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Chapter 52 - El camino de los guerreros

Ansgar quien estaba escalando por el escarpado terreno de la montaña pudo sentir como su pie se resbalaba de la piedra donde se apoyó.

Por lo que sosteniéndose de unas piedras evitó caer al vacío, aunque evitó la muerte, sus manos le dolían debido a que su peso hacía que el filo de las piedras lastimaran sus manos.

Esto ocasionó que Ansgar gritara y usará todas sus fuerzas para volver a poner sus pies en algunas rocas.

Cuando por fin apoyó sus pies en las rocas, agachó su cabeza y cerró sus ojos para poder soportar el dolor, tras un pequeño momento abrió sus ojos para volver a empezar a escalar.

Conforme más subía aquella montaña sus manos le empezaron a sangrar por lo que cuando subió a la pequeña cima se acostó en la nieve para retomar el aliento.

Mientras tenía los ojos cerrados pudo recordar cómo había llegado a ese lugar.

"TENEMOS QUE SEGUIR CORRIENDO DERICK."

Dijo Ansgar mientras corría con todas sus fuerzas entre los árboles.

Derick quien estaba a su lado recargo su ballesta y se dió la vuelta para disparar hacia uno de los osos blancos que lo estaban siguiendo.

Ansgar pudo ver que a unos metros de ellos los árboles acababan abruptamente por lo que giró su cabeza y se percató que Derick estaba distraído.

Por lo que usando su mano lo empujó hacia un lado evitando de esta manera que el cayera por el saliente, pero fue en ese momento que Ansgar sintió como un oso blanco lo empujaba.

Esto ocasionó que Ansgar y el oso cayeran por el pequeño saliente, haciendo que Ansgar perdiera el conocimiento.

Cuando Ansgar recobró el conocimiento lo primero que pudo ver fue el cadáver de un oso blanco el cual estaba completamente desmembrado.

Su estómago estaba abierto y sus intestinos estaban desparramados por la nieve, mientras que muchos de sus huesos estaban tan rotos que sobresalían de la piel.

Su cara estaba completamente desfigurada pero había en ella un virote de ballesta por lo que Ansgar supo por qué el estúpido oso lo había empujado.

Con mucho cuidado se fue levantando de la nieve y miró hacia arriba donde pudo ver que había tenido suerte pues apresar que la saliente de dónde cayó no era muy alta.

Había una gran cantidad de piedras por lo que si hubiera caído un poco más cerca o más lejos de donde estaba pudo haber muerto como el oso que tenía frente a él.

Usando sus manos reviso todo su cuerpo para saber si tenía alguna herida, pero al no haber sentido nada solo tomó de su pecho su cuerno y le quitó la tapa de madera.

Para poder beber algunos tragos de licor, al acabar volvió a tapar el cuerno y empezó a gritar "Derick, si me estás escuchando nos reuniremos en la tribu.

Si encuentras a Elof dile que te siga y que no olvide que aunque estemos separados tenemos que marcar por dónde nosotros pasamos.

De esa manera al menos si uno de nosotros sobrevive podremos hacer que nuestra travesía valga la pena."

Tras decir esas palabras se acercó al cuerpo del oso blanco para poder cortar un poco de carne pues debido a la persecución de los osos no tenía con él nada de alimento.

Al recordar ese momento Ansgar abrió los ojos pues el dolor de sus manos lo despertó "Tengo que buscar un lugar dónde pasar la noche o moriré."

Levantándose de la nieve emprendió su camino a través de la nieve en aquella montaña.

Por su parte Elof quien estaba viendo uno de sus pies rotos el cual tenía el hueso de manera visible miró con curiosidad el lugar donde había caído tras escapar del ataque sorpresa que habían hecho los osos blancos.

El lugar donde estaba era una cueva completamente de hielo, que sólo era visible por la luz que entraba del aujero donde había caído.

Más allá donde la luz no llegaba solo se podía ver una oscuridad absoluta y se podía escuchar el ruido de un río subterráneo que parecía recorrer aquel lugar.

También podía escuchar el ruido de las gotas de agua que caían desde distintas partes de la cueva.

Al intentar moverse de dónde estaba se percató que no solo tenía roto el pie si no que cayó en cuenta que no podía sentir sus pies, por lo que apretó su puño y le dió un golpe a la pared de la cueva.

Tras estar un tiempo pensando una sonrisa se formó en su rostro, por lo que miró hacia el aujero donde había caído y de su costado tomó su cuerno el cual abrió con tranquilidad para después beber todo el licor que había en su interior.

Al sentir el ardor que le provocaba el alcohol mientras recorría su garganta, solo pudo sentir algunas lágrimas que recorrían su rostro cuando recordó a su familia quien se encontraba esperando su regreso.

Cuando acabó de beber tomó su daga que estaba en su pecho y empezó a tallar algunas runas en el cuerno.

"Es una pena que no pueda regresar con mi esposa y ver a mis hijos, pero Midgard a pedido mi cuerpo y el Valhalla me llama.

Solo espero que sí en algún futuro alguien encuentra mís restos pueda regresarlos a mi familia para que me den una sepultura digna de un guerrero."

Cuando acabó de escribir las runas en su cuerno, lo dejó a un lado para después intentar arrastrarse hacia donde estaba su ballesta.

Al inclinarse para poder arrastrarse por el frío pudo sentir un inmenso dolor en su espalda por lo que apretó sus dientes y empezó el tortuoso camino hacia su ballesta.

Cada vez que avanzaba con sus brazos por el suelo de hielo de aquella cueva solo podía pensar en su familia y en todo lo que dejaría atrás.

Lo que eran solo algunos metros se convirtieron en una penitencia para Elof quien avanzo de manera lenta pero continua hacia la ballesta que estaba iluminada por la luz del aujero.

Cuando la mano de Elof toco aquella ballesta la arrastró hacia su pecho y usando sus manos mientras resistía el dolor pudo sentarse y recargar su cuerpo en la pared de hielo.

Resistiendo el impulso de desmayarse tomó uno de los virotes que tenía en su costado y con su mano temblorosa lo colocó dentro de la ballesta la cual ya estaba preparada para disparar.

Teniendo la ballesta cargada y lista para disparar la acomodo sobre sus pies y la apuntó hacia su corazón.

Ignorando el dolor de su espalda respiró profundamente y recargo su cabeza en la pared de hielo "Si solo me queda el camino de la muerte, tomaré mi vida con mis propias manos.

Por qué eso es lo que hace un guerrero, Derick y Ansgar, espero que puedan llegar a nuestra tribu.

De esa manera mi muerte se volverá una leyenda, los esperaré en el Valhalla junto a Kaj y Galt."

Al acabar de decir esas palabras Elof apretó el gatillo de metal de su ballesta, el impacto que pudo sentir lo dejo sin aliento.

Fue en ese momento que sintiendo el frío de la madera del virote pudo recordar toda su vida mientras algunas lágrimas salían de sus ojos.

Recordando toda su vida pudo llegar al momento en que estaba hablando con Derick y algunos osos blancos los atacaron.

Se defendieron pero al final acabaron separándose por lo que él corrió con todas sus fuerzas a través de la nieve hasta que al pisar una parte de la nieve, el cayó en aquel aujero.

Siguió recordando hasta que llegó al momento dónde tomó su ballesta y se disparó al acabar ese recuerdo derrepente todo se empezó a volver negro y fue en ese momento que su vida llegó al final.