Capítulo 7
Entran en un momento de tensión que es roto por los clientes tras soltar unas carcajadas, luego de llegar a un acuerdo la misión inicia, se trataba de robarle unos papeles a los enanos o toda la información acerca de un proyecto, tras recibir los planos pudieron notar que se trataba del gigantesco y moderno lugar llamado "Xon" donde recogieron la misión; este lugar guardaba en su interior tanta información que entrar en él era una verdadera proeza por la protección que tenía. Es así que comienza el plan, las cámaras según los datos otorgados eran capaces de captar imágenes de todo tipo con una alta resolución y poseían rayos infrarrojos que se dispararían al mínimo movimiento, sin embargo, para llegar a estos, cerca de su destino, debían atravesar una muralla de enanos armados con armas láser que al menor movimiento lanzarían un disparo. Realmente no tenía muchas opciones ni mucho en su ventaja, por ello el plan debía ser perfecto, su primer paso sería crear una red de túneles de ratón que permitiesen una veloz comunicación entre los diferentes pasillos. Afortunadamente fuera de los avances que poseyeran los enanos eran extremadamente sucios y con frecuencia tenían problemas de plagas, esto favorecía a la entrada de Rithen, la cual debería disparar las diferentes alarmas y mantener los enanos guardias ocupados el mayor tiempo posible mientras Karanta entraría por los sistemas de ventilación como araña hasta el lugar donde se guardan los papeles para ser memorizados o copiados en tela.
Federico esperó fuera y escuchó como comenzó el espectáculo, las alarmas sonando fuertemente y los enanos escandalizando mientras corrían; aproximadamente a los quince minutos lograron salir las dos chicas, Rithen tenía cara de felicidad, pero Karanta tenía cara de haber visto un fantasma, al ver este rostro le preguntan:
Federico - ¿Qué ocurre? ¿No pudiste obtener la información? -
Rithen - ¿Karanta te sientes bien? –
Karanta – Esto no es lo que esperaba, esta información es más que peligrosa, por ella creo que caeríamos en el sueño eterno –
Rithen - ¿Tan mala es? –
Federico – Creo que está armando mucho drama –
Rithen – Caya Federico, a ver Karanta dime despacio, calmada ¿Qué fue lo que viste? –
Sin necesidad de recordar comienza a dar un resumen – Como sabes la ciudad de los enanos es una ciudad gigante con una tecnología extremadamente avanzada y que consume una energía fuera de lo común –
Rithen – Sí, pero… ¿Qué pasó con eso? –
Karanta – ¿Sabes de donde sale la energía? –
Rithen – De las piedras mágicas obtenidas en la mina según las revistas –
Karanta – Lamento decirte que no es así, los enanos, los enanos … - Se raja en llantos y cae al suelo
Rithen - ¿Qué pasó con los enanos? –
Karanta – Están raptando arcanios, le substraen toda su energía vital mientras los mantienen dormidos en cámaras de sueño eterno, de esa forma tienen energía más que suficiente. –
Rithen – O sea que las misteriosas desapariciones en Arcania son por esas cosas, interesante… pero eso no es para ponerse así –
Karanta – Recuerdas el rayo que incineró nuestra aldea, ese que vino supuestamente del cielo, eran los enanos, tienen un arma que puesta en máxima potencia es capaz de destrozar un continente –
Rithen – Esos enanos malgeniosos hicieron la prueba con nuestra aldea –
Karanta – Sí, aparecían en los informes incluso, eso fue el lanzamiento a un 0,05 por ciento –
Federico – ¿Puedo hacer unas preguntas? –
Rithen – Luego, no hay tiempo para cuentos ¿Recuerdas todo lo dicho por Karanta? –
Federico – Sí, no…- Es interrumpido
Rithen – Cuando vuelvas deberás contarlo –
Federico - ¿Por qué lo dic…? -le comienza un dolor en el estómago por el que termina en el suelo y seguidamente observa como caen sus dos compañeras junto a él, les habla, pero no contestan, entonces le dicen unas palabras los Goblins:
-Muchachito, no te preocupes el dinero será enviado al gremio, su misión siempre tuvo este final, gracias por realizar tan importante aporte al ejército goblin, nunca se te olvidará – Tras estas palabras escucha unos sonidos y seguidamente caen los dos goblins, en cuestión de instantes aparecen seis seres con cara de camaleón, desnudos y con una afilada garra en uno de sus dedos los que dicen:
-Esos Goblins nos contrataron y pagaron para mataros al terminar la misión, pero tras escuchar información tan valiosa, me temo que debían morir todos, estamos al servicio de los enanos – se acercan a Federico – Y tú no debes escuchar ni un segundo más –
Despierta en el mundo real a las seis del mañana recostado sobre la libreta, debía recordar todo lo dicho por Karanta para contarlo en el gremio. Tras varios intentos escribiendo no consigue volver a entrar, no sabía el por qué, pero debía anotar en alguna libreta cada detalle antes de que fueran olvidados por su mala memoria.