En el territorio del norte tras el campamento de bandidos, al otro lado del lago afuera de una pequeña cabaña de madera estaba parado Jon utilizando un atuendo sencillo de color oscuro, sus brazos estaban completamente vendados dándole una apariencia un tanto extraña, más aún si se consideraba que cada movimiento que realizaba provocaba que frunciera el ceño.
No obstante continuo realizando lo que no pudo describirse de manera distinta a una rutina de calentamiento, esto continuo durante cerca de 20 minutos hasta que su frente se empapó de sudor, ya que aunque los ejercicios pudieron considerarse sencillos lo cierto es que consumieron toda su energía en poco tiempo.
"Toma un descanso..." - Tania se acercó para apoyar a Jon cuando se tambaleó un momento, luego de eso procedió a apoyarlo hasta que él estuvo sentado nuevamente en un pequeño banco cercano, seguido de lo cual fue a la entrada de donde tomo una jarra con agua y una pequeña toalla.
"Entiendo que estés inquieto, pero no sirve de nada presionarte tanto." - Limpiando su rostro le aconsejo suavemente, Jon por su parte solo mostró una ligera sonrisa sin responder sus palabras, ante ello el ceño de la mujer se frunció cuando sujeto el rostro del joven y lo obligo a mirarla a los ojos.
"Últimamente has sonreído mucho sabes... también te comunicas más con nosotras, y muestras tus emociones de forma más vivida..." - Un rastro de ira se pudo notar en las palabras de Tania a pesar de que el contenido de estas pareció muy positivo, esto se hizo aún más evidente cuando aumento la fuerza en su agarre contra el joven.
"Entiendo que no confíes en nosotras... pero no creas que somos tan idiotas para no darnos cuenta de que pasa, quizás la única persona que cree ingenuamente en tu acto es Teresa." - soltando al joven continuo con su labor y seco cuidadosamente su cuerpo, como si nada hubiera pasado un momento atrás.
El silencio cubrió al par durante un par de minutos hasta que el Joven recupero el aliento, entonces aparto la mano de la mujer y se levantó lentamente.
"No es todo un acto... y me disculpo por hacerlo, pero en este momento no queda nada más en mi vida." - las palabras de Jon eran tan frías como el hielo, pero en lugar provocar miedo... estaban cargadas de un extraño sentimiento de soledad en ellas.
El joven camino lentamente en dirección al lago al igual que hizo como parte de su rutina diaria, esto causo que la mujer quisiera detenerlo pero cuando abrió su boca no tuvo nada que decir, así que con un pequeño suspiro ella decidió regresar dentro de la cabaña mientras se aseguraba de enviar a una de sus compañeras a cuidar al joven.
Mientras tanto en la entrada del campamento de bandidos un grupo de cerca de 50 soldados ingreso al lugar manteniendo su guardia alta, este era el equipo del Inquisidor Cross liderado por la sacerdotisa Charlotte, quienes hace unos días fueron capaces de encontrar el sendero oculto.
"Es tal y como indicaban los documentos... no puedo creer que los hayan pasado por alto durante tanto tiempo." - El enojo era perceptible en la sacerdotisa Charlotte, sin embargo el Inquisidor solo negó con la cabeza como si tratara de explicar que no tuvo nada que ver con él, después de todo por el tamaño del campamento era obvio que eran más que un pequeño grupo de bandidos.
"No trates de fingir inocencia, esos documentos fueron hechos públicos hace meses... pero el reino ha fingido ignorancia al respecto, no recuerdo que ninguno de esos Nobles haya sido arrestado o siquiera reprendido por sus acciones." - los documentos de los que hablaba Charlotte fueron los que recupero Jon durante su ataque al campamento de bandidos, estos terminaron en manos de Teresa quien los publico por todos los medios que encontró posibles, sin embargo el enorme poder que ostentaba el marqués sumado a los Nobles de su facción reprimieron cualquier noticia y al final todo quedo en la oscuridad.
"Incluso si es cierto, usted debe entender que solo sigo ordenes... si el rey lo considera correcto yo no dire nada en contra." - las palabras del inquisidor causaron que la atmosfera se enfriara unos grados, peor aún fue que nadie pudo decir algo más, ya que era algo común solo obedecer las órdenes del Rey sin importar lo descabelladas o poco morales que fueran.
Charlotte frunció el ceño pero no siguió con la conversación, al final solo era un sinsentido tratar de razonar con estos hombres quienes no eran diferentes de perros leales al reino, por otro lado centro su atención en los alrededores, permitiéndole descubrir algunas pistas importantes de este lugar.
"Probablemente alguien estuvo aquí hace poco tiempo, miren..." - Señalando algunos edificios en los cuales se pudo ver que las paredes o barandales fueron quitados llegaron a esa conclusión, principalmente porque en esos lugares hubo una menor cantidad de nieve cubriendo el lugar, lo que implico que alguien limpio el lugar cuando trabajaron ahí.
Esta confirmación fue todo lo que necesitaban, así que sin demora se dispersaron por todo el campamento buscando cualquier rastro útil de su objetivo, esto rindió sus frutos rápidamente, ya que no paso mucho para que descubrieran los rastros del grupo de Jon, y al final todo el escuadrón se reunió en el muelle del campamento viendo el extenso lago frente a ellos.
"Muy bien... ¿ahora que hacemos?" - Pregunto Cross.
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Jon estaba sentado contra un árbol mientras observaba el paisaje cristalino del lago, a sus pies un pequeño lobo dormía tranquilamente mientras la mano del joven descansaba sobre su cabeza, sin duda era una escena pacifica.
Teresa caminó hasta llegar a un costado de Jon, entonces en silencio se sentó cerca de él como si quisiera compartir ese pacífico momento.
Jon por su parte extendió su brazo y atrajo más a Teresa, permitiendo que sus cuerpos se tocaran suavemente, la mujer madura se sonrojó ligeramente pero no rechazo el contacto en cambio se acomodó y apoyo su cuerpo en el joven.
"No te molestes con Tania... estoy segura de que ella no quiso ofenderte." - aconsejo suavemente Teresa, sin embargo Jon no respondió y en cambio solo acaricio suavemente la espalda de la mujer mayor.
"No estoy molesto... simplemente no puedo explicarle lo que sucede conmigo, o quizás simplemente no sé cómo hacerlo." - las palabras del joven eran el único sonido bajo aquel árbol, al escucharlas Teresa puso una expresión triste un momento antes de hundirse en los brazos del joven.
"Realmente has cambiado mucho desde aquella ocasión en el bosque." - eso fue dicho en un suave murmullo y el joven escucho pero no respondió, en cambio también aumento la fuerza en su agarre y cerro suavemente sus ojos.
Ambos entendieron las circunstancias del otro, al mismo tiempo se pudo decir que no eran diferentes de un par de gatos lamiendo sus heridas... o quizás sea más correcto decir lobos.
Al final ese bello momento de paz termino siendo interrumpido cuando el pequeño lobo durmiendo en las piernas de Jon se levantó rápidamente, esta reacción alarmo al joven quien abrió sus ojos y reuniendo toda su fuerza se levantó de su lugar.
Teresa al darse cuenta de las posibles implicaciones de la reacción también se levantó y uso su cuerpo para apoyar al joven, entonces ambos fijaron sus miradas en el lago frente a ellos, ya que desde la distancia era visible un pequeño bote moviéndose en su dirección.
"Son 4 personas... dos de ellos sin duda son peligrosos, ve a llamar a las chicas." - Sin espacio para discutir el joven envió a la mujer en dirección a la cabaña, él por su parte se apoyó ligeramente en el árbol mientras evitaba que se notara su debilidad.
El tiempo paso lentamente mientras el bote acortaba su distancia cada vez más, esto permitió que las 4 personas se volvieran visibles para el joven, luego de lo cual llegaron a la orilla y bajaron.
Una mujer con atuendo de sacerdotisa al frente, y por otro lado los tres hombres a su espalda la flanqueaban protegiéndola de cualquier tipo de ataque.
El grupo desde hace bastante tiempo noto a Jon recargado en el árbol, y sus expresiones tensas mostraban lo peligroso que consideraban al joven vestido de negro, pero sus miradas se volvieron un poco extrañas cuando notaron las vendas cubriendo sus brazos.
"Mis disculpas por irrumpir en su hogar... pero lo hemos estado buscando durante bastante tiempo." - la mujer realizo una pequeña reverencia sin apartar la mirada del joven temiendo que atacara o huyera en cualquier momento.
"Ya veo... entonces, ¿qué desean?, ¿venganza? ¿justicia? ¿o solo quieren probar su habilidad?" - las frías palabras del joven hicieron que el grupo frunciera el ceño, pero ninguno dijo nada, mientras esperaban que la sacerdotisa volviera a hablar.
"Es un error Sir Blizzard... en realidad nuestro objetivo al buscarlo es solicitar su asistencia con algunos asuntos que hay en la capital, por eso nos gustaría que fuera como un invitado de honor." - la mujer hablo mientras examinaba la expresión del joven, buscando cualquier rastro o pista de sus pensamientos, solo que termino decepcionada al descubrir que no hubo fluctuaciones en él.
"En otras palabras ¿esperan que vaya y me presente en la capital del reino mientras soy rodeado secretamente por tanto el ejército como las fuerzas de distintos Nobles?" - Charlotte se crispó ligeramente al escuchar las palabras del joven, pero no pudo negar totalmente su juicio, ya que era posible que los altos mandos decidieran tomar esa decisión.
"Puedo jurar por mi honor que no tomaremos ninguna acción contra usted..." - aunque el juramento de una sacerdotisa pudo sonar importante, en realidad no movió ni un poco a Jon después de todo era obvio el hueco en su argumento.
"Muy bien, ahora haga que el rey y los nobles realicen el mismo juramento..." - nuevamente la situación se tornó muy incómoda ya que no hubo forma de que los soldados no entendieran lo que insinuó el joven, y ni hablar de Charlotte.
"No andemos por las ramas señora, si tiene algo más que decir entonces dígalo, de no ser así me gustaría que se retiraran." - una vez preparado declaro rápidamente interrumpiendo cualquier intento por alargar la conversación, que tuviera la sacerdotisa.
"¿Porque adopta una postura tan hostil contra mí...? realmente no tengo ningún deseo de hacerle daño, solo quiero..." - las palabras de la mujer fueron interrumpidas cuando una flecha voló desde los árboles en dirección a Jon, esto hiso que la mujer palideciera cuando noto como sus guardias se lanzaron contra el Joven.
"¡¡Alto!!" - su grito entro en oídos sordos, y cuando se preparaba para usar sus habilidades sintió como un escalofrió recorrió su columna por lo que giro a sus espaldas y se encontró con la espada de Cross a punto de cortar su cabeza, en el último segundo una capa de energía se interpuso entre ambos evitando el ataque fatal.
"¡¿Que estás haciendo?!" - grito Charlotte con horror cuando el impulso del choque la envió unos metros hacia atrás, Cross por su parte solo chasqueo la lengua y comenzó a correr contra la sacerdotisa, sin embargo, antes de llegar a ella se detuvo en seco porque pudo ver como detrás de la mujer yacían los cuerpos de sus hombres.
"Así que el rey intento matarme... y el templo está involucrado ¿o?" - la voz del joven provoco un escalofrió en la espalda de Cross, al mismo tiempo lo hizo darse cuenta que sus refuerzos desaparecieron, lo que solo pudo significar una cosa.
"¿Desde hace cuánto lo notaste?" - Pregunto Cross relajando su postura.
Una extraña distorsión apareció en el aire y pronto comenzó a fracturarse como una telaraña mientras fragmentos se desvanecían uno a uno, al final se pudo observar como fuera del bosque se encontraban cerca de 10 soldados en el suelo, todos asesinados de diferentes formas, pero igual de efectivas.
La tristeza se reflejó en los ojos de Cross por un momento, pero rápidamente volvió su atención al joven frente a él, incluso ignorando a la sacerdotisa que temblaba con rabia y odio.
"Nunca tuvimos oportunidad... desde el inicio tuve en claro que no hubo regreso de esta misión, pero al menos esperaba hacerme cargo de esa mujer para implicar a los templos." - Cross comenzó su diatriba al tiempo que preparaba su postura para combatir.
"Me gustaría que al menos me concedieran un último combate... irse peleando contra el monstruo que destruyo todo un territorio no suena tan mal." - El hombre no dio oportunidad de responder cuando se disparó hacia adelante, pero a mitad de camino su dirección cambio y volvió a atacar a Charlotte quien no estaba preparada, sin embargo, reacciono rápido cuando invoco un escudo para protegerse.
La espada de Cross libero un pequeño brillo verde cuando golpeo el escudo, entonces al igual que cortar mantequilla lo atravesó fácilmente, pero antes de poder hacer contacto con el cuerpo de Charlotte un brazo lo tomo del hombro deteniéndolo en el acto.
"Es demasiado tar..." - las palabras del hombre fueron interrumpidas cuando desde su pecho un brazo apareció creando un enorme agujero ensangrentado, esto lo hizo toser un poco de sangre cuando la luz de sus ojos se comenzó a atenuarse lentamente.
"Tienes razón... ya era demasiado tarde para ti." - pronuncio Jon mientras retiraba su brazo del cuerpo del hombre, el tenue brillo rojo en su cuerpo también comenzó a atenuarse cuando casi toda su fuerza desapareció lentamente, aunque antes de caer Fátima apareció y lo sostuvo por un costado.
"Sigh... es agotador, pero creo que ahora podemos tener una buena conversación." - comento Jon mirando a la incrédula sacerdotisa Charlotte.