Cuando esos sonidos e hicieron aún más fuertes aparecieron muchos hombres vestidos de blanco, con gorro y chaleco, todos corriendo a toda prisa con una mano en el cinturón. Una palabra estaba escrita en sus chalecos "Policía" Leo y yo nos espantamos mucho al ver a la policía, así que decidimos alejarnos lo más posible del lugar. No queríamos meternos en problemas.
Fue entonces cuando estábamos corriendo por un callejón no muy lejos de aquel palacio, Leo se detuvo y me gritó -Teo- me detuve y cuando lo vi entendí lo que me quiso decir. Entonces ambos nos detuvimos y sonreímos. -Realmente es difícil acostumbrarme a esto- le dije rápidamente - ¿es un sueño verdad? - me preguntó Leo a lo que asentí con la cabeza mientras una deslumbrante sonrisa se mostraba en mi rostro.
-Estamos tan acostumbrados a la realidad, que incluso en sueños la podemos sentir- cuando le dije eso a Leo él sonrió y me dijo -oye, ¿entonces qué hacemos?, ¿podemos hacer lo que sea verdad? - cuando me preguntó eso tomé mi barbilla con una mano y la otra en la cintura, al ver esta pose Leo comenzó a reírse a carcajadas mientras decía -nunca me canso de tus poses de caricaturas-.
Siempre me molestaba Leo conque imitaba mucho lo que veía en la televisión, a pesar de que nuestra pequeña comunidad no había mucha tecnología ya que normalmente nos la vivimos aislados aún hay un par de televisiones en la comunidad, recuerdo que cuando era niño saliendo de la escuela íbamos todos los niños a la casa del hermano menor de Daniel (el gordito que estaba en el árbol y el que se burla de Teo y Leo) a ver su televisión.
-Oye porque no llevamos una tele a casa y la vemos ahí, quiero saber que caricaturas pasan ahora, siempre quise saber que sucedía con Goku después de que peleaba con Cell- le dije con mucho ánimo a Leo a lo que me respondió - ¡sí! pero ¿por qué no mejor hacemos nuestra propia casa? - cuando dijo eso mis ojos se abrieron enormes a lo que acepté con mucho gusto.
- ¿Dónde haremos nuestra casa? hay muchos pequeños valles dentro del bosque- cuando dije eso Leo se sorprendió mucho y me dijo burlonamente - ¿por qué seguir en ese lugar?, hay mucha gente aquí, hemos visto más personas hoy de las que hemos visto en toda nuestra vida, hagamos la aquí- cuando dijo eso entendí lo que me quería decir, entonces le dije - ¿por qué no mejor la hacemos en la playa? quiero conocer el mar.
Y así fue que decidimos que sería cerca de una playa, entonces lo tomé del brazo y dije -sistema, llévanos a la playa más hermosa- pero nada sucedió, cuando lo notamos pude ver la duda en el rostro de Leo, entonces recordé lo que me dijo el tecolote "el único límite aquí es tu imaginación, si no lo puedes imaginar no lo puedes pedir", entonces el problema fue que no podía imaginar la playa más hermosa.