ella.
—No—responde para poco después seguir—, además no crees que mirar en silencio a alguien desde lejos es un comportamiento un tanto acosador…
Al escuchar lo que dice ella, el mueve sus manos para negarlo de manera nerviosa. Ella deja escapar un suspiro, y golpea suavemente la cabeza de Ethan con su libro mientras él no entiende por qué ella hace esto. Además luce una expresión que demuestra desánimo y aburrimiento.
—Chico nuevo, si quieres hablar con alguien puedes acercarte a esa persona para hablar eso sin violar el espacio personal. Aun así, ya depende de con quien quieras hablar. No todas las personas son fáciles para tener una conversación—ella explica mientras señala lo más evidente a Ethan.
Ethan observa como la expresión de ella cambia rápidamente a aburrimiento. Y baja su libro hasta la altura de su falda, y está llena de desinterés. A la vez que luce un poco inquieta e impaciente.
— ¿Tienes algo que decirme?
Comienza a buscar en sus pensamientos algo que decir o al menos algún tema que hablar. Ahora su cabeza está totalmente en blanco, y recuerda el libro que ella estaba leyendo hace algunos minutos atrás. Ethan va a hacer una conversación en base de ello, aunque él no toca un libro a menos que sea necesario.
— ¿De qué trata el libro que estabas leyendo? —pregunta mientras mira el libro de color verde oscuro que ella sostiene.
—Es sobre un romance trágico. Donde el protagonista muere después de sufrir tanto, y sin poder presenciar el futuro que le esperaba—responde de una manera indiferente.
— ¿Te gusta el romance trágico?
—No realmente. Lo leo por aburrimiento y curiosidad.
Ella parece del tipo de chica con la cual no se puede tener una conversación por mucho tiempo. Observa que ella se ve cada vez más aburrida de estar esperando que la conversación se vuelva interesante, además de no sabe de qué más hablar. De pronto ella da media vuelta para marcharse y una pregunta aparece en pensamientos, que se filtra por su boca.
—Al menos puedo saber ¿Cuál es tu nombre? —dice nervioso.
Esta chica mira a Ethan con una leve sonrisa y mueve sus labios para responder.
—Mia Evans.
Ethan olvido decir su nombre y sonríe tímidamente mientras mira a Mia. Ahora piensa en no provocar un momento incomodo, pero en su pecho nace la extraña sensación de ser presionado. El intenta hablar de manera casual, pero Mia tiene una mirada impaciente en su rostro. Y traga su saliva antes de decir su nombre sin sentirse nervioso.
—Mi-Mi nombre es Ethan Walker.
Y siente que ha dado una pésima impresión al decir su nombre tartamudeando, a la vez que se ve deprimido. Mia toca su hombro para levantarle el ánimo. Ese pequeño gesto hace que no se sienta patético, pero no deja de sentir pena de no ser capaz de hacer algo sin ser tímido o sentirse nervioso.
—Tranquilo Ethan. Tienes que tener confianza en ti mismo, y si te sientes nervioso solo respira profundo para tranquilizarte.
Ethan mira cabizbajo a Mia. Ella cambia de tema para evitar que haya un silencio incómodo. Después de varios minutos caminando por el sendero de piedra acaban llegan a la desolado entrada principal. Y empieza a buscar la cartelera que contiene las designaciones de los salones de clase mientras ella observa como él busca algo.
— ¿Qué buscas Ethan?
El no responde a la pregunta de Mia, a la vez que mira a los alrededores de la entrada principal. Y fija su mirada a una cartelera que está cerca de un grupo de bancas de roble. Comienza a caminar en dirección a la cartelera. Ella al ver esto, lo sigue hasta estar frente de dicha. Mia frunce su ceño confundida mientras no entiende que está pasando.
— ¿En serio? ¿¡No sabias a que salón de clase te designaron, Ethan!?—menciona desconcertada mientras luce sorprendida, y poco después sigue—, todos los estudiantes saben que las designaciones de salón de clase se publican 4 días antes en la cartelera de la entrada principal ¿Acaso no lo sabes?
Al escuchar lo que dice Mia luce sorprendido. Ella se ve más confundida, poco después empieza a pensar sobre la extraña actitud de Ethan, y del cómo se quedó contemplando el observatorio, además de su pésimo sentido de orientación. Y acaba recordando que un estudiante becado perteneciente a la clase social baja o media, ingresaría por primera vez a la preparatoria Maxis.
—Eres el estudiante que recibe la beca para estudiar aquí—menciona Mia mientras mira a Ethan.
—Si—responde mientras sostiene su mirada en la cartelera.
«Por esa razón actúas de esa manera tan rara y extraña, e incluso colocas tu distancia. Es por que no sabes cómo dirigirte a mi o a los demás.»
Piensa al darse cuenta de esto, y se filtra por sus labios.
—Por esa razón actúas de esa manera tan rara y extraña, e incluso colocas tu distancia. Es por que no sabes cómo dirigirte a mí o a los demás.
Ethan sonríe un tanto incómodo. Mia al ver esa expresión, ella coloca su mano en su rostro y le resulta incomprensible que el actuara de esa manera. Además de pensar que tiene que saber cómo dirigirse a los demás o incluso como tiene que actuar.
Entiende que él está en un entorno completamente nuevo, pero la educación de la preparatoria Maxis es un tanto liberalista. Además de aplicar varias metodologías de aprendizaje para los estudiantes. Incluso no dejan de actuar como personas comunes y corrientes, pero si para Ethan es algo en específico. Esto no aplicaría con Ethan, quien tiene una perspectiva diferente. Después de varios minutos pensando llega a una conclusión, y esta es que sus valores son completamente diferentes.
—Conoces al menos la metodología de aprendizaje de Gamificación, Thinking Based Learning o el aprendizaje basado en competencias—menciona mientras intenta averiguar si Ethan, al menos sabe algunos de estas metodologías de aprendizaje.
Él se encuentra desconcertado al no entender a lo que se está refiriendo Mia, es la primera vez que escucha algo sobre las metodologías de aprendizaje. En sus días escolares de hace unos cuantos meses atrás, lo único que hacía era resolver su tarea a través de libros, videos o buscando algún recurso. Si esto era una metodología de aprendizaje, él no sabe el nombre de dicha.
—Te explicare en que consiste cada una de las metodologías de aprendizaje—dice mientras empieza a explicar—, el método de Gamificación utiliza todo tipo de recursos para el aprendizaje, ya sean videojuegos. El otro que es Thinking Based Learning hace que trabajemos la información a través de contextualizar, analizar, relacionar y argumentar para así convertirlo en conocimiento. Y el basado en competencias es el desarrollo de habilidades y la solidificación de hábitos.
Al terminar de escuchar la explicación de Mia. Ethan empieza a hablar sin desviar su mirada de la cartelera.
—Entiendo, entonces esas tres metodologías de aprendizaje son las principales.
—No, más bien esas son las que recuerdo que utilizan en algunas de clases. Hay otras más, pero no puedo recordarlas todas—dice a la vez que recuerda algo importante—, casi lo olvido. Cada estudiante es designado por sus capacidades, y dependientemente de eso se utilizarán alguna de las varias metodologías de aprendizaje.
Ethan se encuentra su nombre en el listado del salón de clase C-2. Mia fija su mirada en el listado que el mira. Ella intenta recordar que metodología de aprendizaje aplican en ese salón de clase. El silencio aparece por algunos segundos, antes de ser roto por las voces de los estudiantes que empiezan a llegar a la entrada principal.
— ¿Qué diablos le sucede a Julieta? —menciona un chico mientras pasa a su lado.
—Nunca había visto a Julieta perder la compostura—la voz de una chica aparece.
El centenar de conversaciones hace que no se entienda bien de lo que están hablando, debido a que todas las conversaciones se están superponiendo una encima de la otra. Mia ignora esto y se acerca a Ethan para tomar su brazo, y lo lleva a otro lugar. Acaban llegando a un lugar que está totalmente desolado que está en medio del sendero de piedra, allí se encuentra una estructura de madera que tiene una mesa de te.
Ella luce una expresión seria. Al ver ese repentino cambio en Mia. Ethan se siente extraño, pero no la conoce lo suficiente para decir que ella está actuando de manera rara. Tal vez es algo que esta imaginando. Mia empieza a mover sus labios para decir algo, pero se encuentra dudado en hacerlo o no. Su titubeo duro 5 minutos hasta que sus palabras salieron de su boca.
—Sé que esto sonara extraño Ethan, pero podrías no confiar mucho en los que estudian aquí.
Las palabras de Mia suenan demasiadas extrañas, a la vez que luce preocupada.
—No todas las personas de aquí son buenas. Hay algunas que pueden arruinarte la vida, así que ten cuidado de con quién te relacionas.
El sonido de "Tick" aparece y llama la atención de Mia. Ella fija su mirada al reloj que tiene en su muñeca izquierda, así notando que ya son las 11:00 Am. Poco después ella se da media vuelta para marcharse.
—Es hora de irme. Nos vemos Ethan—dice mientras mira a Ethan y se despide moviendo su mano.
Las palabras de Mia provoca que Ethan sienta un mal presentimiento mientras mira como ella se va alejando. Aunque para él, ella no es del tipo de persona que dice algo así como si nada, además parece no ser alguien que hace bromas de mal gusto. Esta es la primera impresión que tiene de Mia, sabe que es demasiado seria para hacer algo como esto.
Mia luce en su rostro preocupación debido a que Ethan no sabe cómo identificar a los estudiantes problemáticos. El simplemente no piensa mucho en el tema, y se marcha esperando a que mañana puedan retomar esta charla.