POV (Punto de vista de Aeris Zanir)
Aeris observaba cariñosamente su vientre, estaba embarazada y el niño o niña ya estaba por nacer en las siguientes semanas.
Ella y su esposo Krelanis lo habían estado esperando con muchas ansias.
Aunque la raza élfica tenía un tiempo de vida extremadamente largo llegando al punto de ser inmortales, su tasa de reproducción era extremadamente baja. Krenalis y Aeris tenían aproximadamente 2000 y 2500 años respectivamente, lo que en estándar elfo los hacía jóvenes casi adultos, una edad adecuada para el inicio de su familia.
Muchas parejas de elfos habían tenido que intentarlo por milenios para concebir a un niño, pero esta pareja había sido bendecida con poco tiempo de espera.
Krenalis Ith'laris era un herrero de Nivel Experto, que tenía su propia herrería en la ciudad donde residían, la ciudad humana de Amdarar, ubicada en el reino humano de Imuruth.
Aeris era una ex mercenaria, usuaria del arco de nivel avanzado, actualmente trabajaba como guardia y escolta personal del Duque que dirigía la ciudad. No obstante, por su embarazo se mantenía con licencia.
La pareja se había conocido cuando el Duque, Alfred Sabino había convocado a todos los herreros de la ciudad para intentar crear una arma de un mineral misterioso que habían encontrado en unas ruinas.
Lamentablemente ninguno de los herreros logró si quiera fundir el material, no obstante fue en este encuentro que Krenalis conoció a Aeris, el joven elfo hasta ahora juraba que había sido amor a primera vista, con el tiempo se las ingenió para conocer y entablar conversación con Aeris quien en un principio intentó mantener una relación laboral y profesional, pero con el tiempo cedió a los encantos y carisma del joven elfo.
Llevaban 7 años de matrimonio y ahora esperaban a su primero hijo.
Aeris se preguntaba si sería niño o niña y qué nombre le pondrían, la partera mencionó que nacería en una o dos semanas y todos estaban ansiosos.
De repente empezó a sentir fuertes dolores y sentido como aura descendía de su vientre, inmediatamente llamó a su marido que se encontraba en su estudio, quien llegó corriendo a atenderla.
Se llamo a la partera quien era una vecina y el parto se llevó con naturalidad sin complicaciones, la fortaleza y físico de Aeris lo hizo simple.
El niño nació, era varón, de cabello plateado como los elfos de antaño, muy raro en la actualidad.
De repente la partera mostró signos de preocupación, "El niño no llora"- exclamo preocupada.
Pero Aeris pidió inmediatamente que se lo entregasen, lo sostuvo con sus manos y miró a su hijo, era su todo y su felicidad, lo recostó sobre su pecho y lloró de de felicidad.
De repente el niño empezó a llorar también y tanto Krenalis como la partera suspiraron aliviados y riendo.
En el séptimo día del mes de Rut, año 742 533 DI, El Segundo Dios del Relámpago Astalris Ith'laris Zanir había nacido.