Chapter 17 - Capítulo 16

Cuando Santino la vio irse con ese hombre, sintió el enojo recorrerle el cuerpo de tal modo que jamás había experimentado y lejos de pensar en romper ese acuerdo y anular toda retribución, se decidió por ir donde ellos, para darse cuenta que quebraría una de las cláusulas fundamentales del contrato.

Exclusividad.

Aguardo en frente del lugar por 10 minutos esperando a que se arrepintiera. A qué recuerde las cláusulas y se retire de ese lugar inmediatamente.

Cruzó la calle con tanta furia y se adentro al albergue sin pensar en que él estaría infringiendo otra de sus cláusulas.

Discreción.

La recepcionista se quedó mirándolo idiotizada y no le prohibió el paso. Si quiera se detuvo a preguntarle dónde estaba Abril, en qué habitación, que cuando llegó a los pasillos reconoció perfectamente sus gemidos y como si se tratara de una conexión divina, abrió la puerta encontrándola follando la polla de aquel hombre que justamente, conocía.

- ¡Abril! – gritó enfadado y ella se sorprendió al verlo allí.

- Santino. – le hablo el hombre que se encontraba con su polla dentro de ella.

- Estás follando a mi esclava. – dice y enseguida él corre a la chica de encima suyo para intentar justificarse.

- Lo siento hermano. – le dice levantando sus brazos.

El hombre era Matteo Olvari, uno de sus compañeros de follada, como ellos le llamaban al ejercicio que realizaban cuando se encontraban en el Club Nigth Hot. Un lugar donde solo podía entrar con invitación y dónde todo lo que ocurría allí era exclusividad y nada podía filtrarse.

Santino y Matteo habían compartido innumerables mujeres, habían castigado a más de una y no había nada que les dé más placer que follarlas duro.

- ¿Qué haces? – le pregunta él a Abril evitando las disculpas de el muchacho.

- ¿A ti qué te importa? – suelta de golpe y comienza a buscar su ropa del suelo, pero él la detiene. – déjame. – forcejea con ella pero él es más fuerte.

- ¿Quieres follar? – habla acercando su cuerpo al de ella y sujetando sus brazos por detrás de su espalda..

- Contigo no quiero mas nada. – el dice enfurecida mirándolo a los ojos.

Toda la escena la estaba mirando Matteo, quién jamás había visto a Santino actuar de esa manera con ninguna mujer, por lo que deducía que esa chica era "su favorita" sin más se sentó a seguir mira do, cual película en el cine, aquella situación. Ellos habían participado de varias orgías, por lo que anhelaba poder follar Abril junto con él. Esa mujer tenía una manera de ser que hasta a él le volaba la cabeza y eso que la conoció tan solo hace media hora.

- Sigue resistiéndose que solo me provocas deseo. – le dice al oído y el cuerpo de ella se estremece dejándole sentir a él como es capaz de hacer que su piel se erice. – ahora te pondrás en cuatro en la cama, levantas el culo y dejaras que te meta mi polla mientras Matteo nos ve y disfruta o... – habla y a ella le llama la atención lo que dijo antes sin imaginar lo que dirá ahora. – puedes seguir follando lo a él mientras yo te follo a ti. – suelta y sus ojos se abren como platos.

- ¿Qué? – pregunta incrédula ¿Qué le insinuaba?

- Te quiero follar el culo mientras él te folla el coño. –

Una de las fantasías sexuales más deseadas por ella se estaba haciendo realidad y no podía no aceptarlo. Prácticamente no podía no hacerlo, porque él era su dueño, él desidia con quién debía y con quién no intimar y él ya había residido ¿Una forma de castigo? Talvez, aunque ella no imaginaria como se cobraría su falta de respeto en la oficina.

- ¡Matteo! – grita y él sonríe poniéndose de pie mientras se masturbaba para endurecer su polla. – recueste, quiero que la folles. -dijo y él obedeció. En tanto a Abril se le aflojaron las piernas. Estaba excitada. – ve y móntalo. – entonces lo hizo.

Caminó hacia donde Matteo y se subió a horcajadas de él.

- Fóllalo. Disfruta. Muévete como una perra en celo que tiene lo que tanto buscó. – que excitación le provocaba que le hablaré así. – anda, no me hagas esperar quiero ver cómo esa polla se hunde me ti. ¡Matteo! – él lo mira recostado en la cama y un solo gesto hace que él se quite el preservativo. Abril no comprende. – quiero que le eyacules dentro del coño. – ella lo miró y justo antes de quejarse, le dijo algo que la tranquilizó. – no puede embarazarte. Tiene vasectomía. - ¿Por qué no creer? Si él lo ordenaba, era seguro follar sin condón. – ahora hazlo, fóllalo.

Ella se introdujo su duro pene dentro suyo y antes que pueda comenzar a moverse, él cruzó sus brazos por debajo de sus caderas, apretando la fuerte y comenzó mover su pelvis tan rápido, tan fuerte y tan profunda que ella solo podía gritar.

En ese mismo momento y sin que ella lo notará, Santino se desvistió y comenzó a masturbarse teniendo la imagen en primerísimo primer plano de como al polla entraba y salía dentro de ella, y como un líquido bizcoso muy blanco sacaba desde dentro de su coño.

Lo volvía loco.

De pronto un grito hace que se detengan.

- ¡Ábrela para mí! – y entonces Matteo lo hizo.

Sin sacar su polla de adentro de su coño, abrió sus nalgas dejando a la vista su orificio anal libre. Sin más él se inclinó y escupió en la zona, para luego con su dedo comenzar a dilatarla. Vio en la mesita de luz un pinito de lubricante y con él comenzó a abrirle el ano, a qué dos dedos entrarán y salieran sin dificultad de allí y aunque estaba muy apretado, ella estaba lo suficientemente excitada como para no permitir que lo haga. Cuando al fin logro la dilatación que quería, se inclinó de modo tal que su pene quedé a la altura de su entrada y luego de echarse más lubricante en el largo de su pene, comenzó a penetrarla.

- Ohh si…. Ohhh siii. – comenzó a gritar ella al se ríe como la polla de Santino le entraba en el culo en tanto la de Matteo seguía dentro suyo. Cuando al fin entro toda, él ordenó.

- Muévete Matteo, folla mi perra. – como la ponía escucharla hablar de ese modo. Santino podía ser el hombre más educado del mundo, pero en la intimidad era otro hombre.

Ambos comenzaron a moverse y si bien a ella le dolía horrores estar siendo penetradas analmente, quería disfrutar aquella experiencia maravillosa como es la de formar parte de un trío, donde su cuerpo es el dulce de dos hombres hambrientos de sexo.

- Ohh si… así, pro favor no paren… - pedía ella entre gritos y gemidos de placer.

- Ohh nena, que buen coño tienes – le hablaba Matteo desde abajo en tanto apretaba sus nalgas. Abril estaba tocando el cielo con las manos. – bésame, bésame nena. – le pidió y ella busco sus labios.

Santino la penetraban mientras los observaba besarse y esa acción no podía generarle absolutamente nada. La precio que ejercía sus paredes anales sobre su pene le hacía sentir aún más profundo el placer y realmente lo estaba disfrutando.

Ella, mientras besaba a Matteo, llevo su mano hacia atrás y apretó con fuerza uno de los glúteos de él, provocando que Santino dejara de penetrarla y se incorpore.

- ¡Alto! – ordenó y el hombre automáticamente dejo de moverse dentro de ella. – abril, ponte de frente, quiero verte. – ella se levantó y se recostó sobre el cuerpo de él quedando boca arriba, expuesta en todas sus partes íntimas. – Fóllala por el culo. – le ordenó a Matteo y éste le introdujo el pene en el ano, en tanto él, se subía arriba suyo, para introducir su polla dentro de su coño. – mírame mientras te follo. –

- Házmelo fuerte. – le dijo mientras que con sus manos clavaba sus uñas en sus glúteos. – ábreme para ti. – le dijo y pudo sentir dentro suyo, como su miembro se ponía más duro que una piedra.

¿Quién estaba siendo sometido?

Santino comenzó a moverse al mismo tiempo que Matteo y las expresiones faciales de ella era realmente hermosas. Se mordía el labio mientras clavaba su mirada en sus ojos y abría más sus piernas. Aquel se movía tan fuerte, que de vez en cuando la hacia gritar de placer.

- Gime para mí, vamos hazlo. – le pido a ella mientras llevaba sus manos a su cuello. – hazlo, ponme la polla dura. – decía mientras sella gemía, hacia gestos con su boca en forma de círculo y cerraba sus dientes sintiendo el placer de estar siento afiliada al mismo tiempo que penetrada.

Rivas tenía en claro la maniobra de la estrangulación erótica, que sabía hasta donde ejercer precio y luego soltar. Está primera experiencia en todo la llevaba a un nivel donde nada le era suficiente.

- Fóllame más duro. Quiero que me lo hagas fuerte Santino. – le ordena ella y él no puede resistirse de alzarla entre sus brazos haciendo que Matteo terminé por masturbarse mientras tiene el primer plano de como Santino la folla tan duro como su cuerpo le da.

- Que mojadita la tienes. – decía mientras se movía salvajemente y le mordía, literalmente, se lo mordía todo.

- Ohhh… ahhh, así, no pares… fóllame Santino, hazme tuya, soy toda tuya… - su pedido envuelto de jadeos y gemidos lo volvían loco. – lléname completa, eyacúlame dentro.

- Ohh nena, me pones tan duro… - se mueve las rápido y tan fuerte que todo su cuerpo parece explotar. - ¡Matteo! Ven, fóllala conmigo. – él se levanta de la cama y mientras Rivas abre sus nalgas, aquel introduce su polla dentro de su ano comenzando a moverse ambos.

Una, dos, tres…

La sensación de tener dos pollas entrando y saliendo de su cuerpo era realmente fascinante.

Siete, ocho, nueve…

Sus cuerpos elevan su temperatura al punto de que cualquier cosa que los toque se prende fuego con ellos.

Doce, trece, su cuerpo comienza a temblar…

Veintidós, veintitrés, veinticuatro

El orgasmo comienza a envolverlos y cuando se quieren dar cuenta, los tres gritas monstruosa mente. Ella eyaculando mojando todo el vientre de Santino y ellos llevándola por completo, al punto de sacarle sus pollas y que su propio semen caigan al suelo desde dentro de ella.

Abril quedó exhausta, abrazada al cuello de él, en tanto sin darse cuenta, sus labios comenzaban a rozar su cuello de una manera diferente. ¿La estaba besando?