GABRIELA
No sabía que pensar de lo que me acababa de contar Carlota de ellas, me era complicado, pero también sé que ella no me mentiría. Lo único de lo que estoy segura es que les enseñaré a mis hermanos defensa personal y Ana, no iba a permitir que pasase lo de la semana pasada, ni muerta.
Cuando llegamos solo estaban los chicos lo que fue una suerte para mí porque primera de todo, no sé cómo iba a reaccionar yo y segunda estoy segura que Carlota no sería capaz de aguantar de decirle algo.
"MAMIIII." Chilló Ana en el momento que me vio "Hola princesa." La cogí en brazos porque si no chocaba contra mi cuerpo y no quería que eso pasase, al menos podía estar algo más tranquila porque al parecer la rodilla no le dolía casi nada se podría decir.
"Chicos, hoy nos vamos todos para casa de Gabriela." Dijo Carlota entusiasmada "¿Y eso a que se debe?" preguntó Marcos confundido y ahora mismo estaba yo igual que él "Eso Carlota, ¿me lo explicas?"
"No te enfades Gabriela, pero cuantas más personas se apunten mejor lo vamos a pasar, y así Marcos podrá aprender algo, ¿oh me vas a decir que no es buena idea?" preguntó, riéndose "No entiendo nada de lo que estáis hablando."
"Es que Gabriela decidió enseñarles defensa personal a los chicos y a tu hermana." Informó carlota "Eso me parece una gran idea la verdad, no sé cómo no les enseñaste antes." Dijo Marcos, negando "Porque antes no había necesidad, ahora sí que la hay."
"Vale, también tiene sentido." Respondió asintiendo "Si, además que podrás vernos jugar un rato a mí y a Gabriela." Dijo Carlota con una gran sonrisa en su rostro "¿Jugar a qué?" pregunté confundida "Vamos Gabriela, hace tiempo que no tenemos unos de esos "combates" entre nosotras. Estaría bien saber quién está más oxidada ¿no crees?"
"Si, la verdad es que hace tiempo que no peleamos como en la academia." Dije dándole la razón "Pues Carlota, déjame decirte que creo que perderás." Respondió Marcos riéndose "No creo Marcos, siempre estuvimos muy igualadas, se podría decir que ella me ganaba la mayoría de las veces."
"Eso es mentira Gabriela, estábamos cincuenta-cincuenta." Protestó Carlota "Como quieras, pero estoy segura de que está vez ganarás tú" aseguré "Oh, créeme que lo haré, no dejaré que me ganes." Respondió riéndose "Esto suena bien."
"¿Quieres participar tú también Marcos? Si quieres puedo empezar contigo y dejar mi victoria contra Gabriela para el final." Dijo Carlota, riéndose una vez vio la cara que le quedó a Marcos "No, creo que pasaré esta vez."
"Mami, pero ¿las peleas no están mal?" preguntó Ana en mis brazos y asentí "Si princesa, pero no va a ser una pelea de verdad, va a ser un juego de esos a los que jugamos tú y yo o a los que juegas con tus hermanos."
"¿Entonces podré jugar también?" preguntó ilusionada "No, estás muy pequeña aún." Respondí "Pero yo también quiero aprender a pelear, ¿qué pasa si se vuelven a meter conmigo?" preguntó y negué, porque era algo que no permitiría que pasase de nuevo "No dejaré que eso pase, te enseñaré luego lo que tienes que hacer para que no se metan contigo, ¿vale?"
"Vale." Con eso pareció que quedó más tranquila y pude ver en la cara de Marcos que no entendía nada de lo que acababa de decir su hermana, a lo cual le negué y sonreí para que quedara tranquilo, que luego le contaría.
Llevábamos un par de minutos hablando y no tenía ni idea de dónde estaba Alex la verdad, y en un momento escuché reír a Ana por lo bajo. "¿Qué es gracioso Ana?" pregunté con curiosidad "Nada, es que me acordé de la cara de Marcos cuando le regañaste por quitarme los caramelos."
Me eché a reír con ella, porque la cara que le había quedado fue bastante graciosa la verdad, pero pronto dejé de reírme porque unos brazos que conocía muy bien me abrazaron desde atrás y acabó por dejar su cabeza en mi hombro.
"¿Me echabas de menos preciosa?" preguntó la voz de Alex detrás de mí "Puede ser, pero tenía a esta pequeña." Informé a pesar de que sí que lo había echado de menos "Ana ¿voy a tener que preocuparme porque tú me saques todo el cariño de mí novia?" preguntó este en tono dolido, pero sé que no era real "No."
"¿Entonces no me quieres? ¿Aunque sea un poquito? Pensé que habíamos hecho las paces." Protestó Alex y cada vez estaba más confundida
"Si te quiero, pero quiero más a Gabriela, es mi mami." Insistió Ana "Entonces ella te quiere más que a mí. Voy a llorar."
"No llores, ella también te quiere. Tú mismo me dijiste que nos quiere mucho a los dos, pero de distinta forma." Protestó Ana "Recuerdas lo que te dije ¿eh?" respondió este, con una sonrisa en su rostro "Claro que sí. Por eso me caes mejor."
"Gabriela ¿tú sabes de que están hablando estos dos?" preguntó Marcos a mi lado y negué "No tengo ni la menor idea. ¿De qué hablas princesa?" pregunté con curiosidad "De nada, es un secreto."
"¿No me puedes contar lo que te contó?" pregunté más confundida todavía "No, yo se lo conté, y él no te lo va a contar ¿verdad?" preguntó, pasando a centrar su mirada en mi novio "Palabra de chico bueno." Respondió este, levantando la mano a la altura de su pecho "Ya te gustaría ser a ti bueno como lo quieres aparentar."
"Si que es bueno tía Carlota." Respondió Ana y Carlota se rió "¿Ahora soy tú tía?" preguntó "A mí me gustaría." Contestó la niña "Pues entonces soy tú tía Carlota princesa."
"Además le tengo que dar la razón a Ana, Alex es bueno." Informé "Eso lo dices porque estás enamorada de él y solo ves cosas buenas en él, pero todo el mundo tiene su parte mala, quitándoos a ti y a Ana." Se rió Carlota "Eres una exagerada, tú y Alex no seréis familia por casualidad ¿no?"
"No, ¿por?" preguntó, confundida "Porque a mí también me llama exagerado, por eso te lo debe decir." Dijo Alex, riéndose y abrazándome por la cadera de nuevo "Pues no, no lo somos, aunque eso ahora mismo me convendría porque seríamos familia en cierto sentido."
"Ya lo somos ahora, sobre todo si quieres que sea la tía de tus hijos." Respondí recordando la conversación de antes "Eso no es posible Gabriela, ella sería demasiado infantil para tener hijos." Respondió Marcos riéndose "Pues sería una gran madre, Marcos."
"Gracias Gabriela, al menos sé que cuento con uno de los tíos de mis hijos." Contestó fingiendo molestia a lo que acababa de decir Marcos, a pesar de que ambas sabíamos que no estaba hablando en serio "Claro que sí, para siempre y lo sabes."
"Ves, ella es una buena amiga no como tú Marcos." Dijo Carlota, echándole la lengua a este "Sabes que en el fondo me adoras." Respondió Marcos riéndose "Punto para Marcos." Susurró Alex en mí oído, pero Carlota lo había escuchado "Tú cállate si no quieres que te dé con este puño en la cara."
"Si piensas que te dejaré hacerle eso estás muy equivocada Carlota." La informé "Bueno, puedes dar gracias a Gabriela y por ser su novio, porque por mí te lo daba, y lo sabes." Aseguró y este asintió "Lo sé."
"Haber si no te la doy yo por decir estupideces." Respondí a mi mejor amiga "No lo vas a hacer y lo sabes." Dijo Carlota "Yo de ser tu no la tentaría Carlota, sabes que lo hará." Contestó Marcos riéndose "Está Ana delante, créeme, no lo hará." Dijo totalmente convencida y no pude evitar sonreír.
"Oye Alex ¿Me puedes coger a Ana un momento?" pregunté y este se separó de mí "Encantado preciosa." Dijo este, con una gran sonrisa en su rostro "Mamá ¿qué le vas a hacer a la tía Carlota?" preguntó Ana "Le voy a dar un abrazo princesa, no te preocupes por ella."
"No le hagas caso que no lo va a hacer." Dijo Carlota, apartándose de mí lado rápidamente "Si, sí que lo voy a hacer, no tengas miedo." Aseguré a pesar de que solo me estaba metiendo con ella "Yo de ser tú no me fiaría Carlota, sabemos cómo es Gabriela." Dijo Marcos, siguiéndome el juego.
"Pues por eso mismo digo." Respondió escondiéndose detrás de él "Hey chicos no habléis así de mi reina hermosa que si dice que no va a hacer nada es que no va a hacer nada." Protestó Alex detrás de mí "Eso lo dices porque a ti no te hace nada."
"Puede ser, pero te prometo que no te hará nada." Aseguró este "¿Y de verdad te piensas que me fiaré de tu palabra solo? ¿Que ella se detendrá porque tú lo digas? Déjame decirte que no lo creo." Informó Carlota, mirando por encima del hombro de Marcos "Que poca confianza tenéis en mí."
"Sabes que yo confío en ti más que en nada hermosa." Insistió Alex "Yo también mami." Apoyó Ana "Me conocen de menos tiempo y confían más que vosotros, me debería sentir ofendida o algo."
"Eso es porque ellos no tienen ni idea de cómo eres en realidad mientras que nosotros sí que lo sabemos." Respondió Marcos "Eh, que yo conozco a mami desde siempre." Protestó Ana "Pero no es igual." Dijo Marcos "¿Por qué?" cuestionó la pequeña "Eso, ¿por qué Marcos?" presioné a pesar de que sé a qué se refería "Porque yo te conozco de toda la vida que ya es decir mucho, y ella solo te conoce seis años."
"De toda la vida, igual que tú." Informé "Lo siento Marcos, pero estoy con Gabriela, se puede decir que la conoce de tanto tiempo como tú, a pesar de que no tiene la misma edad." Apoyó Carlota "¿Aún por encima que te vengo a defender y me das la espalda?"
"Lo siento, y te agradezco que lo hagas, pero es la verdad." Respondió esta, encogiéndose de hombros "No volveré a defenderte de Gabriela, en serio te lo digo." En ese momento noté que Carlota se puso tensa mirando algún punto detrás nuestra, lo que hace que me gire y vea a Sara y su hermana detrás de nosotros.
"Hola chicos, ¿por qué discutís ahora?" preguntó Sara, con una gran sonrisa en su rostro "Eso no es de tu incumbencia." No tardé nada en llegar junto a Carlota para ponerme a su lado con una mano en la espalda, no creo que eso fuese a hacer mucho efecto para que ella se callase, pero esperaba que hiciese algo. Desde luego, Marcos y Alex se quedaron mirando para ella extrañados.
"¿Te pasa algo Carlota?" preguntó esta y negué antes de que esta pudiese decir algo más "No le pasa nada, solo está estresada, por lo que nos vamos a dar un paseo." Dije, cogiendo a Carlota del brazo y arrastrándola conmigo "Pero queda poco para que acabe el descanso ¿no tienes clases?"
"Claro que las tengo, pero no pienso ir, prefiero estar lejos…" empezó esta y le puse mi mano sobre su boca para que dejase de decir cosas "Y nosotras nos vamos ahora mismo antes de que digas algo de lo que te vas a arrepentir."
La empujé y empezamos a andar en la dirección en la que habíamos venido hace un rato. Ana no tardó nada en bajarse de los brazos de Alex y se vino para mi lado, mirando a Carlota con el ceño fruncido, estoy segura de que no entendería nada. Marcos y Alex quedaron mirando para nosotras hasta que ellas llamaron su atención.
Ahora mismo estábamos en el parque en el que habíamos estado Alex y yo con Ana antes. Ella no tardó nada en ir a jugar dejándonos a mí y a Carlota solas. "De verdad que como las vuelva a ver delante las mato con mis propias manos. NO PUEDEN SER TAN DESCARADAS." Gritó lo último "Cálmate Carlota, no montes una escena delante de Ana por favor. No quiero que Marcos se enteré."
"ES QUE MARCOS SE TIENE QUE ENTERAR. NO PODEMOS PERMITIR QUE ESA ARPÍA LE HAGA DAÑO GABRIELA." Dijo frustrada "Lo sé, y no lo permitiremos, eso te lo prometo, pero es que si le contamos ahora lo destrozará o no nos creerá." Aseguré "Claro que nos creerá, no le mentiríamos con esas cosas."
"Lo sé, pero está demasiado enamorado de Clara que me puedes creer cuando te digo que no creerá nada de lo que le decimos." Dije "Si eso pasa lo mato también, no puede estar tan ciego." Protestó y negué "Todos estuvimos ciegos al no verlos, yo sigo sin poder creérmelo." Dije lo último más para mí misma que para ella "Pues puedes creértelo porque es cierto, cúbrete las espaldas Gabriela porque los problemas solo acaban de empezar."