Margaret sonrió ante tal noticia luego de saber la verdad, debía ocultar su risa de victoria en frente de Oscuro, aunque no quería ni pensar por el esfuerzo de el por poseer a Zafiro, le pidió de favor a su Dios que mantuviera el secreto, ya que ella tenía en mente una gran sorpresa.
A Seth real mente no le importaba ni comentarlo porque sabría que Oscuro empezaría a arruinar los planes de el y por el momento sólo quería relajarse en un baño de sangre de dragones poseedores de elementos fuertes, aunque anhelaba la sangre de los dragones supremos, Luz y Oscuridad.
Margaret dejó al Dios tomando su baño, había recibido grandes noticias pero aún tenía dudas de algo, invitó a Constans que tomará un balde lleno con la sangre de los dragones y lo llevará a sus aposentos; luego llamo a Fiore y le pidió a Leandro que se mantuviera cerca.
Les explico a ambas que tenía un mente un rito y por eso debía ser bañada con la sangre, esto aumentaba no sólo su magia sino su percepción hasta del más mínimo detalle o hilo de magia de cualquier mago e incluso aprendiz de mago. Margaret decía que cada magia desprendía un color y aroma particular, este color era representado por su chakra dominante y su aroma era el olor corporal.
Quería buscar hasta el más mínimo hilo de magia de Zafiro y de allí buscar la fuente de su poder, pidió que investigarán todo sobre ella, desde carácter hasta amuletos o prendas; todo era importante, era como un libro y cada parte era un fragmento. Fiore le hizo un nudo alto en el cabello de Margaret y lavo su espalda mientras está se uní a con la magia de los dragones, hasta buscar una pista de por donde empezar, luego del baño, tomo un poco de la sangre que había preparado en una copa aparte.
Mientras esperaba que su cuerpo secara dicha sangre, el ritual le exigía estar unos días con dicho olor, no podía ocultarlo con ningún otro aroma o la magia no serviría de nada. Ambas mujeres esperaron hasta que Margaret saliera del transe. Notaron como en su cuerpo los tatuajes se volvían algo más grandes y en su frente aparecía la forma de un ojo de Dragón.
Al Margaret despertar dicho ojo desapareció y como si hubiera encontrado una mina de diamantes dijo
Margaret: Ya veo, con que esa es su apariencia y su poder, ya veo porque mi amo se éxito.
Fiore: mi señora, no me dirá ¿Qué ella también provocó algo en usted?.
Margaret: -ríe- ¿Acaso estas celosa? -toca sus labios-.