Armando estaba más que listo, al oír de sus mensajeros de la oscuridad que aquella mujer de nombre Zafiro estaba por entrar en labores de parto, al enterarse Armando por un lado y Margaret por el otro accedió en crear un portal e ir donde estaba Zafiro, se transformó en una seductora elfo y entró al portal, se hizo pasar por amiga de Zafiro pero los guardias no quisieron darle mucha información.
Margaret incomoda pensaba matarlos pero la voz de un elfo la hizo desistir de dicha idea, al verlo se asombró un poco ya que se parecía un poco a Leandro, aunque era mucho más alto, esta accedió en hablar con el y le contó algunos detalles, el elfo se presentó como Lexis y la guío a la casa de Zafiro.
Margaret luego de descubrir que el le había mentido lo maldijo y comento que ni siquiera Zafiro podría revertir ese hechizo, le dejó a Lexis una marca en su pecho donde sólo altos magos y hechiceros podrían ver dicha maldición. Margaret volvió furiosa a su aposento, pero obtendría su venganza de que le hallan visto la cada de estúpida.
Decidió olvidar su enojo y buscar a Armando, pero el consejero le explico que había salido a buscar una presa valiosa para ella, claramente sabía que era mentira pero en una pelea contra el sabía que aún le faltaba mucho para ganarle, luego de unas horas volvió Armando incomodó y luego de ello fue a su aposento.
Alfred al sentir llegar su amo entro a su aposento y le preguntó por si había logrado obtener su victoria, al ver como Armando se movía incomodó suspiro un poco y dijo
Alfred: mi señor, ya espero muchos años… por unos pocos más y mejor táctica podrá lograrlo, si desea puedo leer libros ocultos sobre ella y buscar el momento exacto.
Armando: no sólo estoy enojado por ello, sino que mi maldito hermano me traicionó, me llamo justo cuando iba a hacer mi ataque y me contó lo ocurrido, dejó que un maldito llamado Roger me destronara; esto me pasa por contarle mi plan.
Tiro de un golpe un jarrón muy antiguo aunque ya sin nada adentro y mientras se calmaba le contó que otra vez esa mujer le había dado batalla, tanto que no veía la hora de poder manipular la a su antojo. Luego de irse Alfred este se acostó en la cama y mientras recordaba la cara de Zafiro y ambas batallas sentía la excitación, no quería volver a llamar a Margaret sólo para eso y hacer que su mente pensará estupideces.
Con un conjuro revivió un cadáver y lo amoldo para que se pareciera un poco a Zafiro, hizo una leve réplica de ella y le ordenó poses sexuales para hacerla suya, al adquirir una idea de cómo era su personalidad le dio más placer y la hizo suya varias veces.
Al fin se sentía tranquilo porque no debía llamar a Margaret, y luego de saciar su sed le pedía que se mantuviera cerca, la había llamado oscuridad, ya que para el, el nombre de Zafiro era puro.