Riverdale y Strom se encontraban reunidos alrededor de una mesa, mientras James estaba frente al yunque con un cuchillo en mano. El ambiente era solemne y apenas se percibía algún ruido, ya que todos parecían temer perderse cualquier movimiento importante.
James se sentía ligeramente nervioso y recordaba los consejos de su maestro mientras intentaba vaciar su mente. Poco a poco, comenzó a desconectarse de sí mismo y a sumergirse en un estado de concentración. En esa sala, no existía James, Riverdale ni Strom; solo había una hoja en blanco y él mismo era el martillo, la intención, el filo y la runa.
Controlando su mana, comenzó a circularlo para crear la runa en su mente. Una vez que pudo visualizarla claramente y completar el patrón varias veces en su mente, finalmente tomó el martillo. Riverdale estaba notablemente tenso, apretando los reposabrazos de la silla con tanta fuerza que parecía que podrían romperse en cualquier momento. Strom intentaba aparentar calma, cruzando los brazos sobre su pecho, pero cada pequeño movimiento de James lo hacía incorporarse ligeramente.
Lentamente, James levantó el martillo y lo posicionó por encima de su hombro. Finalmente, abrió los ojos y comenzó a martillar. Cada golpe parecía traer una fuerza descomunal que podría haber partido al pobre cuchillo, pero solo dejaba un pequeño trazo grabado que resplandecía en tonos azules tenues.
Al principio, James parecía incómodo y sus golpes eran descoordinados. Strom observaba los gestos, el dolor y el cansancio en el rostro del joven, y comenzaba a preocuparse ligeramente. Sus manos bajaron hasta sus rodillas y su postura se inclinó cada vez más hacia adelante, mientras que Riverdale apretaba aún más las manos.
Después de unos minutos, James logró encontrar el tempo adecuado y mantener el consumo de mana en un rango normal, lo que permitió que todos los presentes se relajaran ligeramente. El proceso completo tomó alrededor de una hora y, al final, James estaba completamente empapado en sudor. Lo peor era el cansancio mental; sentía que un gran velo le impedía ver y estaba adormecido.
James simplemente se dejó caer en una silla, incapaz de soportar su propio peso, y apenas alcanzó a preguntar: "¿Cómo quedó?"
Strom asintió y dijo: "No está mal, felicidades por tu primera runa".
Finalmente, toda la tensión que mantenía activo el cuerpo de James desapareció y se desmayó en su silla. Ambos ancianos se acercaron al cuchillo y lo observaron detenidamente. Primero, Strom pasó sus dedos sobre la hoja, examinándola, y luego Riverdale la tomó para observarla por ambos lados.
"¿Cómo es posible?" preguntó Riverdale incrédulo.
"El muchacho es simplemente bueno", respondió Strom encogiéndose de hombros.
"No seas estúpido, Strom. Esto va mucho más allá de lo bueno. La cantidad de mana que posee simplemente no tiene sentido para alguien en una clase principiante. Además, aún no ha tomado la clase de herrero rúnico y ya puede crear artesanía rúnica", exclamó Riverdale.
"No es necesario que te pongas tan ruidoso. No sé por qué te sorprende. Después de todo, has visto sus afinidades. El muchacho es claramente especial. Debe tener una clase de categoría legendaria", declaró Strom, aunque había dudas en su rostro.
"Una clase que, desde sus inicios, destaque tanto podría ser una bendición inigualable para la humanidad", dijo Riverdale.
"No estoy tan seguro", dijo Strom, aumentando sus dudas.
"¿A qué te refieres? ¿Cómo podría ser algo malo?", preguntó el comerciante confundido.
"En general, todo el tema de las clases y sus versiones más prestigiosas es muy secreto. Pero si recuerdas el caso de la legendaria elfa Dalyla, sabrás que las condiciones que tuvo que cumplir para avanzar fueron insanas. Resistir una invasión demoníaca por sí sola es realmente...", Strom se quedó sin palabras ante la magnitud de lo que representaba la prueba de los dioses.
Riverdale reflexionó durante unos momentos y rápidamente estuvo de acuerdo con lo que decía el herrero. Si los talentos iniciales de James ya eran tan sorprendentes, entonces cuando tuviera que enfrentar la prueba de los dioses, probablemente se vería ante un desafío inimaginable.
Ambos intercambiaron miradas de incertidumbre antes de volver su atención a la daga. Era evidente que esta daga era una creación de James, con una calidad decente pero un acabado estético bastante tosco. La runa grabada en ella era una runa de filo, que realzaba el filo natural de la daga. Considerando que era el primer trabajo oficial de James y que solo llevaba cinco meses de aprendizaje, tanto Riverdale como Strom estuvieron de acuerdo en que, si pudiera crear objetos rúnicos en un año, sería un prodigio. Pero la velocidad y destreza de James en el arte de las runas eran simplemente asombrosas.
"El chico es verdaderamente impresionante", comentó Riverdale, mientras Strom asentía y se daba media vuelta. Sin embargo, el comerciante sabía lo que debía hacer y lo interrumpió antes de que pudiera decir algo más. "Antes de sentarnos a beber, deberías llevar al muchacho a su habitación para que descanse adecuadamente".
Strom asintió y ambos levantaron a James para llevarlo a su habitación. Luego regresaron para celebrar, a pesar de que tanto la daga como la runa eran de calidad normal, la más básica de las calidades. El hecho de que James pudiera crearlas tan rápidamente era un gran logro y los llenaba de buen humor.
En los dos días siguientes, James continuó sintiéndose ligeramente mareado debido al agotamiento de mana. El mana, la esencia que impregnaba todo y constituía la principal fuente de energía, tenía sus limitaciones. Utilizarlo en exceso acarreaba varias penalizaciones. Existían técnicas para acelerar su recuperación, pero lamentablemente Strom no tenía ninguna consigo en ese momento. No había traído ningún libro que no estuviera directamente relacionado con las runas o la investigación de su maestro.
"Este es un buen momento. Has estado trabajando durante cinco meses sin descanso y no has recibido ninguna compensación económica. Creo que es hora de que te dé algo de dinero para que puedas adquirir una técnica de meditación que te permita entrenar tu mana. Es fundamental para mejorar tu progreso", declaró Strom.
James, sorprendido, respondió: "Wow, tres monedas de plata. Cuando trabajaba para los mercaderes cargando cajas, solo me pagaban en pequeñas monedas de cobre. ¿Es esto lo que generalmente gana un aprendiz?"
"No, normalmente a un aprendiz no se le paga como tal. El maestro suele encargarse de sus necesidades básicas de subsistencia, y cualquier gasto adicional debe ser asumido mediante una carga de trabajo adicional. Tú has estado trabajando sin descanso desde el principio, por eso te pago un poco más de lo necesario", explicó Strom, sintiéndose incómodo. Sabía que había pagado más de lo debido, pero no quería admitirlo.
"Muchas gracias, maestro Strom. Conseguiré las técnicas necesarias y, una vez las haya estudiado, espero poder comenzar a ayudarte con tu trabajo finalmente", expresó James con gratitud.
"Está bien, muchacho. Por hoy, tómate el día libre y explora la ciudad. Cuando estés listo, te recomendaría que te dirijas a la Torre del Conocimiento, el Bazar de Ryluc o la tienda mágica de la Academia Akshan. Las tres opciones son completamente confiables. Fuera de eso, podrías encontrar opciones más económicas, pero nada está garantizado", concluyó Strom.
"Gracias, maestro", se despidió James y partió a recorrer la ciudad.
Por primera vez, James observaba la ciudad detenidamente. Ahora que la urgencia de encontrar un hogar y saciar su hambre ya no obstruían su visión, todo parecía más vibrante. Había gente corriendo de un lado a otro, mercenarios paseando hacia y desde su gremio, y personas bien vestidas acompañadas de sus comitivas, adquiriendo todo lo que necesitaban.
Durante su paseo por el sector de mercaderes donde conoció a Strom, James vio a varias personas que parecían provenir de la tierra. Estaban rodeadas de mercaderes de dudosa reputación, intentando adquirir equipamiento. Ambos grupos estaban inmersos en conversaciones acaloradas, negociando precios al alza o a la baja. Sin embargo, James sabía que lo que les estaban vendiendo era una falsificación. Aunque las runas en las armas eran reales, no tenían ninguna utilidad práctica. ¿De qué serviría un cuchillo con mayor durabilidad si solo se utilizaba para apuñalar? ¿Qué tan ensañado debías estar con tus víctimas para apreciar tanto la capacidad de infligir daño?
Observó muchos casos similares, donde los recién llegados no habían adquirido conocimientos adecuados en las áreas pertinentes y, como resultado, pagaban un alto precio por ello.
James simplemente se desentendió de esos problemas, ya que no eran su responsabilidad. Decidió seguir adelante y preguntó por la Torre del Conocimiento, dirigiéndose hacia allí. Dado que buscaba adquirir conocimientos mágicos, esa institución tenía la mejor reputación de las tres opciones mencionadas.
Al llegar a la torre, quedó impresionado. Era majestuosa e imponente, con su estructura alta y elegante que se alzaba sobre los demás edificios de la ciudad. La entrada estaba custodiada por dos grandes estatuas de sabios antiguos, y un camino de mármol conducía a la imponente puerta principal.
Al adentrarse, James percibió un ambiente tranquilo y sereno. Las paredes estaban decoradas con estanterías llenas de pergaminos y libros encuadernados en cuero. La sala principal estaba repleta de estudiantes y eruditos, algunos inmersos en la lectura, mientras que otros participaban en animadas discusiones intelectuales.
Sin perder tiempo, James se dirigió al mostrador de información, donde fue atendido por un amable bibliotecario. Le explicó su interés en adquirir técnicas de meditación para el entrenamiento del mana y recibió una lista de opciones disponibles en la sección de magia elemental.
Lleno de emoción, James comenzó a recorrer los pasillos de la torre, explorando las diferentes secciones y leyendo los títulos de los libros que despertaban su curiosidad. Encontró obras que abarcaban desde teorías fundamentales de la magia hasta conjuros prácticos y técnicas de control del mana.
Después de una exhaustiva búsqueda, James seleccionó cuidadosamente algunos libros que consideraba adecuados para su nivel y objetivos. Aunque encontró varios libros que llamaron su atención, se quedó sorprendido al ver los altos precios de cada uno. Era difícil de creer que el fruto de cinco meses de arduo trabajo solo le alcanzaría para adquirir cinco o seis libros. Sin embargo, comprendía que estos libros eran de nivel iniciante y se limitaban a explicar conceptos y fundamentos básicos. Aunque anhelaba ampliar sus conocimientos lo máximo posible para desatar todo su potencial en sus clases, se dio cuenta de que debía enfocarse en un trabajo más focalizado. Por lo tanto, decidió comprar un libro básico de magia, a pesar de quedarse sin dinero.
El libro que adquirió resultó ser una obra sustancial y abarcaba todo lo que un mago iniciante debía conocer, incluyendo las técnicas de meditación y manipulación de mana que le ayudarían a mejorar su inscripción rúnica. Luego de su compra, James continuó explorando brevemente la ciudad y encontró los otros dos lugares recomendados por su maestro. Se limitó a pasear por sus alrededores, creando una imagen mental de la ciudad. Notó que estos lugares prestigiosos solían estar más alejados y rodeados de tiendas de alta calidad. Aunque había un flujo constante de personas, la cantidad era considerablemente menor que en los comercios en los que solía trabajar.
Finalmente, decidió regresar al taller. Aunque tenía el día libre, no sentía deseos de hacer algo más afuera. Estaba ansioso por empezar a estudiar el libro que había adquirido. Al llegar al taller, descubrió a Riverdale y Strom compartiendo unas jarras de cerveza.
"Buenos días, señor Riverdale", saludó James.
"Buenos días, muchacho. ¿No tenías el día libre? ¿Qué haces aquí tan temprano?", preguntó el viejo comerciante.
"Tenía muchas ganas de leer mi nuevo libro", respondió James con una sonrisa sincera. Sin embargo, recordó los altos precios de los libros y lo complicado que sería reunir el dinero necesario para adquirir los más avanzados. Decidió utilizar la habilidad más poderosa que le había enseñado su abuelo, simplemente preguntar: "¿Sabe de alguna manera de ganar dinero? Comprar este libro consumió todos los recursos de cinco meses de trabajo, y este es solo uno de los libros que necesito. No quiero ni imaginar cuánto cuestan los más avanzados".
"Bueno, principalmente hay dos formas. La más fácil sería aceptar un contrato con alguien que tenga los recursos que necesitas", dijo Riverdale, haciendo una pausa para observar al muchacho. Pero, como predijo, James negó con la cabeza. Estaba claro que esa opción no era una posibilidad para él. Riverdale suspiró y continuó: "El camino difícil sería simplemente fabricar muchas armas y venderlas hasta que puedas construir tu propia reputación y firmar algún contrato de venta exclusiva. Estos contratos son mucho más flexibles que los primeros, pero aún requerirían una gran carrera".
Los hombros de James se hundieron de inmediato, mostrando su derrota. Sin embargo, Riverdale recordó otra opción.
"Si lo que buscas es conocimiento, puedes enrolarte en la academia de caballeros de la república. Debido al estado actual del país, la academia está abierta para cualquier persona con talento. Tendrás ciertas obligaciones con ellos, especialmente en tiempos de guerra, pero son mucho más flexibles que firmar con una gran familia", comentó Riverdale.
"¿Y ofrecen cursos para herreros rúnicos?", preguntó James, intrigado por esta opción.
"Tienen cursos para todo, ya que se necesitan una gran cantidad de especialistas que actualmente escasean. Sin embargo, debes saber que los mayores apoyos los tienen aquellos que siguen entrenamientos de combate. Para las clases civiles, hay menos recursos disponibles y debes demostrar algún talento o probablemente te expulsen. Además, si te gradúas, estarán vigilándote para evitar que vendas armas y secretos a los enemigos. Aunque, siendo honesto, probablemente ya nos estén vigilando a todos", añadió Strom con una actitud desganada.
"De cualquier manera, si lo que buscas es conocimiento, esa es una buena opción. Por supuesto, también está la opción de servir en el ejército. Por la misma razón anterior, el ejército siempre está reclutando. Sin embargo, unirte implica peligros evidentes y, aun así, no obtendrás conocimientos avanzados o exclusivos a menos que jures lealtad y te quedes de forma permanente", concluyó Riverdale.
"Muchas gracias por la información. Por ahora, comenzaré a estudiar este libro y luego decidiré junto a mi maestro qué puedo hacer", se despidió James y regresó a su habitación.
Una vez que James se fue, Riverdale tomó la iniciativa de hablar: "Oye, cascarrabias, ¿no te molesta que este muchacho esté buscando nuevos maestros?", dijo con una risita.
"En cualquier otro caso, sería una grave falta de respeto. Pero los resultados del muchacho en la prueba de afinidades realmente me tienen intrigado. ¿Y si realmente pudiera ejercer en todos los campos sin penalizaciones?", comentó Strom.
"No puedes hablar en serio", intervino Riverdale rápidamente. "Obtener una maestría ligera en cualquier campo requiere una gran cantidad de tiempo. Además, a medida que aumentas tu nivel general, se vuelve cada vez más difícil seguir progresando. Eventualmente, le resultará casi imposible alcanzar un nivel intermedio en la mayoría de las áreas". En su mente, alguien que fuera un experto en todos los campos sería realmente un coloso entre los demás.
"Bueno, son solo conjeturas. Veremos qué es lo que realmente busca el muchacho", comentó Strom al final, y ambos continuaron disfrutando de su cerveza.
Mientras tanto, James se sumergió en la lectura del libro. Pasó los siguientes días cumpliendo sus rutinas de trabajo y agregando el estudio de magia y las técnicas de meditación para reponer su mana. Continuó así durante otro mes, hasta que algo inesperado sucedió.