Chapter 24 - 22

Después de aquel incidente con su período, se acostaron en la cama y disfrutaron de comida chatarra y unas buenas películas en Netflix.

Quedaban dos días para su viaje a Busan y ambos estaban nerviosos.

El plan era partir el viernes después de clases y volver el lunes en la madrugada. Iban a estar en un hotel costero de cinco estrellas. Taehyung quería lo mejor para ambos.

Jungkook en un principio se había negado a viajar y que era muchísimo dinero invertido. Pero Taehyung le convenció con palabras y con una... mamada. Jungkook no pudo negarse ante ello, y es que Taehyung había tomado mucha experiencia con ello y le encantaba.

No podían separarse, siempre estaban juntos. Siempre estaban riendo juntos, sonriendo, mirándose, abrazándose, acariciándose, haciendo el amor. Siempre estaban dedicándose dulces palabras de amor y promesas.

Eso en parte les molestaba. Prometer palabras es mucho, evitaban prometerse un futuro juntos porque les hacía doler sus corazones. Es imposible saber qué pasará mañana.

Se amaban el día que lo vivían. No mañana, ni pasado, ni el próximo año. Se amaban el día que vivían. No se apresuraban, vivían cada día como si fuese el último. Siempre hablándose con sinceridad, amor y diciéndose cuanto se amaban con todo.

Eran la envidia del colegio entero, todos los veían con recelo. Parecían la pareja perfecta aunque ellos mismos recalcaban que no lo eran. Jungkook, a pesar de estar con Tae, seguía recibiendo confesiones de amor e invitaciones indecentes.

Jungkook solo para molestar, dejaba esas cartas en la mochila de su príncipe. Taehyung furioso se dirigía a las chicas y les pedía un mínimo de respeto, y que también se respetaran a sí mismas y que buscaran su dignidad en la basura.

A Jungkook le encantaba verlo furioso con sus cejas juntas, su nariz arrugadita y sus ojos achinados, su boquita en un dulce puchero y sus mejillas hinchadas. Era una imagen que le daba oxígeno para poder vivir. Mimarlo después de que estuviese enojado era como estar en el cielo.

Habían veces en las que ni siquiera se hablaban pero disfrutaban de la compañía cálida mutua. Sentirse en un silencio agradable en el parque era demasiado especial para ellos. Era casi una tradición. Siempre que finalizaban las clases iban a descansar un rato al parque y luego iban a sus casas.

Incluso sin hablarse sabían cómo se sentían y que querían.

Taehyung en una ocasión no había vociferado ni una sola palabra, mas Jungkook sabía lo que quería con solo mirarlo a los ojos. "Vamos al parque de atracciones, entonces bebé". Era increíble.

Si bien no compartían salón de clases, fuera de estos, siempre estaban juntos. No había un solo segundo en el que no estuviesen juntos. Incluso para ir al baño. Ambos habían hablado de ello y se sentían cómodos juntos en todo momento.

Cada día se sentía como el primero. Jamás olvidaría la noche en la que Jungkook se emborrachó y llegó hasta su casa, tocando guitarra, llorando y grit��ndole que le amaba mucho.

Recuerda muy bien que había recibido un reto de su padre. Jungkook casi se mea en sus pantalones de la vergüenza y de los nervios.

Pero cosas como esa era que se enamoraba cada vez más.

Jungkook podía jurar que cada día conocía algo nuevo de su príncipe. Era una persona demasiado importante en su vida; lo acompañó durante todo el proceso de quimioterapia de su padre. Su padre estaba estable, casi libre del cáncer. Por lo menos ya no tenía los mismos dolores que antes y ahora tendría muchísimos más años de vida.

Jungkook le abrazó llorando mientras le agradecía su apoyo, y es que Jungkook no hubiese soportado pasar todo eso solo.

Ambos se complementaban increíblemente bien. Como bien dicen: "polos opuestos se atraen".

—Me da miedo lo que pueda pasar mañana...— habló Taehyung en medio del silencio en el parque.

—A mi también, cariño. El tiempo pasa tan rápido que me da nostalgia y pena.

—El tiempo va tan rápido que tengo miedo, Kookie. Sé que odiamos hacer promesas pero... ¿prometes siempre estar a mi lado?

—Siempre, cariño, siempre.— besó su preciosa nariz.—En las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad. En la pobreza o en la riqueza, siempre juntos.

—¡Eso tienes que decirlo en nuestra boda!— rió Taehyung, su sonrisa congelando el rostro de Jeon en una mueca enamorada.

—Estoy tan enamorado que hasta podría tomar tu apellido...

—¡No, no!— saltó asustado.—¡Quiero tomar tu apellido!

—¿Por qué?— sonrió el pelinegro, divertido.

—P-Porque... se me hace sexy.

—Oh, ¿te parece sexy?— preguntó en su acento Satoori, Taehyung automáticamente se tiró al pasto dramáticamente gimoteando. Sus piernas se cruzaron y sus muslos temblaron.—¿Qué pasa, cariño?— volvió a usar su acento.

—¡N-No me-me hables así!— volvió a gimotear. Jungkook, ágilmente, se subió encima de Taehyung riéndose.

—¿Qué ocurre, bebé?

—Suenas tan... ¡Agh!— lloriqueó.—No me hables así por favor...

—Si no me dices porqué... Seguiré utilizándolo, príncipe.

—¿No te has escuchado? Sueñas caliente como el infierno, Jeon.

—Oh, entonces... Seguiré usándolo.

—Incluso si me llegas a insultar así me sentiría halagado.

Jungkook acercó sus labios al cuello canelita de su bebé y susurró —: ¿Halagado?... ¿Así de caliente te pongo?

—Demasiado caliente... Con-Continúa hablándome así, por favor. Me tienes tan húmedo a tu disposición.

—¿Estás húmedo, cariño?— Taehyung afirmó con un sonido que pareció más un gemido.—Tan húmedo por mi y mi voz, príncipe-

—¡Jungkookie!— el chillido de aquella chica hizo que ambos se tensaran.

Jungkook se sentó con Taehyung en sus muslos y miró a la chica. El pelinegro la miró inexpresiva y la chica se puso nerviosa.

—Y-Yo... Quisiera saber si podrías salir conmigo.— la chica habló rápidamente. No era primera vez que la rechazaba pero seguía insistiendo, era molesto ya.

Taehyung simplemente ignoro a la "zorra ofrecida" como le decía y su lengua delineó el delicioso cuello de su novio. Jungkook contuvo su gemido y suspiró.

—No es primera vez que te rechazo, chica. Tengo novio y soy feliz con él, demasiado. Por favor, deja de insistir. Es imposible que deje a mi príncipe. No estoy interesado en ti.— Jungkook aguantó sus gemidos y su rostro había cambiado a una mueca molesta. Estaba cansado de rechazar a esa chica, ¿qué no tenía dignidad?

Taehyung dejó un beso en los labios de su novio y se levantó, se acercó a la chica y la tomó de la mano. La llevó hasta una banca y la fulminó con la mirada, habló —: ¿Qué carajos te pasa? Estamos cansados de que siempre estés interviniendo cuando estamos juntos, ya te lo ha dicho. No desea estar contigo. Compréndelo, me tiene a mi.

—¿Y qué tienes tú que yo no tenga? Mi cuerpo es más bonito... Yo si soy normal y natural. Soy mejor que tú.

—¿Natural? Llevas cirugías encima y me dices que eres natural... Vaya chiste. Jungkook me ama, me prefiere a mi. Tal vez yo no sea algo normal pero aún así me prefiere... No sabes cuantas veces me ha hecho gritar de placer cuando me folla bien rico ¿y sabes qué? mi cuerpo le fascina, gime con solo verme. Nos amamos y somos felices, por favor, deja de molestar y búscate a alguien que si te quiera. Jeon Jungkook es mi novio, ¿lo captas?— golpeó su nariz con su dedo índice y fue donde estaba su novio.

—No se quedará así.— la chica sollozo triste.

se vieneeeeeeee 👀👀

prepárense mentalmente uwu