Esteban salió de la ducha con una toalla en la cintura y otra en la cabeza con la que se secaba el cabello. Camino hacia el tocador para lavarse los dientes, pero también tenía muchas ganas de orinar. Se rascó la cabeza por un momento antes de colocar un vaso de agua a llenar y corrió hacia el inodoro.
Lo más rápido que pudo se sacó el pene e hizo fuerza para que el líquido saliera rápidamente. Regularmente asomaba la cabeza para ver qué tanto se había llenado el vaso. Cuando vio que este ya estaba más arriba de la mitad y estaba a punto de llenarse, sintió que su corazón se aceleraba mientras hacia mas fuerzas. Su frente se llenó de pequeñas gotas de sudor cuando vio que el vaso estaba a punto de revosarse y sentía que aún tenía un poco por orinar. Esteban sintió el impulso de correr a cerrar la llave antes de que se regara el agua, pero no podía rendirse en este momento, tenía que terminar de orinar y correr a cerrarla.
*Cearrrr*
Esteban se asomó al escuchar la llave del agua cerrarse.
"¿Que estás haciendo?" Preguntó Jeison mientras lo veía con una sonrisa de complicidad.
Esteban se quedo mudo por un segundo. ahora que lo pensaba no sabía porque lo hacía, era algo que hacía unas pocas veces tanto en esta vida como en la anterior y lo entretenía. "N-Nada."
Jeison lo miro con escepticismo.
"Ok."
Pero acepto su respuesta y se fue después.
Esteban suspiró aliviado y continúo orinando esta vez con todo el tiempo y la tranquilidad del mundo.
Cuando llegó la hora de dormir, Esteban saco un pequeño colchón de su armario, lo tendió y se acostó con una sonrisa.
"Yo dormiré aquí y tú en mi cama." Señalo como si de un hecho se tratará.
"¿No es mejor que duermas en tu cama?" Jeison estaba un poco inseguro.
"No. Así estoy bien. Me trae viejos recuerdos."
"Si tú lo dices."
Esteban comenzó a manipular su brazalete GX, un holograma azul rey se proyecto desde el brazalete lo que le permitió su manipulación, el brazalete tenía todo lo que una computadora y un celular podían tener en su mundo anterior, como muchas otras cosas. prontamente encontró la función de IA.
Le apareció la función de nombrarla. Elijo Jarvis como un modo de recordar de dónde vino. También configuró la voz para que se pareciera a la de Jarvis de Ironman.
"Jarvis por favor transmite el partido de Telmar vs jumpx."
Si señor.
El brazalete disparó varios rayos de colores y en cuestión de segundos la pared frente a Esteban se transformó por completo en un estado totalmente abarrotado con muchas personas que vestían camisetas azul cielo con negro o camisetas rojas con blanco. La algarabía y pasión en los gritos hicieron que Esteban se asustará un poco y le bajará un poco al volumen.
Mientras las imágenes se transmitían Esteban no pudo evitar emocionarse y levantarse de su colchón.
Jeison también se había levantado, pero solamente estaba sentado en la cama mirando con interés en partido.
Ese era un partido muy viejo de hace ya 79 años. Pero gracias a la tecnología de este mundo se podía vivir como en ese mismo momento.
El corazón de Esteban comenzó acelerarce, sus ojos brillaron mientras veía las fantásticas excivicion de poderes.
En el punto fulminante del partido Telmar solo contaba con uno de sus participantes de pie y jumpx por otra parte tenía 2 de pie. Todo parecía dicho y hecho, pero Alexander flix no se rindió y con una valentía y determinación inimaginables desafío a una batalla a ambos. Con las garras uñas y dientes Alexander luchó hasta el último segundo, donde uno de sus contrincantes se distrajo por un segundo y a costa de su propia integridad se lanzó hacia el obelisco.
Esteban ya no se pudo controlar y con la cara totalmente roja y el puño apretado grito a todo pulmón. "¡¡Brakerrrrrrrrrr!!" Al mismo tiempo que aún después de que uno de sus brazos se partió Alexander llegó frente al obelisco y con su único puño aún funcional golpeó al obelisco con locura mientras rugía con locura: "¡¡brakerrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!!"
El estadio se quedó en silencio por un breve segundo antes de que todos saltarán y gritaran de la emoción al ver el obelisco derrumbarse en pedazos frente a Alexander flix.
"No puedo evitar emocionarme cada vez que veo ese juego." Esteban suspiró mientras se acostaba satisfecho.
"En verdad que eres feliz ¿verdad?" Preguntó Yeison de repente.
Esteban solo lo volteó a mirar desde su posición sin moverse ni un poco. La sonrisa que hace poco adornaba su rostro se borró de inmediato.
"¿Soy feliz?" Murmuró como una pregunta, no era para nadie en específico, se quedó mirando el techo de su habitación por unos buenos segundos en un pulcro silencio. " Creo que lo soy; al menos ahora sí. Antes... Era extraño. Porque no estaba feliz, ni triste. No me sentía mal, pero tampoco me sentía bien. Solo era como si la vida me hubiera puesto en modo avión. Solo... Estaba y yá."
Jeison lo miro como a un loco. "Hablas muy cripticamente y profundo. Casi pareces un viejo."
Esteban levantó su mano y la miró por un momento. Si contaba los años de su vida anterior tendría en total 43 años.
"Talvez soy un alma vieja." Esteban susurró. "¿Pero sabes?" Esteban se volteo el cuerpo y lo miro directamente hacia arriba. "Gracias a ti por fin soy feliz."
"¿Yo?" Preguntó Jeison sorprendido.
Esteban asintió. Siempre pensó en si mismo como un adulto en sus 40 años en el cuerpo de un niño, veía el mundo como solo un adulto podía verlo.
Pesimista y realista.
Pero hoy cuando sintió que su vida llegaba a su fin, se encontró con remordimientos y arrepentido.
Esa experiencia lo cambio por completo.
Solo unos minutos después su vida volvió a pender de un hilo muy fino, pero está vez no hubo arrepentimientos. Porque si moría, lo haría siguiendo sus propios deseos.
"Se cómo vivir mi vida de ahora en adelante." Los ojos de Esteban se tornaron firmes." Viviré conforme a mis deseos. Se que eso me llevará a cometer estupideces, errores e innumerables equivocaciones. La gente me llamará tonto, estúpido e iluso, pero viviré y moriré felíz."
Jeison lo miro fijamente por un tiempo antes de acostarse de nuevo en la cama con las manos apoyando su cabeza.
"Eres raro." Dijo Jeison
Esteban sonrió alegré. "Si, Lo soy."
"Antes dijiste que dios nos pudo haber reunido."
"¿Dije eso?" Preguntó Esteban rascándose la cabeza un poco avergonzado.
"Si." Respondió Jeison mientras soltaba de repente una pregunta. "¿De verdad crees que dios exista? Y si lo hace ¿porque ayuda algunos como yo en ese momento y a otros los olvida por completo y los deja a manos del mal?"
Esteban dudó unos segundos en responder ya que no sabía que quería escuchar Jeison, pero decidió ser totalmente sincero con lo que piensa.
"¿Dios? Talvez exista. No lo afirmó ni lo niego, porque no lo sé, ni tengo medios para saberlo." Esteban pensó que al momento de su muerte vería a dios o simplemente dejaría de existir. Pero simplemente abrió los ojos en un cuerpo totalmente nuevo y eso era todo. "Pero sé, porque esto me lo enseña diariamente la vida. Que si existe, ni se acupa, ni se preocupa por nosotros."
"Tú en verdad no crees en Dios ¿verdad?" Preguntó Jeison con una sonrisa.
"No." Esteban admito, su resurección le había hecho reforzar su escepticismo hacia este ser llamado Dios.
Nunca le había gustado hablar sobre ese tema, porque en su vida pasada había Sido muchas veces fuertemente criticado por ser ateo.
Así que cambio de tema.
"Jarvis ¿qué hora es?"
"Son las 11:50 señor."
Esteban se preocupo de inmediato.
"Jarvis. ¿Es posible para mí, no despertar un poder?"
"Imposible señor. En toda la historia no ha habido un solo caso de alguien sin un poder."
Esto lo tranquilizó un poco, pero estaba a tan solo 10 minutos de terminar su cumpleaños y no había señal de un despertar.
"Jeison está atentó a cualquier percance."
Esteban se acostó cómodamente y se obligó a dormir.
Extrañamente se durmió en el momento exacto que así lo deseó.
Cuando Jeison quería responderle, lo vio completamente rendido en el sueño.
"¿Cómo puede dormir tan rápido?"