En la base de Demonic Contract
El señor Seed permaneció en su escritorio, mientras miraba las cámaras restantes, su mente no dejaba de divagar sobre quien podría haber vendido su base, estaba seguro de que no la habrán encontrado por casualidad, no había tanta suerte y mala suerte en este mundo, igual que las casualidades, de esta manera, solo quedaba que hubiera un topo o traidor dentro de sus hombres, quizá, incluso dentro de su propio circulo.
Sabia que no podría escapar si se llevase al traidor con el, pero tampoco podía dejarlo todo y escapar, si simplemente se marcha, no podrá retomar su poder anterior, como mínimo el hereje tenia que salir con el, si pudiese esconderse con el y seguir utilizando sus habilidades, entonces retomar grupo y clientes, incluso vengarse podría ser posible, pero primero era lo primero.
Se levanto y camino a una de las paredes, allí toco varias zonas diferentes y un pasillo se formo, tenia que marcharse a la zona de evacuación secreta.
tras bajar algunas escaleras, un pasillo extremadamente largo se mostro, este pasillo tenia una anchura de 6 metros y la altura de 4, se extendía por docenas de kilómetros y varios coches junto a un furgón, todos blindados esperaban para evacuar.
El furgón estaba destinado a la célula de contención del hereje mientras que los coches para todos los miembros del circulo, el suyo explícitamente era el mejor preparado y resistente, claro que esto los demás no lo sabían, eso y que el había colocado unos disruptores en cada vehículo, a excepción del suyo y el furgón, por si alguna vez tuviera que sacrificarlos para ganar tiempo.
Pensándolo fríamente, su paranoia le iba a servir excepcionalmente hoy.
Debajo de su mascara, sonreía y esperaba, mientras, un grupo de soldados y un miembro de su circulo trasportaban la capsula del hereje por un montacargas.
Su plan de escape estaba progresando sin dificultades.
En la superficie
El descenso de los capitanes llego tras dos tandas de desembarcos, la resistencia exterior fue nula, el único impedimento fueron las llamas de los Ifrit, su extrema temperatura y la pegajosidad de sus llamas era un suplicio para las fuerzas de desembarco y la razón sobre su alto índice de mortalidad sobre las fuerzas enemigas.
Mientras las llamas azules se apagaban ya había fuerzas militares preparadas para avanzar en el interior.
Minotaur, la avanzadilla del ejercito autómata, moles de 3 metros de altura y casi 1,5 de ancho, unidades muy poderosas debido a su resistencia.
Como de costumbre en estos casos, los autómatas Minotaur, comenzaron el avance a la base, rompiendo los restos fundidos de la puertas exteriores y entrando.
La fuerza de estas unidades robóticas era virtualmente imposibles para la mayoría de razas humanoides, quitando ciertas excepciones. Su fuerza sin precedentes y resistencia desmesurada los volvía la vanguardia perfecta, sus pesados cuerpos metálicos comenzaron a descender por los pasillos, un escudo militar de aleación, junto a un generador de escudos de energía personal, los volvía impenetrables para la mayoría de las armas de seguridad, las torretas de los pasillos fueron destrozadas, lo mismo para los guardias que los atacaron.
Claro que no fue un paseo, armas de gran calibre, como cañones de plasma montados, fueron capaces de destruir algunas de estas unidades, pero cuando esto sucedía, las unidades de soldados usaban su menor tamaño y maniobrabilidad para derribar a los tiradores.
La batalla en los primeros niveles fue escasa, casi todo defensas automáticas, Mirlia, Reis y Dimitri casi ni participaron.
El contingente militar superaba con creces a los efectivos de la base, provocando que los capitanes casi ni peleasen, además de que ellos entraron en la segunda oleada, lo que disminuyo su riesgo de entrar en combate, solo mataron o apresaron a las pequeñas ratas que se escondían, con Reis cerca, era imposible esconderse.
Debido a la activación de su habilidad, la apariencia de Reis fue extremadamente cambiada, aunque su altura permaneció, una manta de escamas cubrió su piel, ojos ambas y tres pares de largas orejas, fueron uno de los cambios mas sutiles, incluso su lengua fue cambiada a una viperina.
- Capitán, aunque conozco a un par se estigmatizados, aun no puedo evitar sorprenderme, debo decir que esta apariencia le favorece - Ante la broma de Dimitri, Mirlia no pudo evitar reír en voz alta, mientras Reis mantuvo su mirada al frente, aunque una pequeña protuberancia en su frente, donde una singular vena se puede notar hinchada, desenmascaraba su oculta irritación.
Dimitri y Mirlia continuaron riendo, siempre atentos a sus alrededores, pero con Reis como radar, era casi imposible que algo se le escape, dejándoles su ya poca acción en nada.
En ese momento, Reis levanto el puño y todos se detuvieron, Dimitri, comenzó a revisar a todos lados con la mira de su fusil, esperando el fuego enemigo, pero nada llego en un par de instantes, pero Reis rompió el silencio.
- Mirlia, la caja, se esta moviendo - Ante esta palabras, todos comenzaron a mirar la caja de seguridad.
Esta caja fue un medio de contención para animales extremadamente peligrosos y vienes de increíble fragilidad, una caja pequeña con una presión interna capaz de mantener fijo en su extremo cualquier objeto o pequeño ser vivo en su interior, dentro de la caja de la capitana, un Fénix tenue comenzaba a mover sus tallos, dejando su posición actual a otra, esta vez mas al oeste.
- Lo que sea a lo que apunta parece moverse a demasiada velocidad, estan escapando - Reis refunfuño, que su presa se escape fue casi un insulto para el, fue una arrogancia intrínseca con su estigma.
- Capitanes, no podemos contactar con la base, parece que estas ratas tienen algun inhibidor de señales, no podemos avisarles - Dimitri dijo mientras pateaba una papelera en un costado del pasillo.
Mirlia los calmó, pero su mirada a duras penas se alejaba de la flor, en esta caja su estigma no funcionaba, no podía escuchar a la planta, algo bueno para ella, los gritos de la pequeña eran molestos, aun no lograba tener un perfil sobre quien dejo estas plantas.
En unos minutos, un par de soldados llegaron a los capitanes corriendo.
- Capitanes, el Capitán Lerie, pide su presencia, ha encontrado una fuerte resistencia en la puerta H, los técnicos están por lograr desactivar las defensas autónomas, pero los guardias enemigos están reunidos en esta zona, también informa que la posibilidad de que sea un trampa es elevada -
- Guía - ante la voz de Reis, los soldados comenzaron su camino hacia la puerta H.